Danmachi – Bell El Heredero Del Poder - Capitulo 3 – El Dúo Que Deben De Temer.

Silencio y tranquilidad, este día, aunque nublado era así y para una chica rubia era algo relajante, esta se encontraba en la entrada de Orario, vigilando y asegurándose de que nada sucediera con respecto a las personas que llegaban a la ciudad, pero no se encontraba sola ya que algunos de sus compañeros de familia la acompañaban.

En Orario esta chica era muy conocida al igual que su famila, ella es llamada La Princesa de la Espada, Aiz Wallenstein, miembro de la segunda familia más poderosas de Orario, La Familia Loki.

Aiz, debes estar más atenta a cualquier posible inconveniente, no podemos cometer un error como en el calabozo de nuevo, hablaba el que parecía ser su capitán sacándola se sus pensamientos rápidamente.

Era cierto, ellos estaban en esta situación debido a su imprudencia ya que dentro del calabozo se les habían escapado un grupo grande de Minotauros, estos lograron subir varios pisos, lugar donde lamentablemente se encontraban aventureros novatos de nivel 1, no hubo muertos, pero si salieron heridos de gravedad la gran mayoría que se los había topado, pero eso no fue todo, aunque la familia Loki logro acabar con ellos estaban seguros de que al menos 1 seguía con vida escondido en alguna parte de los pisos superiores, esto solo resulto en un pequeño castigo para la familia, la mitad del grupo que estuvo involucrada en el incidente del escape de los minotaruos fue enviada a continuar con la búsqueda y aniquilación del ultimo minotauro, mientras que los demás debían cubrir a los guardias de la entrada de Orario, deberían encargarse de vigilar y revisar a cada persona que entrara a la ciudad.

Aunque algo simple, era tedioso, pero debido a que hubo heridos por culpa de ellos no podían simplemente hacer que nada paso y rechazar el castigo, solo quedaba esperar a que sus compañeros en el calabozo encontraran al minotauro de lo contrario sería el turno de ellos de ir al día siguiente en busca de este, llevaban 4 días en ese ciclo de un grupo buscar en el calabozo y otro hacer de guardia en la entrada de Orario, hasta ahora no habían tenido resultados, no sabían cómo un simple minotauro se podía esconder tan bien en los pisos superiores sobre todo teniendo en cuenta que aventureros de primera clase eran los que lo estaban buscando, solo querían acabar con este tormento cuanto antes y descansar algo de estos días que han tenido.

Así que aquí estaba ella, su capitán Finn un hobbit rubio de ojos azules y sus dos grandes amigas elfas, Riveria la cual tenía un cabello de color verde al igual que sus ojos y Lefiya ella contaba con un pelo de un color anaranjado y unos ojos azules, estos mismos se hallaban cumpliendo con su labor de vigilancia e inspección de los visitantes del lugar.

Ellos seguían en lo suyo, ya casi era medio día y hasta ahora nada fuera de lo común había sucedido.

Pero una extraña sensación les llego, era como una presión sobre todo el lugar, pero que podía causarles aquella sensación, al verse mutuamente supieron que algo no estaba bien por lo que girándose en dirección de donde sus instintos dictaron lograron ver a 3 personas con túnicas oscuras, estos se encontraban en la fila de inspección para entrar a la ciudad, tenían un carruaje más grande de lo normal y no podían ver sus rostros debido a la capucha que tenían puesta, ahora que lo veían bien ese carruaje era anormal en su gran tamaño largo, dudaban siquiera que tuvieran lugar donde dejarlo.

Esto los puso en guardia, estaban seguros de que aquella presión en el ambiente era debido a ellos o más bien a lo que llevaban con sigo, pero no podían atacar sin razón alguna, por lo que dejando cualquier otra cosa que estuvieran haciendo rodearon a los sujetos y teniendo sus manos en sus armas en señal de estar listos para pelear, razón por lo que les dieron una advertencia rapida.

Ustedes, retiren sus capuchas y no hagan ningún movimiento extraño o nos veremos obligados a retenerlos, ordenaba el Hobbit Finn a los encapuchados.

Debido a la situación los comerciantes, turistas y nuevos posibles aventureros se alejaban del lugar, era claro que sea cual sea el problema no debían estar involucrados.

Al verse rodeados no tenían más alternativa que adelantar sus planes, cuando tuvieron la oportunidad los tres simulaban levantar sus manos a modo de rendición, solamente para meter sus manos en las túnicas y cada uno sacar un bastón mágico que libero un gran brillo segador, esto aturdió momentáneamente a las personas a su alrededor.

Cuando la luz cegadora desapareció se dieron cuenta de que los sujetos también lo habían hecho y en su lugar, justo donde antes estaba el carruaje ahora había 5 monstruos de dos metros de apariencia similar a los Minotauros con dos cuernos grandes y curvos, piel negra, cabello rojo y ojos amarillos y uno de ellos tenía una espada larga en mano y se veía más imponente que los demas.

