Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

˚ ༘✶ ⋆。˚014.

˚ ⁀➷

Saiko esquivó el ataque de Boruto con una agilidad impresionante, pero su rostro mostraba claramente su enfado. Antes de que pudiera contraatacar, Boruto, quien volvía a ser controlado por Momoshiki, lanzó otro ataque en su contra y así poder alejarla de nosotros.

—¡Tú debes de ser Momoshiki! —gritó Saiko mientras volvía a esquivar el ataque que le lanzaban—. ¡¿Qué haces protegiendo a estas personas?! ¡Se supone que a ti no te importan las vidas de los demás!

—No. No me importan —dijo Momoshiki a través del cuerpo de Boruto—. Es solo que, mientras observaba dentro de este chico, he podido notar lo fundamental que puede llegar a ser esa chica para mi plan.

—¿Tu plan? —preguntó Code, quien no movía un solo dedo al ver que atacaban a su compañera—. Ya comprendo. Piensas invocar al árbol divino utilizando a Kawaki, pero para que él coopere contigo debes de mantener a esa chica con vida.

—Entiendes la situación muy rápido, Code —dijo Momoshiki—. Sí. Tienes razón y por ello destruiré a los que se interponen en el camino.

—¡Espera! ¡Si dañas a Saiko, Kyoko también sufrirá! —exclamó Kawaki.

—Lo único que debo evitar es no matarla —dijo Momoshiki, observando a Saiko con maldad—. Primero me encargaré de ella y luego iré por los demás que estorban.

Saiko miraba a Momoshiki con una mezcla de sorpresa y confusión, mientras que yo me sentía preocupada por el hecho de que mi hermano estaba siendo controlado.

—Papá, debemos de recuperar a Boruto —dije al momento en que buscaba algo entre mis bolsillos—. La última vez, lo traje de regreso con una gran cantidad de chakra que tuvo que absorber —expliqué mientras sacaba el guantelete ninja que siempre traía conmigo—. No hay mucho tiempo. Así que, haré uso de esto de nuevo.

Mi padre asintió, comprendiendo mi plan. Me puse el guante, y mientras Momoshiki estaba distraído con Saiko, lancé todos los jutsus posibles que traía en aquel guantelete para que Boruto los absorbiera y volviera a recuperar el control de su cuerpo.

Momoshiki absorbió por completo mis ataques. Sin embargo, esta vez no se fue y nos dejó completamente sorprendidos.

—Parece ser que este niño no tiene planeado regresar tan pronto —dijo Momoshiki, sonriendo con arrogancia.

—¿Por qué? ¿Por qué Boruto no querría regresar? —pregunté, angustiada por el bienestar de mi hermano menor.

—Boruto debe de estar preocupado por su poder —dijo Kawaki—. Su poder actual no puede superar el de Saiko y Code. Es por ello por lo que está permitiendo que Momoshiki continué aquí.

—¿Y qué vamos a hacer ahora? —pregunté, mirando a mi padre y Kawaki—. No podemos dejar que esto siga así. Tenemos que detenerlos de alguna manera.

Mi padre y Kawaki intercambiaron miradas, buscando una solución a nuestra situación. La presencia de Saiko, Code y ahora la de Momoshiki representaba una amenaza considerable, y necesitábamos actuar rápidamente para detenerlos antes de que pudieran causar más daño.

Kawaki se lanzó contra Momoshiki para proteger a Saiko, mientras que mi padre y yo nos mantuvimos al margen. Sabía que mi padre no actuaría de inmediato al Code tener al señor Shikamaru como rehén. También sabía que Kawaki no haría nada contra Saiko o Code para no lastimarme a mí.

«¿Qué podemos hacer?» «¿Qué puedo hacer?». Esas preguntas retumbaban en mi mente, pero no encontraba alguna respuesta. Sabía que había que hacer algo, pero no sabía qué.

Mi mente se estaba volviendo un enredo, pues no encontraba una solución para derrotar a tres enemigos a la vez. Sentía tanta impotencia al no poder hacer nada para ayudar en una situación como esta.

Fue entonces que, en medio de la confusión y la sensación de impotencia, una idea comenzó a formarse en mi cabeza. Una idea que podría traer de regreso a Boruto, pero también una idea que haría que Saiko y Code pudieran ser derrotados.

«¿Funcionará?». La pregunta sobre si funcionaría esta idea o no comenzó a rondarme. Sin embargo, no había tiempo para dudarlo. Debía actuar con rapidez. No podía permitir que la duda o el miedo me detuviera.

Si quería salvar a mi hermano, a Kawaki y a los demás, debía tener confianza y actuar ahora. Después de todo, esta sería la única oportunidad que tendría para acabar con esto.

—Papá, solo tendremos una oportunidad —dije, tratando de mantener la calma a pesar de la angustia que sentía—. Espero que todo funcione.

—¿Qué quieres decir, Kyoko? —preguntó mi padre, observándome con confusión.

—Por favor, cuida de Kawaki, mis hermanos y madre —dije, formando una pequeña sonrisa mientras tocaba con suavidad su pecho—. Y por favor, perdóname por la tristeza a la que te someteré.

Antes de que pudiera decirme algo o hacer algo, lo alejé de mi lado con ayuda de mi guantelete ninja. Entonces, mientras me encontraba sola, he tomado un Kunai del suelo y apuntado a mi corazón.

—¡Alto, Kyoko! ¡No lo hagas! —gritó desesperado mi padre, quien no tardó en comenzar a correr hacia donde me encontraba para detenerme.

El desesperado grito de mi padre alertó a Kawaki, quien no tardó en mirar en mi dirección y al ver lo que estaba planeando, ha comenzado a correr hasta aquí.

—¡Kyoko! —exclamó Kawaki.

Los gritos de mi padre y los de Kawaki se mezclaron en mis oídos, lo cual me hizo por un momento dudar. Sin embargo, mi determinación por acabar con esto de una vez por todas fue más fuerte.

—Lo siento, papá, Kawaki. Esto es lo único que puedo hacer ahora —susurré con voz entrecortada, mientras sentía la punta del Kunai presionando mi pecho.

Cerré los ojos y con un movimiento rápido, clavé el Kunai en mi pecho. Un dolor ardiente se propagó por mi cuerpo, mis músculos se contrajeron y mi respiración se volvió entrecortada. Sabía que mi decisión causaría un gran sufrimiento a mi familia y Kawaki, pero también sabía que esta era la única manera para detener a Saiko, Code y Momoshiki.

Saiko se iría conmigo debido a que estábamos vinculadas y Boruto rompería la conexión con Momoshiki, por lo que tendrían una oportunidad para derrotar a Code sin limitaciones.

El tiempo parecía detenerse a mi alrededor. Escuchaba los gritos desesperados de mi padre y de Kawaki, pero también percibía la angustia de Saiko y Boruto por mi drástica acción.

A medida que la oscuridad me envolvía, he sentido como alguien sostenía mi cuerpo y tomaba mi mano; reconocí el cálido contacto de Kawaki.

—Kyoko, por favor, no me dejes —susurró Kawaki con voz temblorosa, su agarre en mi mano apretándose con fuerza.

—Tranquila, Kyoko —oí mencionar a mi padre, quien intentaba en vano detener el flujo de sangre que brotaba de la herida en mi pecho—. Ya le dije a Sakura que venga hacia aquí. Ella te ayudará... Ella se salvará, así que, mantente fuerte...

El tiempo parecía transcurrir en cámara lenta mientras mi conciencia se desvanecía lentamente. A medida que mi visión se oscurecía, pude ver el rostro angustiado de mi padre y las lágrimas en los ojos de Kawaki.

A pesar del dolor físico en el cual me encontraba, me sentía en paz con mi decisión. Sabía que mi sacrificio no sería en vano y que, de alguna manera, ellos lograrían derrotar a Code.

Mis pensamientos se desvanecían lentamente mientras la oscuridad me envolvía por completo. Todo a mi alrededor se volvía borroso y distante, y finalmente, me sumergí en un profundo sueño del cual no despertaría.

De repente, dejé de sentir dolor o de sentir la calidez que Kawaki me transmitía. Estaba en un lugar completamente oscuro, por lo que creí que este era el sitio al cual la gente venía cuando fallecía, a la espera de la decisión de algún ser superior que te mandaría al infierno o cielo.

—No puedo creer lo que has hecho —oí la voz de Saiko desde la oscuridad—. Acabar con tu propia vida para detenerme. ¿Acaso no sentiste miedo?

—Tal vez haya sentido miedo —respondí, mi voz resonando en la oscuridad—. Pero sabía que esta era la única solución para detenerte y proteger a los que amo.

Saiko permaneció en silencio por un momento, como si estuviera procesando mis palabras. Finalmente, habló de nuevo, esta vez con un tono más suave.

—Te has vuelto sorprendente, Kyoko. No, siempre lo has sido y es por ello por lo que te tenía envidia.

La voz de Saiko resonaba en la oscuridad, y aunque sus palabras eran sorprendentes, también revelaban una parte de ella que no había mostrado antes.

—¿Envidia? —pregunté, sintiendo curiosidad—. ¿Por qué tendrías envidia de mí?

Hubo otro momento de silencio antes de que Saiko respondiera, su voz era más tranquila ahora, como si estuviera reflexionando sobre todo lo que había sucedido.

—Tú tenías todo lo que yo quería, Kyoko —dijo Saiko—. Tenías una buena salud, tenías el cariño de Kawaki y ahora, tenías una familia que te quería y protegía. Algo que yo nunca llegué a tener.

Sus palabras resonaron en mi mente, haciéndome comprender un poco más sobre los sentimientos de Saiko.

—Saiko, lo siento. Nunca quise causarte dolor —respondí con sinceridad—. De haber sabido como te sentías, habría hecho lo posible por ayudarte.

—Lo sé, Kyoko. Eres una chica amable.

—Tal vez en otra vida volvamos a encontrarnos y tal vez en esa vida todo sea diferente.

Mis palabras resonaron en la oscuridad, creando un momento de paz y reflexión en medio del caos que había experimentado antes. A pesar de nuestras diferencias y conflictos, quería que Saiko sintiera que aquí había alguien que esperaba verla en otra vida.

—Gracias, Kyoko —dijo Saiko con sinceridad—. Sin embargo, no habrá otra vida.

—¿Qué quieres decir? —pregunté, confusa por sus palabras.

—Significa que esto no es el final para ti, Kyoko. Tu historia aún no ha terminado —La voz de Saiko sonaba serena, como si estuviera tratando de transmitirme una especie de consuelo—. Todavía estás a tiempo para regresar.

Aunque mi situación parecía irreversible, Saiko me estaba dando una pequeña esperanza de poder regresar con mis seres queridos.

∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙∙


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro