La búsqueda por una <Familia> comenzó a las 9 A.M.

--para ser la ciudad de los aventureros de seguro es difícil convertirse en uno....

Un suspiro amargo salió de la boca de Bell, durante todo el día solo escuchó comentarios como "Lo siento, te ves muy débil como para meterte aquí" o "los humanos no son muy útiles en el calabozo, menos un mocoso como tú" y un sin fin de insultos disimulados o no por las ultimas dos horas.

–haa... Nope, no conseguiré llegar al final del día a este paso.

Con una mano en la cara, Bell resopló un poco aburrido y preocupado porque sus bolsillos estaban casi vacíos. Tenía que entrar a una <Familia> si o si.

–sin embargo... ¿No me haría algo famoso si entro al calabozo sin una <Falna>?

Una idea iluminó sus apagados ojos rubíes y sus pies se movieron más rápido.

++++++++++

Primero, Bell tomó rumbo al gremio para registrarse como aventurero.

El gremio estaba en la zona al noroeste de Orario, no muy lejos de la gran "torre del cielo" babel. Su estructura elegante lo hacía parecer un castillo en miniatura, aunque no muy pequeño que digamos, Bell estimó que tenía al menos unos 4 pisos. Se trataría de un lugar intimidante para un chico de las afueras de la ciudad, pero Bell solo aprecio su arquitectura un momento antes de pasar por el enorme arco abierto que tenían como entrada.

–hmm, según esta guía debería contactar con una de las recepcionistas para el registro.

El peliblanco había comprado un libro guía de 1000 valis para conocer el funcionamiento de Orario, desde ubicaciones importantes hasta instrucciones de empleo como el convertirse en aventurero por ejemplo.

--bien, primero tienes que firmar aqui chico.

Había caminado hacia una barra donde una hermosa elfa de cabello castaño esperaba tras una reja de seguridad, Bell preguntó por un formulario de aventurero y, como costumbre de todos los días, la elfa encargada saco una hoja y pluma con tinta debajo de su escritorio.

Solo por si acaso le explico parte del contrato del gremio donde decía que su posible muerte en el calabozo no tendría repercusiones para ellos y que no se encargarían de su muerte o posibles deudas tras perder su vida.

–Aunque no es como que le tenga un especial apego a mi vida.

No hubo una sonrisa pero si un pequeño sentimiento de burla dentro de él mientras asentía a la chica

--entendido.

No lo pensó mucho, no porque fuera alguien descuidado, simplemente no tenía problema en aceptar esa clase de riesgos.

Los Aventureros eran, después de todo, aventureros. No había otra forma de decirlo más allá del nombre del empleo.

Eran personas dispuestos a morir por sus objetivos, algo que no estaba muy lejos de la personalidad del chico.

Una vez que terminó se apresuró en deslizar la carta de inscripción por debajo de la abertura de la reja.

La elfa se ajustó los lentes y dio un pequeño vistazo por curiosidad, ya que Bell se veía muy joven... Y un poco apuesto.

Carta de registro:

Nombre: Bell cranel

Edad: 16

Ocupacion anterior: ninguna

Familia: <vacío>

Raza: humano

Un pequeño suspiro se escapó de ella luego de ver la casilla de <Familia> en blanco.

--Cranel-san, ¿acaso usted no pertenece a alguna Familia?

--¿Lo has visto no? Entiendo si hay problemas, pero lo he intentado todo el día y me estoy quedando corto de dinero... ¿Podrías hacer una excepción para mí?.

El chico inclinó su cuerpo y puso una mano en la barra con una expresión vacía, pero sus ojos miraban a la elfa con una súplica silenciosa.

--absolutamente no...  no pienso mandar a un joven a su muerte.

La elfa ocultó su mirada tras el brillo de sus lentes. El chico entendió lo que quiso decir, pero echarse para atrás no era opción

--pensé que esto no era un problema para el gremio.

--tal vez no para la institución, pero para mí si lo es. Por favor no me obligue a ir en contra de mi ética aquí.

Ella se mantuvo firme y se cruzó de brazos, el chico se llevó la impresión
de que se trataba de una persona firme t obstinada en vez de una recepcionista común del gremio.

--Debe haber algo que pueda hacer, ¿Verdad? Un aventurero lv.1 en su primer día no debe estar muy lejos de mi, ¿Quieres alguna prueba.

Sin embargo, el tampoco era alguien que retrocedía fácilmente.

--*suspiro* al menos déjeme ver su equipamiento. Es imposible que esté preparado si no tiene por lo menos un arma.

--por supuesto–Bell dirigió su mano izquierda a su cintura y sacó la espada que siempre descansaba ahí–aqui tienes.

La espada sobre la mesa permanecía enfundada salvo por un poco del filo que Bell mostró a la elfa para comprobar la calidad.

La secretaria admitió no saber mucho de armas, pero dijo que uno de los aventureros a su cargo luego de años de trabajar en el gremio le enseñó un pequeño truco.

Ella tomó una hoja de papel y la paso por el filo suavemente, entonces–

--¡....!

--¿que te parece?

El chico entrecerró sus ojos cuando la elfa se sorprendió del resultado, la hoja se cortó por la mitad al mínimo contacto con el filo de la katana.

No solo eso, el diseño de la katana desprendía cierta "calidad" y elegancia en ella.

Como mínimo era un arma de <segunda clase>, pero ella sentía que era un arma de <primera clase>.

Si eso no era suficiente para pasar, nada lo sería. Incluso si solo se trataba de un niño rico que dejó a su familia con esa espada en sus manos en busca de hacerse un nombre o algo en ese calibre de estupidez, ella pensó que estaba bien para los primeros <pisos>

--... Esta bien, pero no te recomiendo pasar del <piso 2>, y asegúrate de comprar alguna que otra poción en el camino.

--muchas gracias, hmm...

--llamame Eina.

--muchas gracias, Eina-san.

El asintió para mostrar su gratitud sincera, Eina se sorprendió un poco de lo educado de era y le dio un vistazo a la letra en su carta, sin duda una caligrafía elegante y una ortográfica pulcra, por lo que la elfa se acomodó las gafas y se arriesgo a preguntar.

--¿no serás un noble que perdió la cabeza o si?.

La pregunta vino acompañada de una sonrisa nerviosa con un toque amargo.

--¿eh?.

Él solo ladeó su cabeza hacia un lado en respuesta, entonces negó rápidamente.

--para nada... Supongo que recibí una buena educación a lo largo de mi vida.

++++++++++

Despues de agradecerle a la elfa que se presentó como Eina y aclarar su malentendido Bell se dirigió al calabozo sin esperar mucho o preocuparse de otros detalles.

No llevaba una armadura de alta calidad, solo un peto de metal que trajo desde su hogar, no tenía grebas ni brazaletes para cubrir las demás partes, aunque eso no le causo ansiedad o miedo particulares.

La espada–no, Yamato era suficiente para alejar cualquier preocupación que un sucio pasillo lleno de monstruos podría brindar.

Eso fue lo que pensó luego de entrar a <Babel> y bajar por el agujero que actuaba de entrada.

Todo iba bien hasta que puso un pie sobre el suelo rocoso del <Calabozo>.

*Escalofrío*

Una ola de frío lo invadió desde la punta de su pie hasta su espalda, era una sensación que el nunca había sentido antes.

Algo que retumbaba, una cantidad de magia salvaje increíble en las paredes le dio la sensación de que–

--este lugar está.... ¿Vivo?

Extraño, misterioso... ¿Cautivante? La sorpresa inicial se convirtió en curiosidad y el chico se dirigió a la pared más cercana para tocarla con su mano.

--ese de ahí se ve un poco raro...

--callate, no vaya ser el miembro de alguna <Familia> importante.

--debes arreglar esos problemas de confianza bro...

–ah cierto, hay más personas por aquí...

No le importó en absoluto el susurro completamente audible de uno de los aventureros en un grupo que pasaba al lado de él, Bell se dejó llevar del sentimiento.

La sensación de frío de antes se transmitió por sus dedos y, finalmente, entendió el escalofrío.

Bell tuvo una reacción violenta, la sangre en sus venas aceleró, y en lo más profundo de si mismo, tal vez su alma en si, fue tocada por lo que sea que haya sido lo que inició la conexión.

Ducha experiencia terminó con un mensaje.

"Bienvenido a casa".

Esa sola oración transmitida como una interferencia a su cerebro lo tomó por sorpresa y lo hizo apartarse rápidamente.

--está bien... Eso fue bastante extraño. No lo haré de nuevo.

Su usual mascara de indiferencia lo abandonó por un momento. "Concentrémonos en lo importante" dijo, fijando su mirada en el pasillo ahora vacío de personas, estaba solo.

--me pregunto que tan fuertes podrían ser los monstruos del <piso 1>.

*Crack*

Una grieta se extendió por la pared donde había colocado su mano antes y una garra salió de ella un segundo después.

Un monstruo que acababa de nacer ya era uno por completo, ni siquiera había salido por completo cuando su garra ya se movía para cortar la cara de Bell y dejarlo ciego.

Aunque no suponía un problema.

--¿un goblin?.

El brazo corto del monstruo hizo que un paso hacia atrás fuera suficiente para evitar el ataque.

Bell: dicen que el calabozo es impredecible, pero que el <piso 1> este infestado de goblins no le da muchas opciones al comienzo.

--¡raghhhhhhh!

El monstruo grupo en señal de lucha, emergiendo por completo de la pared empezó a mover sus pies para correr hacia Bell.

Sus garras solo se movían para arañar lo que tuviera al frente, sin un orden o estrategia.

--por ahora eres bastante patético.

--¿aghhhhhhh!?

El goblin quedo desorientado cuando Bell desapareció frente a sus ojos.

--oye.

--¿....?

Un dedo del chico tocó la cabeza del monstruo como si se estuviera burlando un poco.

--*¡kuruk!*

El cuerpo del monstruo se giro con sorpresa y trato de atacar con su brazo derecho–no fue lo suficientemente rápido.

*Shrink*.

El silbido del metal desenvainado se escuchó suavemente en el pasillo vacío y luego–

*Paf*

El sonido del brazo amputado del goblin al caer al suelo.

Con sus ojos inyectados en sangre, el goblin experimento miedo por primera vez en su corta vida.

--¿¡Krek!?

--y aquí va el primero.

Un destello blanco paso por su cuello y su cabeza cayó al suelo.

La espada volvió a su funda lentamente, hubo un sonido de envaine y el goblin se convirtió en cenizas.

--no parece que esté <piso> vaya a darme problemas.

Expresó en voz alta mientras recogía la piedra mágica de ese primer goblin, Bell jugó con ella tirandola al aire para atraparla al bajar, de ese modo siguió caminando hacia el siguiente monstruo.

+++++++++++

--¡Hah!.

La "experiencia de aventurero" duró unas cuantas horas más y el chico pudo haberse emocionado un poco tras bajar un par de pisos.

Ubicación: <piso 3>.

El nivel de dificultad aumento un poco en cantidad y diversidad–ahora se encontraba con Kobolds, eran bestias humanoides gigantes que median un promedio de casi dos metros de altura–pero nada que se le saliera de las manos.

Fue entonces cuando varias voces llegaron a su oido.

--oye Finn, ¿¡por que nos retiramos tan rapido!? ¡Ni si quiera llegamos tan profundo está vez! Sólo el <piso 50>.

--calmate un poco, ¿¡quieres Bete!? El juicio del capitán jamás falla, además era una expedición para recaudar fondos nada más.

Los gritos provenían del siguiente pasillo  no muy adelante, parecían ser las siluetas de un beastman y una amazona.

--Tione, Bete... Por favor no se peleen cuando estamos tan cerca de llegar a casa. Es inapropiado cuando hay miradas cerca.

El chico no tenía intención de ser chismoso pero estaban en el camino de todos modos, y el aparente capitán lo encontró de excusa para callar a sus subordinados.

El par de ojos azules del hobbit se pusieron encima de Bell cuando terminó de hablar.

--no creo que deba preocuparse por mi, es mi primer día y fácilmente podría morir antes de querer contarle a alguien de una discusión normal entre compañeros.

Su respuesta inmediata tras la mirada del Hobbit sorprendió a este un poco, pero este solo asintió y siguió con su camino.

–no hay duda... Estos tipos son los que venían en la guía de la ciudad.

Miembros de una <Familia> lo suficientemente famosa como para ser considerada un símbolo de Orario, con el estandarte del bufón sonriente en las banderas de alguno que otro miembro como insignia.

Dirigida por la "Lanza" de la raza Hobbit, se alzaron como una de las facciones más fuertes de la ciudad.

–<Familia Loki>, si tan solo pudiera....

La procesión continuó tranquilamente, tal vez porque se sentía avergonzado de esperar a que el resto de lo que parecía ser un gran grupo terminara de pasar por el túnel, el decidió dar por sentado su día ahora que su bolsa de <piedras mágicas> estaba llena.

++++++++

De vuelta al gremio, Bell buscó a la recepcionista de antes ya que Eina le resultó agradable, pero no parecía estar de turno.

El decidió dejar de buscar y fue directo al intercambio de piedras mágicas.

--disculpa, es mi primer día como aventurero así que no se mucho del cambio de <piedras mágicas>...

--no se preocupe aventurero-san, primero déjeme ver sus <piedras mágicas> y le explicaré el cambio.

"Por supuesto, aquí tiene" el busco en su cinturón y arrojó la bolsa de piedras en frente de la chica que atendía el puesto.

--esto.... Dijiste que era tu primer día ¿no?

--Así es. ¿Hay algún problema?

--No... Solo que la cantidad que hay aquí no pertenecen a un novato, ¿acaso es un combatiente experimentado de afuera?

El cabello rosado de la recepcionista se agitó un poco cuando la chica movió su rostro con sorpresa y curiosidad.

Aunque la respuesta del chico solo aumento el sentimiento.

--experimentado en combate tal vez pero... Si se refiere a alguna clase de <falna> antes de llegar a la ciudad no, jamás he hecho algún pacto con un dios y no lo pensé hasta hace poco.

Misha–nombre de la recepcionista– sintió una presión extraña proveniente de esos ojos rubies que la miraban con frialdad a pesar del tono amable del chico.

–moo, Eina ganará la apuesta si este chico resulta ser tan genial como se ve...

Ella recordó algo de hace no muchas horas.

.

.

.

--espero que se encuentre bien...

Minutos después de que Bell partiera al calabozo eina estaba con sus colegas del gremio, angustiada por el posible destino del chico.

--Eina, Eina, ¿Cuantas veces te hemos dicho que no pongas demasiada fe en los novatos? Sabes que la mayoría son o desquiciados que se lanzan a su propia muerte o muy avariciosos que encuentran su final muy temprano.

Un <beastman> con orejas de perro fue el que habló, el parecía ser algún miembro viejo del gremio.

--lo se muy bien Gerente, pero ese chico... ¿Como explicarlo? Era algo así como Wallenstein-shi.

Recostada en su escritorio, la recepcionista de cabello rosado, Misha, reaccionó.

--Estás segura, ¿Eina? No es como que Aiz-chan fuera alguien común entre los aventureros... Incluso puedo decir que no hay mucha gente con esa expresión de muñeca como ella la tiene.

--¿es algo así como su presencia? Es apagado y parece vivir en su propio mundo.

Uno creería que ser comparado con Aiz Wallenstein, una famosa aventurera, sería algo bueno, pero los demás colegas del gremio presentes se expresaron para demostrar lo contrario.

-- entonces va a morir

--Sip, definitivamente lo hara

-- ¿que tal si apostamos cuanto dura? yo digo que máximo un mes

--¿un mes? ¿No escuchaste a Eina cuando lo comparo con esa chica Wallenstein? Esa actitud y el hecho de que al parecer no tiene <Familia> lo llevará a la tumba en menos de una semana.

Las opiniones en forma de crítica solo se amontonaban mientras la mayoría se unía a la apuesta solo por eso.

Al final, todos en la sala se unieron a la apuesta y una pequeña fiesta de opiniones se formó.

Lo que colmó la paciencia de Eina.

--¡ya basta!

Grito la elfa enojada y todos fijaron su atencion en ella para ver que tenia por decir.

--entonces yo apuesto que el sobrevivira 6 meses y sera conocido en todo orario para entonces.

Todos en la sala empezaron a reir un poco. Y aunque la mirada nefasta de Eina cayó las risas, no pudo hacer lo mismo con las opiniones.

-- escuchate, Eina. Por mucho que se parezca a la <princesa de la espada> o lo que sea, a un aventurero le toma mínimo más de un año subir del lv.1 aún cuando tienes un poco de talento, incluso el record de la más rápida que esa misma Aiz Wallenstein tiene es de exactamente un año.

La realidad cruel de Orario era esa, por lo que la apuesta de Eina de que un simple lv.1 se haría famoso en seis meses fue considerada estúpida.

--hmph, ya verán...

.

.

.

.

–sip, es imposible que lo logré... ¿Verdad?

Ahora que lo tenía en frente, Misha podía comprender a lo que Eina se refería sobre el chico. No era una sorpresa de que la humana peli rosado entendiera a su amiga, ya que ella misma era consejera de Aiz Wallenstein pero la opinión de que lo lograría seguía siendo exagerada.

--uh... ¿Misha-san?.

--¡ah! ¡Perdón me distraje! Jejeje, no te preocupes, toma tu pago de hoy. ¡Fue un excelente primer día por cierto, espero verte por aquí mañana!

--.... Si, muchas gracias.

Ella soltó una bolsa con muchos Valis frente a él y Bell la tomó para irse en silencio, Misha lo siguió con la mirada luego de darle otro vistazo a la bolsa de piedra mágica.

–menuda bestia hay que ser para matar por lo menos 70 monstruos en tu primer día... ¡Y sin una <Falna>! El chico no era solo una cara bonita ¿eh?.

Por alguna razón Misha se sintió como si tuviera que prepararse para un posible "te lo dije" de Eina en los próximos 6 meses.

++++++++++++

--debo admitir que fue un error entrar al calabozo con el estómago vacío... Uhhh.

El chico se estiró un poco al salir del baño en su habitación de la posada.

Su equipo removido estaba en la cama, aunque todo estaba ordenado.

--Es una lastima que no tenga una cocina.... No me deja de otra que un restaurante.

Afortunadamente, su cartera no estaba vacía ya.

El peliblanco agarró el abrigo negro que utilizaba sobre su camisa del mismo color y salió con Yamato en su cinturón.

+++++++++++

Habían pasado unos minutos desde que salio y bell se había dirigido a un bar que le llamo la atención, su nombre era "la señora de la abundancia".

Al abrir la puerta del bar inmediatamente se encontró con la hermosa figura de una chica con cabellos cenicientos.

--oh.... disculpe aventurero-san, pase por favor.

Ella se echó con su bandeja hacia un lado e hizo un gesto con el brazo para que Bell entrara al bar.

Pese a esto el chico se quedó quieto frente a ella.

–esta persona tiene algo...

Hubo algo raro por un momento, su mirada parecía... ¿Invasiva? además de eso, le había llamado aventurero a la primera.

--recibes a muchos aventureros parece...

--tal vez... O tal vez sea porque un civil no llevaría un arma tan llamativa. Te-he~

Olvidándose de la sensación rara de antes, Bell parecía más bien cautivado por esa sonrisa astuta en el rostro de la chica mientras está apuntaba hacia Yamato.

--tienes un punto... Je, disculpe mis modales ¿pero podría preguntar por su nombre ahora?.

El se inclinó cortésmente hacia ella con la mano en su pecho, parecía más un caballero que un aventurero por su tono y comportamiento.

--oh, mira que aparte de aventurero tenemos un caballero... Mi nombre es Syr Flover.

Siguiendo su juego, la chica, Syr, se inclinó un poco al presentarse, como una damisela noble.

--es un placer Syr-san.

--jaja, el gusto es todo mío Bell-san, en especial si pides mucha comida y dejas propina~

La encantadora mesera se acercó a el, lo jaló y tomó su mano para instarlo a entrar. Bell se sorprendió un poco de lo asertiva que era a pesar de que el mismo se dejó llevar un poco.

Ambos recorrieron el restaurante hasta la barra, en su camino Bell logró sentir una especie de ambiente hogareño, aunque ese ambiente se cortó de repente cuando se cruzó con la cantinera amenazante tras llegar a su destino.

--Mama Mia, te traje un cliente nuevo~ al parecer es un aventurero novato que busca como gastar su primer salario aquí.

--oi, Syr-san...

--que la pases bien, Bell-san~.

"¿Caí en una trampa?" La sensación de haber sido tomado con la guardia baja fue algo que no había pasado en mucho tiempo y no pudo cubrir su sorpresa al hablar en voz alta al ver cómo Syr se iba con un aura floral encima de ella.

--parece que le agradas a Syr... Pobre de ti mocoso, te espera una vida difícil.

–¿por que lo dice como si esa chica fuera una bruja o algo?.

Bell tenía los ojos en blanco, su atención se volvió hacia la cantinera que deslizó un vaso de madera vacío enfrente de él.

--Y bien ¿Vas a seguir escondido tras esa cara de piedra tuya o vas a pedirme que te sirva algo? Tu decides mocoso.

--oh... Hmm, un poco de cerveza está bien, pero me gustaría pedir algo de comer además de eso.

--je, en ese caso mi nombre es Mia, la dueña del bar. Toma asiento y ponte cómodo ¿quieres?

Emocionada, la mujer apoyo con fuerza su brazo en la barra mientras con el otro llenaba hasta el fondo el vaso de Bell con cerveza que venía del dispensador de un barril lleno del liquido embriagador.

–Se ve muy feliz.... ¿Acaso no iba a decirme eso hasta que expresara mis deseos de gastar?

El estaba pensando en la reacción de la enana, aunque decidió no darle muchas vueltas a eso y pidió un platillo con mucha carne para acompañar la cerveza.

Bell no se consideraba un Alcohólico pero gracias a cierta persona este encontró cierto agrado en la bebida, sin mencionar que era una de las pocas cosas que a Bell le gustaba hacer en compañía, aunque no había nada que hacer al momento con su falta de compañeros.

--hay un poco de ruido... ¿Alguien llegó al bar?.

Un pequeño bullicio de susurros invadió el bar, Bell escucho algo sobre la <Familia Loki> pero no le prestó mucha atención gracias a que la camarera de antes, Syr, se había sentado a su lado.

Ellos comenzaron a hablar un poco, tal vez porque el chico se sentía de buen humor.

--entonces, ¿este bar aguantó la <era oscura> de Orario? Suena impresionante.

--si, si. ¡Mama Mia es bastante fuerte! Incluso si venían escuadrones a este bar ella los mandaría a volar fácilmente, ¿Sabes?

--aún no me creo que sea de la raza Enana... Es incluso más alta que yo.

--jajaja, ¿lastima tu orgullo?

--por supuesto que no lo hace–Bell tomó una pausa para dar un sorbo al vaso que Mia le sirvió hace menos de un minuto– solo pensaba que este bar es increíble... Al igual que su personal.

--oh ya basta, harás que me sonroje.

Ella puso sus manos en sus mejillas y agitó su cabeza de forma adorable, Syr no podía ser descrita que otra cosa además de "encantadora".

Sorprendentemente, Bell y ella hablaron por varios minutos y el chico se dió cuenta de lo bien que parecían llevarse.

--Aunque parece que debo irme... No puedo dejar que Mia-san y Syr-san me dejen arruinado...–el primer rastro de una broma salió de los labios de Bell–

--jeje, parece que el caballero por fin descubrió mi plan secreto para que te quedes a lavar los platos~

Syr pinchaba una de sus mejillas con el dedo mientras hablaba con una expresión inocente que no iba con las palabras que recién salieron de su boca.

--aunque Bell-san me sorprende también, eres bastante más resistente de lo que pensaba.

Los ojos de la chica, de color ceniza como su cabello miraron por un segundo hacia los vasos alrededor de Bell, había más de una docena ya.

--el alcohol y yo no nos llevamos mal supongo.

Aunque no era inmune a los efectos, puesto que las mejillas de Bell se calentaron con un poco de rojo.

++++++++++++

Mientras el chico y la camarera hablaban en la barra. Una conversación totalmente diferente se desarrollaba en una mesa redonda en medio del bar.

--al menos la expedición terminó bien.... Ya no podía más cuando estábamos en los primeros pisos, menos mal no había ningún monstruo para entonces.

Dijo un chico de aspecto común con su frente pegada a la mesa, ya estaba completamente borracho.

--¡menos mal ganamos dinero para venir al bar de Mia! Suerte que mamá elfa no está aquí para detenerme de aprovecharme de las chicas borrachas, ¿¡Verdad Aiz!?.

Una mujer pelirroja grito y todos la miraron con un poco de desaprobación o algunos con diversión, pero la expresión de esa mujer cambio cuando la chica en cuestión no respondió.

--¿Aiz? ¡Gareth!, ¿viste a donde se fue?

--no... Pero estaba justo al lado tuyo cuando te trajeron ese vaso de cerve–... Oh oh.

El enano golpeó su barba con una expresión un poco nerviosa que se transfirió a la diosa en frente de él.

-- ¡Oigan todos! ¡Código rojo! ¡AIZ ESTA BORRACHA!

++++++++++++

--fue una buena noche... ¿O no compañero?

Bell salió del bar con una expresión un poco suelta, casi divertida mientras le hablaba a Yamato en su cinturón. El chico se retracto rápidamente después.

–espera, creo que el alcohol si me hizo un poquito de efecto.

Algo parecido a una sonrisa divertida pasó por sus labios, sin duda estaba relajado.

Aunque ese sentimiento duró poco.

*Shrink*

Todo pasó muy rápido, pero el chico alcanzó a reaccionar por instinto cuando escuchó el sonido de una espada desenvainada detrás de él y sacó a Yamato mientras se daba la vuelta.

--¿¡qu–!?

Fue obligado a tomar una posición de defensa gracias al borrón oscuro de una silueta que era demasiado rápida como para reaccionar por completo.

*Clank*

Bell escucho el sonido del metal chocando, de eso estaba seguro cuando fue mandado a volar varios metros por la calle de piedra.

--Ah... ¿Donde se fue el monstruo?

--¿Pero que demonios?–el chico interrumpió su rodaje por el suelo y se levantó lleno de polvo.

La silueta oscura, que estaba encorvada y con una postura torpe parecía ser el atacante, pero Bell no se sentía seguro.

--por allá.

Y de repente, la silueta dio un paso y ya estaba frente a él.

--¡¡E-Espera!!

El destello plateado de un arma alcanzó a iluminar hebras de cabello rubio en su visión, pero Bell también vio el peligroso filo de una espada que parecía venir por su vida.

–¿Tenia que llamar a la mala suerte verdad?

No tenía tiempo para pensar ni correr, solo intentar defenderse. Cuando la espada del enemigo ya estaba cerca suyo, Bell puso su espada en vertical con la punta apuntando hacía abajo para disminuir el impacto.

*Clunk*

Era solo el segundo golpe que recibía a través de su espada, pero casi arranca a Yamato de su mano entumecida solo con la fuerza del golpe.

–esa persona es más fuerte que cualquier otro monstruo o persona con el que he peleado hasta ahora.... Tengo que–

Cuando Bell había perdido el equilibrio y su cuerpo se inclinó hacia atrás en contra de su voluntad, el chico ya planeaba como aprovechar este impulso de no ser porque algo impacto directo en su mandíbula y lo hizo dar una vuelta completa en el aire.

*Thud*

La cabeza de Bell cayó sobre el pavimento y todo su cuerpo fallaba en responder... Sólo luego de unos segundos pudo darse la vuelta para ponerse boca arriba.

–oh Mier...da

La consciencia se iba, pero el podía ver la figura femenina que lo acechaba acercarse con esa espada mientras emitía una presencia aterradora.

–Deberia usar mi magia, no... Piensa en algo más... Argh–.

Bell trató de apretar el puño, pero había perdido todas sus fuerzas y quedó inconsciente.

--oh, el conejo monstruo se desmayo... Exterminar.

Con una expresión tonta, la chica rubia sostuvo su espada en lo alto y estuvo a punto de matar al chico. ¿Acaso la historia de Bell terminaría aquí?

--OI AIZ, ¿¡QUE ESTAS HACIENDO!?.

El grito distante de una diosa preocupada distrajo a la chica, esta ladeando la cabeza confundida.

--¿Loki? Estoy matando monstruos, ¿que haces en el calabozo?

--¡ese no es un monstruo Aiz!

La figura musculosa de un enano salto como una bala y previno a Aiz de cometer una atrocidad al darle con una tableada.

--¡fiu... Ya está contenida!

--gracias al cielo.

El alivio de la diosa y el enano duró poco cuando una Amazona vio el cuerpo de Bell tirado en el suelo.

--*gulp* ¿¡mató a alguien!?

Los ojos cerrados de la diosa se abrieron por completo hasta casi salirse de sus cuencas

--¡mierda!... Llévenlo a la sede con Riveria, ¡RAPIDO! ¡O la Policía vendrá por Aiz!.

La noche tranquila se volvió un infierno escandaloso, pero la <Familia> de aventureros y su diosa lograron llevarse al chico a salvo.

+++++++++++++

E

l ambiente tranquilo de las colinas y su viento amable golpeando contra sus mejillas envolvió a Bell de repente.

--ah... ¿Un sueño?

No de vuelta a la realidad, sino a los rincones de su mente, se dio cuenta el chico.

Parecía su aldea natal, todo estaba tranquilo... Hasta que comenzaron los gritos.

--¡a-ayudaaaaa! ¡Un Monstruo!

Era un pequeño goblin, como el que había matado en el calabozo–o para ser más preciso, este goblin era inclusive más débil por ser de afuera.

Incluso así, el pequeño monstruo mataría al niño.

--¡no voy a llegar a tiempo!– gritó un adulto mientras el grito desgarrador de la madre del niño se escuchaba de fondo.

Un simple ataque del goblin bastaría para matar al chico indefenso y asustado, era un recuerdo muy distante en la mente de Bell. Sin embargo.

El no era el chico en el suelo.

*Flash*

--¿*kuk*?.

--¿h-huh?

El destello violeta de algún arma desorientó la visión del chico, sin embargo su sorpresa más grande fue la cabeza decapitada del goblin frente a sus pies.

--¡a-ahhhhh! ¡Mami!.

El niño salió corriendo hacia los brazos de su madre, mientras los adultos miraban al asesino del goblin.

--e-ese no es–

--¿Bell?.

De pie al lado del cuerpo del goblin, una pequeña figura no mucho más grande que el monstruo descansaba en su hombro una pequeña hacha para talar árboles, la misma con la que mató al monstruo hace unos segundos.

Pero eso no era lo perturbador, la razón por la que los adultos estaban en shock era..

--espera, ¿esa cosa alrededor de él es magia?

--¿un humano sin <Falna> puede despertar magia?

Ellos prestaron más atención a la masa oscura de poder mágico que rodeaba su cuerpo como una sombra pegada a la piel en algunas partes, incluso ocupaba el aire alrededor de él como miasma.

El niño que fue salvado por Bell también lo vio, su mirada llena de... Miedo.

--M-monstruo...

Bell lo escuchó, pero al igual que un muñeco, no reaccionó de ninguna forma, el siempre había sido así desde que llegó a la aldea y fue recibido por su abuelo.

Aunque no pudo recordar mucho antes de llegar a la aldea, Bell si recordó su tiempo en ella.

Su infancia estuvo marcada por ser un marginado en esa aldea, un niño maldito con magia que parecía la oscuridad misma... Nadie, ni siquiera los adultos, se acercarían a el.

–no... Siempre hay una excepción– por primera vez y aunque fue su imagen dentro del sueño, Bell sonrió con un poco de alegría al ver a cierta persona en sus recuerdos de infancia.

--¡jeje, vamos a jugar juntos Bell!

El sueño/recuerdo se acabó justo después de que esa voz llegase a sus oídos.

.

.

.

Los ojos de Bell se abrieron lentamente... Encontrándose con un par de ojos rojos semi–cerrados que se abrieron al instante en que los suyos cobraron consciencia.

--¡Si! Esta vivo... ¡Esta vivo!

--no exageres Loki, vino aquí sin un solo hueso roto.

'¿Donde estoy... Porque me duele tanto la mandíbula?' Aún no podía pensar bien con esa sensación de golpe encima, pero Bell se encontraba bien.

--Cuando lo revisaste antes, Riveria, ¿dijiste que no tenía <Falna> verdad? Ahora que lo veo bien, me encontré a este chico en el tercer <piso> del calabozo... Su constitución es realmente impresionante para un humano.

--ohh, te está llamando la atención, ¿Finn?

--solo un poco... Espero que no esté molesto con nosotros o que quiera presentar cargos.

--jajaja tranquilo tranquilo... Lo callaremos si eso pasa.

Varias voces se amontonaron una sobre otra, primero la de esa diosa embaucadora, luego la de una elfa de cabello verde jade y ojos del mismo color, por último, el capitán hobbit de aspecto joven que hablaba con preocupación por las palabras de su diosa.

--este... ¿Me pueden decir que lugar este?

--oh, ¿ya te sientes mejor jovencito?

--no diría mejor, solo... Consciente, creo.

Bell se levantó de la cama y se puso una mano en la frente cuando ya no pudo evitar quedarse quieto.

--¿Y ustedes son?.

Su vista seguía borrosa porque apenas volvía en si, pero la sorpresa de Bell casi lo hace desmayarse cuando enfocó su vista.

El finalmente pudo darse cuenta de a quienes les estaba hablando de manera tan descuidada.

--perdona mis malos modales... *Ejem* Soy Finn Deimne, el <Valiente>. Actualmente te encuentras en la enfermería de la <Mansion Crepúsculo>.

--¿M-mansion Crepúsculo? ¿Eso no es...–?.

Los ojos de Bell se abrieron más rápido por la sorpresa y anticipación antes de que el Hobbit terminara su frase.

--si, estás en la <Sede> de la <Familia Loki>... ¿Te molestaría decirnos tu nombre?.

--... Me llamo Bell Granel, es un gusto.–'¿Estaba soñando?' se sentía de esa manera. Bell estaba atónito, rápidamente alcanzó su cintura y sintió alivio cuando se encontró a Yamato ahi.

--entonces... Bell-tan, ¿no? Tenemos una propuesta para que no te enojes con nuestra Aiz-tan.

'ah, cierto, La figura que me atacó era...' todo cobró sentido una vez abrió los ojos en la <sede> de la facción más famosa de la ciudad, quien lo atacó probablemente fue la <princesa de la espada>, una aventurera de Lv.5.

Alguien que estaba en los rangos de <primera clase>.

Y frente a el, tanto el hobbit rubio de ojos azules como la mujer elfa a su lado eran de ese mismo rango, incluso un nivel más alto.

Dos lvs.6, Finn Deimne, el <valiente>. Y Riveria Ljos Alf, <Nine Hell>.

Dos aventureros en la cúspide de fuerza de Orario estaban de pie frente al chico que debía parecer un joven en resaca...

--lo... ¿¿Aló?? Tierra llamando a Bell-tan, ¿Esta alguien atendiendo??.

--ah, si. Discúlpeme, no la estaba escuchando.... ¿Loki?

--oye, ¡solo mis hijos tienen derecho a llamarme de esa manera niño!

Ella no abandonó su sonrisa, pero la intención divina que emitía no mentía, la mujer pelirroja que había estado actuando como un payaso todo este tiempo en realidad era la diosa patrona de la <Familia>, en otras palabras era Loki en carne y hueso.

--aunque si aceptas el trato que vamos a proponerte y pasas la prueba serás precisamente.

--¿disculpa?

Las palabras de la elfa lo hicieron pasar de la diosa a lo que ella dijo directamente, parecía que un bombardeo de sucesos estaban cayéndole constantemente.

"¿ahora tenemos tu atención?" Loki se rió entre dientes y acomodo su postura para parecer más magnánima de lo que en verdad era.

Finn se acercó y puso una mano en el hombro de Loki, que estaba arrodilla a un lado de la camilla de Bell y luego miró al chico con su sonrisa característica diciendo:

--¿quieres unirte a la <Familia>?

--.... ¿Eh?

¿Cuántas veces se había impresionado en un solo día? Bell no podía decirlo, pero estaba seguro de que hoy fue uno de los días donde más se sorprendió en toda su vida.

--oye, no hagas esperar a Finn.

La diosa gruñó como si la hubieran ofendido a ella, Bell bajo la mirada y se encontró con la mano del hobbit extendido hacia el. Tal vista hizo que Bell recordase los eventos recientes donde las <Familias> ni siquiera voltearon a mirarlo, y justo ahora había recibido una oferta fantástica de la mejor facción de la ciudad.

Al ver esa mano extendida, ¿Cual sería su decisión? Para Bell, esta era clara como el agua y sonrió de forma leve antes de abrir la boca y tomar la mano de Finn.

--¿cual es la prueba que mencionaste?

++++++++++

-

-Si logras golpearme ganas entendido?

El chico solo asintió a la pregunta de su contrincante. Hace solo unos momentos Finn le había explicado que todos los miembros de la <Familia> antes de Bell se habían ajustado a este especie de "ritual de bautizo" donde tenían como tradición combatir al capitán Hobbit, aunque claro, no era un combate serio, solo de exhibición.

Sin embargo, Finn dejo claro que la forma del combate si era un criterio importante a sus ojos, por lo que Bell lo tomó en cuenta mientras lo llevaban al patio.

–menos mal se me pasó el efecto del alcohol...

Bell miró el cielo mañanero con una expresión complicada al darse cuenta que la <princesa de la espada> lo mando a dormir por tanto tiempo. Sin embargo rápidamente se concentro en el combate.

Con Loki de referí y Gareth junto a Riveria de testigos, el combate iniciaría de forma justa luego de que ambos se dieran la mano.

--buena suerte.

--gracias <Valiente>, creo que la voy a necesitar...–Bell parecía inseguro al momento del apretón.

--... ¡Comiencen!

La diosa dio la señal, pero nadie se movió.

--....

--....

Tanto Finn como Bell no movieron un solo músculo durante el comienzo del duelo, pero eran los ojos de Finn los que estaban más relajados.

Bell por otro lado, tenía una mirada amenazante que bien podía cortarte, pero no mostraba señales de avanzar.

--por cortesía de capitán, siempre dejo que vengan por el primer golpe.

--Que amable... Pero veo que no lo suficiente como para no disminuir esa defensa.

--oh, ¿Te diste cuenta?.

Los ojos del Hobbit se clavaron en el como si Bell fuera un conejo que cazar, y el chico sintió esa poderosa presión que solo un aventurero de <primera clase> podía liberar.

Si el se atreviera a poner un solo dedo del pie dentro del rango de la lanza de Finn entonces–

Derrota absoluta.

'Vaya oponente....' Bell no era un estúpido, lejos de serlo, el chico analizó el combate fríamente... Y no importaba el resultado, siempre era su derrota.

Por supuesto, era imposible que alguien sin <Falna> le ganase a un lv.6 en la actualidad pero la condición del combate era anotar un solo golpe a Finn, de esa forma Bell ganaría.

Y al final...

--*suspiro* es imposible.

--¿...Te rindes?.

El rostro se arrugó con sorpresa. Sus ojos parecían decir "¿tan rápido?" El combate ni siquiera había empezado aún.

Sin embargo.

--oh no, nunca dije eso... Me refería a que es imposible "ganar de manera justa".

Otra de las pautas del combate era:

"Finn no puede hacer trampa", esto no incluía al combatiente que no era Finn.

--¿Entonces? Me estás diciendo que hiciste alguna trampa en el camin–

*Chasquido*

--¿....?

*Paf*.

Fue el sonido de un golpecito. Minúsculo y casi inaudible. Pero Finn lo escuchó.

Venía de su mano, la mano que le había dado a Bell antes de comenzar el combate. Un pequeño estallido provino de ahí.

--¿esto es... Magia?

Era una pequeña mancha oscura en la punta del dedo angular de Finn lo que llamó su atención, el podía ver como la mancha se contraía para formar un puño y luego golpeaba contra la yema de Finn.

--gane, ¿no es cierto?.

Tanto Gareth como Riveria miraban con ojos confusos, Loki se echó a reir y Finn se rió divertidamente.

--¿tienes una magia que hace esto? No me lo esperaba de seguro.

--en realidad cubre todo mi cuerpo–dijo, dejando salir la cobertura negra fuera de su cuerpo, y mostrando alguna que otra marca en su piel–mejora mis características físicas en general, pero también puedo darle alguna que otra forma si me concentro.

--ya veo... Legalmente es un golpe tuyo, supongo... ¿Lo hiciste durante el apretón?

--sip, estaba concentrado para que no se diera cuenta.... Ya sabía que yo no podía ganar sin importar cuánto lo analizaba ¿sabe? ¿No califiqué entonces?

--¡para nada! Usar tu cabeza era lo que quería ver en el combate, en otras palabras pasaste con honores... Bell Cranel de la <Familia Loki>.

++++++++++++

La <bendición> de un dios.... También llamado <Falna>, era el máximo contrario que los mortales y las deidades compartían en este mundo inferior.

Dicho ritual era simple, bastaba con que una gota de sangre(Ichor) de cualquier dios cayera sobre la espalda de un individuo para iniciar el contrato, donde la marca de un dios cubriría tu espalda hasta el final de tus días.

--Yyyy listo, un nuevo "niño" se unió a la <Familia>, Yeiiii... Aunque hubiera preferido a otra adolescente de pechos grandes.

Ignorando el comentario extraño de Loki, Bell bajo la mirada su hoja de <estado>.

Bell cranel

Fuerza: 0 I

Resistencia:0 I

Agilidad: 0 I

Destreza: 0 I

Magia: 0 I

Habilidades:
/////////////////

Magias:

<Darkness>

Maldicion:
Vegh: mejora la fuerza fisica y magica del portador a cambio de su cordura. la maldicion se hace mas fuerte mientras mas personas mate el portador.

En ese papel se reflejaban las estadísticas, habilidades, habilidades de desarrollo, magias y maldiciones del usuario, dichas características cambiarían con el tiempo, pero para Bell seguía siendo lo más básico de lo básico en todo.

Sin embargo la casilla de <maldición> intrigo a Loki un poco por sus condiciones.

'Aunque parece pronto para indagar en su pasado...' la diosa mantuvo su expresión graciosa y toco el hombro de Bell, viendo de reojo el símbolo del bufón sonriente en su espalda. Era su insignia, la marca de Loki.

--Bell-tan~ ahora es turno de conocer a Aiz.

--¿te refieres a la <princesa de la espada>?

--¡esa misma!

--¿eso estará bien? Digo, parecía odiarme.

--oh ¡no,no, no, no! Aiz es así cuando está borracha–lo cual solo pasa una o dos veces al año–¡pero no te preocupes! Ella... Quiere disculparse por ya sabes, noquearte en medio de la calle.

Loki rápidamente gesticuló con sus manos para hacerle saber a Bell que estaba bien para ambos, el chico la miró como un conejo lleno de dudas pero al final asintió.

--ya... Veo.

Aceptó su destino, no podía seguir dándole la espalda al momento.

--ademas quieras creerlo o no, ¡se pegó a ti en la camilla jajajajaja!! Casi te ahorco de los celos pero me contuve porque sabía que Aiz-tan borracha no está en sus cabales.

--espera, ¿que dijiste?

--¡tranquiloooo! ¡Ahora ve tigre!

Loki lo empujó fuera de su habitación.

--vaya que son anima– una persona fuera de la puerta le cayó la boca a Bell–dos....

Ella era un poco más baja que el, así que Bell miró hacia abajo para encontrarse con su mirada.

Dos hermosos, tal vez los mas bellos que había visto, par de ojos dorados esperaban a Bell con un sentimiento complicado en ellos... Era culpa.

--etto... Yo....

La dueña de esos ojos, una chica bellísima, tal vez adolescente. Tenía un cuerpo esbelto y sus pechos eran de un tamaño considerable, sin mencionar su sedoso cabello rubio que se desplegaba frente a él.

Sin embargo, no parecía saber que decir.

--¿....?

Bell ladeó su cabeza, al encontrarse con alguien que no iniciaba la conversación, casi se rinde en hacerlo el mismo porque no era bueno por si solo.

--... Ah, Aiz Wallenstein-san, ¿Verdad? Soy Bell Cranel.

--si, ya te conocia–digo, es un placer.

Ella hizo una pequeña reverencia, luego alzó la cabeza y vio a Bell.

POV Bell Cranel:

Era... ¿Extraño? Una sensación rara que no conocía invadía mi cuerpo cuando veía a esta chica. No, no del todo, más bien...

Cuando veía a Wallenstein-san a los ojos, una sensación de nostalgia crecía en mi... Si, era nostalgia.

Pero... ¿Por qué?.

--Bell...-san?

--¿Si? ¿Que sucede?.

Las palabras de ella me hicieron cobrar el sentido de nuevo, tal vez me sentía un pico maleducado por mirarla tanto que fue por eso que aparté la mirada.

Wallenstein-san por otro lado no parecía tener problemas con mirarme, sino con encontrar las palabras adecuadas para hablar... Honestamente me estaba aburriendo.

--Wallenstein-san, la diosa patrona ya me dijo de tus intenciones de disculpa, pero son innecesarias.

Ignorando el hecho de que somos adolescentes o que ella parecía tener la misma edad que yo–aunque un poco menor probablemente– decidí hablar en un tono profesional.

Ella era mi superior después de todo, debía ser respetuoso. Además esperaba que entendiera que no le guardaba renc–

--lo lamento por dudar y también lo lamento por lo de antes... Estás enojado conmigo, ¿verdad?

¿Eh?

'¿Habia escuchado esa voz antes?' lo dije en mi mente pero descarte esa idea enseguida.

Porque solo había encontrado una voz así de bonita en una única persona aparte de ella.

Decidí aclarar el malentendido rápidamente.

--se equivoca, Wallenstein-san. Yo... También estaba un poco borracho, así que no la culpo si tiene problemas de bebida.

--¿problemas de bebida?

Ignoré su comentario confundido y seguí hablando.

--no sentiría rencor por algo tan infantil, de hecho, fue divertido hasta cierto punto tener un sparring con alguien como usted.

Hice una pequeña reverencia hacia ella para dejar de lado su disculpa de antes, en verdad no sentía que ella tuviera que pedir perdón por algo.

'Con esto es suficiente verdad?'... Eso creía, pero los ojos de Wallenstein-san me cortaban como espadas a cada segundo que mantenía su mirada en mi.

Era la misma mirada de cuchilla que yo tenía.

--no.

--¿eh?.

--dije que no.

--¿por que?

--... Por lo menos le debo un favor, quieres algo en particular.

"¿Un jyagamaru-kun tal vez?" Aunque me sorprendió su iniciativa de nuevo, ¿por qué un jyagamaru-kun?.

'Espera, parece ser alguien que no estará en paz hasta que acepte su favor entonces....' un pequeño suspiro salió de mi boca.

--esta bien ¿tanto quieres devolverme el favor?

--si, mientras pueda con ello.

Ella asintió diligentemente sin desperdiciar una sola palabra.

'Es bueno... No es como que tengamos que ser amigos ni nada' asentí internamente, ciertamente había algo que necesitaba que era difícil de obtener en esta ciudad sin gastar muchos recursos que no tenia.

Entonces hice mi solicitud a Wallenstein-san.

--Guia turística.

--¿Eh?

--necesito a alguien que me muestre la ciudad porque nunca había estado aquí antes.... Aún me pierdo, ¿Me enseñarías la ciudad?.

Extendí mi mano hacia ella luego de separarme un poco para darle espacio, con suerte se negaría....

Sin embargo.

--¡si! Puedo hacerlo.

Una respuesta que no esperaba salió de sus labios en un tono más animado que todos los anteriores. ¿Puede que la <princesa>no sea tan inexpresiva como todos creen?.

Ella aceptó mi mano con entusiasmo 'un agarre fuerte' sonreí levemente al contacto cálido, al menos con esto sabía que no era una mala persona.

--gracias, espero con ansias el día de mañana entonces.

--igual...mente.

Ella repitió mi sonrisa, y por raro que fuese me sentí...feliz.

Tal vez mañana no sea un mal día.

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Fin del capítulo.

Hola a los nuevos y a los viejos lectores. Bueno, quería decirle a los nuevos lectores que no se sorprendan si la calidad de lectura cambia de un momento a otro, no es que lo haga muchas veces pero a veces edito la historia porque los caps viejos me dan un poquito de pena jajajaja (tenía como 14 en ese entonces...) Ah, y para los viejos lectores, si están releyendo esto porque me demoré mucho en actualizar no se preocupen y perdón! Actualizaré lo más rápido posible.

¡Que les vaya bien y adiós!