Barbarians, murmuro la rubia cuando logro verlos bien, pero esto significaba un peligro inminente, no para ellos, si no para las personas aquí presentes, protegerlos y acabar con la amenaza lo más rápido posible era el objetivo de los 4 ahora, en un mismo pensamiento en común 2 de ellos, Aiz y Finn rápidamente se lanzaban al combate cuerpo a cuerpo mientras las otras dos elfas comenzaban con su cantico de magia.

Todos aléjense lo más que puedan, gritaba el capitán de la familia Loki haciendo que todos a su alrededor corrieran rápidamente hacia la dirección más segura que pudieran encontrar ahora mismo.

Los monstruos reaccionaron a esta acción por lo que empezaron a seguir a las personas, pero dos de ellos eran atravesados por una lanza y una espada de parte de ambos rubios que se movieron a una velocidad increíble.

Esto estuvo cerca de matarlos, cerca ya que aun siendo empalados por las armas se movían desesperadamente e intentaban golpear a sus atacantes.

Mientras el resto continuo la persecución, ignorando a los suyos y a los dos miembros de la familia Loki, pero cuando menos lo esperaron varios hechizos en ráfaga los hacían retroceder.

Aquí no podían desatar todo su poder, lo sabían perfectamente, un solo ataque más fuerte de la cuenta podría dañar a los civiles más que los propios monstruos, solo debían esperar a que se alejaran lo suficiente o en su contrario retenerlos para hacer que sus compañeros los acaben.

Viendo a sus compañeras en problemas los dos rubios sacaron ambas armas del cuerpo de los monstruos e inmediatamente ambos partieron por la mitad a sus adversarios quienes se hicieron polvo al momento

Crece... entre la multitud de personas había una persona que claramente estaba recitando un cantico de magia, y al tener puesto un velo no se podía distinguir quien era ni tampoco parte de lo que decía solamente pasaba desapercibida en medio del caos.

Esto es malo, no podre seguir con este hechizo más tiempo, pensaba la elfa peli naranja sabiendo que tarde o temprano el hechizo se les agotaría y tendrían que comenzar de nuevo con el cantico

Y de la misma forma pensaba su compañera Riveria, quien era más consiente que aun invocando su hechizo más rápido, esto les daría una oportunidad a los monstruos de acabar con las personas

Por lo que poco apoco empezaba a debilitarse los continuos ataques, así que, sin poder evitarlo, estos se detuvieron por unos momentos, comenzando rápidamente a cargar de nuevo con sus hechizos para retener a las criaturas.

Tan pronto como las elfas detuvieron su arremetida de ataques mágicos los 3 barbarian restantes se lanzaban de vuelta, esta vez arremetiendo contra un pequeño grupo de comerciantes que intentaban huir del lugar.

Que tengas gloria y fantasías y crece.... Se podía distinguir algunas palabras de la misma persona aun sin ser notada.

Ante esto ambos rubios reaccionaron al instante aproximándose a su objetivo final, teniendo preparados un golpe decisivo para los otros dos de ellos.

A lo que se vieron gratamente sorprendidos al ver que uno de ellos, el que tenía una espada, en una sorprendente acción lazo su espada justo a donde se encontraba la elfa peli naranja, conocida como Lefiya.

(Poner la cancion del principio en este punto)

uchide no kozuchi, termino de decir la persona en concreto a lo que un brillo segador se hizo presente y lo que casi nadie noto fue la forma de martillo que cayó a un lado del responsable de dicha magia.

tan pronto les dio la reacción que tenían a la familia Loki de intentar detener esa arma o de saber que fue ese brillo, a una velocidad casi imposible de seguir la forma de lo que parecía un rayo repelía la espada antes de llegar a su objetivo y a ese mismo ritmo una silueta dentro del rayo extendía su mano y de este salieron 3 rayos cargados de un inmenso poder mágico en dirección de los monstruos pasando a un lado de Aiz y Finn, siendo las criaturas las cuales fueron reducidas a cenizas ante la vista. incomprendida de los 4 miembros de la familia Loki y de paso a los civiles en el área que solo podían cubrirse de la fuerte ráfaga de viento que en consecuencia se había desatado.

Y justo cuando lograron divisar las siluetas responsables de lo acontecido, vieron, por un lado, justo delante de la elfa peli naranja a un chico peli blanco, de ojos rojos de unos 15 años, con una gabardina, botas y pantalón de color negro, siendo un extraño e inusual brillo que desbordaba de su cuerpo de las cosas que más destacaban de él.

Y por el otro, ya sin su velo puesto, debido a la anterior ventisca había una chica de aparentemente la misma edad que el peli blanco, pero lo resaltante de ella era su cabellera rubia junto a sus orejas de zorro, ella vestía un kimono rojo y por deducción rápida determinaron era una Renart.

Ambos mantenían una mirada firme llena de determinación, y a su alrededor un aura pura los acompañaba y esta misma sorprendía y a la vez llenaba de dudas a los presentes.

Fin Del Capítulo 3.