Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

43

Dante

Ethan conduce mientras yo sigo muy emocionado.

Para no estarlo. ¡Ha comprado una casa para los dos!

Controlo mis lágrimas y él me ve.

Ríe un poco y acaricia mi pierna.

—¿Estás bien? —me pregunta y asiento muy rápido.

—Claro que sí. ¡Estoy de maravilla! —digo muy rápido.

A él le hace mucha gracia.

Coge mi mano y se la lleva a los labios.

Deja un sonoro beso en esta y veo hacia la derecha para ocultar mi rostro.

¿Acaso se le ha olvidado que, cuando me da un beso sonoro en cualquier parte de mi cuerpo, me pone cachondo?

—¿Y ahora qué pasa? ¿Soy tan feo como para que no me veas? —dice dramatizando.

Ambos reímos y veo a mi novio mordiendo mi labio inferior.

—No me des más besos así —digo y a él le importa muy poco porque vuelve a hacerlo.

Cierro un poco mis ojos y paso una mano por mi entrepierna.

Lo está haciendo a propósito.

Ríe sabiendo lo que está haciendo.

Aparca delante de una casa construida con piedras. Tiene un porche delantero. El marco de las ventanas es marrón oscuro.

—Ethan, esta casa es muy italiana —digo mientras mi mano está en su regazo. Él la está acariciando.

—Dante, nuestra casa es muy italiana —corrige y río.

Río entre lágrimas y él se derrite al verme.

—Vamos a salir del coche. Necesito abrazarte —dice y me hace sonreír muchísimo.

Salimos del coche y me abraza muy fuerte mientras acaricia mi pelo.

—¿Te gusta, cariño? —me pregunta y asiento numerosas veces sin poder hablar.

Ethan sonríe y ambos caminamos hacia la entrada de la casa cogidos de la mano.

Me pide que introduzca la llave en la cerradura y así lo hago.

Giro la llave y la puerta se abre.

Abro esta muy ilusionado y Ethan enciende la luz del pasillo.

Cuando entramos, se nos pasa el frío.

El interior de la casa es muy calentito y esto se agradece.

Sonrío feliz viendo las paredes de color blanco.

Lo primero que nos encontramos son dos sofás de color gris oscuro. En medio de estos dos hay una mesa de metal de color blanco. La televisión no es muy grande, pero es perfecta para la estancia.

Detrás de uno de los sofás hay una estantería llena de libros. Al lado de esta hay un zapatero de color marrón y un perchero de metal de color negro.

Entramos por una puerta y vemos la cocina. Es un poco más moderna que el salón.

Los muebles son de color marrón y las encimeras están hechas de piedritas pequeñas.

—Te veo mucho en las encimeras —comento sonriendo y Ethan se ríe.

—¿Por qué dices eso?

—Te encanta subirte a las encimeras para hacer cualquier cosa. Comer, estar con el móvil, sentarse para pensar. Pero también para tocar mi pelo cuando ando cerca.

Asiente y me da un dulce beso en la mejilla.

—Sigue explorando, amor —dice y me derrito muchísimo caminando ahora yo solo sin que nuestras manos estén juntas.

Subo unas escaleras de piedra y veo tres puertas.

La curiosidad se apodera de mí y abro la primera puerta.

Es el baño de la casa.

Hay lo típico que hay en un baño. Pero algo me llama la atención.

—Necesitaba casa con bañera —dice Ethan a mis espaldas y río al escucharlo.

Beso sus labios y él sonríe muy feliz.

Sí que necesitamos una bañera.

La segunda puerta que abro nos muestra una pequeña oficina en la que hay una estantería, un escritorio, una silla y varios archivadores en el escritorio.

A la derecha, hay un cajón, el cual es un instrumento. Y varios platillos.

Ethan se sonroja un poco y explica que es todo esto.

—Como eres doctor, necesitas tu lugar para trabajar en casa. Y yo como soy batería, necesito varios instrumentos para practicar en casa. Esto es menos de la mitad.

Sonrío y acaricio su brazo.

—Me encantaría verte tocando la caja —digo y él sonríe.

Se sienta sobre ella y comienza a mover sus manos por la superficie.

Me quedo allí mirando lo que hace y suspiro enamorado.

Siempre, cuando toca un instrumento, su pelo se mueve mucho y eso lo hace más hermoso. Su cuerpo se mueve y es realmente bello.

Ho un bello ragazzo con me —digo y él se ríe al oírme.

—¿En serio tienes un chico guapo contigo? —dice acercándose a mí y besa mis labios.

Asiento y toco su cuello.

—El más bello —digo susurrando y ambos reímos.

Ethan sabe muy bien que es hermoso, pero nunca lo dice.

Solo va con estilo fuera de casa tocando ese bonito pelo que tiene.

—Vamos —dice y señala la última puerta de la casa.

Abro la puerta y, al ver lo que hay, me emociono.

El techo de nuestra habitación está a menor nivel que los otros techos de la casa.

Es un techo un poco más bajo y eso le da un toque muy bonito a la habitación.

Veo una buhardilla y me emociono más porque se ve el cielo lleno de estrellas desde ahí.

Es realmente precioso.

La cama es más grande que la que tengo en la casa de mis padres. Tiene sábanas blancas, un edredón nórdico de rayas blancas y negras, unos cojines azules sobre unos cojines marrones y el cabecero es marrón claro.

A cada lado de la cama hay una mesita de noche con un tono de blanco bastante bonito. Sobre ellas hay una lámpara verde.

Delante de la cama, hay un armario marrón.

A la derecha de la cama, hay un espejo bastante grande. Digo bastante porque en mi habitación solo había un espejo de menos de un metro de ancho.

—¿Cuál es tu parte favorita de nuestra habitación? —me pregunta y coge mi mano acariciándola.

—La buhardilla, por supuesto —digo sonriendo.

Tengo muchas ganas de acostarme en la cama y ver el cielo.

Señalo el espejo.

—También esto. Es bastante erótico, ¿no te parece? —digo y él se ríe antes de besar mi mano.

—Te falta ver el baño de nuestra habitación.

El baño es más moderno que el otro baño. En ambos hay bañera y sé que a Ethan le encanta esto.

Nos acostamos en la cama sin ni siquiera cambiarnos de ropa.

Nos hemos dejado caer en el colchón y ahora estamos cogidos de la mano mirando el cielo.

Ethan toca mi pelo y deja numerosos besos en mi rostro y en mi cabeza.

—Gracias —digo en un susurro y veo a mi novio. Está adorando mi rostro y mi pelo.

—Quería hacer esto hace tiempo, Dante. Me encanta estar contigo y siempre he tenido esa idea de compartir casa contigo —besa mi frente y sonrío mucho más.

—Gracias, en serio. Esto es muy italiano y muy bonito.

Ríe y me acerca más a él.

—Somos italianos y necesitábamos una casa así, ¿verdad? —asiento y él sonríe—. Además nos encantó visitar Settebagni. ¿Te acuerdas?

Sonrío y dejo un beso en su pecho.

—Me acuerdo de la comida de aquel restaurante —digo con una sonrisa—. Quiero ir de nuevo allí.

—Iremos pronto, ya verás. Además, estamos un poco más al norte de Roma. Más o menos nos queda cerca el restaurante.

Pongo un dedo sobre sus labios y sonrío.

—Dame cariño, bambino mio —digo alejando mis dedos de su rostro.

—Todo el que tú quieras, amor.

Y esa fue nuestra primera noche en nuestra nueva casa.

Qué bonito suena decir nuestra casa.

Mi casa también es la de Ethan.

•••

****

Holaaa de nuevo jeje.

Hoy me veréis mucho por aquí porque tengo muchas ganas de publicar.

¿Qué os ha parecido este capítulo?

Ethan ha comprado una casa para ellos dos. Y este es el principio de las tantas historias que tendrán en su nueva casa.

Me los imagino y me derrito ayyyyy.

Es que los amo muchísimo, no se nota para nada JAJAJA.

Espero que os haya gustado este bonito capítulo de la parejita que se ama con locura.

¡Nos vemos!

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro