Volviiiií:D

•~ El camino que hay que seguir •~

1000 years ago.

El Reino de Vargr.

La cuidadosa preparación para el festival del invierno se estaba llevando acabo en este momento, ya que el tan ansiado evento empezaría a media tarde según el reloj del sol.

Marjorie prepararía el vestuario de la Princesa de la Luna, mientras que las sirvientas y demás la ayudaban a vestirse para un elegante —demasiado para lo que era— desayuno al lado de sus amados padres, los cuales eran los reyes del reino del GuarLu.

Esa misma tarde se encontraría con su querida prima, la heredera del reino del GuarSol, Selen.

—¡Marjorie! —llamó la princesa Nankahelle a su nana—. ¿Has visto mis zapatillas celestes? —preguntó, agachándose debajo del gran colchón de algodones y seda que tenía por cama.

—¡Princesa! —exclamó exaltada la nana Marjorie al ver a su princesa agachada de tal manera—. ¡Recuerde que no debe comportarse así! Pronto será coronada y debe de comportarse como tal: una heredera y futura reina —reprendió con desdén mientras que se agachaba para chequear ella misma debajo de la cama.

La princesa se irguió rápidamente y asintió, un poco decaída a pesar de ser tan temprano en la mañana, pues: vivir toda la vida bajo prejuicios y últimamente aún más, no era de muy libre albedrío para ella. Siendo rica por fuera, pero tan solitaria por dentro.

—Sus zapatillas están en el armario, su Alteza, ya se las traeré —informó una de las sirvientas mientras que la princesa se acercaba detrás del cambiador (si, cambiador porque no me acuerdo cómo se llama) y se desvestía.

—¿Colores tan campantes tan temprano? —preguntó ya después, cuando la otra chica la ayudaba a ajustar el corsé beige de cintas rosadas.

—Hoy tiene varias cosas que hacer en el itinerario después del desayuno, Princesa —le informó Marjorie.

—¿Puedo saber cuáles son? —indagó.

La nana asintió y comenzó a enumerarlas sin necesidad de algún papel o guía.

—El desayuno de 8:00a.m a 8:30a.m, ir a tomar las últimas medias para el vestido de esta tarde con madame Julie de 8:40a.m a 9:30a.m, elección de vestidos para su coronación con madame Julie de 9:30a.m a 10:20a.m, hora del té y almuerzo en la terraza del café de Marie's con lady Adar de 10:30a.m a 11:00a.m, pasar a saludar a su padre y a los ministros antes de la reunión general de 11:30a.m a 11:40a.m—

La nana se vió interrumpida por la pregunta de la princesa.

—¿Y qué haré en los treinta minutos de 11:00a.m a 11:30?

—Esperar fuera del salón de reuniones oficiales.

—Ah... (😒).

La nana carraspeó—: Bueno, prosigo: de 12:00p.m a 13:00p.m, revisar el trabajo de preparación del banquete que está siendo supervisado por Odette en el salón de eventos oficial en el palacio mixto en el ala...

La princesa se había perdido a todo lo que su nana decía acerca de los quehaceres de princesa mientras se seguía cambiando. También se hizo ajena a todo lo que pasaba a su alrededor cuando salieron de la habitación, y solo, tan solo cuando vió a sus caballeros, fue que recuperó cierta consciencia.

—K —enunció la princesa, algo enmudecida por verlo nuevamente; su fascinación al verlo tan atractivo como siempre jamás cambiaría.

—Su Alteza —el más alto hizo una digna reverencia a la menor elegantemente.

Nankahelle se había sonrojado, aún más que el rubor que llevaba ya consigo por el maquillaje (¿A dónde tan yooo? Jajaja).

—¡Princesaaa! —vociferó felizmente uno de los más jóvenes de los caballeros y protectores de la princesa: Taki. El emocionado se acercó con una alegría contagiosa a la princesa para después besar su mano y causar desagrado en la nana, aún cuando la princesa se reía.

—¡TAKI! —reprendió Marjorie enojada—. Cuida tus acciones, le debes más respeto a la princesa.

—S-si, lady Marjorie —respondió el joven, nervioso.

   🐺

—¿El azul claro no sería más apropiado para la descendiente del GuarLu? Al menos, eso creo yo —habló la princesa, dirigiéndose a su nana, la cuál se debatía mentalmente si sí o si no.

La otra opción era un vestido verde menta.

—Creo que su Alteza tiene razón —dijo una empleada. Eligieron el azul claro por protocolo.

La princesa se sentó en uno de los sillones y al levantar un poco más el rostro, se encontró con las miradas directas de sus caballeros. Se puso algo nerviosa y les preguntó:

—¿C-cómo se vestirán para esta tarde? —tartamudeó.

Los chicos se miraron dudosos entre ellos y Nicholas respondió.

—Usted escogió nuestro uniforme ayer —enunció y los nueve soltaron una risita divertida.

Nankahelle. O Ayari (?).

Ya en la tarde, cinco minutos antes del evento.

Iba directo al salón de eventos del palacio mixto, donde sería el gran evento.

Me encontraría con padre y madre antes de comenzar y entrar oficialmente en el salón, por lo que estaba algo nerviosa. Sería mi primer evento con el reino del GuarSol, bueno, con mi prima.

Levantó con delicadeza la pesada falta de mi vestido y salgo del carruaje al llegar, cuando el conductor abre la puerta y bajo el primer escalón, uno de mis pies se enreda con la parte del vestido que no puedo alzar y caigo, pero unos fuertes brazos que reconozco con facilidad me toman suavemente antes de caer. Euijoo me carga por unos segundos y después me pone en el piso. Le sonrío tímidamente y el asiente, tranquilo.

—Gracias... —le susurro.

Camino recta —como dicta el protocolo— y avanzo hasta llegar a la puerta, la cuál los guardias abren para mí y entre tantos e inmensos pasillos me dirijo a una habitación donde me encontraré con mis padres antes de ir con la tía y prima para entrar al importantísimo evento.

Abren para mí la puerta nuevamente y suelto un irreconocible quejido por lo pesada que es la capa cálida del traje.

—¡Madre! —musito y corro a abrazarla y darle un beso francés. Repito la misma acción después con padre.

La pequeña reunión de repaso sobre lo que teníamos que hacer no duró ni dos minutos y salimos.

La tía nos esperaba junto a la prima y sus caballeros.

—¡Selen! —sonreí al verla.

Mi querida prima también sonrió y nos dimos un abrazo.

—¡Hace cuánto no nos veíamos! —dice y yo asiento, de acuerdo.

—¿Cómo has estado? —inicio una breve charla entre ambas.

—Magnifico, pero planear la coronación estos días ha sido estresante y agotador —se queja.

Selen era unos meses mayor que yo, por lo que recibiría la corona de reina antes que yo.

—El poder pesa, ¿no lo cree? —llega Heeseung por detrás de Selen, dirigiéndose a mi. Asiento algo incómoda por el peso que su mirada me tare hoy y me separó de ambos.

—Su Alteza —me habla el caballero de Selen, Sunghoon. Lo volteo a ver y me preguntó internamente por qué me hablan tanto hoy. Solon se acerca poco más y susurra—: debería irse temprano hoy.

   🐺

El evento de llegada del invierno era realmente aburrido. Era más que nada, un evento al que asistían representantes o familias reales de otros reinos, por lo que no conocía a nadie y la única princesa con la que hablaba era Selen, pero ella estaba ocupada hablando con representantes de otros reinos.

Estoy sentada en una esquina, específicamente al lado de una mesa de postres, de la cuál tomaba algo cada tanto.

Estaba comiendo como puerco. O al menos eso me diría Marjorie si estuviese aquí.

Los jóvenes caballeros que me robaban el sueño estaban afuera o cuidando las puertas del salón, por lo que ni con Taki podría hablar en este momento.

Me levanté, aburrida y comencé a buscar a mis padres por todo el lugar, por lo que comenzaba a tantearme el irme temprano.

Uno de los guardias, el cual no conozco, se acerca a mi con discreción, la cuál no tienen tanto debido a que varios voltean con interés.

Bola de metiches.

—Su Alteza.

Se dirige a mi y respondo.

—¿Qué pasa? — pregunté.

—Debe irse ahora —dice y me toma del brazo sin mucha gentileza y me arrastra prácticamente a la puerta, sacándome al pasillo.

Las miradas hipócritas y juzgadoras no se hicieron del rogar cuando pasamos por el mar de gente hasta la salida. La vergüenza se apoderó por unos minutos de mi rostro hasta que salimos al pasillo.

—¿Q-qué cree que hace? —hablé molesta cuando vi que no daba señales de querer soltarme, además de que realmente estaba siendo muy brusco conmigo, cosa que no es permitida.

—Mocosa... —me insulta y levanta una mano sospechosamente para golpearme, pero es detenido por Maki, quién agarra con una gran fuerza su muñeca y en cuestión de segundos, la rompe.

El guardia ahoga un gritó de dolor y Maki solo lo fulmina, mientras que cuando no me doy cuenta Yuma llega y me aleja de la intimidante escena.

—Eso dio miedo —menciono.

Yuma soltó una risita y asintió, pero la sonrisa en su bello rostro se borró en cuanto un estruendo impactó contra la puerta principal del palacio, pero todos nos dimos cuenta por lo fuerte que sonó.

Yuma me abrazo para crear un escudo humano, pero se apartó algo avergonzando y sonrojado. Se le quitó en un segundo solo porque recordó que es un caballero y rápidamente llamó a Maki.

—Hay que llevarla a un lugar seguro, no estamos informados de que fue eso.

—Esta bien —Maki asintió y ambos me guiaron por pasillos desconocidos para mí.

   🐺

Los meses habían pasado y aún no sabíamos que había pasado en el evento, al menos nada más que todos se habían ido por miedo a lo que había pasado. Mis padres mandaron investigar, pero ninguno obtuvo información sobre el guardia que me intento agredir.

Los chicos han estado más alerta y cercanos a mi por lo mismo. Más que por mi seguridad, agradecía eso ya que podía verlos mucho más y más seguido.

—Madre —dije después de sorber un poco de té. La reina me regaló su atención y seguí—. ¿Iremos mañana al reino hermano? —pregunté. Nos referíamos al reino del GuarSol como reino hermano.

Madre asintió y dijo—: Si, partiremos al anochecer. Tu padre dice que es peligroso, pero debemos de estar allí cuánto antes para la coronación —asentí y quedé mentalmente de acuerdo con mi padre.

La tarde se pasó volando, al menos hasta que supe que viajaría con los chicos en un mismo carruaje.

—¿T-tan grande es este carruaje? —pregunté tontamente al ver el carruaje en el que iríamos.

Era de cuatro puertas y bastante espacioso.

Subimos al carruaje y partimos al reino hermano.

   🐺

Llegamos muy tarde en la madrugada del siguiente día. Ahora mismo nos llevarían a nuestras habitaciones y por la mañana nos darían una verdadera bienvenida.

Dormir aquí era extraño, pero lo había pasado por estás cuatro horas de sueño necesitado. Me había levantado de mañana para alistarme temprano e ir al comedor a desayunar.

La tía y prima junto a sus caballeros nos recibieron. Entre caballeros no se llevan muy bien, por lo que por su parte el desayuno fue tenso e incómodo.

A la media tarde Selen tenía planeado llevarme a visitar el templo del Sol, el cual era un lugar privado, por lo que cambiaría de atuendo para un lugar santo.

—¿Listos? —pregunté a los chicos, pues sabía que no les agradan Heeseung y los chicos.

—Para usted, siempre —Nicholas bromeó y me guiñó un ojo.

Me reí.

Los diez subimos al carruaje y nos dirigimos al templo.

Selen de niñas siempre me decía que el templo del Sol era su lugar favorito, esperaba ahora entender el porque.

El viaje duro un buen rato, pues el lugar estaba lejos de la ciudad principal.

—Que aburiiiidooo —se quejó Taki mientras que se estiraba y aplastaba a Jo.

Jo solo puso una mueca molesta.

—¿Ya casi llegamos? —le preguntó Jo a K.

—Se supone —respondió.

El resto del viaje fue silencioso a excepción de algunas quejas o chistes de Taki, pero lo demás fue relativamente tranquilo.

Bajamos del carruaje y seguimos a Selen, quién iba a la cabeza junto con Heeseung.

—Este es el pasillo sagrado —comenzó—, todas las malas energías se limpian mientras que caminas por él hasta llegar al centro.

—Vaya, debe ser un lugar verdaderamente importante como para que sepas tanto.

—Si —sonrió.

Sonrió, solo que... Se le miraba muy tiesa esa sonrisa.

Heeseung se acercó a mi, solo que se quedó demasiado cerca mientras caminábamos.

K se metió entre medio de ambos.

—El espacio personal es importante, ¿no te lo han dicho? —K regañó a Heeseung.

«Oh, vaya...».

Ambos chicos se siguieron fulminando con la mirada hasta llegar al altar.

—¿Este es el famoso Altar de la Luna? —pregunté.

—Si —respondió Jungwon—, el mismo que fue exportado con piedras preciosas desde el reino del GuarLu hasta aquí, un regalo de paz entre ambos reinos —explicó.

—Increible... —murmuré.

Pronto pasamos a la biblioteca del templo, en la cuál Selen me enseñó varios libros a la par de Heeseung, el cual ya los había leído prácticamente todos.

—Todas las historias de ambos reinos y nuestra ascendencia están aquí, no importa si las copias desaparecen o se pierden, siempre estarán los documentos originales aquí.

Ayari.

Actualidad.

Desperté de golpe después de las palabras de Selen. Ahora estaba segura de dónde estaban las respuestas y extrañamente, de donde encontrar ese lugar.

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Holiiis
Se que me perdí, perdí ya estaré de regreso por fin kajakaj

Espero que les haya gustado este cap, y aunque no pude hacer maratón, pronto volveré a actualizar.

Bye and Ai shiteru♡

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