Maratón 5/?

Dark.

Ubicación: La Mansión (Instalaciones de Darkness)

Camino de un lado al otro en el estudio, mientras aguardo el momento justo, todo está dispuesto justo como lo he planeado, cada ficha está en su lugar y solo hace falta que se dé la orden de ataque. Me detengo frente al ordenador y sonrió de lado al ver los convoyes del equipo SWAT que se mueven entre las calles del área residencial.

El FBI ha acordonado el área a dos cuadras a la redonda. Bloqueando cualquier posible ruta de escape y tienen en el aire cerca de cinco drones que vigilan los cielos. No tenemos escapatoria... estamos justo donde ellos quieren que estemos.

Rio divertido al escuchar la voz del agente Jenkins.

— Todo listo director Vans...— su voz suena segura, ansiosa y triunfante.

— Quiero a los más grandes vivos, los demás si se resisten saben lo que tienen que hacer...— mi sonrisa se ensancha.

¿Vas por los grandes Vans? Quizás es mucho más de lo que puedas masticar. Me giro y observo la pantalla detrás de mí donde puedo ver a la familia del director en un lugar seguro. Tan seguro que los puedo vigilar desde cada jodido ángulo, lo que sea que hagan, tan seguro que puedo decir hasta que olor tiene su mierda una vez van al baño después de la cena.

— Jasón...— le hablo por el dispositivo de comunicación.

— ¿Señor? — sonrió.

— ¿Listo para darle de una agradable y cálida bienvenida al agente Jenkins y sus amigos? — pregunto en todo divertido.

El chico respira profundo y luego de unos segundos responde.

— Sí, señor todo listo...

— Pues a la voz del director Jasón... sigue las órdenes de los grandes...— comento con sorna, mientras me dejo caer en la silla y tomo mi 9 mm.

Después de algunos segundos de silencio, una vez más el Director Vans, llena el audio de los hombres de su equipo.

— Andando, tienen luz verde para iniciar el operativo...

— ¿Informe del perímetro? — pregunta Jenkins antes de dar la orden definitiva de ataque.

— Tenemos en la mira a los hombres que están en las torres de vigilancia del área de la puerta principal del objetivo...— responde un hombre por uno de los canales, obviamente trajeron a los mejores franco tiradores — ¿permiso para eliminar a los objetivos señor? — Jenkins toma una bocana de aire y susurra.

— Permiso concedido...— al instante siguiente todos los hombres que se encuentran en las torres de vigilancia de la puerta principal de la mansión caen al suelo con un disparo en la cabeza.

Respiro profundo y me remuevo en la silla, aunque no me guste hacer este tipo de cosas, a veces hay que hacer ciertos sacrificios.

De ese modo empieza la locura y el desastre... un desastre que he planeado paso a paso y milimétricamente con un solo fin. Tres Roshel Sanator ARV –un bestial vehículo blindado que se utiliza solo en operativos realmente especiales– se mueven por la calle principal hacia el portón de la mansión. Del frente de dos de ellos salen disparadas dos Arietes tipo arpones que se hunden en el metal blindado del portón y luego con una cadena retráctil, estos tiran de los portones arrancándolos de las bisagras.

Esto es más que suficiente para que se disparen las alarmas de la mansión. De inmediato el caos se desata, los hombres que se encuentran en las mediaciones de la Misión salen a defenderla con armas largas, disparan a los vehículos blindados sin conseguir nada. La mansión está diseñada para este tipo de asaltos.

Pero hoy no es más que un juego de niños. Las trampillas de los camiones blindados se abren y los disparos acaban con rapidez a los hombres del exterior. El ruido llena mis oídos y simplemente muevo mi cuello de un lado al otro, aguardando. Los camiones avanzan hacia la puerta principal de la mansión donde se detienen y cerca de 30 hombres uniformados con equipos de asalto descienden de estos.

Armando un pelotón de avance se mueven con rapidez a la puerta.

— Perímetro limpio, estamos por entrar al objetivo — escucho a uno de los hombres anunciar.

— Muévanse con cuidado...— les pide Jenkins.

Derriban la puerta principal y los veo lanzar dispositivos de humo para cubrir su entrada.

— Jasón, ahora...— ordeno.

— Si señor...

La visibilidad es poca gracias al humo que invade el recibidor, pero soy capaz de ver como se mueven con los rayos laser activados listos para arremeter contra cualquiera. En ese momento del área de la sala una rafa de disparos los ataca y veo caer a unos cuantos, las balas salen disparadas a nivel de las piernas por lo que muchos caen al suelo soltando gritos de dolor.

Pronto el caos es tanto que lo único que alcanzo a escuchar son disparos.

— Nos atacan desde el costado derecho...— brama uno de los hombres — Román, Jacob, Stuart cubran el flanco izquierdo y Mason, Charles a la derecha, Nick, Franco y Michael al frente...— los escucho reorganizarse.

Los disparos disminuyen en intensidad al igual que el humo y poco a poco puedo ver una vez más como el equipo SWAT despeja el área del recibidor, la sala y el pasillo que da hacia la cocina, los veo entrar a esta asegurando todo.

— Recibidor libre...— suelta uno de los agentes.

— Sala y cocina libres...— agrega otro hombre.

Sonrió de lado cuando otro equipo del FBI entra a la mansión liderado por Jenkins, mientras el equipo SWAT se divide en seis grupos de cinco y empiezan asegurar las distintas áreas del primer piso de la mansión.

— Todo el primer piso despejado, procedemos a la revisión del segundo nivel...— agrega otro agente.

Dos equipos se acomodan en las escaleras y comienzan a subirlas sonrió consciente que falta poco.

— Señor no tenemos a nadie en el primer nivel, deben ocultarse en las instalaciones de la organización...— comenta otro de los agentes.

— ¿Dónde coño están? Revisen el primer nivel, debemos encontrarlos antes que logren escapar...— rio divertido y me inclino hacia el frente interesado en los siguientes movimientos que hará el detective.

Conforme los minutos pasan, los equipos de revisión se acercan cada vez más al estudio y abajo en el primer nivel están por descubrir el panel y la puerta corrediza que da hacia las instalaciones subterráneas de Darkness.

— Señor tenemos un panel de control...— informa uno de los agentes y mi sonrisa se ensancha.

— Desactívenlo debe ser el panel para ingresar a las instalaciones y procedan con precaución, deben estar ocultos abajo y no tenemos idea de cuantos hombres hay aquí... — demanda con presteza Jenkins.

Al mismo tiempo observo como entran en cada una de las habitaciones del primer nivel. Revisan la de Claus, la de Max, alcanzan la que solía ser la habitación de Nisha y finalmente alcanzan la mía, todas y cada una de ellas despejadas. Jenkins sube las escaleras con expresión frustrada, no ha encontrado nada aun que le una pista de donde está su chica.

Camina por el pasillo mientras sus hombres lo escoltan. Entra en cada habitación mientras su rostro se va transformando en una máscara de ira, finalmente alcanzan la puerta del estudio y se preparan para abrirla.

— Jasón...— en el mismo instante en que pronuncio el nombre del técnico una explosión hace que todos vuelen por los aires...— deben tocar antes de entrar, la educación es muy importante...— comento divertido.

Luego tomo mi arma y suspiro, me pongo en pie y sonrió de lado, marco el código de seguridad y veo como la puerta se desliza, del otro lado la sorpresa de algunos de los hombres en la estancia me recibe. Levanto mi arma y empiezo con el juego, cae el primero, tiro perfecto. Me cubro detrás de uno de los muebles y espero a que haya reacción por el primero de los hombres que cae.

Escucho pasos presurosos y suspiro antes de ponerme en pie y mirar a un costado, los uniformados están retrocediendo, ocultos detrás de muebles hacia la puerta del estudio. Fijo mi vista en el más cercano listo para disparar, pero antes de hacerlo la voz de Jasón llena mis oídos.

— Señor están por entrar a las instalaciones...— sonrió una vez más...

— Bien, ¿terminaste con la migración? — indago seguro que el chico lo ha conseguido.

— Los servidores están listos hace 15 minutos señor...— rio suavemente.

— Bien hecho Jasón, ya sabes que hacer...— en ese momento salgo detrás de mi improvisada barrera y disparo a cuanto jodido uniformado que se mueve.

Tres de ellos caen en el momento en que me oculto detrás de una pared, me agacho y utilizando el viejo truco del espejo diviso tres hombres más, cerca de mi vía de escape. Tomo uno de los dispositivos de pánico que Jasón creo, me coloco los tapones y lo activo antes de lanzarlo hacia el pasillo.

Dos segundos después un humo blanco llena la estancia avisándome que se ha activado correctamente, salgo detrás de la pared con calma, en el suelo hay cerca de ocho hombres tapando sus oídos con expresión dolorida, conforme avanzo dejo un disparo en cada uno de ellos.

Alcanzo el borde de las escaleras y desciendo con calma, esta es mi jugada y por más que se hayan preparado para esto, voy un paso más adelante que ellos, dos hombres aparece y me disparan, me cubro como puedo y termino de descender las escaleras, antes de ponerme en pie barro una de las piernas de uno de los tipos y disparo en su pierna, por la misma me giro y disparo al otro en el abdomen.

Ambos caen al suelo, me pego a la pared y camino junto a esta, los hombres continúan saliendo y disparando en mi dirección, cada uno cae con uno o dos tiros míos, cuando estoy por alcanzar la puerta principal de la mansión uno de los uniformados me taclea saliendo de algún lugar y tomándome por sorpresa.

Su puño impacta contra mi costado una vez estamos en el suelo, con un movimiento rápido golpea la mano donde tengo el arma y esta cae al suelo, este sujeto es un poco más alto y más musculoso que yo, uno de sus puños se estrella en mi quijada con fuerza, haciendo que cada jodido musculo de mi cuerpo se tense.

Escucho pasos acercarse el tipo eleva su puño nuevamente para golpearme pero elevo mi rodilla y golpeo su espalda desequilibrándolo, rodeo su cuello con mis brazos haciendo una llave que poco a poco le quita el aire, a los pocos segundo deja de luchar. Me lo quitó de encima y cuando estoy por ponerme de pie el toque de un cañón sobre mi cabeza me tensa.

Respiro profundo y sonrió con arrogancia, cuando escucho el pitido de la radio y dos hombres uniformados más aparecen delante de mí.

Max.

Camino ansiosa de un lado al otro, mis manos sudan debajo de los guantes, de piel que hacen un buen trabajo calentándolas, me detengo frente a la chimenea y observo el fuego que chisporrotea en ella, para luego ver el reloj que esta sobre la piedra, este marca las 6:30 pm el frio aquí es una mierda y aunque estoy que estallo por el stress, Claus sigue igual de relajado, me observa con una media sonrisa en los labios y bufo cuando me lanza un beso.

— No entiendo cómo puedes estar tan tranquilo, a esta hora el operativo ya debe estarse llevando a cabo...— le espeto reanudando la marcha.

— ¿Y qué es lo que te preocupa exactamente? — Suelta en ese puto tono despreocupado — Ay ya deja de angustiarte estamos hablando de Dark, seguro está bien...

— ¿Bien, es una jodida broma? Se quedó en La Mansión sabiendo que el FBI iría a por ellos, ni siquiera les pidió a nuestros hombres que se largaran, ¿no entiendo a que está jugando? — Claus se encoge de hombros y le da un sorbo a su trago antes de dejarlo sobre la mesa que esta frente a él.

— Deja de preocuparte...— responde calmadamente, mientras se pone en pie y echa andar hacia mi — Dark sabe cuidarse muy bien solo, es más si debemos preocuparnos por alguien es por esos inútiles agentes y el sexy detective de ojos claros...— aparta un mechón de cabello de mi rostro y sonrió con diversión — te ves jodidamente sexy con el ceño fruncido Max...— una de sus manos acuna mi mejilla y su pulgar se desliza sobre mi labio inferior.

— No puedo estar tranquila, no cuando está actuando como un puto suicida...— Claus frunce el ceño durante unos segundos antes de soltar una sonora carcajada.

— ¿Dark suicida? — suelta entre risas apartándose de mí.

Toma la botella de Vodka y vuelve a servirse un trago, el cual bebe de un sorbo, mi ceño se frunce porque no sé cómo demonios puede beber esa mierda como si fuera agua. Cuando se gira y sonríe con picardía.

— Yo no me preocuparía por Dark...— murmura esta vez un poco más serio — estoy seguro que esto no es más que otro de esos jodidos planes muy bien elaborados.

— ¿Un plan involucrando al FBI y la cede principal de la organización? — suelto incrédula.

— Mejor porque no vienes aquí y me dejas follarte para calentar ese cuerpo mientras esperamos a nuestro hombre...— murmura cambiando de tema haciéndome bufar.

— No seas imbécil Claus no es el momento...— me giro para reanudar mi andar, pero él me toma de la muñeca y tira de mi girándome con brusquedad.

— Deja de pensar en Dark el bastardo es un puto genio, ¿de verdad crees que se dejara capturar por el FBI así sin más? — respiro profundo.

— vamos hermosa, ¿no confías en el? — murmura mientras el mete su rostro en mi cuello y respira profundo.

— Últimamente no está siendo el mismo...— respondo en un susurro ronco cuando siento que sus labios se cierran sobre la piel de mi cuello.

— Está siendo más Dark que nunca, solo que te acostumbraste al Dark tranquilo y conversador que solía ser cuando estaba Nish...— murmura desplazando sus manos hacia mis caderas.

— ¿Crees que Griffin la tenga? — lo siento encogerse de hombros y luego abandona mi cuello.

— No lo sé, pero lo averiguare y juro por dios que me divertiré con ese hijo de puta lo que en mi vida me he divertido...— su voz cargada de frialdad y ese tono malicioso que me eriza la piel.

En ese momento los bonitos ojos de Claus me miran con frialdad, ese pequeño cambio en el me recuerda que el hombre que tengo delante de mi es capaz de hacer demasiado mal si lo desea. Después de unos segundos suspira y cierra sus ojos privándome de ellos.

— Quiero follarte y hablamos de Dark...— suelta en tono burlón y rio.

— Lo siento, pero no puedo pensar muy bien cuando sé que puede pasarle algo...— acaricio su mejilla y suspiro — tú y el son todo lo que tengo Claus mi vida sería una mierda si le pasara algo a cualquiera de los dos.

— ¿Reconoces que tu vida será una mierda después que me mate? — pregunta riendo y suspiro.

Debe haber alguna forma de sacar esa idea de la cabeza de Dark, no puedo creer que de verdad vaya a asesinarlo cuando ya no le sea de alguna ayuda, mis ojos se encharcan con solo pensarlo y ciento como sus labios se pegan a los míos en un beso lento que correspondo sin poder evitarlo.

Sus manos se aferran a mi cintura pegando mi cuerpo a él, dejándome sentir la erección que lleva, sin poder evitarlo rio suavemente porque no entiendo cómo puede estar así de duro en una situación como esta.

— ¿Qué? — pregunta separándose para verme.

— ¿Cómo es que estas duro? — la sonrisa lobuna que me regala me recuerda que es u pervertido de mierda y que posiblemente el verme ansiosa lo ponga.

— ¿Te viste en un espejo? — murmura dando un paso atrás.

Sus ojos se desplazan por mi cuerpo y atrapa su labio inferior entre sus dientes.

— Max siempre me ha gustado como se te ve el cuero pero puta madre la piel de estas cosas te hace lucir...— hace una pausa y medita antes de continuar — eres una Cruela de Vile 5.0 con tetas y culo mucho más provocativo que la de la película — suelta el comentario divertido y yo no hago más que poner los ojos en blanco.

— Eres un pesado...— me quejo dando un paso atrás y reanudando la marcha ansiosa que me lleva de un extremo al otro de la sala donde estamos.

Paso junto a Claus una vez más mientras el me ve con expresión fastidiada, luego si decir nada desciende el escalón que lo separa del sofá y regresa al lugar que ocupaba. Sus ojos vuelven a seguir mi caminata ansiosa sin decir nada. El lugar en el que estamos es cálido y bonito debo reconocerlo, Claus tiene un gusto un poco extraño en ocasiones.

— Este idiota está demorándose demasiado...— murmura fijando sus ojos en el reloj.

— Dijo que estaría aquí a las 7 aun no es la hora Claus...— comento.

En ese momento decido sentarme ya no puedo con esto, camino hacia él y me en vez de sentarme junto a él, opto por sentarme ahorcadas sobre él, tengo demasiado frio y él está más cálido que yo. Sus labios dibujan una sonrisa triunfal.

— ¿Un rapidin? — me pregunta antes de humedecer sus labios y rio.

— No vamos a follar en 15 minutos...— respondo a lo que el simplemente toma mis caderas y me restriega de su erección.

— Llevo tres horas esperando por ese imbécil que el espere mientras follo tu coño me parece un trato justo...— murmura inclinándose sobre mí, rosando sus labios con los míos.

— Claus...— le advierte deteniendo el juego.

— Una mierda, voy a hundir mi polla en tu coño y me dejaras hacerte lo que me pegue la puta ganas ¿sabes por qué? — pregunta tomando mi cabello y tirando de el con fuerza, exponiendo mi cuello.

Un jadeo se escapa de mis labio y el ríe suavemente.

— ¿Porque quieres un tiro en la cabeza y no te ha bastado los dos que Dark te ha metido? — respondo con altanería.

Nuestras miradas se cruzan y sonrió. El muerde su labio conteniendo la risa y luego sin avisarme nada lleva su boca a mi cuello y me muerde con fuerza para luego succionar el área, jadeo cuando sus dientes se hunden un poco más y siento un ligero dolor que lleva un corrientasos eléctrico a mi entrepierna.

Maldito... Claus ha logrado hacer que ciertos de sus juegos me pongan y mucho.

— Porque así dejas de pensar en estupideces y te centras en lo misión...— murmura liberando mi piel — Dark te envió conmigo por algo Max, no lo arruines ni le des motivos para que te mate...— esas palabras me hacen centrarme y caer en la realidad.

Dark no me envió con Claus simplemente porque me quería segura lejos del caos que iba a armar en la mansión, me envió aquí porque sabe que estos malditos rusos no pueden ver a una mujer sexy porque sus putas pollas se calientan. Cierro los ojos y suspiro, Claus ríe suavemente mientras sus manos se desplazan hacia el botón de mi pantalón y sus labios dejan un reguero de besos suaves sobre mi cuello.

En cuestión de nada estoy elevando mi cuerpo para que descienda el pantalón, lo ayudo a sacarlo y regreso a la posición en la que estaba sobre él, sus ojos se encuentran con los míos y ríe con picardía, lleva las manos sobre el espaldar del sofá y ladea su rostro.

— Venga diviértete, que el ruso sepa lo que es tener una rubia con cerebro y letal entre las piernas y se muera por tenerla...— muerdo mi labio porque este plan no me gusta.

Estoy dudándolo cuando sus dedos empiezan a juguetear con mi centro y cierro los ojos, jadeo.

— Vamos Max... tu coño quiere esto más de lo que tu cerebro quiere pensar en Dark...— se burla al meter dos de sus dedos en mi canal.

— Idiota...— jadeo.

En ese momento un par de suaves golpes en la puerta nos alertan de la presencia de alguien, cuando estoy por levantarme, Claus me sujeta de las caderas y niega con su cabeza, lleva una de sus manos al costado de su cuerpo y saca el cuchillo, llevando la hoja a sus labios.

— ¿Diga? — responde fuerte con voz ronca.

— El señor Volkov aviso que estaría aquí en cinco minutos...— responde una mujer del otro lado.

— Tienes cinco minutos Max...— murmura mientras empieza a jugar con el cuchillo — Gracias lo traes aquí en cuanto llegue...— le espeta a la mujer de servicio que no agrega nada más.

Entonces sus caderas se remueven debajo de mí y vuelvo a jadear, entonces movida por su insistencia deshago el broche de su pantalón, meto una de mis manos dentro de este y descubro que no lleva nada puesto debajo. Nuestras miradas se encuentra y el ríe.

— Acceso rápido y seguro...— coquetea conmigo moviendo sus cejas de arriba abajo.

Tomo su miembro entre mis manos y lo saco, mientras desciendo un poco la piel y el suelta un gruñido, su mano izquierda regresa sobre el espaldar del sofá y la derecha inicia un frenético juego con el cuchillo mientras comienzo a masturbarlo, nuestros ojos prendidos el uno del otro.

Después de estimularlo un poco con mis manos, dejo caer un hilo de saliva sobre su miembro lo que lo hace soltar un gruñido, me levanto un poco y lo acomodo en mi entrada, su sonrisa se ensancha y antes de poder descender yo, el eleva sus caderas y me llena de un solo golpe lo que me hace gritar.

— Eso, llenemos estos putos y fríos muros rusos de gritos nuevos...— sus manos se mueven a mi cadera y me sujeta con firmeza.

Siento la empuñadura del cuchillo lastimarme ligeramente pero lo ignoro cuando Claus se inclina sobre mi pecho y muerde mis pezones endurecidos sobre la blusa que llevo. Grito y en ese preciso instante la puerta del estudio se abre con brusquedad y salvajismo.

Lo que pasa al segundo siguiente hace que mi cuerpo se detenga, Claus libera mi cadera y lanza el cuchillo hacia la puerta donde un hombre está de pie asesinándonos con la mirada.

— ¿Cómo mierda se atreven entrar...— la pregunta queda en el aire cuando el cuchillo pasa extremadamente cerca de su cara y se clava en la pared junto a él.

Claus sonríe y posa sus ojos en mí.

— Nadie ha dicho que te detengas Max... el señor Volkov nos acompañara siendo un espectador y con la puta boca cerrada...— espeta posando sus ojos en el hombre que esperábamos.

— Esta es mi puta casa...— suelta el ruso entre dientes, haciendo reír a Claus.

— Y estoy follandome a una rubia hermosa en tu estudio...— suelta divertido mientras remueve una vez más sus caderas debajo de mí haciéndome gemir.

— Voy a matarte...— suelta el tipo dando un paso en nuestra dirección pero es todo lo que hace porque es mi momento de actuar.

Saco mi 9 mm y lo apunto con ella con una sonrisa pícara en los labios.

— Esperaras que me corra y luego hablaremos de negocios así que cierra la boca y siéntate...— Claus sonríe y lo ve con diversión.

Hace un puchero y suelta en tono infantil.

— No hagas enojar a mami que después se ensaña...— el tipo suelta un gruñido y se deja caer en un sillón individual al otro lado de la pequeña mesa.

— Bien hermosa, mostrémosles a este idiota como follamos en Darkness...

Nota del autor: Hola mis Darklings como les va? hoy esto sera corto... solo diganme

 que piensan del plan de Dark? 

Que hacen Max y Claus en Rusia y quien es Volkov? ademas para que follar de lante del tipo?

Un beso les amo gracias infinitas por el apoyo y pues nos leemos mas tarde!