La mañana había llegado de nuevo donde Muichiro ya se había levantado para poder observar el lugar donde se encontraba lo único que recordaba era que había llegado aquel sitio por un sujeto, pero no presto más atención por lo que se le olvido.

Haruto por su parte lo observo en las sombras para ver que era lo que hacía o más bien era para que no se lastimara, entre tanto seguirle se dio cuenta de que Muichiro era muy ágil además de habilidoso con la espada para su edad. Por lo que una idea paso por su cabeza pensando que podía entrenarlo para que sea un cazador.

Muichiro: Puedes dejar de seguir—menciono para mirarlo de reojo con una mirada asesina además de fría—Si no bajas ahora te matare

Haruto abrió los ojos de golpe por la amenaza parecía una persona totalmente distinta en unos segundos—A atraparme si puedes entonces—hablo como un reto

Muichiro solo chasqueo la lengua para que rápidamente a pareciera delante suyo, su mirada era vacía como fría causando escalofríos más con la sonrisa sobre sus labios que se posaba.

Haruto rápidamente se alejo para saltar a otra rama del árbol cercano—Eres rápido—menciono sonriendo para luego empezar a saltar por las ramas y observar cómo lo seguía

Estuvieron por un buen rápido saltando donde Haruto pensó que el chiquito ya se había cansado porque no lo observo, pero grande fue su sorpresa al sentir como un pequeño cuchillo estaba posado en su garganta.

Muichiro: ¿Quién eres? —pregunto en tono amenazante para mirarlo de reojo ante cualquier movimiento que estuviera planeando

Haruto solo lo miro algo confundido estaba seguro que le dijo su nombre el día de ayer— Haruto te lo dije ayer—comento para mirarlo

Muichiro arqueo una ceja ante aquella respuesta, pero después de unos segundos lo soltó—No lo recuerdo—menciono sin dar importancia a lo que decía para bajar de un salto para caminar

Haruto lo observo algo confundido era un niño aun, pero parecía que sufría de perdida de memoria, aunque no estaba seguro por lo que tendría que confirmarlo, aun así, lo llevaría con un medico por lo que bajo para seguir además de ver que no se perdiera de regreso.

Mientras tanto en la dimensión infinita Nezuko se encontraba en su habitación castigada por su padre después de enterarse que estaba entrenando en secreto la dejo encerrada por así decirlo durante una semana, pero eso no le impedía practicar.

Nezuko: Mi tío me comento sobre esto—analizo para ver su espada de madera por lo que una leve sonrisa se formó en su rostro—Pude crear una respiración—hablo emocionada para dejar la espada en el suelo para ir a su escritorio y empezar a escribir

Mientras lo hacía Tanjiro escuchaba a su hermana que parecía emocionada por su descubrimiento por lo que solo suspiro con alegría por ella y camino a su habitación donde se dejo caer al suelo para descansar un poco. Las horas pasaron rápidas donde Nezuko había terminado de escribir sus dos primeras respiraciones ahora tenía que ver cómo realizarlas.

Nezuko: Tengo que salir—menciono para abrir la puerta de habitación donde observo a todos lados—Listo no hay nadie—comento para salir con cautela para no ser escuchada

—¿A dónde vas? —se escuchó a sus espaldas una voz algo divertida

Nezuko se quedó inmóvil para girar su cabeza—Oh hola tío Douma—respondió con un saludo de su mano

Douma: Acaso te estas escapando—pregunto divertido más cuando sus ojos buscaban algún rastro de mentira sobre la menor

Nezuko por su parte solo suspiro lentamente y junto sus dedos los cuales comenzaron a jugar con ellos—N..no—su voz fue en un hilo de voz como si la hubieran descubierto por hacer algo malo

Douma solo suspiro para darle una seña para que lo siguiera durante el trayecto era algo tranquilo, pero silencioso cuando llegaron a la sala principal donde estaba Nakime con su biwa en su regazo.

Douma: Nakime podrías llevarnos a mi templo—hablo para observarla

Nakime solo giro en su dirección para suspirar—La señorita Nezuko tiene prohibido salir—menciono seriamente, pero algo relajada

Douma: Solo será un momento vendremos rápido—comento tratando de convencer a la demonio que no paraba de tocar su biwa

Nezuko solo junto sus manos en señal de poder salir que solo seria unos minutos después de tanto insistir Nakime los trasporto al santuario donde Douma se quedaba, por lo que ella sonrió animada.

Douma: Bueno llega...—no termino de hablar cuando una voz se escucho a las entradas del templo

—Oh ya llegaste Douma-san—menciono una voz femenina quien salía de las sombras de una de las habitaciones

Nezuko volteo su mirada a la mujer su belleza era única al igual que hermosa y su sonrisa era delicada de una forma cálida.

Douma: Hm, Oh Kotoha—hablo animado para ir a su costado además de abrazarla—Si acabo de llegar

Kotoha solo sonrió para mirar a la pequeña que solo se mantuvo en silencio y observándola detenidamente—Un gusto tu debes ser Nezuko, ¿verdad?

Nezuko solo asistió con la cabeza para corresponder a la sonrisa de la mayor—Tío, ¿quién es ella? —consulto y trato de no sonar grosera porque ella sabia bien que aquella mujer era una humana además todas las personas que estaban en el templo del tío Douma nunca duraban lo suficiente como las sirvientas ya que eran como su alimento, por lo que tenia curiosidad del porque ella estaba viva, aunque también estaba emocionada ya que era su primera vez que interactuaba con uno que estuviera vivo

Douma: Ella es Kotoha mi esposa—respondió simplemente mientras sonreía

Los ojos se abrieron de golpe por tal información ¿esposa?, pensaba Nezuko algo aturdida por la información desde cuando mi tío Douma se había encariñado con una humana, acaso mi padre lo sabía, miles de pensamientos cruzaron su cabeza por lo que miro a la mujer unos segundos ante de responder.

—¿Mi papá sabe de esto?

Douma por su parte permaneció en silencio para luego suspirar y mirar a Nezuko—No... aun—menciono bajo dejando a Kotoha algo confundida, pero sabia que era importante lo que hablaban

Ambos se lanzaron una mirada rápida para poder adentrarse al templo donde todo estaba normal salvo que Nezuko miraba algo desconfiada a Kotoha, pero poco a poco se sentía cómoda con ella.

Nezuko: Voy a salir ahora vuelvo—menciono ya que tenia un poco de hambre y le hizo una seña a su tío

—De acuerdo, pero no demores—menciono para ver como su sobrina salía del lugar dejando los solos

Kotoha: Tu sobrina es hermosa—comento para levantarse y traer un poco de te además de recibir un asentimiento de su parte

—¿Y dónde está inoske? —pregunto para mirar alrededor

Kotoha: Salió a comprar al pueblo que estar cerca—menciono para sentarse y tomar un poco de te

Con Nezuko ella caminaba por el bosque con su forma humana su cabello llegaba hasta su cintura donde estaba decorado con una pequeña rosa en su costado, con un traje de un kimono con bordes rosados con patrones de estrellas. Mientras caminaba estaba asombrada por lo relajante que estaba en el bosque, pero su kimono le incomodaba un poco por lo que decidió ir al pueblo para comprar ropa.

Cuando llego las miradas no tardaron en llegar no solo por su belleza, sino por el porte elegante que desprendía unos minutos tardaron para llegar a donde vendían uniformes por lo que se alegró para poder entrar.

—Disculpe cuánto cuesta? —pregunto adentro para observar un traje, su chaqueta era de color negra con bordes rojos claros teñido en plateado con algunas líneas en forma de luna y portaba una falda de color negro de hakama metidos en una tela kyahan de patrón de estrellas alrededor de sus piernas.

(Tomarlo como referencia crédito a su autor de la imagen)

La jovencita que vendía los trajes sonrió para luego acercarse a donde estaba—Claro señorita es un modelo único en su clase—menciono con una sonrisa—Ese traje lo cree yo misma era para mi hija, pero lamentablemente falleció

Nezuko: Lo lamento mucho—menciono con un poco de tristeza en su tono de voz—mejor quedarse lo para que lo conserve

—No claro, claro que no querida—menciono divertida la señora para entregarle el traje—Aquí tienes considéralo un regalo de mi parte

Nezuko: Pero....

Trato de negarse, pero la señorita solo insistió por lo que suspiro para llevarse puesto una vez salió del lugar camino por todos lados buscando algún puesto que vendieran espadas, pero no encontraba ninguno, un joven le dijo que tenia que ir a un pueblo que no estaba tan lejos ahí creaban las espadas, pero solo eran para los cazadores aquella lo molesto, cazadores era la única palabra que se escuchaban en ese aburrido pueblo.

Ya se había aburrido y el hambre le estaba entrando por lo que camino al bosque para ver quien sería su primera víctima, mientras lo hacía algo le llamo la atención era un joven de puntas verdosas y haori negro casi del mismo color en los bordes de su cabello.

Nezuko pensó que seria una buena presa, pero se detuvo al ver como portaba una katana a su costado era un cazador, pensó por lo que se acerco lentamente a donde estaba para observarlo.

—Es peligroso estar sola a esta hora de la tarde—hablo seriamente para girar su rostro en la dirección de Nezuko se encontraba

Nezuko: Vaya me descubriste—comento para salir de donde se escondía—¿Cómo te llamas?

—Porque debería de decirte mi nombre—menciono para seguir su camino—Eres una cazadora? —pregunto para mirarla de reojo

Nezuko: Que maleducado—pensó al ver cómo había ignorado su pregunta—No, soy un cazador de demonios—menciono con odio y rodando los ojos

—Parece que no te agradan los cazadores—mustio para mirarla y observarla detenidamente

Nezuko: No me agradan—hablo para desviar la mirada—¡CUIDADO! —grito para empujarlo rápidamente ante la aparición de un demonio

Demonio: Vaya... vaya—menciono con una sonrisa iba a seguir hablando cuando observo a Nezuko haciendo que se sorprenda—tu...

Nezuko al ver como iba a decir su nombre sujeto la espada del chico para atacarlo y estar suficientemente cerca—Cállate es una prueba y tu eres la presa—hablo con una sonrisa ladina para intentar cortarle el cuello al demonio que solo esquivaba

—Primera postura Polvo de luna—hablo para inhalar y saltar rápidamente por todas las ramas de los arboles creando como una escarcha

Demonio: ¡Pero que!

De pronto la velocidad aumento dejando así que el demonio apareciera en un lugar donde era como un lago—¿Dónde estoy? —pregunto hasta que de repente de un borrón su cabeza fuera decapitada por Nezuko quien sonrió y su respiración agitada

Nezuko: Lo hice...—hablo sin poder creerlo—¡LO HICE! —grito emocionado porque su respiración logro funcionar

—No que odiabas a los cazadores—hablo el joven que estuvo de espectador todo el tiempo para acercarse a la chica y pedir su katana

Nezuko al darse cuanta de su presencia solo chasqueo la lengua para luego entregarle su katana—Lo lamento

—No es necesario me salvaste—menciono para observarla—mi nombre es Muichiro un gusto—menciono para sonreír levemente

Nezuko: Nezuko ese es mi nombre—correspondió ante la sonrisa del chico que por alguna razón sentía un sentimiento extraño en su cuerpo

La noche ya se había presentado después de eso ambos se despidieron para ir por caminos separados mientras que Nezuko estaba emocionada por contarle lo que había sucedido a su tío Kokushibo.

Una vez llego al templo de su tío le dijo que ya tenia que volver a casa por la hora entonces rápidamente llamaron a Nakime para que los llevara de nuevo a su hogar ya una vez dentro Nezuko estaba feliz y su rostro lo notaba en todo momento.

—Nezuko—se escucho una voz gruesa que causo escalofríos a la pequeña que con solo reconocer la voz ya tenia en mente quien era—Saliste de tu recamara aun estando castigada

Nezuko solo suspiro para mirar a su padre quien estaba cruzado de brazos por lo que lentamente decidió hablar—Lo se papá—menciono con la cabeza baja—pero tengo una buena noticia

Muzan solo arqueo una ceja ante la idea por lo que decidió escucharla y caminaron a su habitación para estar más tranquilos—Bueno dime

Nezuko: Logre crear una respiración—menciono seriamente a pesar de su edad ella sabia bien que su papá no le gusta que hablara de ese tema por lo que solo espero a su respuesta

Muzan: Primero saliste de tu cuarto a escondidas—hablo para levantar un dedo—después sales de casa—levantando el segundo—Y por último me dices que creaste una respiración cuando te prohibí usar la espada

Silencio había, pero las miradas firmes de ambos no se iban por lo que una pequeña tensión se formó a su alrededor.

Nezuko: Papá si puede infiltrarme en los cazadores te puedo ayudar—hablo después de un largo silencio creado por ambos

Muzan analizo lo que dijo, pero genero una mueca de desagrado—No—salió de sus labios en negación—Que pasa si te pasa algo?

—No pasara confía—reclamo a su padre para mirarlo suplica menté—Yo puedo hacerlo eh estado entrenando, soy fuerte

Muzan: Nezuko—hablo firme—Te di una orden la cual desobedeciste—menciono para que la nombrada bajara la cabeza—Eres mi hija—acerco su mano su cabeza—No quiero que esos cazadores te lastimen y se te descubren—comento para mirarla con preocupación

Nezuko solo se dejo acariciar—Y si voy con mi hermano—comento con la esperanza de que aceptara su plan

Muzan la miro para luego suspirar—Déjame pensarlo

Fue lo que dijo para que Nezuko se emocionara para poder abrazarlo y salir de la habitación para comer algo ya que no había comido por lo que espero a que le trajeran su comida.

—Nezuko-sama su comida—menciono con emoción para entrar a la habitación con un pequeño plato de comida

Nezuko: Gracias Daki-nessan

Ambas se pusieron a cómodas para empezar a conversar y platicar de su día donde Nezuko disfrutaba su comida y estaba emocionada por ver a su hermana mayor la cual era un amor con ella.