30
Las palabras de Dante me han sorprendido, pero también estoy sorprendido conmigo mismo.
Me ha gustado mucho ver a mi novio con Damiano.
¿Qué me está pasando?
Cojo aire y asiento.
—Estaría bien verlo de nuevo.
Victoria cocina brócoli con algo de bechamel y prepara otras verduras. Coraline ya está enfadada con ella.
Primer enfado entre mujer y mujer.
Río.
Todo es porque Coraline no quiere comer eso. Le parece asqueroso.
No le gustan las verduras. No las soporta.
Thomas aparece caminando muy lento, está detrás de mi cuñada.
Stella camina feliz y le da un gran beso en la mejilla a su hermano. Toca su pelo y le dice que está muy guapo y que tiene que seguir tomando vitamina E.
Es decir, que tiene que estar conmigo.
Ambos nos reímos y nos miramos.
Le mando un beso y él sonríe.
A mi lado está Damiano con una partitura. La está leyendo y parece algo molesto.
—Rubio, intenta que esto suene mejor —dice y Thomas le enseña el dedo medio.
Muy propio de él cuando se despierta.
Se gana un manotazo de Stella. Ella le pega en el brazo.
—No seas así, Thomas —dice molesta y río.
En ese momento me imagino a Thomas enseñándole cosas malas a su pequeño o pequeña. Y Stella grita enfadada diciéndole que pare de hacer idioteces.
Río más alto y todos me miran.
—Parece que alguien está muy feliz hoy —comenta Coraline y me da un beso en la mejilla sonriendo. Acaricia mi pelo y hace un puchero—. Quiero hacerte un peinado hoy.
—Adelante. Extraño eso.
Mi amiga sonríe y se sienta a mi lado.
Empieza a tocar mi pelo y veo a Victoria quejarse cocinando.
—¡Damiano, corre! ¡Va a quemar la casa! —exclama Thomas.
Damiano sonríe y le lanza la partitura y el lápiz.
Va con Victoria y le ayuda a cocinar.
—Tienes que bajar más el fuego, loca. Si no lo haces, la comida se quemará y dejarás la cocina llena de suciedad.
Escucho como dice Damiano y Victoria suspira.
Nuestro amigo le da un golpe en el trasero a Victoria y le dice que vaya con su esposa.
Victoria se acerca a Coraline, la cual sigue enfadada con ella.
El brazo de la rubia está sobre los hombros de la pelirroja.
—Venga, Coral. No te pongas así. Tienes que comer verdura también. Tu cuerpo lo necesita.
Asiento.
—Eso es verdad. Tienes que estar fuerte, pequeña —digo y Coraline me mira con una pequeña sonrisa.
—Por lo menos escucha a Ethan y hazle caso.
—Victoria, solo te hace caso en la cama —dice Thomas mientras escribe algo en la partitura.
—A ver, chaval, calla un poco —le dice Victoria y Thomas se ríe diciendo que la que se tiene que callar en la cama es ella.
Victoria se echa encima de él y ambos gritan y ríen.
Veo a los locos en el sofá. Stella está cerca de ellos y se aleja un tanto asustada. Se sienta en una silla y abraza a su hermano.
Río al ver la escena.
Coraline ríe y anima a su esposa para que no se rinda, que siga matando a Thomas con cosquillas y algún que otro golpe.
Dante sonríe hablando con su hermana y toca mucho el pelo de Stella. Ambos se preguntan si están bien y se cuentan alguna cosa.
Damiano sigue cocinando mientras canta muy bajito alguna canción en francés.
Acabo de lavar los platos y los cubiertos.
A mi lado está Dante sentado en la encimera.
Ambos estamos solos en la cocina.
Coge una de mis manos y me atrae a él.
—¿Qué te pasó, cariño? —le pregunto y él me calla besándome una vez que me coloca entre sus piernas.
—Te amo. Eso es lo que pasa —dice sonriendo.
Pongo mis manos en sus piernas y las subo un poco más.
Vuelve a besarme y muerde mi labio inferior.
Rápidamente aprieto su entrepierna y él para de morderme. Gime un poco y sonrío al verlo.
—¿Solo me amas a mí? —le pregunto y él asiente.
—Sí. Solo a ti. Solo te amo a ti —dice y busco sus labios.
