Dennis en cuanto tiene la oportunidad usa su velocidad vampirica para marcharse, cuando esta lo suficiente lejos del Castillo, se detiene y se oculta en un tronco de árbol. Recarga su espalda, espera unos segundos y se asoma. Comprueba que no la han seguido y sonríe maliciosa.

Tan pronto desaparece con velocidad de regreso con los suyos. Al kilómetros reconoce a cada vampiro recién convertido, avanza mientras los esquiva captando sus miradas.

De pronto un jalón la hace detenerse y chocar contra un vampiro.

—¡Lio! ¡Deja de hacer eso! —al reconocerlo se safa de su agarre y lo empuja un poco.

—¿Dónde estabas? Tardaste demasiado y —Lionell la analiza de pies a cabeza— ¿por qué cambiaste Vivian?

—Dennis, ahora soy esta vampiresa.

Lionell gruñe, la agarra del brazo nuevamente y la aleja un poco de la multitud de vampiros.

—No te pueden ver así

—Nadie sabe de mi existencia Lio. Conocen más a la falsa Vivian.

El vampiro frente a ella niega y la suelta.

—Como sea, mejor dime ¿por qué tardaste en regresar? —se cruza de brazos.

Ella imita su acción

—Se cuidarme sola

—Estas a mi cargo, me preocupe por ti Dennis.

Ella descruza sus brazos.

—No sé volverá a repetir, solo fui al Castillo —hace una corta pausa— Lio logré cruzar la barrera.

—Eso no es posible, no tienes el poder para hacerlo. Su barrera fue creada por el alma de uno de los vampiros de la Corte.

—Tal vez soy mejor que ella, mucho más fuerte Lionell.

Él baja sus brazos y coloca sus manos en sus hombros.

—¿Por qué cruzaste? Pudieron verte.

—No lo hicieron, su reino ni se dio cuenta —ladea la cabeza— aunque uno de ellos si me vio.

—¡¿La... la reina?!

—No —Dennis gruñe— A ella ni me la menciones, fue con alguien peor, un vampiro.

—No me digas que te vio su rey ¡qué locura hiciste! —la zarandea.

—Lio ¡Lionell suéltame! —se safa de su agarre y retrocede— No fueron ellos, me cruce con su hijo, Darel Valentains.

Sin evitarlo sonríe ampliamente

—Con su descendencia —repite Lionell más calmado— ¿Te hizo algo?

—Más bien yo lo controlé aunque si es muy raro. Me fue difícil hacerlo, hay en él un poder oculto, muy fuerte que lo controla.

—Es hijo de uno de los vampiros más fuertes hermana, linaje Valentains.

Ella asiente y se vuelve a cruzar de brazos.

—¿Te vio como tal?

—Por suerte cambié a tiempo, me presente como esta vampiresa —se señala— la real.

—¿Y si te delata? Dennis, te arriesgaste demasiado.

—No le van a creer. Para ellos nadie puede cruzar la barrera y mucho menos una desconocida.

Lionell pasa su lengua por sus colmillos.

—Aún así, no vuelvas a actuar por tu cuenta, esto le costará el plan de venganza de nuestro padre —emite en voz baja.

—Él no tiene porque enterarse. Jurame que no... —ella guarda silencio al notar su mirada y verlo retroceder. Maldice a sus adentros— Hola padre.

—Escuché lo suficiente

Dennis sin darse la vuelta, lo mira rodearla hasta situarse frente a ella.

—No volveré a desobedecer, no cruzare más si...

—Shh —Vlad levanta su mano, ella guarda silencio de inmediato— Era justo lo querías que hicieras. Comprobaste lo que vi en ti. Eres más fuerte de lo que creí hija.

Dennis confusa medio sonríe

—Lo que me extraña es a quien estoy viendo.

Ella se observa a si misma.

—Sigue siendo tú hija, es Vivian —interviene Lionell.

—La vampiresa que vez es la verdadera, tú hija. Dennis Valentains.

—Me di cuenta, cuando te conocí usaste la misma apariencia de tu madre —Vlad comienza a caminar alrededor de ella sin dejar de verla— ¿puedes cambiar en lo que sea Adelina?

—No, solo puedo imitar a mi madre. Aun no he perfecciónado el hechizo.

Vlad musita y se detiene frente a ella.

—No es tú don —ella niega varias veces— Es una lástima pero me seguirás siendo útil —con velocidad la sostiene de las mejillas— No vuelvas a entrar a su reino sin mi permiso. Antes de que actúes tengo que estar enterado.

—Padre, ella ya entendió. Suéltala.

—Y así será, le pido que me suelte —masculla ella entredientes.

Su creador le sonríe con malicia

—Tal vez no lo conozca, pero aseguro que su creación es peor que el maldito de Darren. Te quiero lejos de él o al menos hasta que yo lo autorice ¿fui claro Adelina? —la escucha musitar y la suelta. Recuerda la visión que tuvo hace días —no cometeré ese error con él. Conocen mi plan.

—Cuando se de la oportunidad, cazarlo y matarlo —le responde Lionell.

—No, cambio de planes. Su hijo será mi aliado y tu hija vas a ayudarme —ella lo mira confusa —esto lo hago por nuestro reino —señala alrededor— Si me lo complican, no podré vencer al rey y recuperar a mi Aylin —se voltea y observa a cada uno— y que mejor mis propias creaciones estén de mi lado. Quiero creer que hice bien al convertirte y a ti al crearte por nacimiento —sin su permiso jala a ambos y recarga sus brazos en sus hombros— Aunque sean mi descendencia, la traición se paga con muerte.

Lionell comparte una mirada cómplice con Dennis.

—Eso jamás, estamos de tu lado hasta el final contra quien sea ¿cierto hermana?

—Si padre, tú vas a ganar esta guerra —inquiere ella molesta.

+++ Tres días después +++

Vlad vuelve a repetir un corte en la palma de su mano, sin sentir dolor mientras espera a sanar cada vez con más rapidez.

—Gracias por tu donación de sangre —le dice al purasagre drenado en el suelo frente a él— me dio más fuerza.

Cierra su puño y se da la vuelta. Al primer paso se detiene al ver su reflejo frente a él, quien lo imita al ladear la cabeza.

—Tus bromas no funcionan conmigo Darkiel.

—Intento que recuerde quien es

Vlad suelta una risa sin ánimos y retrocede un paso.

—El humano que estoy viendo ya no existe, gracias a tú Señor, soy este vampiro —gruñe al verlo dar un paso. Su reflejo sin colmillos, sin los ojos carmesí como él —¿a qué viniste? ¿Te mandaron a matarme? —espeta burlon.

—Aunque quisiera y tuviera la autorización, no lo haría. No arriesgaré la eternidad de mi Señor, ni de la señorita Elizabeth como a todo vampiro que se vincula a él.

—Incluyenme Darkiel

—Fue un grave error de mi Señor al incluirlo, pero no estoy aquí para discutir sobre el pasado. En cuanto su creador despierte, lo va a detener.

—No creo que lo haga o mejor dicho, no creo que despierte de un descanso por muchos siglos.

—Compruebo mi teoría, esta influyendo en su despertar.

Vlad le sonríe con malicia

—Aprendes mucho al convivir con el por más de un año. Soy su creación, aprendí que siempre afectamos al creador.

—Le he servido a mi Señor por siglos y nunca he actuado en su contra. Ni la señorita Elizabeth que es su legítima hija.

—Pierdes tu tiempo Darkiel, no pueden deterneme ¡soy invencible!

—Solo esta arriesgando su eternidad y la de todos, por un error suyo, dejaran de existir. Aunque no lo crea, encontrarán una forma de detenerlo y habrá un ser que lo haga ¿no aprecia su eternidad señor Vlad?

Él gruñe y hace sus manos puños.

—Olvide esta guerra o sus enemigos  terminaran con usted.

—Te equivocas Darkiel, lograré lo que quiero y todo quien me hizo volverme así, tendrá que morir. No me importa quien sea, todo quien se interponga —lo mira fijamente— comenzando por ti.

Usa su velocidad para atraparlo cuando Darkiel cambia a su forma cuervo, vuela hasta lo más alto y se marcha. Causando la molestia de Vlad.

No obstante, Vivian en su falsa apariencia entra a su guarida.

—¿Ese era el pájarraco de la corte? ¿A qué vino?

—A nada que debas meterte.

—Solo preguntaba. Vine porque tu reino está listo para atacar. Lionell ya tiene a todos afuera preparados.

Al escucharla su molestia se exfuma

—Excelente, vienes con nosotros. Necesito tú don.

Avanza y pasa por su lado.

Vivian gruñe y a regañadientes lo sigue.

Tras varias indicaciones de su creador, cada uno se marcha con velocidad hasta llegar a la siguiente manada de lobos.

...

—Tú plan no funcionó —le dice su hija al ver el desastre a su alrededor, cuerpos y más sangre.

Vlad le da una mala mirada y regresa la vista en el alfa frente a él quien se queja ante la mordida de su cuello.

—Te... van a... matar... chupasangre

—Te di la oportunidad de estar de mi lado y no en mi contra, pero estoy tratando con un débil alfa —lo mira respirar con dificultad hasta quedarse inmóvil — No puedo convertirlos en híbridos.

—Te dije desde un principio, esto no funciona así. Tú veneno los mata.

—Hermana —Lionell le advierte y se acerca a su creador— No le hagas caso, vamos a encontrar la manera. Tal vez puedas experimentar con el híbrido de la manada del norte. Es híbrido de nacimiento, madre de la alfa Amaris Leroy y de un vampiro, un tal Dean Cowell Williams.

Tan pronto capta su atención.

—¿Amaris haz dicho? —Lionell asiente— ¿cómo es que sigue existiendo?

—Los vampiros del Castillo le dieron su sangre, conocen un hechizo que descubrieron que les otorga la inmortalidad a cada lobo. Con ella experimentaron y dio resultados.

—Han sido años en descanso que aun no estoy enterado del todo.

—Yo investigué por ti, bueno también gracias a Vivian.

Vlad coloca su mano en su hombro

—Lionell, me estas sorprendiendo. Mi mejor aliado, llévame hasta esta manada ¡iremos por ese híbrido! —anuncia al resto y es el primero en desaparecer con velocidad.

(...)

Por otro lado, Amaris descalza avanza sin soltar la mano de aquel vampiro castaño.

—No puedo creer que no te canses de mi en todos estos años.

—Jamás lo haría, eres mi alma.

Ambos se detienen, ella se voltea quedando frente a él.

—Dejaste todo por mi ¿no extrañas el Castillo?

—No me dejaron de otra. Mi padre me dio a elegir, mi familia o tú ¿qué querías que hiciera?

—Lo sé Dean pero han pasado años que no los visitas.

—No seré buen recibido por él, lo conozco. Aunque si extraño el Castillo, a mi madre, conocer más a mi hermana. Escuchar los consejos de mi tío Esteban, todas sus descendencias ya deben haber crecido y cambiado a como los recuerdo.

Amaris se acerca a él y lo abraza.

—Con más razón debes ir a buscarlos. Estamos en guerra.

—No te dejaré sola aquí así seas la alfa mayor —la aleja un poco de él— me quedaré siempre a tu lado. Ambos logramos poner a salvo a Valuk, nuestro hijo estará bien en el Castillo, al menos a él si lo recibieron y lo aceptaron allá.

—No me gusta tenerlo lejos de nosotros pero si los rumores son ciertos, van a querer cazarlo por lo que es.

—¡Alfa Selene! —un grito los interrumpe.

Enseguida ella se da la vuelta

—¿Qué pasa Steven? —observa al lobo adulto frente a ella.

—Atacaron a la manada del este, me enteré que a su alfa Yael lo mataron. Ya acabaron con los lobos del oeste. No dudo que vendrán para acá o iran a atacar a la manada del sur.

—No, ahí esta mi hermano —Amaris se voltea con lágrimas en los ojos— Tengo que avisarle a todos y a Ian, él es su alfa y tiene que poner sobre aviso a su manada.

—Cuenta conmigo Amaris, yo puedo ir a... —Dean guarda silencio al ver a su madre frente a él— ¿madre?

—Hola Dean

Rodea a Amaris y se acerca a ella con velocidad.

—¿Qué haces aquí? ¿Te expulsaron?

—No, nosotros decidimos irnos —se medio gira y jala a su hija.

—May

—Hola hermano —ella se abraza a sí misma.

—Woo, la última vez eras una niña

—Han pasado años de eso

—Hijo —Mía capta su atención— Llevamos tres días fuera del Castillo y nos damos cuenta que este mundo ya no es igual a como era hace años. Han querido cazarnos. Nos hemos ocultado pero ya no estamos a salvo y no podemos regresar. Por eso estamos aquí, convencí a tu padre de buscarte y pedir tú ayuda —Mía le permite verlo —acercate a tu hijo Drake.

—No tenemos nada que hacer aquí Mía.

—Padre, yo no pienso correrlos. No hay un desprecio por el pasado.

—Tampoco queremos tu lastima Dean.

—¡Drake ya basta! —Mía fija la vista en su hijo— ¿nos aceptan?

Amaris llega hasta Dean

—Hola, miren, pueden quedarse si así Dean lo quiere pero ahora estamos bajo ataque. Ese vampiro cazador viene para acá, ya mató a varios... lobos —se limpia las lágrimas de sus mejillas.

—¿Y si mejor regresamos al Castillo mamá? —opina May al ver a ambos lados.

—Quedense al menos hasta que sea seguro que se vayan.

—Amor tengo que irme, mi manada me necesita. —Amaris se despide de un casto beso de Dean y enseguida se marcha.

—Lo siento hijo, por nunca apoyarte como debi hacerlo hace muchos años.

Mia capta su atención

—Ya habrá tiempo para hablar sobre eso madre —observa a su padre, él sin verlo y dirigirle más la palabra.

...

—Luces nervioso hermano

Dean deja de tocar su anillo y observa a May.

—Estoy preocupado por Amaris, es debido al vínculo. Ya van minutos que se fue y no regresa, ni nadie de la manada.

—Merecías algo mejor

—No empieces ahora padre

—Dean, Drake no discutan —emite Mía cansada.

Dean gruñe y avanza varios pasos

De pronto observa a tres lobos llegar hasta él. Uno de ellos sin su transformación.

—¿Dónde está su alfa?

—La han capturado, tenemos que irnos de aquí.

—No, Amaris no —con velocidad Dean se marcha.

Mia da un paso adelante

—Tenemos que ir con nuestro hijo, no podemos dejarlo solo Drake.

Él gruñe y dura segundos en responder.

—Bien, pero tampoco dejaremos a May sola con estas bestias.

Se marcha con velocidad

Al instante Mia lo sigue acompañada de su hija.

A pocos kilómetros, Dean se detiene. Deja crecer sus colmillos al ver a Amaris ser sostenida por el líder vampiro.

—Déjela o se va a arrepentir

—¿Qué piensas hacerme? Mirate, no eres rival para mi —Vlad ejerce fuerza en su cuello, Amaris sin dejar de removerse— Solo quiero algo tan sencillo y su alfa no correrá con la misma suerte que todos esos lobos que han muerto por mi —observa de ella a él y les sonríe con malicia— entregueme a su descendencia y me iré con mi reino.

Dean comparte una mirada con Amaris.

—Nuestro hijo no logró vivir, lo perdimos.

Vlad borra su sonrisa de inmediato

—Adelina, hazlo

Ella asiente, da un paso y extiende sus manos, le causa un dolor a Dean que lo obliga a arrodillarse y llevar sus manos a su cabeza.

—¿Lo vas a seguir ocultando de mi?

—¡No le hagan más daño! —súplica Amaris— nuestro hijo no está aquí... Se los juro, lo enviamos al Castillo.

—Averigualo Adelina

Ella se acerca a Dean, deja de torturarlo y coloca sus manos en su cabeza por cortos segundos y se aleja.

—No mienten padre

Vlad gruñe y suelta a Amaris bruscamente.

—Me será más difícil pero voy a capturar a su híbrido.

—¡¿Qué quieres de él?! —Amaris con esfuerzo se acerca a Dean.

—Los híbridos tienen más poder

—Es protegido del Rey y la Reina, no darás con Valuk —le responde Dean.

Vlad hace una mueca

—Les demostraré lo contrario —retrocede un paso— Maten al vampiro y a la alfa, la encadenan. Se viene con nosotros.

Dean rápido se pone de pie y cubre a Amaris. Dos convertidos se acercan a él. Logra derrotar a uno y el otro le es arrancado la cabeza por su creador al llegar hasta ellos.

—Tú imbécil cazador ya me tienes harto —Drake fija su vista en él— Nunca debimos salvarte en el pasado.

—Me siguen recordando

—Si, siempre serás un débil humano —se acerca a él, Vlad susurra un “No intervengan”

Su rostro trasmite la burla cuando Drake lo sostiene del cuello con fuerza.

—Les debo, me dejaron vivir y por cada uno soy quien ahora soy —imita su acción y saca a relucir sus colmillos— Tú darás el mensaje al Castillo.

Con su otra mano atraviesa su abdomen, logra liberarse de él y acto seguido le arranca la mitad de su brazo derecho hasta empujarlo al suelo.

Con velocidad llega hasta Dean y Amaris, ambos sin creerlo.

—Cazare a su híbrido —ríe siniestro y se marcha con velocidad como cada uno de su reino.

—Pa... padre

—¡Drake! —grita Mia al aparecer con May, al verlo comienza a llorar.

Dean rápido se acerca a él mientras lo revisa mientras Amaris detiene tanto a May y a Mia.

—¡No! ¡Él no!

—¡Dean... ayuda a nuestro padre!

Él gira a verlas

—Esta perdiendo mucha sangre, de alguna forma tenemos que llevarlo al Castillo —les responde desesperado.

+++ Horas después +++

Por el pasillo del Castillo Alina avanza con aburricion mientras escucha a su cuervo graznar en su hombro derecho.

—¿Cómo lo conseguiré Darki? —habla con su mascota y hace una mueca— no me permiten ser yo —observa el brazalete en su mano.

De pronto se detiene, baja su brazo y sonríe ampliamente al verlo a poca distancia.

—Shu, Shu, vete Darki, nos vemos después —espanta a su cuervo y con velocidad llega hasta él— Hola Valuk.

Él recargado en la pared gira a verla.

—Ali... Alina

—Te vi solo y me quise acercar a hacerte compañía —apoya su brazo en su hombro acortando toda distancia.

—Que... considerada eres Alina

Ella le sonríe luciendo sus colmillos.

—Mirate, estas tenso, nervioso ¿Por qué?

—No sé que me pasa

Alina ladea su cabeza, borra su sonrisa y hace un puchero.

—Valuk, requiero tu ayuda, me apena decirte esto pero te... necesito —le vuelve a sonreir.

—Lo que sea Alina

—¿Lo dices enserio? —rápido se aleja de él, se sitúa al frente suyo— ayudame a que me quiten este brazalete. Averigua como deshacerme de él.

—Tengo entendido que eso te controla. No puedo ayudarte con eso.

—Valuk, creí escuchar en lo que sea Alina —se cruza de brazos.

—¿Por qué quieres descontrolarte?

—No lo haré, solo quiero conocer todo mi poder. Liberar mi don. Así nunca seré la vampiresa que soy.

—Cuando fuiste libre, causaste un incendio.

—¿Cómo sabes que...? —gruñe— Noah te contó —baja sus brazos— Era una niña ¿de acuerdo? —se acerca a él— Valuk ayúdame y si lo haces yo podría ayudarte a completar al híbrido que eres.

—No Alina, yo prefiero ser solo un vampiro y no liberar a mi lobo interior. Por eso me he negado a transformarme. Después no podré controlarme.

—Desperdicias tú poder —roza con sus uñas su cuello— Y a mi me gustan los más fuertes.

—¿A qué te refieres?

Alina lo obliga a verla

—Imagina tener todo el poder al ser un híbrido con sangre de vampiro y de tu madre alfa loba —se inclina a su rostro— y a mi.

—Alina... nos pueden... ver

Ella se encoge de hombros y lo besa. Valuk con torpeza le sigue el beso mientras la agarra de la cintura.

No obstante, alguien los aleja bruscamente.

—¡Valuk la familia te necesita!

—¿May? ¿Tú qué haces aquí? —le pregunta Alina mientras la observa molesta por la interrupción.

Ella la ignora

—Mi padre fue herido. Querían matar al tuyo y llevarse a tu madre.

—¡¿Qué?!

—Están entrando al Castillo, yo me adelante a pedir ayuda.

Valuk se acerca a ella

—Tranquila May, tienes mi ayuda —se voltea— Alina avisale al rey y a la reina por favor.

Dicho esto y se marcha con velocidad con May.

—Claro, me gusta ser la mensajera.

Resopla Alina y se dirige a buscarlos.

(...)

—Cada vez más vampiros desaparecen, dejan de existir por su culpa. Se está volviendo más fuerte e incluso tiene más aliados —les informa el líder del consejo.

—Maldito, desde un principio debí matarlo.

La reina se cruza de brazos

—¿Qué más averiguaste Esteban? ¿Sabes algo sobre Mia, Drake y May?

—Nada de ellos, los que han ido a buscarlos, de diez, dos regresaron y no saben nada —Esteban hace una corta pausa— solo descubrieron que ese cazador ya eliminó a toda una manada de lobitos en la zona oeste y este.

—¿Por qué está matando lobos?

—Es obvio Ayline, le dará más ventaja

—Hay rumores, los que encontraron muertos tienen marcas de colmillos. Sea lo que planea, pienso que es su forma de matarlos o quiere convertirlos —emite el rubio vampiro.

—¿Eso es posible?

—No Ayline, el veneno de nuestros colmillos solo los matará. Es muy diferente a nuestra maldita sangre.

—Así funciona esto pequeña

—Tenemos que hacer algo. Darle protección a la manada de Amaris, a cada lobo. Ellos nos ayudaron en el pasado.

—Además si nena, su criatura y el imbécil de Drake lograron dar con ellos, están en peligro si los atacan.

Ambos giran a ver al rey

—Ni lo piensen, solo nos hacemos cargo de los que están dentro del Castillo, afuera no es mi problema.

—Darren...

—Ya es demasiado con tener a su descendencia aquí Ayline.

De pronto la puerta de la sala es abierta de golpe por Alina quien se asoma.

—Les traigo más problemas —ríe sin ánimos— toda la familia Cowell Williams acaba de regresar, creo que Drake esta gravemente herido. Atacaron a la manada de Amaris.

Aylin al escucharla gruñe

—Gracias Alina, ya vamos

Es la primera en abandonar la sala con velocidad.

—Es dentro del Castillo, si es tu problema.

Darren le da una mala mirada a Esteban y en silencio avanza hasta salir de la sala.

Esteban oculta su burla y se voltea.

Al verlo avanzar, Alina se coloca en medio de la puerta y extiende sus brazos.

—Antes de que se vaya, necesito que haga algo por mi.

—Eso depende chiquilla pero ahora me tengo que ir, si me dejas pasar.

Alina niega varias veces

—Antes me debe escuchar, yo lo aprecio mucho, lo respeto como el padre de Noah. Aun recuerdo cuando solía leernos aburridos libros a ambos siendo unos niños o me dejaba jugar con su hijo.

Esteban se cruza de brazos

—Ajam y nunca prestabas atención a cada lectura ¿Me recuerdas cuantos libros valioso quemaste en tu incendio en la biblioteca? —se inclina un poco— Si, todos que me a costado recuperar.

—Eso quedó en el pasado —masculla Alina harta. Se obliga a controlarse y baja sus brazos —¿cuento con su ayuda? Haré lo que sea por usted.

—Explicame ¿en qué te puedo yo ayudar?

—Convenza a mi madre de quitarme mi brazalete.

Esteban lo observa en su mano y regresa la vista en su rostro.

—No hablaré con criatura para tu malévolo plan. Eso te protege Alina.

Ella hace sus manos puños

—Ayúdenme, estoy agotando todas mis opciones. Mis padres no quieren liberarme de esto —levanta su brazo— Si me ayuda, puedo obligar o convencer a Noah de ser el vampiro que usted quiere que sea. Usará sus colmillos por primera vez o puedo incluso tener sexo con él. De verdad que estoy desesperada.

—A ver chiquilla, en primero lugar, no voy a permitir que una vampiresa con menos siglos que yo me chantajee. Segundo, no metas a mi hijo en esto y tercero, es un no definitivo —Esteban baja sus brazos— Tienes una mala manera de conseguir lo que quieres Alina.

—No le pedí un consejo. Sabe, ya me cae mal.

—Esteban

El susodicho está por responderle a Alina cuando escucha detrás de él una voz reconocida.

—¡Beth! —rápido se voltea, avanza hasta ella y la abraza —Tanto te he extrañado. Hay problemas en el reino.

—Lo sé, por eso estoy aquí.

Cuando se aleja la besa con intensidad.

Incomoda Alina se voltea y se marcha de la sala, aun molesta.

...

Al llegar a lo más alto del Castillo, lo busca y sonríe ampliamente al dar con él.

—¡Tío Darel, lo estaba buscando!

—Darel, solo así mi molesta sobrina —le responde sin verla.

Alina se encoge de hombros y se acerca a él. Se sitúa a su lado.

—¿Qué tanto vez el bosque?

—Me aseguro que fuera de la barrera ninguna vampiresa extraña cruce.

Ella frunce el ceño

Darel baja sus brazos y gira a verla.

—¿Por qué me buscabas?

—Oh si, yo venía a informarte que los padres de May y ella, regresaron al Castillo.

—Lo sé, cuando venía para acá escuché rumores. Por un ataque.

—Correcto —Alina se recarga en el barandal— Y es posible que Drake deje de existir, tu venganza con él quedaría al olvido si eso llega a suceder. Mi madre me contó lo que te hizo o más bien yo le saque la verdad, la escuché hablar con mi padre.

—No dejas de meterte en asuntos que no te incumben ¿cierto?

—Que más se puede hacer en este Castillo —le sonríe divertida.

Darel gruñe y deja de verla.

—No estaría satisfecho si él llegara a dejar de existir. El merito es para ese maldito cazador, no para mi porque no fui quien le causó ese dolor.

Alina lo observa pensativa

—Eres muy vengativo

—Con mis acciones solo intento que me expulsen, más mis creadores se rehúsan a hacerlo.

—Entonces, eres un rebelde vampiro que esta consciente de cada acción, hay consecuencias.

—¿A qué viene eso?

Gira a verla, Alina le sonríe ampliamente.

—A que si me ayudas a conseguir lo que quiero, tal vez esta vez te exilien para siempre —Darel la mira con intriga— le pedí ayuda a Valuk, y nada, al padre de Noah y tampoco va a ayudarme y hablar con mis padres, lo he intentado tantas veces. Así que tú eres mi única opción —lo señala— Me quiero deshacer de este brazalete, me debilita y como tú, no me gusta ser controlada. Ni si quiera me conozco o lo capaz que soy de hacer.

Darel agarra su mano y revisa el brazalete.

—No tiene seguro, ni tampoco se puede romper.

—Es por un hechizo que solo mis creadores conocen. Después usan una llave que ocultan bien.

La suelta lentamente

—¿Me ayudarás?

—Haré lo que pueda Alina, vas a hacer libre de eso.

—¡Gracias Tío Darel!

Esta por abrazarlo cuando él levanta su mano. Al instante Alina se detiene y marca distancia.

—Te debo una —le sonríe y avanza para irse. Sin embargo al tercer paso se detiene y se voltea— Ya no puedo más callarlo.

Darel se voltea por completo.

—Existe un secreto que la reina y el rey te han ocultado.

—No es la primera vez que lo hacen

—Darel, esto es grave —con seriedad Alina lo observa— cuando era una niña escuché algo sobre ti —hace una corta pausa— No eres hijo del rey.

—No es gracioso eso Alina. Por supuesto que lo soy, somos muy parecidos.

—Lo sé pero hace años escuché una conversación de mi madre con mi abue Lin. No se dieron cuenta que estaba escondida en el armario al estar jugando con Noah. Escuché que la reina le confesaba a mi madre que... Tu hermano murió Ana Liz , esas fueron sus palabras y es obvio que se referían a ti.

Con velocidad Darel la sostiene de los hombros.

—Eso no puede ser cierto. Soy su hijo, Libe es mi hermana. Yo crecí dentro de mi madre.

—Es lo que no entiendo. Yo recuerdo haberla visto esperándote, te vi nacer. Mi abue Lin estaba embarazada de ti pero siempre fuiste raro. Para ser una niña llegué a escuchar muchas cosas que ahora entiendo. El sedante te afectó.

—Eso lo sé, por culpa de mi... padre ahora soy inmune.

—Escuché que fue Derek quien te salvó, tal vez el sedante de mató y él te trajo de vuelta —Alina se encoge de hombros cuando Darel la suelta— o no sé porque tú madre mencionó que habías muerto. Han sido varias veces que quieres matar al rey, incluso desde que crecías dentro de la reina. Para ser vampiro a esa corta edad y sin nacer, eras muy fuerte.

—No Alina, yo no puedo ser ese que dices. Soy fuerte pero no demasiado.

—Siempre te han controlado como a mi —hace una corta pausa— Es obvio que aquí hay un secreto que tienes que descubrir. Esa verdad que tu madre te a ocultado o al menos que te explique esto. Habla con ambos Darel.

Él baja la vista

—Si es verdad lo que me dices, eso explica porque quieren siempre controlarme. No pueden contra el mal que hay en mi.