Capítulo 29 ✘ Rey de sombras
“No sé si me gustas o te amo, si te quiero o te necesito. Todo lo que se es que me encanta la sensación que tengo al estar contigo y todo eso, me confunde ”
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D A R E L
Distingo una sombra frente a mi, borrosa hasta que mi vista se aclara y puedo reconocer a Dennis en mi campo de visión.
—Bienvenido otra vez, Darel.
Dejo de ver su rostro al notar un techo desconocido. Después me veo a mi mismo dándome cuenta que estoy acostado en el suelo mientras la humana con poder oscuro me tiende su mano.
—Debes estar confundido —agrega— Déjame ayudarte.
Niego y me levanto por mi cuenta viendo alerta alrededor. Comienzo a recordar absolutamente todo.
—Vlad te dejó inconsciente, no te creyó del todo y comprobó tús palabras al ver tus recuerdos.
Giro a verla fijamente
>Maldito ¿cómo se atreve?<
Sin embargo antes de transmitir mi molestia, me obligo a conservar la calma.
—¿Qué tanto vio? —me alerto cuando pudo ver más de lo necesario y es un riesgo para mi principal plan.
—Todo lo que nos contaste, quedó satisfecho al confirmar que realmente estas de nuestro lado.
Me obligo a sonreírle
Mi plan se complicará si el cazador no me cree del todo. Cuando fue difícil fingir, mostrar indiferencia. No creyó en mis palabras y aunque logré convencerlo no me esperaba su ataque, no me esperaba que entrara en mi cabeza.
Más su ausencia me confirma las palabras de Dennis, de lo contrario, estaría aquí con intencion de matarme.
—¿Dónde está?
—Se fue a convertir más humanos, es lo que siempre hace, quiere ampliar su propio imperio con más convertidos, pero no tardará, mencionó que a su regreso, te tiene una sorpresa y te va a necesitar.
Eso alerta mis sentidos
—Así que me dejó a mi para vigilarte, no creo que quieras escapar.
—No pienso hacerlo —me doy la vuelta avanzando hasta las escaleras— no cuando ya elegí un lado —tomo asiento en el tercer escalón— estar aquí lo demuestra.
Recibo su sonrisa mientras me dedico a observarla con detenimiento.
Sigo sin aceptar a la humana que es aunque posee el don de usar la magia oscura.
Cuando conocí dos facetas suyas, cuando las tuve enfrente a las dos. Cuando creí que una era aliada y otra enemiga, cuando creí que eran diferentes y son la misma.
Y caí en sus malditas mentiras.
—Quita esa cara, te vas a acostumbrar a estar aquí —avanza hasta detenerse en el primer escalón sosteniendose del barandal— sigo sin creer que estés aquí Darel.
—Tampoco lo creo —le muestro mis colmillos— por fin soy libre.
Una libertad que me costó desde engañar a todos en el Reino. A estas alturas debo ser considerado un traidor más tenía que actuar, hacerles creer justamente que soy uno para llevar acabo mi plan: Matar a Dennis y debilitar al cazador.
Convencí a la sombra, ajena a mi plan cuando fue útil para salir. Cuando me atacó, perdí el conocimiento y realmente creí que me había descubierto más me dejó despertar siendo yo mismo con un gran poder que use contra todos. No tenía la idea de lo fuerte que puedo ser gracias a la oscuridad. Y seré sincero, me gustó todo ese poder, ser invencible.
No lo dude para atacar a todos, principalmente a mi creador que siendo controlado por la sombra o sin ella, quería verlo débil, sufrir. Una parte de mi, siempre quiere matarlo y otra, siempre me detiene.
Sin embargo, tenía que ser más creíble, con esfuerzo la ataque a ella, a mi creadora. Aun recuerdo su mirada, su dolor, sus palabras y de todos, es la única en la que confío y espero que lea mi carta.
Ella me conoce, debe creer en mis palabras aunque mis acciones digan lo contrario.
Aunque me gané el desprecio de todos, cuando no olvido las palabras de Libe al atreverme a usar a Alina como un arma de escape. Sin embargo, no tenía opción.
Era actuar por mi cuenta o quedarme encerrado sin hacer nada con el temor de que llegara el momento y ya no pudiera más con la sombra, me venciera y me controlara.
Y a estas alturas, me extraña su ausencia. Me permitió controlarla en el Castillo. Al llegar aquí, no hay rastro de ella, no escucho su voz y eso me alerta.
La sombra siempre está ahí, no se oculta, no me dejará en paz tan fácilmente.
Más en este momento, prefiero creer que no está, que se fue, puedo disfrutar ser yo mismo.
—Tendrás la libertad que tanto querías Darel —su voz me hace dejar mis pensamientos a un lado— serás invencible —sube un escalón— los dos juntos contra todos. Te lo vuelvo a repetir, me importas demasiado.
No le creo
Aunque a Dennis fue fácil de convencer, mentirle. Cuando desconoce mi verdadero motivo, cuando vine a matarla y por un momento, tuve la oportunidad. Pensé en matarla en el primer momento que la volví a ver, al tenerla frente a mi sin embargo, pensé con detenimiento mi primer movimiento, con el cazador detrás de mi, no iba a permitirlo y solo iba a lograr que ambos me atacaran, contradecir mis palabras y me consideren su enemigo. Tendría otro trato.
Incluso, me sorprendió escuchar sus palabras: No le creyó a la Reina cuando le advirtió que la voy a matar. Cuando son palabras ciertas y tiene razón. Una señal más de cuanto ella me conoce.
—Así que estamos solos —emito causando su amplia sonrisa.
—Con unos convertidos allá afuera que no tienen permitido entrar sin permiso.
Asiento
Importante dato
Tengo la oportunidad, debo matarla ahora mismo cuando juré regresar al Castillo en dos días con su corazón. Sin embargo, me he acobardado para no actuar.
>¿Por qué estoy dudando? <
Me molesto conmigo mismo cuando me tomo el tiempo para pensarlo.
—¿Quieres que te enseñé cada rincón de este lugar? —se inclina— No te pierdes de mucho, no es tan interesante.
Dejo de verla ganando más tiempo.
—Es impresionante que este lugar aún exista, nunca pensé que yo estaría aquí.
—¿Lo conoces?
—He escuchado de este lugar —regreso a verla— La Reina, solía contarme historias de su pasado. Desde que era humana, cuando conoció en este Mundo mortal al Rey. Todo lo que soportó hasta condenarse a la eternidad y estar atada a su lado con un vínculo eterno. Siempre eran historias, tras historias y al estar aquí recuerdo que solía contarme de un escondite que en el pasado el antiguo vampiro se ocultaba. Cuando ella resucitó como vampiresa, perdió la memoria y creía que era la auténtica hija de Derek Valentains hasta que el Rey, prácticamente la salvó, la hizo recordar y se la llevó al Castillo —me encojo de hombros. Detesto que siempre mi creador se crea el héroe— Llegó a mencionar al cazador.
—Sé lo mismo que tú. Vlad me contó sobre este lugar, aquí inició su nueva vida inmortal —hace una corta pausa— y miranos, su descendencia en el mismo lugar.
—Es diferente Dennis
>No quiero un vínculo contigo<
Me detengo a decirle.
—Tienes razón, pero los dos dependemos de la oscuridad y eso lo hace más atrayente.
Se recarga de la pared, girando un poco su cuerpo sin poder apartar la mirada de ella.
Me gusta su lado malvado.
—Tú lo haz dicho —humedezco mis labios— Somos tan parecidos— me pongo de pie y acorto la distancia— y apesar de todo ¿no tienes problema de que sea el hijo del Rey?
—¿Y tú que yo sea la hija de Vlad?
Me sostiene la mirada, tan retadora.
—En lo absoluto, los errores ni rivalidades de nuestros creadores, no nos deben afectar a ninguno de los dos —repito otra mentira.
Prácticamente, por ellos nos conocimos. Por una venganza de su pasado que afecta nuestro presente.
—Tú no eres como ese miserable Rey —coloca su mano en mi hombro— pero si te voy a confesar que no me gusta que justamente tú, seas su descendencia cuando lo odio con toda mis fuerzas —aparta la vista, su mano se desliza hasta mi pecho— antes era por Vlad, porque confíe ciegamente en sus palabras, quise ayudarlo en su propia venganza hasta que ese Rey vampiro se atrevió a arrebatarme a Lionell, él era mi hermano, mucho más importante que Vlad —gira a verme y me sorprende que no derrame ninguna lágrima— le juré vengarlo y no estaré tranquila hasta ver a tu creador, muerto.
—Cuenta conmigo Dennis
Refuerzo mi mentira al apoyar mi frente en la suya.
—Queremos lo mismo —agrego y me alejo un poco. Es inevitable no prestar atención en su corazón mortal cada vez que late. Y se acelera cada vez más.
—Darel —me obligo a regresar la vista en su rostro al escucharla mientras se atreve a colocar su mano en mi mejilla —por ti soy capaz de traicionar a Vlad. Lo único que quiero es la muerte de tanto el Rey, como su Reina —resopla— tal vez mi odio hacia ella es menor pero la odio porque fue la culpable de que mi madre alimentara ese odio que tenía en mi. Desde niña, recuerdo que cada día la mencionaba. Adelina Floowang se sentía un reemplazo de la Reina cuando aceptó que Vlad la usara, cuando se relacionó con él. Le hizo mucho daño y solo por ella, se lo debo. Tantas veces deseó verla muerta apesar que nunca fue una buena madre conmigo, me maldijo— hace una corta pausa— pero ya perdí todo lo que me importaba y a estas alturas, tú eres lo único que aun tengo, me importas y no quiero que Vlad te use por tu oscuridad.
—Dennis —retiro su mano de mi rostro— Yo decido de mi mismo.
—Sus intenciones que tiene en tu contra Darel, son de lo peor.
—No podrá cumplirlas —digo seguro al tener las mías propias— causo su media sonrisa. Carraspeo y aparto la vista. No me puedo permitir sentir absolutamente nada por ella— sigo esperando ese tour en este repugnante lugar —me alejo de ella bajando el escalón —Vamos— me medio giro.
—Espera Darel —su mano en mi brazo me detiene.
Alerta veo sus movimientos cuando acorta la distancia y se sitúa frente a mi.
Esperaba de todo menos volver a sentir sus labios sobre los míos. De mi parte, duro en reaccionar. Una parte de mi quiere alejarla y la otra, cae en la tentación de sus labios cuando comienzo a besarla intensamente mientras uso mis colmillos al morder sus labios saboreando las gotas de su sangre, aumentando el ritmo.
Más Dennis es quien marca distancia tras empujarme.
—Tendremos tiempo para todo Darel —emite con la voz agitada.
Sin evitarlo, bajo la vista en sus labios que constantemente humedece.
>Quiero más<
Entonces, no lo dudo, la sostengo de los hombros siendo la distancia nula para volver a besarla.
Sin embargo una alarma en mi cabeza me hace reaccionar.
>No puedes arruinar el plan Darel>
Gruño contra su boca y me alejo de ella. No me ayuda escuchar su corazón latir, desear su sangre y desearla a ella.
—No perdamos tiempo Dennis —me obligo a decir al pasar por su lado y subir las escaleras. Para mala suerte, ella me sigue siendo más difícil cumplir mi plan.
...
Trato que no se vuelva a repetir entre nosotros otro beso. Lo complicaría aún más pero la verdad es que Dennis suele causar demasiado mi atención y no es por la explicación a cada rincón aburrido de este lugar, si he ignorado todo lo que dice.
—Y arriba en el techo, hay una buena vista, es menos deprimente este lugar si lo observa todo desde ahí. Suelo subir con tal de alejame de Vlad y de sus convertidos.
Es lo último que le presto atención, musito en respuesta.
No obstante, su sonrisa desaparece trasmitiendo seriedad. Su atención se dirige hacia la puerta.
—Vlad regresó
La escucho pronunciar palabras inentendibles cuando en poco tiempo veo al cazador entrar por esa puerta con tres de sus convertidos detrás suyo.
—¡Ahí están! —exclama con exagerada emoción hasta detenerse en el centro, a poca distancia nuestra— ¿estás listo Darel?
—Detesto las sorpresas —le respondo ganando su risa. Es difícil controlarme en no atacarlo de una vez.
—Ya veras lo que te espera —les ordena a sus convertidos. Chasquea sus dedos y pasa por mi lado.
—Vas a descubrirlo —giro a ver a Dennis al escucharla y pese a mi mirada, ella me agarra la mano y me jala en dirección a esa puerta. Ya había entrado con ella hace poco, parece un simple despacho cuando esta vez hay un vampiro sentado en la silla quedando del otro lado del escrito.
—¿Qué es lo que quieres? —le pregunto tras soltarme con brusquedad de su agarre.
—Más y más poder, Darel —me contesta extendiéndo los brazos— Un poder que tú vas a otorgarme— señala a un convertido, gruño cuando otro lo acerca demasiado a mi— gracias a tú oscuridad.
—Darel aún no se recupera —le dice Dennis aún permaneciendo a mi lado— No es momento.
—A mi me parece el justo momento para que Darel deje libre su oscuridad. Ese era el trato.
Me alerto
No puedo permitir eso, no soy capaz de controlarla, no llevaría acabo el plan, la sombra tiene otros planes conmigo cuando ni siquiera me deja actuar por mi cuenta bajo su control.
—No estas respetando mis condiciones. Dejaré salir a la oscuridad cuando yo quiera —sigo con la mentira, prefiero que crean que realmente la controlo.
—Darel, Darel. Ya no ocultes más ese gran poder que tienes —se levanta apoyando sus manos sobre el escrito— No te pido mucho, nada más necesito tú oscuridad si tanto presumes controlarla ¿tienes algún problema con eso?
Hago mis manos puños
—Vlad...
—No acepto un no —interrumpe a Dennis— Es tan sencillo Darel, mi hija aquí presente te puede ayudar a despertarla si la necesitas —la señala— lo único que tienes que hacer es darles de esa oscuridad que tienes a mis convertidos. No seas egoísta, todos anhelamos tener ese poder.
De reojo observo al convertido, no me pasa desapercibida el temor es su mirada. Más esta dispuesto a cumplir una orden de su creador.
—Mi oscuridad, no funciona así.
>No tienen la menor idea de que tan peligrosa es<
Resuena un golpe con su puño, lo suficiente para partir una linea en el escritorio.
—Adelina, obligalo.
Gruño y comparto una mirada con ella.
—Esta bien —maldigo a mis adentros cuando la veo avanzar y situarse frente a mi.
Tan mentirosa como yo.
—Dennis —odio recurrir a suplicarle con la mirada. Necesito más tiempo.
—Vas a estar bien Darel
Comienza a pronunciar un hechizo, de su palidez resaltan lineas oscuras que comienza a aparecer y de pronto se esfuman.
—¿Dennis? —rápido reaccióno al sostenerla de la cintura cuando esta por caer mientras sangre baja por un orificio de su nariz.
—No puedo, no tengo la fuerza suficiente.
—¡Eres inservible Adelina! —dejo de verla al escuchar su voz.
—Necesita a Dennis más de lo que cree —le respondo— y yo también —le ayudo a mantenerse en pie— voy a... hacer lo que quiere pero para transmitir mi oscuridad a sus convertidos, para eso necesito el don de Dennis, con la magia oscura la podrán conservar —me apego a una teoría— De lo contrario, mi oscuridad va a desaparecer y solo los matará.
Él gruñe y nos observa a ambos.
—De acuerdo, los dos, recuperense en cuanto antes. Y no me vuelvas a fallar hija mía y más te vale que así sea Darel —asiento sin apartar la mirada de él— Fuera de aquí todos excepto Adelina— señala la puerta.
No me gusta que la llame de esa forma, es simplemente Dennis y no debería importarme tanto ese detalle.
—Vete Darel, ya he estado a solas con él— giro a verla al escucharla. Sin emitir palabra, vuelvo a asentir y la suelto lentamente mientras Dennis se apoya del escritorio.
Retrocedo y tras una última mirada al cazador, me dispongo a salir cerrando la puerta detrás de mi.
Es insoportable más que el Rey.
A tres pasos me volteo, espero quedarme solo al ver a esos convertidos salir y enfoco la vista al frente. Sin embargo, mi audición de vampiro no me ayuda cuando no puedo escuchar nada del otro lado de la puerta.
Internamente maldigo a Dennis.
Nuevamente una barrera me lo impide.
(...)
Considero que llevo varias horas aquí. Y hasta el momento, no hay rastro de ellos, aún deben seguir en el Castillo, eso me da tiempo y me confirma que a estas alturas conocen mis intenciones.
Así que aprovecho que el cazador volvió a salir con sus convertidos al ser de noche para llevar acabo de una vez mi plan cuando ya estoy frente a su puerta y doy un golpe.
—Darel —ella me abre la puerta.
—Dennis —paso por su lado escuchando su suspiro.
—A estas alturas, ya ningún vampiro espera una invitación para entrar eh.
—¿De qué hablaron tú y el cazador? —le pregunto sin rodeos en cuanto llego al centro de la habitación y me doy la vuelta.
—¿Por qué la curiosidad? —cierra la puerta con seguro y se voltea recargandose.
—No voy a permitir que los dos estén en mi contra.
—Deja la paranoia Darel —ríe y se acerca a mi, esta descalza— no vamos a matarte si es lo que crees. Tú lo haz dicho, nos eres tan útil, para Vlad por tú oscuridad.
—¿Qué planea? Dime.
Niega y detesto no poder saber lo que piensa sin embargo aún puedo recurrir a entrar en su cabeza y ver sus recuerdos.
—Solo le daremos lo que quiere y te dejará en paz. Creenme, se va a arrepentir —se detiene a pocos pasos de mi.
La observo con detenimiento
>¿Qué ocultas?<
—¿Realmente estas débil o fingiste hace rato? Tenias la oportunidad, tienes el poder de despertar a la oscuridad sin mi consentimiento.
—Aún no me recupero del todo. Me excedí con la magia oscura —se encoge de hombros.
Una ventaja a mi favor.
Asiento
—¿Y tú? ¿Sigues débil?
—Algo, el cazador me ofreció beber sangre de sus convertidos pero no la acepté. Ninguna se compara a la tuya.
—Eres un vampiro con excelentes gustos —ríe y acorta la distancia. De inmediato borra su sonrisa, luce nerviosa y su corazón la delata— si tanto la necesitas, entonces tomala —se baja un tirante de su vestido— Bebe de mi.
Niego más mis colmillos que crecen más y sobresalen de mi boca, delatan la sed que tengo.
—No es la primera vez que lo haces.
—No, pero la última vez... —guardo silencio al recordar.
Me descontrole con su sangre, me cege y caí en la tentación.
—La oferta caduca Darel.
Le doy una mala mirada
Será la última vez que beba su sangre.
Será la última vez, me repito internamente.
—El problema Dennis es que no quiero solo tú sangre.
Con mi mano la sostengo de la nuca mientras acerco mis colmillos a su cuello rozando su piel hasta clavarlos succionando cada gota tan exquisita e inigualable mientras que con otra mano la sostengo de la cintura sin querer alejarla de mi.
—Darel —se queja de dolor— creo que ya deberías...alejarte.
Satisfecho retiro mis colmillos aún saboreando su sangre en mi boca y observo su rostro.
—Tú tuviste mi sangre —limpia con su dedos mis labios— yo quiero un beso. Es un precio justo ¿no?
—Es un alto precio Dennis —respondo y vuelvo a besarla al punto de obligarla a retroceder hasta que choca con la cama. Sin ninguno cortar el beso mientras ella queda sentada.
—Detente —gruño cuando usa su mano para alejarme. No es demasiada fuerza contra mi más me obligo a obedecerla.
—¿Qué?
—Si eres un vampiro, mereces estar con una vampiresa.
Con un susurro comienza a cambiar su apariencia dejando visibles unos colmillos iguales que los míos como el carmín de sus ojos, luce incluso más pálida sin un corazón latente.
—No quiero estar con esta falsa Dennis —me sorprenden mis palabras al verla con detenimiento —quiero a la real, a la humana con un maldito don.
Sonríe y vuelve a repetir ese hechizo que le permite cambiar.
—Estoy malgastando mi poder recuperado —emite al volver a ser la misma Dennis— y no me arrepiento.
Sin responderle, vuelvo a besarla esta vez con mis manos en su espalda con intención de quitarle el vestido que poco demoro en desatar el nudo, tres botones y comienzo a bajarlo hasta su cintura. Al mismo tiempo que ella desabotona mi camisa.
Por un instante quiero olvidarme de la Guerra, de todo lo que me prometí cumplir cuando la deseo tanto.
>Una última vez<
No obstante, dejo de besarla y conmigo la obligo a ponerse de pie cayendo su vestido al suelo. Posando en ropa interior, la cargo con facilidad hasta dejarla en el centro de la cama volviendo a besarla con frenesí hasta ir desde su boca hasta su cuello dejando un camino de castos besos, por un instante me obligo a un no marcarla otra vez.
La desesperación me vence cuando me alejo usando mi velocidad vampirica para deshacerme de mi camisa, mi pantalón, zapatos que son lanzados en algún parte de la habitación y regreso con ella. Situandome entre sus piernas esta vez tentandola al besarla en la comisura de su boca.
—Darel —implora.
Divertido observo su rostro.
—¿Deseas tanto a este vampiro?
—No voy a negarlo
Estoy por besarla cuando su mano se desliza por mi pecho mientras entre abre sus labios susurrando. Y otra vez veo una D marcada en su pecho como en el mio.
—¿Lo sientes? La conexión es real.
No pierdo el tiempo en pensar en vínculos, almas, verdades, mentiras cuando en respuesta le doy un casto beso mientras mi manos bajan por sus pechos hasta su plano abdomen dejando varios rasguños por mis uñas en su piel. Mientras me voy agachando sanando esos leves rasguños con mi sangre al morderme a mi mismo mis labios, basta una diminuta gota y prosigo por bajar una prenda más que deslizo por sus piernas y la lanzo sobre la cama hasta ponerme de pie.
Dennis por su lado se deshace de su última prenda dejando libres sus pechos y es tan cínica al lanzarmela a la cara.
—Atrevete vampiro
>Bruja maldita<
Le sonrío y lanzo su sujetador sin darle importancia a donde cae y con la misma velocidad me quito el bóxer y regreso con ella. Entre sus piernas, por mi cuenta las coloco en mi cintura mientras apoyo mis manos de cada lado de su cabeza sin recaer mi peso sobre ella.
No me quejo de la vista, luce tan vulnerable, atrapada por mi, desnuda por completo con un sonrojo en sus mejillas, sus pupilas dilatadas cuando me muevo un poco.
Por mi parte, no oculto mis colmillos y antes de volver a beber su sangre, en una mejor posición comienzo en entrar en ella lentamente, sin perderme ninguna expresión de su rostro hasta undirme por completo siendo glorioso su gemido.
No me olvido que es humana y por ende es una primera vez para los dos. Así que me obligo a controlarme cuando entro y salgo de ella. En cada embestida se le escapa un gemido que cayo con un beso.
En algún punto, acelero el ritmo tras su petición al repetir jadeante mi nombre. Una y otra vez.
Con un corazón acelerado, su respiración agitada y la capa de sudor en su frente cada vez que la embisto a su ritmo.
Más no estoy satisfecho cuando Dennis está apunto de desfallacer.