Nos besamos con un nivel de pasión muy alto, pero sabemos que en cualquier momento alguien puede aparecer.
Paramos con los besos y ambos nos da la risa tonta sabiendo que estamos muy cachondos.
—Vamos a planear esto.
—Cazzo, cierra la boca ya. No sé como mamá te trajo al mundo sabiendo que ibas a ser tan imbécil.
Oímos a Damiano hablar por teléfono cuando llega a casa.
¿Con quién está hablando de esta manera?
Seguro que está hablando con su hermano mayor.
Siempre se insultan a todas horas y se molestan el uno al otro como si fueran niños pequeños.
Damiano nos saluda con una mano mientras nos ve en el sofá viendo la televisión.
Sonrío y lo saludo.
—Cazzo, ¡cállate cállate!
Dante intenta no reírse al escucharlo.
Damiano cuelga y comienza a reírse.
Deja una libreta azul en la encimera y, encima de esta, su móvil.
Se acerca a nosotros tocando su pelo, el cual tapa un poco sus ojos.
No es tan largo como lo tenía hace dos años. Le llegaba por los hombros.
Se sienta en un sofá y mira sus uñas.
—¿Dónde está esta gente? —nos pregunta al no oír ni una voz en esta casa.
—Victoria y Coraline se han ido a una tienda de música buscando algo. Mi hermana y Thomas se fueron a algún lugar para estar solos en parejita —explica Dante.
Damiano asiente y nos ve.
—Y vosotros aquí. Solos en casa —dice y sonríe—. Bonita pareja.
—Gracias —digo y sonrío feliz.
Dante aprieta un poco mi mano mirándome mientras Damiano ve la televisión.
Cojo aire sabiendo lo que viene ahora.
—Damiano —digo y me ve con su mirada un tanto seria—, queremos hablar contigo.
Asiente y nos ve esperando a que hablemos.
—¿Estás de acuerdo en hacer un trío? —le pregunta Dante.
Damiano se sorprende mucho.
Intento no reírme.
Eso sí que ha sido muy directo.
—¿Nosotros tres? —pregunta y ambos asentimos. Me mira preocupado y suspira—. Ethan, ¿estás bien? No quiero hacerte daño. No quiero destrozar lo que que tenéis.
Niego y muevo mi mano quitándole importancia a lo que acaba de decir.
—Estoy bien. Además, mi relación con Dante va genial. No te preocupes.
Asiente y se queda pensando. Sonríe.
—¿Y por qué un trío? —nos pregunta.
—A Ethan le interesa besarte de nuevo —dice Dante riendo. Le doy un golpe en la pierna y los tres nos reímos.
—Es mentira —aclaro y miro a nuestro amigo—. Me interesa hacerlo. Es pura curiosidad.
Damiano asiente.
—Supongo que tendréis normas para todo esto —dice y mira a Dante—. Ethan necesita estar siempre organizado.
Reímos los tres.
—Bueno, hemos hablado sobre esas normas —le dice Dante—. Pararemos todo cuando Ethan o yo no nos sintamos cómodos. Pararíamos al instante. Y, claro, si tú no quieres continuar, dilo y paramos con todo.
Damiano sonríe y asiente.
—Entiendo y me parece genial. Nuestras opiniones van primero —dice nuestro amigo y toca un poco su pelo.
Me siento feliz porque Damiano ha entendido todo.
Solo espero que todo vaya bien.
—¿Cuándo lo hacemos, chicos? —pregunta Damiano mirándonos.
•••
****
¡Hola!
Llevo despierta desde casi las 8 de la mañana y lo único que he hecho es escribir el siguiente capítulo, el cual lo publicaré hoy dentro de unas horitas.
Se viene una escena interesante jeje.
¿Tenéis ganas de leerla?
A mí me ha encantado escribirla. Fue una fantasía escribir ese capítulo. Una pura fantasía, es maravilloso.
Y sí, es el capítulo más largo de Dante hasta el momento. Así que, estad preparadas porque se viene un capítulo larguísimo con muchas descripciones.
Me enamoré de ese capítulo jeje.
Espero que os haya gustado lo que hice ayer. Publicar 4 capítulos de Dante en un día.
A mí me encantó hacerlo. Espero que algún día lo vuelva a hacer.
¿Qué os está pareciendo este libro con lo que está pasando ahora entre la pareja protagonista?
¡Nos vemos!
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro