“Un vínculo es más fuerte si es real, irrompible, mutuo y eterno”

—Regresar al Castillo dos veces en un mismo día es agotador incluso para mi —espeta Lezy quien se encuentra de pie dentro del Castillo sin dejar de ver la enorme puerta esperando su presencia.

—Dímelo a mi que estoy vinculado al miserable cazador —le responde un rubio vampiro sentado en el tercer escalón— y no puedo salir o más bien en este momento, alguien no me dejó ir —le da un rápido vistazo a Noah que desde que se enteró, no dudó en vigilar a su creador ganando una discusión con él que Esteban, rendido aceptó quedarse en cuanto sintió la oportunidad de salir sin esa barrera.

Noah en silencio rueda los ojos, se mantiene de pie cerca de él sin quitarle los ojos de encima.

—Lo entiendo, los roles han cambiado —se burla Lezy— siglos atrás los creadores controlaban a las creaciónes, no al revés.

Esteban regresa la vista en ella y dándole una mala mirada le contesta:

—Tal vez nuestras creaciónes son nuestra debilidad para negarles lo que quieren.

Lezy esta por hablar nuevamente cuando la puerta es abierta por el líder de la guardia real.

—El Rey y la Reina, ya están de regreso.

Sus palabras causan la atención de todos mezclada con la emoción.

—Gracias Baroski —inquiere Lezy al verlo recuperado y seguir con su cargo— me toca actuar y ayudarlos a cruzar.

Con velocidad vampirica Lezy sale del Castillo y en cuanto llega a la barrera pronuncia el hechizo abriendo una pequeña abertura más duradera.

Dentro, todos los esperan, Consejo y descendencias hasta que logran ver entrar a la Reina quien enseguida es abrazada por Ashley.

—¡Aylin! Que bueno que volviste. El Castillo necesita a su Reina —con lentitud la vampiresa se aleja de ella observando su rostro— ¿eres la misma?

Su sonrisa sincera dejando a la vista sus colmillos se lo comprueban.

—Lo soy, no tuvieron la oportunidad de controlarme.

Ana Liz a su lado la vuelve a sostener de los hombros.

—Pequeña —el rubio vampiro es rápido al acercarse y aparta a Ashley quedando frente a ella— Estas a salvo —percibe la sangre seca en sus brazos y la excesiva palidez de su rostro— tenía la intención de ir a apoyar pero hubo una energía que no me lo permitió. Sumale la debilidad y control...

—Esteban, lo sé y no tienes que disculparte. —ella rápido lo abraza— Fue Vlad y su hija. No sabes lo que lamento que esto te dañe a ti.

—Lo único que importa es que tú estás bien —Esteban se aleja de ella dándole una sonrisa falsa.

—¿Qué pasó con el cazador? ¿Lo detuvieron? —Noah se acerca quedando a un lado de su creador.

Tras segundos en silencio, la Reina deja de ver a cada uno y niega.

—No se va a detener, esta dispuesto a no detener la guerra en nuestra contra. Se ha vuelto más fuerte, tan temido. No le importa afectar a quien sea y sus creaciónes le ayudan. Tuve la oportunidad de escapar antes de que controlaran mis recuerdos y me obligaran a estar de su lado, de preferirlo —Aylin hace una corta pausa—su primer convertido, me ayudó a huir. Lionell Castiens no era igual a él. Lo convencí de detener esta guerra.

—¿Era? Te refieres a él como si ya no existiera —inquiere Esteban.

Aylin se apoya del hombro de su hija y con pesar confiesa:

—Darren le arrancó el corazón.

Acto seguido el susodicho entra causando sus miradas. Con un Darel molesto por seguir encadenado a él.

Al escuchar a su creadora, su molestia se esfuma al sonreir con maldad.

—¿No le van a aplaudir al Rey? Empeoró la guerra, todo gracias a él —es el único en dar un mal aplauso cuando su brazo es jalado con brusquedad— Y no solo con el cazador, acaba de despertar la venganza personal de Dennis —masculla con seriedad sin dejar de verlo— mató a su hermano y el próximo serás tú.

—Darel —pronuncia la Reina sin querer verlos— basta. Lo hecho, hecho está. Solo nos queda buscar soluciones, la conocí y su hija es muy fuerte al usar su magia oscura.

—Un punto a su favor para el cazador, usa el vínculo y a su creación que con la magia oscura, nos será más difícil ganar esta guerra —opina Lezy— me sorprende que siendo ella tan joven, ya es poderosa.

—Por eso vas a reforzar la barrera —habla por primera vez Darren— le fue fácil usar su don para permitirle al maldito de su creador entrar sin problema y llevarse a Ayline sin darnos cuenta. Y no se tiene que repetir.

—Haré todo lo que este en mis manos pero les seré sincera, el Castillo ya no es seguro para nadie—le contesta Lezy cruzada de brazos— Crearé un hechizo de protección más fuerte pero necesitaré ayuda, ya que tienen a Alina como mi reemplazo, será útil cuando ya aceptó la magia oscura más aún no la controla.

—Haz lo que tengas que hacer —demanda el Rey.

Entre el silencio, Mía se obliga a deja de ver la puerta al sentir la presencia de su alma de otro lado, más no lo ve entrar y fija la vista en el Rey.

—¿Y Drake? ¿Los lobos aceptaron ayudar? ¿Hubo enfrentamiento?

—Los convenció, se adelantaron a ir contra el maldito cazador y sus creaciónes pero nosotros nos desviamos cuando Ayline no estaba con él.

La Reina al escuchar su voz detrás de ella se da la vuelta sin querer ver su rostro.

—¿La guerra no se detuvo? —espeta al no estar enterada de eso.

—Persiste pero en esta ocasión ganamos una batalla —resuena la voz de Drake al entrar, con velocidad Mía lo abraza y enseguida se aleja. Se asusta al ver sangre en su ropa sin embargo ante el olor no es la suya— Cada Alfa de las manadas aceptó intervenir por la Reina, también están en contra del cazador —Drake con Mía se acerca quedando en el centro— Llegamos a su ubicación pero no estaba ahí ni la Reina, ni el cazador ni su creación de nacimiento. Escaparon pero acabamos con todos sus convertidos pero hubo pérdidas, dos vampiros guardias —fija la vista en Valuk al verlo tenso— 10 lobos, 2 de la manada de Amaris. Ni ella ni Dean quisieron venir al Castillo.

—Al menos le tomará tiempo a ese miserable de convertir más humanos para atacarnos —Esteban acaba con ese prolongado silencio.

Valuk se acerca a Lezy apurado.

—Ayudame a cruzar, tengo que ir con mi madre, necesita mi apoyo.

—¡Valuk no! No puedes salir del Castillo.

Él se gira prestando atención en la vampiresa más cerca.

—Abuela Mía, por favor. Soy un vampiro y a la vez lobo, siento la pérdida de los míos y por ende el dolor de mi madre como la Alfa mayor.

Mía niega varias veces, desesperada lo agarra del brazo.

—Sería un acto impulsivo dejarte ir, solo puedo ayudarte en darles tú mensaje, haré que tus creadores vengan al Castillo —le dice Lezy y baja sus brazos.

Valuk asiente, pestañea varias veces dejando salir las lágrimas de sus ojos naranjas siendo abrazado por Mía.

—Ya no podemos cambiar lo que pasó pero si ayudarnos todos, entre todos los venceremos —espeta Ana Liz sin creer en sus palabras— pero por ahora, mi madre debe descansar y recuperarse.

Aylin asiente al sentir la pesadez de sus pies al luchar por mantenerse de pie.

—Vamos —su hija la ayuda a darse la vuelta y subir cada escalón hasta doblar al primer pasillo.

—Le iré a avisar a Owen que ya regresaron —emite Ashley y es la siguiente en marcharse.

Darel sin lucir afectado como el resto, desvía la vista en su creador.

—Si la Reina ya esta de regreso, entonces ya liberame —mueve su mano escuchando la cadena sonar.

Darren sin perder de vista a Aylin gruñe al escucharlo.

—No tengo la maldita llave

—Buen intentó en querer asustarme con eso pero no caeré en tú juego —Darel reduce la distancia al avanzar a zancadas— pero no te rogaré cuando te lo ordeno.

El Rey a la misma altura que él gira a verlo con esa mirada de frialdad.

—No tengo la llave Darel, en cuanto Lizbeth me dio la cadena para atarte conmigo, no pensé y olvidé pedirle la maldita llave.

Darel lo observa con la misma frialdad, molesto retrocede jalando la cadena sin importar el daño a si mismo y a su creador.

—Darel, así solo lograrás que ambos terminen sin brazos.

Él ignora el comentario de Esteban hasta que Lezy se acerca a ambos.

—Yo me encargo, detente —causa calmarlo y con un bajo hechizo las esposas se abren y caen al suelo— Dejarlos atados sería dejar que se maten el uno al otro.

Darel gruñe y mueve su mano al sentir la libertad notando una marca rojiza en su piel.

—Te lo vuelvo a repetir —concentra la vista en el Rey que no se inmuta en revisar la misma marca que comienza a sanar —No te saldrás con la tuya.

Dicho esto y se voltea marchandose con velocidad.

—Es una lástima tener a nuestras propias creaciónes en nuestra contra. Que equivocadas están —Lezy niega y se voltea— y ya que cumplí mi parte, me retiro. Cualquier cosa avísenme o usen a mi remplazo. Vendré en cuanto antes.

Usa un hechizo y desaparece dejando partículas pequeñas de color negro.

—Debes estar sediente, ven Drake. May se quedará más tranquila al verte— Mía y él son los siguientes en marcharse cuando Valuk les pide querer estar solo al alejarse y quedar recargado en un muro del pasillo.

Esteban carraspea y da un paso adelante.

—Noah, ve con Valuk

Su hijo observa de él al Rey

—Claro padre —se marcha dejándolos solos hasta llegar hasta el híbrido  tratando de consolarlo con palabras.

Esteban fija la vista en el Rey.

—Volviste a actuar por impulso Darren.

—¿Qué querías que hiciera? Solo pensé en el bienestar de Ayline —se cruza de brazos— y solo gané más su maldito rechazo.

—Pero la trajiste de regreso. Ahora te toca escalar al siguiente paso —Esteban le sonríe con burla— Resolver su vínculo y pedirle perdón. Pequeña te querrá escuchar.

—Parece que no la conoces

—Sé sincero Darren, pero no de una forma cruel. Tienen que resolverlo y los dos resolver los problemas que involucran a todo el Reino y a su creación en esta guerra —Esteban se medio gira listo para irse— ya es demasiado que tengas a tu hijo en tu contra, lo justo es tener a tu alma de tu lado.

Dicho esto y se marcha en dirección a cada Williams dejando al Rey pensativo.

(...)

En la habitación de Ana Liz, la Reina la espera sobre la cama con su espalda apoyada en la cabecera. Le pidió ir a ver a Alina y después traerle una copa.

La espera en soledad sin dejar de ver la puerta y pensar en todo lo ocurrido. Su mente sigue reviviendo la muerte de Lionell una y otra vez empeorando su dolor de cabeza.

Tras un golpe en la puerta, regresa a la realidad y frunce el ceño. Abraza más el cojín al sentir su presencia y ver lentamente la puerta ser abierta.

—Necesitamos hablar Ayline —lo mira adentrarse con una copa de sangre en su mano. Aunque odie admitirlo, el olor le es agradable que despierta su sed.

—Le pedí a Ana Liz una copa de sangre, no a ti.

—Y yo la convencí de encargarme y calmar tú sed, ganándome una discusión que tal vez tiene razón.

Darren al estar cerca de la cama le entrega la copa. Aylin desiste en aceptarla, su vista viaja de su rostro a la copa notando su mano que la sostiene; su anillo nuevamente puesto.

—Si a esto solo viniste, ya puedes irte —emite con frialdad y con rapidez le arrebata la copa. Le da un trago apartando la vista.

—Debes escucharme

—No hay nada que resolver —Aylin lame sus labios manchados de sangre fijando la vista en una esquina de la habitación menos en él— cometiste un error al matar un vampiro que no lo merecía.

—Y no me arrepiento de eso —Darren coloca sus manos en sus bolsillo delanteros — pero si del error de alejarte y dudar de nuestro vínculo. De no evitar que ese maldito te sacara del Castillo y te dañaran —gruñe y al no recibir su mirada se sienta en la orilla de la cama muy cerca de ella— Merezco tú odio y rechazo. Le creí más a un hechizo de magia oscura y sangre que a propia alma, pero al menos fuiste sincera. Sigue siendo mi culpa de la oscuridad de Darel.

—Lo dije porque estaba enojada contigo. —Aylin resiste a no beber al sentir las lágrimas en sus ojos.

—Siempre tienes la razón. He cometido error tras error, no puedo cambiar el pasado, mis acciones o lo que dije pero si encontrar una manera de arreglarlo comenzando por ayudar a Darel y liberarlo de esa maldita oscuridad y que vuelva a ser el de antes, el Darel que solo tú y yo conocemos por ser nuestro hijo y lo segundo, ganar tu perdón, que vuelvas a ser mi alma, mi reina.

Darren busca en su bolsillo y al sacar su mano deposita lentamente dos anillos diferentes sobre el cojin sin causar su mirada. Sin embargo Aylin los mira de reojo.

—No te obligaré Ayline, los dos decidimos dudar del vínculo y querer perderlo. Tú decide volver a aceptarlo o rechazarlo —hace una corta pausa sin dejar de verla— Puedo ser un vampiro frío y despiadado, la forma en que me describan todos, que no me interesa pero incluso para un maldito como yo, cuando me enteré que el cazador te atrapó, me aterró perderte. Es el peor miedo y debilidad para un vampiro, perder a su alma otra vez.

Lentamente Aylin gira a verlo, le causa sorpresa al notar el azulado en sus ojos con un leve destello carmesí en su iris. Sin sus colmillos visibles.

En silencio baja la vista en sus anillos y uno a uno se los coloca en su mano, en cada dedo.

—Ves que es fácil disculparte con palabras y para mi no será tan difícil perdonarte— alza la vista y le sonríe— Si creo en nuestro vínculo Darren y tampoco quiero que se rompa. Gracias —comienza a llorar de felicidad— gracias por ir por mi, por todo.

Se inclina, lo jala con fuerza y lo abraza sin querer soltarlo siendo correspondida al sentir su mano en su espalda. Se las ingenia para no dejar caer la sangre de la copa.

Acto seguido, es la primera en alejarse y comprobar su vínculo eterno cuando sostiene su mano y ambos anillos brillan.

—Lo vez, si existe. Soy tú alma, soy tú Reina —con su larga uña lo obliga a verla— ¿es lo que creo que es? —Darren se safa de su agarre y se limpia esas lágrimas rebeldes inevitables de ser vistas— no se lo diré a nadie —ríe y le da un casto beso.

—Tú... es tú culpa que sea débil y a estas alturas patético —el carmesí de sus ojos regresa reemplazando el azul.

Aylin le sonríe, sin soltar su mano y la copa hasta que borra la sonrisa al pensar en Darel.

—Debemos detener a Vlad, no podemos permitir más pérdidas inocentes, más humanos convertidos. Cuando se de cuenta que hui, lo volverá a intentar pero lo que más me preocupa es que van a usar la oscuridad de Darel en nuestra contra, a él no quiero perder —hace una pausa— Al conocer a su hija, me di cuenta que es tan maldita como él, cegada por un odio a nosotros dos y ahora más. Me advirtió, no le importó dañarme, a quien sea con tal de tener control de nuestro hijo, quieren su oscuridad y con más razón, su alma, ese vínculo no podemos permitir la cercanía. Dennis nos hará perder lo poco que queda de nuestro real Darel.

—Ella es el peor problema, sin ella el maldito cazador quedará vulnerable. Nos consta que la usa.

—Será difícil que su propia hija este en su contra y nos ayude a nosotros a vencerlo —Aylin lo suelta y deja la copa sobre el buro— por eso, estuve pensando y creo que la solución es que si quieren a Darel, no lo tengan a su alcance. No podemos matar a su alma, no le causaré ese dolor pero si podemos cumplir esa advertencia que siempre le dices —lo mira fijamente a los ojos— obligarlo a descansar.

El Rey asiente

—Vamos a necesitar a toda la Corte, a Elizabeth, magia oscura y sangre para darle ese descanso, puede que sea favorable para Derek aunque Darel tenga que quedar atrapado y enfrentar la oscuridad por ser vampiro.

+++

Por otro lado, Sharon Collins, ajena a lo que sucede afuera, sin querer saber sobre los rumores del Castillo y sobre la guerra, se encuentra en su habitación sentada en la cama queriendo resolver sus propios problemas o en este caso el dolor de un corazón roto.

No deja de llorar, de limpiarse sus pálidas mejillas con pañuelos dejando una cajita vacía al pensar en ese vampiro.

—¿Por qué? ¿Por qué duele tanto? —sorbe su nariz y coloca su mano en su pecho— no lates.

No encuentra explicación al sentir esa sensación tan intensa y diferente a un mortal siendo vampiresa.

De pronto la puerta es abierta. Su gemela al verla, entra y cierra la puerta recargandose en ella.

—¿Otra vez Sharon? Superalo

—Cállate Isa, no sabes lo mal que me siento.

—Siento lo mismo que tú tonta —se cruza de brazos— escuché que la Reina está de regreso, su Rey y el resto de los salvadores —ríe sin ánimos— y Darel —Sharon se tensa al escuchar ese nombre— Ese vampiro no merece que tú estés así.

—No puedo evitarlo, Darel me engañó, me ilusionó cuando sentí tanta felicidad el día que me besó para días después descubrir que él ya tiene una alma fuera de aquí.

Sharon llora al recordarlo y recordar el día que lo enfrentó.

—¡Darel! ¡Detente que te estoy hablando!

El vampiro gruñe y se detiene, sus días se basan en encerrarse en su habitación y salir a alimentarse en los calabozos sin querer hablar con nadie.

—¿Es cierto? —Sharon aparece frente a él— ¿Ya tienes un vínculo, un alma?

—No tengo tal aberración

—Entonces, ¿no te suena Dennis, la hija del cazador? —Sharon da un paso adelante, ante su mirada se obliga a sostenerle la mirada— ya lo sabías y aun así me besaste Darel ¿por qué?

—Solo fue un beso Sharon, para convencer a la Reina y dejarle claro como a otros que tú eras mi supuesta alma con tal de que me dejara en paz. En realidad no sentí nada, ni atracción...

El sonido de una cachetada lo interrumpe con una Sharon molesta sin importarle su oscuridad.

—Eres un idiota Darel, no puedo creer que por un momento a mi... me gustabas —lo mira girar su cabeza viéndola con molestia— no te quiero ver ni nada.

—Collins, deberías sentirte afortunada al tener una pizca de mi atención —Darel baja su mano— Tal vez te estimo pero no te permitiré que te creas mejor que yo.

—Ni te atrevas

Darel ignora su amenaza y se acerca peligroso. Sin embargo Sharon usa su don al causarle dolor en su cabeza, al verlo quejarse y sangre bajar de cada orificio de su nariz lo libera yéndose lejos con velocidad.

Y el resto de los días, se la pasó encerrada lamentándose.

—Fui una tonta por considerarlo mi alma.

—Ni si quiera lo haz comprobado Sharon.

—Darel es mi alma, lo sé. Lo siento —baja su mano de su pecho— odio amarlo —su gemela rueda los ojos— pero él quiere a otra y para colmo, no cuento con tu ayuda. Necesito a mi gemela y te siento lejos. Desde hace días me alejas cada vez más, presiento tú odio conmigo ¿qué te hice Isabel? —Sharon se inclina— Hablame, siento la misma tristeza en ti.

—Ay por favor Sharon ¿acaso no es evidente? No eres la única que sufrió un rechazo —se acerca dejando sus colmillos expuestos— Y todo por tu culpa. En el fondo me gusta verte así porque es exactamente lo mismo que sentí yo cuando... Noah me rechazó.

Ella se limpia las lágrimas viéndola con confusión.

—¿Qué... tiene que ver Noah?

Isabel se cruza de brazos en medio de la habitación.

—Eres tan tonta para no darte cuenta que Noah es mi alma pero no soy correspondida cuando tú eres la suya. Lo comprobé Sharon y mi anillo con el suyo, solo brilló el mio y me confesó que te prefiere a ti.

—Isa, yo no sabia. No lo creo si...

—Darel y Noah pelearon por ti —la interrumpe— a Noah le dieron celos cuando los vio besarse, siempre te protege, te ayudó en el Mundo mortal. Se nota que... te ama como su alma —baja sus brazos sin dejar de verla con odio— maldigo que seas mi gemela Sharon, mamá solo debió tenerme a mi, así sería su única favorita y tendría toda la atención de Noah cuando soy mejor que tú, la más fuerte de las dos —Su gemela se levanta de la cama— Bravo— aplaude— gracias al destino que te hizo vivir lo mismo que a mi ¡Darel no te prefiere!

—No sigas Isa

Ella ensanchan su sonrisa, su rubio cabello suelto lo aparta de sus hombros.

—Sufre Sharon

Entonces su gemela levanta su mano y usa su don para controlar su mente. Sin embargo Isabel rápido le regresa el mismo ataque, ambas quejándose de dolor, con sangre de su nariz sin bajar sus manos.

—¡Yo soy mejor que tú!

—¡Ya quisieras! —cansadas ambas bajan su mano y se liberan viéndose desafiante— Tienes razón, una de las dos no debió nacer. Solo una debe ser la original.

Isabel usa su velocidad para atacarla y ambas comienzan a jalarse los cabellos.

—¡Rindete Sharon!

—¡Nunca!

De pronto la puerta es abierta, al verlas su creadora interviene y con facilidad las separara con fuerza y se sitúa entre ambas.

—¡Niñas! ¿Qué les pasa?! ¡No pueden pelearse, son hermanas! —mira a cada una, las dos despeinadas —Jamás se habían atacado entre ustedes. Estoy tan decepcionada.

—Inició Isabel

—Asume tú culpa también Sharon

—Quien haya empezado. Quiero saber el porqué.

Ambas bajan la vista

—Por Noah —confiesa Isabel— él es mi alma madre pero no soy la suya cuando Sharon se interpuso entre los dos.

—Isabel que no entiende que mi alma es Darel, yo no sabia lo de Noah y ella.

Ashley luce sorprendida.

—¿En qué momento dejaron de ser mis niñas, crecieron para ahora hablar sobre almas? —se tranquiliza y obliga a ambas a verla con su agarre en su barbilla— Las almas no las elegimos niñas, en el momento de nuestra eternidad, ellas nos buscan o aparecen sin imaginar quien puede ser. Vamos a hablar seriamente de esto pero se lo diré a su padre, dejemos a un lado sus vínculos, no les enseñamos a dañarse a si mismas.

Sharon retrocede un paso safandose de su agarre.

—No me importa, pero antes voy a confirmar las palabras de Isa. Voy hablar con Noah.

Dicho esto y avanza a la salida ignorando el llamado de su madre tras salir y azotar la puerta.

—Y me decían ser la rebelde

—Estuvo mal lo que hicieron Isabel así que iré a avisarle a tú padre. Y esta vez no busquen mi ayuda —Ashley molesta se dedica a salir mientras internamente en su cabeza repite: Dominik un problema con nuestras hijas.

...

Mientras tanto, en la biblioteca Noah busca libro tras libro al dejar a su creador en su habitación, hasta que lo vio beberse una copa de sangre, quedó satisfecho al dejarlo solo.

Ningún Williams insistió con Valuk y le dieron esa soledad en cuanto se alejó de ambos.

Sin embargo, ahora Noah tiene una idea en mente. Buscar una solución para salvar a su creador.

Desesperado deja cada libro en su lugar tras hojearlos.

—Supuse que estarías aquí, te sentí cerca.

Él gira la cabeza viendo a una gemela Collins entrar y acercarse a él.

—Hola Sharon —le sonríe y deja el libro en su lugar— estoy buscando un hechizo que Alina pueda usar al tener acceso a su don para desvincular a mi padre. Lo vi tan afectado, cada vez está más débil aunque me quiera demostrar que no y quiero ayudarlo —bufa y vuelve a verla dándose la vuelta —pero no encuentro nada útil.

—Lo lamento por tu padre Noah

—Gracias —nota su cabello hecho un desorden cuando normalmente ella suele peinarlo en una cola alta bien peinada —¿Qué te pasó? No dejas de ser bonita pero me extraña de ti.

Ríe mostrando los colmillos

—Me pelee con Isa, por ti —Noah deja de reír y la observa tenso— por Darel, porque ya lo sé todo —hace una corta pausa —¿es cierto? ¿Yo soy tú alma?

Noah deja de verla, nervioso deja caer un libro sin querer verla a los ojos. Al notar que ella no se irá se obliga a verla y asiente lentamente.

—No era el escenario perfecto que imaginé para decírtelo pero sí, tú... mi alma eres tu Sharon, no tu hermana.

—Noah —ella finge suspirar y se recarga en el estante de libros— no puede ser, tú a mi no... me interesas de esa forma. Te quiero como un amigo nada más.

—Lo sé, siempre Darel es el favorito

Sharon al verlo mover sus manos nervioso, lo agarra y con la mano donde se encuentra su anillo la entrelaza con la suya.

—No quiero ilusionarte Noah, perdón por no...

—Sharon, dejalo —comprueba su único anillo brillar— Era de esperarse— la suelta bajando su mano.

—Tampoco quiero perderte como amigo.

Noah aparta la vista e imita su acción.

—No sé si pueda, dame tiempo. Ahora que lo sabes, no puedo evitar verte de esa forma —se encoge de hombros— ¿Me dejas solo? Para ambos es mejor la distancia... Sharon.

La rubia vampiresa asiente sin emitir palabra. Se obliga a no abrazarlo y darle un beso en la mejilla como acostumbra cuando se dedica salir de la biblioteca.

—Estúpido —Noah golpea el estante de libros, varios cayendo al suelo al quedarse solo. Cierra los ojos por segundos y al abrirlos se percata de una rubia vampiresa viéndolo.

—No evité escucharlo todo, vez que Sharon en el fondo si es cruel. Te rechazó, como tú lo hiciste conmigo —Isabel se cruza de brazos— Bienvenido al club.

—Burlate todo lo que quieras

Noah se voltea dándole la espalda, con disimulo se limpia sus lágrimas.

—Realmente no vine a eso. Como sabrás, me espera un castigo de mi padre por atacar a Sharon y ella a mi. Puede que sea la última vez que me veas —se encoge de hombros— pero si estoy aquí es porque quiero proponerte algo cuando me libre del castigo —lo obliga a darse la vuelta— Sonará loco aun después de tu rechazo pero podemos intentarlo. No somos almas correspondidas, no soy mi hermana pero tú y yo... podría funcionar ¿no creés? Piénsalo Noah, yo estoy dispuesta a darte ese amor que Sharon te negó darte, podríamos... fingir un vínculo.

Sin esperar su respuesta, le da un casto beso en la boca tras marcharse con velocidad dejando a un Noah confuso.

✝

Finalmente, Darel en su propia habitación trata de mantener controlada su oscuridad al sentirse atrapado en su propia mente.

—Te vuelvo a repetir considera el trato. Hazme el vampiro más fuerte.

Le dice dentro de su mente, rodeado de oscuridad, con él en el centro siendo la única iluminación.

—Dejame salir Darel

Resuena esa voz siniestra haciendo eco de su nombre. Sin ver esa sombra entre tanta oscuridad.

—Tú no vas a controlarme

La imagen de desvanece al abrir los ojos y gruñir.

—Nada —masculla apoyando sus manos debajo de su cabeza con la vista fija en el techo.

Una parte de él, quiere ver a la Reina y otra lo obliga a mantenerse lejos de ella. De todos.

Piensa en su creador y el odio incrementa como la sensación de matarlo al sentir un extraño dolor de tristeza que no le corresponde desde que regresó al Castillo.

>¿Ya habrás descubierto su cuerpo Dennis?<

Sonríe con malicia

No obstante un dolor lo obliga a incorporarse rápido en la cama y revisar su mano. Tensa la mandíbula, deja crecer sus colmillos al sentir ardor en la palma de su mano y ver lineas oscuras aparecer y esta vez se disparsen formando una palabra:

Matalo D

Darel se lo atribuye a la oscuridad más no escucha esa voz en su interior. Por un escaso minutos es el mismo.

Gruñe al sentir la piel de su antebrazo quemarle, lo revisa notando esas mismas finas lineas oscuras que forman una nueva palabra:

Te necesito

El ardor se extiende y reaparece en su abdomen. Darel tiene que levantar su camisa al descifrar el mensaje con las letras al revés siendo más fácil al leer:

Somos iguales, invencibles

—¿¡Dennis?! —repite sin creerlo dejando salir una risa sin ánimos— maldición —masculla y comienza a desabrochar cada boton de su camisa hasta quitársela y con su torso descubierto vuelve a notar otro mensaje justo donde se ubica su corazón sin latir:

Tú corazón me pertenece. Yo te controlo.

Sus pálidos y delgados dedos rozan su piel con las letras negras que una a una se desvanecen.

Darel intrigado, más que molesto por ser marcado y usado con un hechizo de magia oscura, le sorprende su poder que no respeta barreras para llegar hasta él.

Le fascina la conexión que tiene con Dennis cuando su oscuridad lo alienta a ir con ella.

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Dato interesante:
Si no se dieron cuenta, en el libro individual de "ESTEBAN" hay un capítulo donde Nohemi al conocer a Darren por primera vez le dice "Darel" al ser una mala pronunciación de su nombre para solo molestarlo. Entonces, queda claro de donde viene su nombre. En VDS Aylin eligió el nombre de "Ana Liz" y en VE a Darren le tocó elegir el de su hijo "Darel" pero en sí su nombre que tiene muchos significados es:

DAREL proviene del “dar” alguien que siempre da lo que merece y a la vez se denomina valiente, leal, sincero, directo, astuto, divertido etc

N/A:
Las cosas se podrán peor y oscuras para Darel, sorry peero feliz por los vínculos resueltos o otros enrredados Nos seguimos leyendo 🖤🍷✨

Para más memes sigan la página de Instagram loca_lectoraw.

Foto de las gemelas Collins