En cuanto el antiguo vampiro se encuentra fuera del ataúd, es recibido con un abrazo por su creación.

Derek permaneciendo inmóvil, Elizabeth derramando más lágrimas de sangre hasta alejarse.

-Padre, ya anhelaba que despertara.

Él sus largas uñas las guía a su rostro, borrando todo rastro de su sangre de sus pálidas mejillas.

-Elizabeth -aleja lentamente su mano, sus uñas manchadas de sangre-No actives la maldición, hija mía.

Ella baja la vista

-Lo siento padre, no controlo mis emociones -alza la vista- cada gota de sangre, es de felicidad.

El antiguo vampiro desvía la vista en Darkiel que al instante hace una reverencia.

-Mi Señor -al enderezarse, sitúa sus manos detrás de su espalda- Una disculpa, tuvimos que interferir en su descanso.

-Padre -su hija capta nuevamente su atención-. Es urgente su intervención. El humano que convertiste, hace meses que una creación suya lo despertó y desató la Guerra contra el vampirismo, debilitandonos a todos y no es lo peor, liberó a la Sombra que se mantenía en el hijo del Rey.

Elizabeth comienza a relatarle absolutamente todo.

-... Y puedo sentirlo, es más fuerte. A estas alturas, ya debieron atacar el Castillo.

-Mi descontrolada creación -emite el vampiro y agarra las manos de su hija- Iré, Elizabeth. Vlad no será más un problema.

De pronto, la puerta es abierta entrando cada vampiro de la Corte con otra vampiresa.

-¡Derek! -emite Black tras hacer una reverencia como todos- Si ya estás despierto, actúa en contra de tú creación.

-Detenla o nos va a perjudicar a todos -le dice Gabriel con molestia. Recientemente despierto como Luckian.

-Solucióna tú error, Derek -le dice otro vampiro situandose a un lado de su hermano.

-No hay mucho tiempo -espeta Lezy al sostener a Jonathan que con esfuerzo se mantiene en pie.

-Con todo respeto Derek, que estés despierto nos otorga poder a cada uno, una poca recuperación y al mismo tiempo el Cazador la absorbe.

-Su debilidad no será permanente Gabriel, Luckian, Blackniells -comienza a sonreír con malicia mostrando sus largos y puntiagudos colmillos. - y Jonathan - regresa a ver a su hija- Aunque sea un castigo merecedor.

-Yo te acompaño, padre. Déjame ayudarte.

-No hija mía, te quedarás aquí como todos.

-Mi Señor -Darkiel da un paso adelante-Se encuentra débil por su reciente descanso, así no puede enfrentar al Señor Vlad y mucho menos al Rey de sombras. No puede, se va a perjudicar a si mismo.

-No es la primera vez, Vlad merece un agonizante castigo. La oscuridad no será eterna.

-Tú no destruyes a tús propias creaciónes, padre.

-Vlad fue mi mayor error, hija mía. No tendré compasión por una creación mía, traidora con su propio creador que intenta evitar mi eternidad. No podrá -levanta sus manos dándole un casto beso en el dorso- Tú eres diferente Elizabeth, te ofrezco una disculpa.

-No padre, no tengo nada de que perdonarle.

Derek sin soltarla desvía la vista en el ataúd.

-No puedo resucitar a Mellissa. No hay nada que pueda hacer por ella.-regresa a verla.

-En todos estos siglos, he superado la pérdida, extraño a mi creadora pero no te culpo, si es imposible.

-El dolor no será permanente, hija mía -deja fluir su poder, su energía cubre las manos de Elizabeth al mismo tiempo que su creador repite internarme un hechizo- Nuevamente una disculpa.

-¿Por qué? ¿Qué me estas haciendo? -ella intenta soltarse.

Derek le sonríe con malicia, el carmín de sus ojos se tiñe de negro por completo.

-Por condenarte -le responde y en cuanto la suelta, con suma rapidez encaja sus colmillos en su cuello succionando cada gota de su sangre.

-¡Mi Señor! ¡Es su hija!

Insatisfecho, Derek se aleja dejando caer a Elizabeth al suelo. Darkiel con la misma rapidez la sostiene entre sus brazos dejando de ver aquel antiguo vampiro.

-Señorita Elizabeth -revisa su rostro, ella cerrando sus ojos ante la perdida de sangre. -Reaccione, se lo suplico- derrama varias gotas de su sangre oscura sobre su boca y desvía la vista al oler el intenso olor a sangre alrededor. -Mi Señor... -Darkiel posa la vista en cada vampiro con marcas de colmillos en sus cuellos, inconscientes sobre el suelo- no debió.

Él único sin ser marcado, baja la vista al verlo acercarse.

-Poder por sangre.

-No lo haga, mi Señor -Darkiel se atreve a verlo, él a poca distancia, con rastro de sangre en su boca que se desliza por su barbilla como sus colmillos manchados- No se perjudique.

-Quedate con Elizabeth, que nadie interfiera.

-No mi Señor -por su poder en su contra, obligado cae al suelo de rodillas sin soltar a la vampiresa- me veré obligado a no obedecer... Permitanme acompañarlo.

-Es una orden, no olvides tú propósito Aziel.

Él vuelve a tener control de sí mismo y en cuanto alza la vista, ve desaparecer a su Señor. Rodeado de vampiros antiguos por curar con un mal presentimiento.

Después de tantos siglos, por primera vez Derek lo ha nombrado.

#

En el escondite, Ana Liz y Darel se apresuran a llegar cuando son perseguidos por más sombras. Sin ninguna barrera de impedimento, cruzan hasta detenerse viendo a la Mansión en su campo de visión y presentir un gran poder provenir desde adentro.

-Ahí están

-No presiento a nuestros creadores, Libe.

-Sin mal pensamientos hermano, entremos por ellos.

Ana Liz da un paso adelante cuando una sombra la alcanza, sus hilos de oscuridad se enrroscan en su tobillo y la hacen caer.

-¡Libe!

-¡Darel!

La arrastran a medida que aparecen más sombras, como más hilos a su alrededor.

-¡Vete! ¡Salvalos! -le grita Ana Liz cuando los hilos cubren su palidez. Grita cuando la encierran en una red de oscuridad.

Darel maldice y retrocede sin permitir contacto con cada hilo.

-Libe -se obliga a dejarla cuando desconoce el uso de su don. Tan pronto se voltea y con velocidad entra empujando la puerta.

Sin creer el panorama que ven sus ojos.

Una Sombra controlando al Cazador con la misma red de hilos de oscuridad a su alrededor.

Como ver a su creadora controlada por la misma con una estaca entre sus manos en dirección a su creador.

-¡Madre! -se adentra, cada hilo cubriendolo resaltando su palidez- No quieres hacerlo. No te des por vencida, es tú maldita alma- cada paso con más dificultad cuando a una corta distancia, los hilos lo inmovilizan-Padre- masculla con gran esfuerzo levantan su brazo dejando fluir la magia oscura. Sin poder tocarlo.

-Darel Valentains, volviste a resucitar -resuena la voz de Shanees ampliando su antinatural sonrisa. Controla los hilos y en instantes, Aylin la cubre la misma red de oscuridad hasta desaparecerla y reaparecerla a su lado, ella bajando la estaca reflejada la misma malicia.

-Darel -la voz de su creador lo hace dejar de verla incrédulo- No debiste... venir. Volviste a la maldita... eternidad.

-No me importa, vine a salvarlos -su creación gruñe cuando cada hilo de oscuridad trata de controlarlo- no tienes... una descendencia... débil.

Darren gruñe al estar en la misma situación.

-Encargate del Rey vampiro - Shanees le ordena a Aylin- No te detengas -refuerza cada hilo corrompiendo sus propia mente- hasta atravesar su corazón con la estaca. A su creación, yo lo mataré.

-Te obedezco Shanees -le contesta, una lágrima de sangre se desliza por su mejilla ocultándose de su palidez con líneas oscuras.

Entonces, el Rey de sombras libera a Darren que ante el recuperado movimiento se levanta perdiendo un poco el equilibrio y al instante, es atacado por Aylin. Un simple movimiento de su mano libre sin estaca, los hilos lo alcanzan y lo lanzan lejos.

-¡Noo! -grita Darel frustrado de no poder intervenir.

En cuanto Darren aterriza en el suelo, los hilos lo liberarán. Él revisandose a si mismo.

-No te controlan -le informa Shanees- Yo controlo a quien. Un Rey vampiro solo merece ser destruido por su misma conectora- Aylin se vuelve a acercar a él levantando la estaca- sin tú eternidad y no volverás a resucitar.

Él gruñe y los mismos hilos lo obligan a darse la vuelta.

-Que decepción de Rey -Aylin controlada se coloca sobre él guiando la estaca en dirección a su corazón. Con esfuerzo, Darren la detiene con ambas manos, los dos forcejeando.

-No eres tú... Ayline -la punta de la estaca alcanza a tocar a un lado de su pecho- Te vas arrepentir... de esto.

-La estaca en su corazón -ella repite varias veces ladeando la cabeza.

-No me obligues a dañarte -Darren gruñe y usando su poca energía, la aparta de él.

Al mismo tiempo, ambos se ponen de pie.

-El Rey vampiro debe morir -se vuelve a acercar. Con velocidad lo vuelve a atacar. Ambos salen de la Mansión, ruedan por el suelo cerca del primer escalón.

-Maldita -Darren la sostiene del cuello y con su fuerza se levanta arrebatandole la estaca- Regresa a mi Ayline -insiste al verla a los ojos, percibiendo una intensa oscuridad.

Ella gruñe y ante el brusco movimiento se suelta de su agarre. Darren lanzando la estaca siendo de su total atención al verla caer al suelo a cierta distancia.

-Reacciona Ayline

Ella con un gruñido gira a verlo y desaparece hasta llegar a la estaca que no duda en agarrar. Al mismo tiempo que no deja de escuchar una susurrante voz repetirle:

>La estaca en su corazón<

Darren con intención de volver a entrar sin embargo vuelve a ser detenido por ella.

Por el poder de la oscuridad, lo derriba en el suelo y nuevamente se coloca sobre él, los hilos inmovilizando sus brazos. Sellando sus labios.

-El Rey debe morir -rie siniestra al mismo tiempo que levanta la estaca sosteniendola con ambas manos.

Mezclandose con la misma risa siniestra de Shanees que desde adentro de la Mansión libera a Darel.

-Deja de controlarla -masculla entre dientes apenas cae de rodillas al suelo.

-El mismo destino será para ti Darel Valentains -Shanees aparece cerca de él- su eternidad será destruida. Es en vano tú existencia.

-Volví por Dennis -Darel alza la vista sosteniendole la mirada- Tú eres quien será destruida Sombra, solo dependes del vampirismo.

Shanees comienza a cambiar en su real aspecto, su poder se eleva hasta guiar su garra al pecho del vampiro y atrevesarla con brusquedad.

Darel escupe sangre oscura al mismo tiempo que en Shanees, presiente la debilidad y con su oscuridad, lo cura alejando su garra.

-No puedes... matarme -esta vez Darel ríe siniestro buscando la estaca en su bolsillo- Dennis se vínculó con el Cazador con la magia oscura, la misma que hay en mi y por ende, si me matas, matarás a quien controlas que estoy seguro que lucha por recuperar el control, aún esta dentro de ti. Hazlo y te desvaneces -ríe como demente.

-Error, ya nada existirá del Cazador. Nada te salva vampiro.

Darel deja de reír y con un rápido movimiento le muestra la estaca guiandola a su pecho a sí mismo mientras se pone de pie.

Shanees retrocede y controla sus hilos evitando que lo ataquen.

-¡NO! -ruge. Internarme cada uno de sus hilos atacan a Vlad que trata de ser libre de su propia mente. Fallando al darle más control de su cuerpo a la Sombra.

Sin embargo, Darel al último segundo se arrepiente. Gruñe ante su cobardía.

-No puedo ser egoísta -baja la estaca convencido- y perjudicar a más vampiros.

Los hilos de oscuridad lo atacan obligándolo a arrodillarse frente a la Sombra.

-No eres del todo valiente.

Darel con la vista en el suelo gruñe.

-Tú oscuridad no va a vencerme -Shanees aparta sus hilos y al levantar su mano comienza a absorber su magia oscura- sin conexión. Destrucción al vampirismo.

Darel alza la vista, cada vez sintiendo la debilidad. Logrando verlo.

-Yo no puedo matarte -emite mientras sangre baja de su nariz- pero él si.

Shanees lo ve sonreír con malicia, lucir sereno pese la pérdida de su don.

-La existencia del vampirismo no se puede destruir -resuena su voz- no por completo, oscuridad.

Shanees al escucharlo, al presentir su gran poder se voltea viendo ante él a Derek Valentains a pocos pasos de distancia.

-Despertaste.

Comprende el poder incrementado del Cazador cuando era nulo, cuando por poco su oscuridad lo iba destruir por completo teniendo su total control. Desvanecer conexiones. Ser solo una Sombra con todo su poder.

-¡No me detendrás! -deja fluir sus hilos en su dirección.

-No perteneces aquí.

-No me enviarás a mi Mundo, nadie lo hará -sus hilos rodean a Derek que luce sereno- mis sombras vendrán a destruirte.

El antiguo vampiro en un pestañeo, sus ojos se vuelven negros por completo y extiende sus brazos liberando su poder.

Su energía oscura traspasan los hilos de la Sombra rodeandolo.

-No tienes el poder suficiente Derek Valentains.

Shanees usa la conexión con el Cazador a su favor al debilitarlo sin aquél antiguo vampiro detenerse tras pronunciar hechizos tras hechizos en cada intento disminuyendo su poder.

Los hilos de oscuridad colisionan con los suyos, cruzando su barreras de protección hasta enrredarse en su cuello.

-No seré quien te destruya -le dice Derek con la misma maldad desviando su energía.

La Sombra se alerta y observa las conexiones que en ningún momento lo atacan, fluyen en una sola dirección. Entonces se voltea viendo a Darel en total control por Derek y a si mismo es obligado a clavarse la estaca justo en el corazón.

Su futuro inevitable.

Demasiado tarde para Shanees para detenerlo cuando la magia oscura desaparece de él al mismo tiempo que un inexistente Vlad. Afectandose cuando sus hilos de oscuridad deja de controlar y desaparecen. Sin nada en que aferrarse para existir. Sin un ser que controle suelta un gruñido bestial y en su real apariencia, comienza a desintegrarse cada hilo de oscuridad brotando de su forma hasta ser destruido por completo.

Darel aún de rodillas en el suelo, escupiendo sangre con aún sus manos sosteniendo la estaca, fija la vista en Derek sin poder articular palabra al tener el control de sí mismo, preso del dolor por la estaca.

-Darel Valentains -en el antiguo vampiro su apariencia vuelve a ser cadáverica- Nos liberaste a todos.

Sangre brota de su boca. Cada uno de sus dedos se tornan oscuros, cubriendolo por completo hasta volverlo cenizas.

Derek Valentains deja de existir al mismo tiempo que un joven vampiro con menos de un siglo cuando cae al suelo.

Afuera del escondite, Aylin es libre de la oscuridad. La palidez resalta en todo su cuerpo.

-Darren -emite al darse cuenta y suelta la estaca- Te amo- cierra los ojos cayendo sobre él.

-Ayline -con esfuerzo el Rey vampiro la deja a su lado y se incorpora revisando su rostro- ¡Ayline! -la zarandea- Despierta- la sostiene entre sus brazos- despierta, maldita sea, despierta- acuna sus pálidas manos en sus mejillas.

En cuanto Ana Liz es libre de la red de oscuridad, se observa confundida hasta escuchar su voz, al sentir la conexión con su creadora inexistente.

-Madre -titubea y apurada corre hasta alcanzarla- ¡Mamá! -comparte una mirada con su creador y niega varias veces- Ella no, no volvió a morir -se levanta sin creer su aspecto cadáverico- Va a resucitar -desvía la vista en la Mansión que comienza a caer cada construcción -Mi hermano.

Ignorando el grito de su creador se marcha hasta lograr entrar. Su mirada lo busca hasta dar con el solitario vampiro en el suelo.

-¡¡Darel!! -grita y en cuanto antes se arrodilla con el claro miedo al cargar entre sus brazos un cadáver más.

Mientras que en Rumanía, cada vampiro de la Corte que fue curado por Darkiel, lo presiente.

-Aziel, mi padre...

Elizabeth que se encuentra recuperada, de pie a su lado gira a verlo.

-No

Ella asiente

-Eres libre Darkiel -le dice entre lágrimas de sangre.

Gabriel en instantes se vuelve polvo, Luckian comparte una mirada con su hermano, en el último momento intenta atacar a Darkiel cuando desaparece. Black aceptando la derrota, mantiene sus manos detrás de su espalda y tras una reverencia, todo en el se vuelve cenizas.

-¡Jonathan! -grita Lezy entre lágrimas al ver lo mismo en todos, con miedo en su mirada en cuanto su alma cae entre sus brazos- ¡No te dejaré morir! -cae arrodillada con él.

-Lez.. Lezy -aquel vampiro trata de sostenerla fallando.

De pronto, entra Elliot acompañado de un reciente Caleb convertido y al ver la escena, con velocidad se inca a un lado de su creadora.

-Padre -deja brotar las lágrimas en cuanto lo ve volverse polvo. Con sus manos sostiene de los hombros a su creadora tras derrumbarse en un mar de lágrimas. Tras intentar revivirlo, fallando.

-Eternamente Jonathan -solloza y se endereza abrazando a su hijo- te amaré.

-Seré la última, Darkiel -Elizabeth comienza a escupir sangre al igual que en todos- Mi padre... me dio tiempo... tengo que ir... al Castillo- desaparece dejando a Darkiel sin poder articular palabra, inmóvil sin poder reaccionar al no poder asimilar una pérdida más.

...

En el Mundo mortal desaparece la oscuridad de la Sombra como en el Castillo que en segundos, una a una es destruida. Los hilos se esfuman alcanzando a liberar a todo vampiro infectado como el control de sí mismos.

Mía es la primera en correr hasta Drake al verlo a cierta distancia. En un segundo lo alcanza y lo abraza, May al darse cuenta uniéndose al abrazo.

Dean deja de atacar al Alfa de lobos como al híbrido a su lado que no dejaban de tratar de controlarlo sin atacarlo.

-Lo siento -les dice y débil cae de rodillas al suelo.

Amaris en su transformación como Valuk, se acercan a él recibiendo su tacto.

En la sala, Alina recupera el control y al ver el portal, usa su don sellandolo sin alcanzar a dejar libre más sombras. Cansada, se deja caer sentada al suelo sonriendo al ver a su alrededor ningún hilo más.

Owen incrédulo, con velocidad busca a su hija.

En otro pasillo, Ashley y Dominik son abrazados por su hijas, todos libres de la oscuridad.

Al mismo tiempo que en Noah, al verse a si mismo, refleja una mirada incrédula al tener el control de sí mismo.

-No hay oscuridad -observa alrededor- No más sombras -curva una media sonríe cuando se alerta. Con el terror invadiendole, borra su minúscula sonrisa y lo busca desesperado hasta encontrarlo- ¡Padre!

A poca distancia, se haya Esteban que invadido por el mismo efecto, libre de las líneas de oscuridad -que lo alcanzaron como a todos- comienza a escupir sangre y pese a la débilidad, cae al suelo.

En un santiamén, su creación llega hasta él y arrodillado, desesperado trata de levantarlo.

-¡Padre, no se rinda! -apoya su cabeza en su regazo- Lo salvaré, no morirá -Noah observa a ambos lados del pasillo- ¡Ayuda!

-No...ah -su creador logra sostenerlo de la camisa recibiendo otra vez su atención- venció... mi tiempo.

-No, no diga eso padre -en lágrimas, Noah limpia la constante sangre de su boca, en un intento de darle su propia sangre. Sin ver resultados al ver cada uno de sus dedos teñirse de negro- ¡Padree! -suelta un grito desgarrador al verlo más pálido, más cadáverico.

-Esteban -ante ellos aparece Elizabeth en la misma apariencia, en parte de su rostro tiene un hoyo como en partes de su cuerpo que desaparecen. El claro ejemplo de una muñeca de porcelana, rota al punto de quebrarse en mil pedazos- Tú padre... no existe y tú, necesitas tiempo para... despedirte.

Cae de rodillas al suelo y se inclina sellando sus labios sobre los suyos transmitiendole cada poder conservado de cada vampiro.

-Perdóname -le susurra al alejarse y frente ambos vampiros, se vuelve cenizas.

-Beth...

Por un instante, el rubio vampiro deja de escupir sangre. Su eternidad atrasada influyendo en el tiempo.

Mientras que en la pared del Castillo, cada vez aparecen más nombres de vampiros y vampiresas inscritos, en diferentes lugares, aumentando la lista de los inexistentes:

Derek Valentains

Elizabeth Valentains

Darel Valentains

Aylin Valentains

Vlad Valentains

Gabriel Morqueez

Luckian Diggory

Blackniells Diggory

Jonathan Williams

Como un nuevo nombre que cada palabra desaparece y reaparece creando el nombre:

Esteban Williams.

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Soporten. Sigan leyendo 💔👉