🦇 Narrador omnisciente 🦇

Sin invitación, Darel entra azotando la puerta. Usa su velocidad para llegar al balcón y al ver a la vampiresa frente a él se detiene.

—¿Quién es Vlad Valentains?

Aylin se tensa al escucharlo, sujeta el barandal con fuerza.

—¿Cómo es que sabés...?

—Es lo de menos por quien o como me enteré de él —la interrumpe y avanza un paso— Deja de ocultarme información.

—No es así hijo —su creadora se da la vuelta— No es tu guerra.

—No haz contestado a mi pregunta

Aylin toca su anillo por inercia.

—No hablaré de esto contigo

Darel curva una media sonrisa.

—Entonces buscaré información por mi cuenta. Todo el Castillo lo sabe, todos excepto sus creaciónes ¿por qué madre? ¿Nos creen débiles?

—No Darel —ella levanta su mano al notar el carmesí de sus ojos— solo escúchame, se los ocultamos porque no queremos involucrarlos, ni al primer siglo de la eternidad han llegado —baja su mano lentamente —Este tema no es su asunto.

—¿Quién es? No dejaré de insistir en querer saber más sobre él.

Su madre se cruza de brazos.

Los invaden segundos de silencio.

—No puedo decirte nada Darel —lo escucha gruñir— no sin la presencia de tú padre, iré por él.

Aylin avanza dispuesta a entrar a la habitación cuando su hijo se interpone y levanta los brazos.

—Déjame pasar

—Retrocede madre

Ella baja sus manos sin dejar de verlo. Ante la diferencia de altura levanta la cabeza, su hijo heredó esa misma alta estatura de su creador.

—Él no vendrá cuando está ocupado en los calabozos, me aseguré de que estuvieras sola para venir a hablar contigo —Darel baja sus brazos— solo en ti confío, no vas a mentirme porque con él, estoy seguro que me romperá el cuello o me encerrará con tal de no tener la información que quiero.

Aylin desvía la vista

—¿Por qué lo consideran cazador?

Rendida gira a verlo.

—Entremos hijo y te diré todo — su madre avanza, pasa por su lado sin ser detenida esta vez y al instante, Darel la sigue— ven aquí, siéntate —Aylin se sienta en la cama y señala un extremo, él niega al detenerse frente a ella— Bien, esto es difícil Darel.

—Desde el principio madre —se cruza de brazos.

—Él es parte del pasado, hace muchos años Vlad fue un humano, antes de ser convertida por tú padre como lo sabes, él era mi amigo. Carlos, era tan diferente al vampiro que ahora es, ya perdió su humanidad —hace una pausa— siempre estuvo ahí para mi, cuando tú padre me dejó, me ayudó a criar a tu hermana y cometí el error de casarme con él, me engañé al creer que podía amarlo como él a mi —baja la vista— Pero no fue así y cuando Darren regresó, ese vínculo entre nosotros nunca desapareció. Ya Ana Liz nos unía y no soporte más y lo volví a elegir a él, sé que le destruí el corazón a Carlos —su hijo hace una mueca de desagrado — Y cuando morí, a él lo convirtieron en vampiro. Cuando creí que era Elizabeth y Derek me había convertido, él estuvo ahi, me ayudó al principio, había un aprecio Darel —alza la vista— Hasta que tu padre me hizo recuperar la memoria, saber quien era y descubrí que había sido convertida por él. Acepté ser su reina y pasar mi eternidad con tu padre —Aylin se levanta— pero Vlad, lo tomó mal. Antes de que nacieras, él inició esta guerra y para detenerlo, Derek quien es su creador lo obligó a descansar todos estos años hasta que hace poco dos de sus creaciónes lo despertaron y volvió a cometer exactamente lo mismo desde hace años, esta cazando purasangres, esta convirtiendo humanos, esta haciendo su propio reino en nuestra contra. Se está volviendo más fuerte.

—¿Cómo lo detenemos?

Aylin niega varias veces

—No sé puede

—Madre siempre hay una manera.

—¡No Darel! Hay un vínculo que involucra a toda la Corte, a Elizabeth,a Esteban y a él. Si Vlad deja de existir, lo harán todos ellos y no hay un hechizo para destruirlo. No se puede hacer nada mientras el líder este en descanso. Solo Derek puede detenerlo o destruir el vínculo o hacer que él ya no pertenezca más.

Él niega varias veces

—Mi creador ¿por qué no lo destruyó antes?

—No pensamos que sería una amenaza.

Darel se acerca a ella.

—No, se detuvo por ti. Haz dicho que te importaba ese humano, se lo pediste y por ti no fue capaz de matarlo ¿crees que no me doy cuenta?

—Hijo

—¡Lo controlas a él como a mi!

—¡Me equivoqué! Lo hice de acuerdo. Creenme que me arrepiento, si no lo hubiera dejado llegar tan lejos, esto no estaría pasando —Aylin con velocidad aparece cerca del balcón— pero no puedo regresar y cambiar el pasado, lo que me preocupa ahora es que vuelva a atacar a todo el reino, a mis hijos y a tu padre.

Darel se da la vuelta

—Él te quiere cazar a ti, lo sé madre —avanza tres pasos— Y destruir al rey ¿no?

—Yo cometí el error, por todos ofrezco mi eternidad si es necesario...

—Tú no vas a morir. No te alejará de nosotros —con velocidad Darel la alcanza y la sostiene del rostro— no sé saldrá con la suya, no me importa mi creador, solo tú madre.

—Lo sé, hay un aprecio para mi y muy en el fondo aunque te comportes así y lo niegues, es el mismo por tu padre.

Él niega y baja sus manos

—Al rey solo quiero matarlo

—Darel...

—¿Dónde lo encuentro? Manda destruir esa barrera y iré a matarlo. A mi no me importa los involucrados, que pertenezca al mismo linaje Valentains, voy a cazarlo antes de que llegue a ti.

—Justo por esto no quisimos contarte nada. Eres impulsivo Darel.

—¡Voy a arreglar su error! —retrocede un paso. Mira su negación— Buscaré la manera madre.

—No vas a intervenir hijo, nosotros veremos como detenerlo sin correr riesgos. Evitar la inmortalidad de siete vampiros y solo sea la suya.

Se cruza de brazos inconforme.

—Sus creaciónes, acaben con ellas.

—Vlad es muy diferente, lo desconozco. Además ha convertido muchos humanos, de los cuales tú padre en el pasado eliminó, pero no se dio cuenta que había sobrevivido dos. Quienes le ayudan, quienes desconocemos. A él no le importa su descendencia con tal de seguir con esto, vuelve a crear más así pierda —Aylin se acerca a él— no harás nada hijo, por favor.

Él evita verla

—Darel no quiero perderte, es más fuerte que tú.

—Con más razón debo destruirlo. Ya suficiente tengo con vencer a mi padre para que salga ahora otro vampiro Valentains más fuerte que yo —deja crecer sus colmillos— seré el único madre.

Dicho esto y se marcha con velocidad ignorando el grito de su creadora.

—Voy a encontrarte maldito —emite al detenerse lo suficiente lejos de esa habitación. Se voltea y avanza por el pasillo con sus manos hechas puños.

Al pasar cerca de una puerta, esta es abierta y con velocidad lo agarran y lo adentran a la habitación sin darle tiempo de reaccionar.

Darel gruñe y se levanta rápidamente al escuchar la puerta ser cerrada. Ojea la amplia habitación vacía. En la esquina nota una larga cadena de plata en el suelo.

—Te vas a arrepentir de esto

—Asi seas el hijo de rey, tengas la protección de la reina —el vampiro frente a él se acerca— no me va a importar matarte. Escúchame bien Darel, nadie se mete con mi hija y mucho menos la usa de la forma que tú lo hiciste.

—No sé que tanto les haya contado May...

—Sé lo suficiente, ella no es una más de tu lista, todos conocemos la clase de fama que tienes —Drake saca una jeringa con sedante de su bolsillo— Y mi May no será tratada por ti como todas esas vampiresas que frecuentas, no es inferior a ti.

Darel curva una media sonrisa burlona.

—Fui claro con ella y estuvo de acuerdo en solo sexo. Tú actuación de creador molesto es absurda —ríe sin embargo con velocidad es empujado a la pared por Drake quien lo sostiene del cuello —si no eres el mejor, de hecho todos son unos malditos creadores.

—May no sabe que hago esto por ella. No solo es eso Darel, ya estoy harto de los problemas que nos ocasionas —ambos dejan crecer sus colmillos— eres un mal ejemplo para mi hija. Si tus creadores no te detienen, entonces lo haré yo.

Drake ejerce fuerza, Darel deja de tocar el suelo.

—Te doy tiempo... de huir porque voy a... cazarte... y arrancarte el corazón.

—No me tomará mucho tiempo matarte, lo haré antes de que vengan a salvarte —rápido le inyecta el sedante y lo suelta bruscamente— dentro del Castillo ya tienes muchos enemigos.

Darel gruñe, toca su cuello mientras intenta levantarse.

—Por milésima vez... un sedante no me detiene... Todo gracias a mi creador.

—Lo sé, pero es una fácil distracción —Drake agarra la cadena y la enrreda en su cuello— me da el tiempo suficiente para cortar tu cabeza ante que tu lo hagas conmigo— ejerce presión, soporta el ardor en sus manos al agarrarla de cada orilla.

Darel se remueve bruscamente desde el suelo. Sin gritar intenta jalar la cadena, sin embargo cada vez se clava en cuello mientras le quema la piel.

—Realmente eres fuerte pero no por mucho —Drake lo arrastra a la esquina de la habitación, su fuerza comienza a debilitarse. Desesperado usa el resto de la cadena y la vuelve a enrredar en su cuello— un poco más de presión y sin cabeza —le susurra al oído.

No obstante la puerta es abierta.

—¡¿Qué estás haciendo?! —Valuk se adentra cerrando la puerta y se acerca—abuelo por qué...

—No me digas así, no soy nada tuyo —fija la vista en él— este vampiro se burló de May y solo la estoy vengando.

—Escúchame, sea lo que sea que Darel le haya hecho a May, no debes hacerle esto. Te meterás en graves problemas, si te atrapan vas a ser expulsado del Castillo o te condenaran a muerte.

Drake lo analiza, comienza a disminuir su fuerza.

—Puede que tengas razón, por eso vas ayudarme.

—Yo no me refería...

—¿Quieres que te acepte Valuk como mi familia? Ayudame y voy a arreglar las cosas con Dean —él ojea a Darel cada vez más pálido— También te desprecia, merece morir.

—Si, por supuesto que si —Valuk retrocede— nunca he recibido un buen trato de él desde que éramos niños pero no señor Cowell, es un vampiro como nosotros o al menos mis padres me enseñaron a no atacarnos entre nosotros.

—Tú no eres un vampiro

—Tal vez no por completo, tal vez ser mitad lobo me hace ser mejor que lo que tú eres.

Valuk niega y desaparece con velocidad.

Drake reacciona al escuchar una risa siniestra. Y antes de impedirlo, Darel se suelta de la cadena al usar su fuerza y se pone de pie.

—Solo era ventaja —la marca en su cuello sana — Piensas mucho para matar —lo observa con seriedad —yo no.

Drake retrocede un paso y ojea la puerta.

—No hay salida para ti —con velocidad Darel lo ataca y rodea su cuello con la misma cadena— Sabes, vas a morir y podré seguir disfrutando de la sangre de May, con respecto a lo otro —pasa su lengua por sus colmillos— no cometo el mismo error dos veces, tengo una estricta regla mía que cumplir.

Ejerce más fuerza, ignora al escucharlo gritar y verlo más débil.

Satisfecho ensancha su sonrisa luciendo sus colmillos.

De pronto, la puerta es nuevamente abierta.

—¡Darel suéltalo ahora! —gruñe y maldice. Esta por mover la cadena y jalarla cuando recibe un corte en su mejilla y es alejado bruscamente hasta chocar con la pared —Te lo pedí por las buenas hermanito.

—Libe —él se levanta. Su herida cicatriza — intentó matarme, solo haré exactamente lo mismo con él.

—No harás tal cosa —Ana Liz se da la vuelta. Resopla con fastidio al verlo y con velocidad lo agarra de la camisa y lo acerca a su rostro — No aprendes Drake, no falta decirte que esto te costará la vida —le sonríe maliciosa— sin embargo no voy a hacerlo, ni mi hermano porque ni Mía, ni tu hija merecen sufrir por tu muerte pero escúchame bien, que sea la última vez que intentas esta locura. No te acusare con el verdadero temor, a mis padres no le gusta que se metan con Darel, ni conmigo. Así que por tu bien —le acerca el filo a su cuello que comienza a sanar— no te vuelvas acercar a mi hermano —Lo suelta y se aleja de él —Fuera de mi vista.

Drake la observa molesto, se controla al atacarla.

—Nunca dejarás de ser un problema Darel —emite al verlo y con velocidad se marcha.

—¡Lo dejaste ir Libe!

—En primera, dime por mi real nombre —se voltea y se guarda la daga en el bolsillo de su falda— Ya sabes pronunciarlo, Ana Liz o Lizbeth —resalta.

—Libe —repite él y se acerca a ella. Le gusta verla molestarse por su mala manera de referirse a ella desde hace años.

Ana Liz se cruza de brazos.

—Segunda, te salvé, por mi tu cabeza esta en su lugar. Me encontré a Valuk en el pasillo y me contó todo.

—Ya me iba a encargar de él. Solo le daba ventaja, alimentaba su ilusión de creer que podía vencerme.

—Deja de hacer eso Darel, no siempre vas a poder contra ellos.

—Soy fuerte Libe, no necesitaba tu ayuda.

Ella rueda los ojos

—Como sea ¿ahora que hiciste para que Drake quisiera matarte?

—Averígualo —nota su mirada seria. El carmesí de sus ojos se intensifica — sexo con May.

—Ay no, otra vez hermano

—Siempre es una vampiresa distinta.

—Aja y le tocó el turno de la pobre y tonta hija de Mía ¿no?

Darel desvía la vista

—¿Por qué les importa tanto? Así llevo mi eternidad. Además es lo mismo que todos aquí hacen. Tú con Owen.

—Oye, es muy diferente. Wen es mi alma y solo es con el y nadie más. Tú deberías hacer lo mismo.

Darel gira a verla

—No voy a debilitarme por tener una alma, no intervendrá en mis planes.

Ana Liz lo observa con burla.

—No dirás lo mismo cuando la encuentres. Así era nuestro padre.

—No soy igual a él

Ana Liz avanza a su alrededor divertida.

—No, para nada —ríe— Enserio hermano, deja de meterte en problemas y por el bien de todos, que sea nuestro secreto. Esto nunca pasó.

Se detiene, pellizca su mejilla y se voltea yendo en dirección a la puerta.

—¿Tú conociste a Vlad Valentains?

Al escucharlo se detiene cerca de la puerta.

—¿Quién te contó sobre él? —se voltea.

—Mi madre, me contó todo o eso creo.

—Es una larga historia hermano, por algo te la ocultaron. Ya sabes la mayor parte del pasado, con eso te es suficiente.

Darel aparece con velocidad cerca de ella.

—Tenemos que eliminarlo antes de que venga por ella.

—Es algo que quiero hacer pero no sé puede.

—Al diablo ese vínculo Libe

—Darel, esto funciona así, si estas enterado, no se hará nada por el momento.

—¿De verdad estás de acuerdo con todos ellos? ¿Te quedaras sin hacer nada y esperar que solo nos ataque? —gruñe ante su silencio— Podemos ir a matarlo antes que eso pase.

—No lo hará mientras la barrera proteja a todo el Castillo. No podrá entrar —da un paso adelante— Mira, entiendo tu frustración pero no dejaremos que se lleve a nuestra mamá o quiera acabar con la eternidad de nuestro padre. Los vamos a proteger desde aquí okey.

—Yo solo protegeré a mi madre. Del rey encargate tú.

—Darel, él es también tú padre.

—No, tú eres su favorita

—No lo culpo, fui la primera y soy mejor que... Ey, ey espera —lo detiene al verlo abrir la puerta— era broma, por favor Darel, igual te aprecia como hijo, que no lo demuestre es otra cosa. Conoces como es —Ana Liz lo suelta— entiendo tus razones competitivas —le sonríe—solo ayúdame a protegerlos.

Él asiente

Ana Liz amplia su sonrisa, levanta su mano y le muestra el meñique.

—Juralo por tu sangre, por tu eternidad.

—Libe, no haré eso, es patético —baja su mano y levanta la suya. Bajo su atenta mirada se hace un corte en la palma de su mano con sus largas y filosas uñas. La línea de sangre se desliza y antes de sanar se la muestra.

—Uy, que sádica idea —ella imita rápido su acción y juntan sus manos —Pacto de sangre hermano, por nuestros creadores, por todo el reino.

Por otro lado, a kilómetros de distancia del Castillo, los vampiros que han logrado dar con él, pierden su eternidad.

Cuando ella avanza se cruza con cuerpos disecados, percibe el olor a sangre sobre el suelo, escucha gritos de los sobrevivientes. Y entre más avanza observa a recientes vampiros convertidos alimentarse con desesperación de humanos sádicamente.

Se detiene al llegar hasta la puerta y se voltea. El mismo panorama, tanta sangre derramada por su creador.

—Vivian

De pronto reacciona y desvía la vista al escuchar su voz.

—Lio

—¿En qué piensas?

—En la guerra que ocasionamos.

—Se lo debemos, es nuestro creador.

—No Lionell, despertamos a un vampiro muy diferente al que imaginamos.

—¿Qué es lo que en realidad te molesta?

Ella deja de verlo y baja la vista.

—Hermana —le insiste.

—No es el creador que queríamos para nosotros y ya estoy harta Lio —levanta la vista— nos ignora. Ya es momento de que nos escuché.

Se voltea y tras empujar la puerta se adentra.

—¡Vivian no vayas a enfadarlo más!

Lo ignora cuando no le a vuelto a temer.

Por el pasillo ignora el rastro de sangre, los vampiros que trabajan para ambos se apartan de la entrada y le permiten pasar.

—Quiero hablar contigo

Vivian se adentra al cuarto, al verlo frente a él se detiene a tres pasos.

—Estoy ocupado

—Claro, tan ocupado bebiendo tú copa de sangre.

Vlad deja de beber, la aleja dejándola sobre la orilla de la pared.

—¿Qué quieres Adelina?

—Dime por mi verdadero nombre.

Deja de darle la espalda

—Te pareces tanto a tu madre, mereces llevar su nombre —avanza hasta ella— a ti te desconozco.

—Porque no te haz dado la oportunidad de conocernos. Desde que te despertamos, no haz hablado con nosotros, solo nos usas para ayudarte en tu guerra —lo apunta— tanto yo y Lio, solo queremos un creador.

Él se detiene y coloca sus manos detrás de su espalda.

—¿Terminaste con esos sentimientos humanos? —le sonríe con burla— Tú no los sientes porque no eres una mortal, eres esto —la señala— mi mejor creación Adelina.

Ella pronuncia su real nombre en voz baja.

—¿Crees que no los he investigado? Ya hablé con Lionell —la mira con seriedad— Ambos, de todas mis nuevas creaciónes, son los más poderosos, los mejores —aparece cerca de ella— tú hermano fue el primer humano que converti y mira los resultados y tú —lleva su mano a su rostro, su mejilla la roza con sus largas uñas— Fuiste lo mejor que obtuve de tú madre.

—La usaste, me lo contó todo cuando era una niña.

Vlad baja su mano rápidamente.

—Lo hice —se voltea y se aleja de ella—para una buena causa —se detiene. Hace una corta pausa— Hace muchos años, seguía muy molesto con Aylin, como siempre prefirió a Darren antes que a mi. Cuando me di cuenta que formaba parte del vinculo, la busqué y actuó tan diferente conmigo. Me volvió a rechazar, hubo un leve enfrentamiento con Darren y ella lo volvió a elegir —observa su copa fijamente— Entonces me fui sin antes jurarme a mi mismo que Aylin volvería conmigo, justo como en el pasado. Solo ella y yo —gira a verla— Semanas después llevé acabo mi plan de venganza. Comencé esta guerra.

>>Y en una ocasión, cuando convertía a varios humanos, conocí a tú madre. Ella me detuvo con su poder de bruja. Al principio lo hizo pero haber probado sangre de muchos vampiros pursangres había dado efecto. La ataqué y estuve apunto de matarla cuando me pareció tan hermosa, tan idéntica a ella —se encoge de hombros— Le perdoné la vida, le conté una falsa historia y me creyó. Me ayudó mucho y en un mal momento me relacioné con ella, simple placer para olvidar a Aylin y lo logró por un breve instante —pausa— semanas después me capturaron, antes de que Derek llegara le pedí a Adelina irse, nunca me informó que tú crecías dentro de ella. Cuando él apareció, quise atacarlo, como a su hija pero juntos son más fuertes que yo. Lo intenté, use todas mis fuerzas pero al final me atraparon, me obligaron a descansar y me encerraron en ese ataúd por años. Y fue su rey quien me inyectó esa sangre maldita.

Con velocidad agarra su copa y le da un trago hasta vaciarla.

—Entiendes mi venganza, hija mía —lanza la copa a la pared que se hace añicos. Los vidrios caen al suelo.

—Puede que lo haga —capta su atención— pero tú entiendes nuestro sufrimiento. Te haz preguntado todo lo que hemos pasado ¿por qué te busqué? Por mi, estas de regreso.

—No lo olvido

Ella se cruza de brazos.

—Mi madre quiso matarme siendo una niña de 12 años, todo por sacar su don y ser al mismo tiempo una vampiresa que lleva tu sangre, creyó que sería peligrosa para todos y ese día, Lio apareció y me salvó. Ambos la matamos y después él se hizo cargo de mi, me contó quien era. Teníamos algo en común —baja sus brazos— al mismo creador.

—Lionell me contó tú historia, estoy enterado Adelina, él fue quien las buscó. Sabía de tú madre y obviamente al seguirle el rastro, se enteró de ti e hizo bien en criarte —llega hasta ella— por eso eres más valiosa para mi de lo que crees, te debo mucho —coloca sus manos en su cabeza y sin permiso entra en su mente, ella grita y poco a poco se va arrodillando.

Tan pronto Vlad se aleja de ella. El tono oscuro de sus ojos desaparece al ser nuevamente carmesís.

—¿Usaste tú don conmigo?

Él la ignora al verla levantarse con esfuerzo.

—Serás muy poderosa, tú puedes destruir esa barrera, tú podrás vencerlos —se dice a si mismo y sonríe ampliamente.

—No, aún no soy lo suficiente. Aún no me controlo del todo, lo hice un poco gracias a... Elizabeth —toca con su dedo la gota de sangre que se desliza de su nariz— ella me ayudó.

—En ese caso, voy agradecerle antes de matarla —acorta la distancia y coloca sus manos en sus hombros— Adelina, te necesito de mi lado, tu ayuda, tu poder. Soy tu creador hija.

—Por eso te busqué. Porque sin mi madre, nada tengo más a ti y a Lio.  Cuando él me habló de ti, tenía tantas ganas de conocerte, de tenerte cerca, de tener un padre.

—Y tendrás al creador que quieres —pronuncia su nombre— No soy como Adelina, yo si te voy a proteger, te prefiero viva, daré mi eternidad por ti.

Ella lo mira sorprendida.

La abraza sin ella notar su sonrisa maliciosa.

—¡Vlad! —interrumpe un convertido al entrar —Los purasangres que atrapaste quieren hablar contigo, aceptan tú trato por su eternidad.

Él se aleja rápidamente de ella.

—Excelente noticias —gira a verla— ¿Te das cuenta? Están conmigo o en mi contra.

Dicho esto y desaparece con velocidad.

Vivian niega y se marcha enseguida. Al salir, agarra su arco de la pared mientras se dirige al bosque.

—¡Hermana! ¡¿Ey, a dónde vas?!

Lionell aparece frente a ella.

—¿Nos dejas?

—No, solo quiero estar sola, caminar, pensar —se encoge de hombros— no me alejaré, voy a regresar, lo prometo.

—¿Hablaste con él? —ella asiente— Hay que entenderlo, todos aquellos que lo hicieron así merecen sufrir. Debemos ayudarlo Vivian, cuando esto termine, será muy diferente con nosotros —coloca su mano en su hombro— El padre que queremos.

Sin imitar palabra, se safa de su agarre y se da la vuelta. Se aleja mientras más se introduce en el bosque.

En algún momento usa su velocidad para alejarse lo suficiente.

De pronto se detiene, se acomoda su arco y coloca la primer flecha.

—Maldita reina —lanza la primera, la flecha se encaja en el tronco de un árbol y vuelve a repetir acción con otra mientras avanza y se termina cada flecha— maldito rey, maldigo a sus creaciónes —La última cae en un árbol en la misma dirección al Castillo. Vivian observa la barrera, claramente puede verlo hasta desde la entrada principal a lo más alto. Enseguida retrocede y baja su arco —Voy a destruirlos.

Se jura a si misma mientras se transforma en una vampiresa distinta.