—Darel —muerde su labio inferior con fuerza— ya no... —gime con más fuerza— no puedo más.
Sonrio con arrogancia y solo acelero el ritmo cuando me obligo a detenerme cuando todo su cuerpo tiembla.
Ella lo disfrutó, yo no del todo.
—¿Tan pronto te rindes?
Recupera el aliento
—Quítate Darel
Por su mirada, salgo de ella y me dejo caer en la cama a su lado. Se cubre con la sábana lo que ya he visto.
—No suelo repetir con nadie, es mi condición y tú Deniss —gruño— me obligas a romperla, una y otra vez —giro a verlo notando su mirada fija en mi— eres la excepción.
—¿Quieres intentarlo otra vez? —se levanta y en poco tiempo tengo a la falsa vampiresa en mi campo de visión.
—Sería lo justo
La beso desesperado y con un rápido movimiento giro con ella otra vez quedando debajo de mi mientras me cuelo en la sábana y vuelvo a entrar en su interior. Esta vez no me limito, pierdo el control en cada embestida más salvaje y rápida que la anterior.
Vuelvo a marcarla del cuello mientras sus uñas se clavan en mi espalda y en algún punto jadeo su nombre en su oído una y otra vez.
...
Una Dennis duerme a mi lado al quedar agotada. Volvió a cambiar, su corazón late calmado como su respiración cuando su pecho sube y baja.
Me tomo el tiempo de verla.
Su cuerpo cubierto por la sábana aún con marcas de mis colmillos en su cuello y parte del hombro que no pienso borrar.
Y entre más la observo, más lo pienso:
>¿De verdad voy a sacrificarme por todos en el Castillo al matarla? Dejaré de verla para siempre<
Maldigo y me levanto, con cuidado de no despertarla me acerco quedando a pocos centímetros de su rostro.
Tal vez use el momento a mi favor cuando llegué a ver sus recuerdos al simplemente morderla:
—No puedes despertar su oscuridad —le dijo Dennis.
—No interfieras, conoces mis planes.
—¿Y si no tenemos el poder suficiente para controlar todo un ejército con su oscuridad? Darel podría ser el único que los controle a su favor y a ti, dejarían de ser leales.
—Son mis creaciones
—No conocemos por completo el poder de su oscuridad. Será un riesgo ¿y si se vuelve en tú contra? Con Darel así es más fácil manipular, con su oscuridad, no lo creo. Al igual que todos, corres peligro si se cumple la visión que tanto temes.
—Su oscuridad o el mismo Darel, no me va a derrotar.
Sigo pensando en ese recuerdo.
>¿A qué visión se refieren? <
Con más razón, no puedo permitir que usen la oscuridad a su favor.
>Tienes que morir Dennis<
Con ese pensamiento llevo mi mano a su pecho, justo donde se encuentra su corazón y comienzo a marcar su piel con mis uñas hasta encajarlas más logrando despertarla.
—¡¿Qué haces?!
Gruño cuando me empuja y es rápida al bajar de la cama.
—Matarte Dennis —no oculto el desprecio e imito su acción. Descalzo, sin camisa con solo el pantalón puesto rodeo la cama viéndola desde el otro lado —para eso estoy aqui.
—Mentiste —se agacha con rapidez y al enderezarse retrocede mientras me apunta con una estaca— Vlad tenía razón. No eres capaz de traicionarlos y una parte de mi, si desconfío de ti, por eso oculté esto bajo la cama y no creí que tendría que usarla en ti.
Me detengo a pocos pasos de ella, esta vez no presto atención en su cuerpo que lo cubre la tela de su ropa interior cuando fijo la vista en la estaca.
—¡Eres un miserable Darel! —deja de retroceder cuando no tiene escapatoria— lo que pasó entre nosotros... ¿no significó nada? ¿no fue real?
Ignoro su mirada de decepción.
—Fue el mismo engaño Dennis y a veces deben hacerse sacrificios, aceptar pérdidas, por mi propio bien. Tú, ni nadie va a despertar la oscuridad.
Sonríe maliciosa
—Que lastima que no puedas matarme. Tu plan falló Darel, es demasiado tarde si me vincule con Vlad, mátame y matarás a todos.
—No te creo, lo dices para evitar que te mate, pero nada me hará...
—¡Compruébalo!
Gruño y con velocidad la empujo a la pared. Ambos forcejeamos con la estaca, ella la guía a mi pecho sin embargo su fuerza no es suficiente al quitársela y lanzarla lejos de su alcance.
No lo dudo cuando encajo mis uñas en su pecho y con mi otra mano la sostengo del cuello.
—No hagas más difícil esto Dennis, —le susurro— tu muerte es la solución.
—Darel, no —habla con dificultad, su rostro demuestra dolor cada vez que mis uñas se encajan presionando su pecho. Mientras trata de hablar repitiendo ese hechizo.
Debo ser más rápido, más que su don que comienza a cubrir su palidez.
—Adiós Dennis
Bastará un rápido movimiento para arrancarle el corazón. Sin embargo, un fuerte dolor en la cabeza me invade. No tengo el control de mi cuerpo y me alerto cuando veo la oscuridad cubriendo mis brazos que me hace apartar mi mano sin lograr mi plan.
—No, maldita sea —mi cuerpo retrocede por mi mismo cuando vuelvo a escuchar su voz en mi cabeza —¡No!
Cubro mi rostro con ambas manos luchando contra ella. Sin embargo es más fuerte, me vence y me consume la oscuridad.
D E N N I S
Su grito es agonizante, sufre tanto como cuando débil caigo al suelo de rodillas y uso toda mi fuerza y mi don para curarme la herida en mi pecho.
No tengo más fuerza para enfrentarme a Darel.
Cuando preferí recurrir a su oscuridad a tener a un Darel que quiere matarme.
Lo observo, guarda silencio y baja sus manos, sus ojos siendo completamente negros resaltando líneas oscuras de su rostro, cuello, brazos, pecho y pies y cae inconsciente al suelo.
Me obligo a reaccionar y mi vista busca la estaca, se encuentra muy cerca de él y no puedo levantarme ante mi poca fuerza.
—Darel —emito en voz baja.
No quiero preocuparme por él sin embargo, no se mueve, su oscuridad no desaparece cuando cada vez se extiende más. Cubre por completo sus brazos y en vez de sus largas uñas veo unas garras.
Regreso la vista a su rostro que parece tan diferente mezclando su apariencia con oscuridad.
Y de pronto, despierta.
Darel se incorpora con esa mirada tan oscura fija en mi.
—¿Darel? —niega lentamente— ¿eres su oscuridad? —paso saliva cuando se pone de pie sin antes agarrar la estaca.
—Tú haz tratado conmigo, me liberaste, me conocen como el Rey de sombras —su voz suena tan diferente a la voz de Darel, es tan fría, vacía —observa la estaca con detenimiento y ante mis ojos la deja caer y se acerca a mi mientras extiende su mano en mi dirección, donde líneas oscuras no dejan de emeger —o tú puedes decirme —muestra unos colmillos mucho más grandes que sustituyen todos sus dientes — Rey Shanees.
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Nota de autora:
¡OMG! Vaya giro inesperado ¿eh?
Darel, mi pobre Darel, sorry pero antes de derrotar a otros, vence por ti mismo a la oscuridad.
¿Rey Shanees?
Sospechoso, lectoras de ENTRELAZADOS saben de lo que hablo.
Una lectora me preguntó: ¿Cómo es la sombra? Pues es muy monstruosa, no tiene rostro, es tan atinatural que si luce más "normal" es por el vampiro que posee, en este caso, en Darel. Roba su apariencia.
El capítulo que viene podrán leer más sobre ella.
Mientras, suframos por este capítulo y les dejo estas fotos referentes 🖤
(Darel entre el Castillo y el escondite de Vlad)
(Dennis)
(Darel & Dennis 🔥)
(Shanees, repito es falsa su apariencia por Darel)
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