52; AMOR VERDADERO
❝AMOR VERDADERO❞
Siempre por más que le costara era sincera, odiaba las mentiras más que nada, por lo que no podía mantenerse callada, a pesar de saber que iba a hacer añicos su gran corazón.
-Luego de lo que te diré, todos esos sentimientos desaparecerán -enfrenta su mirada, mientras toma una bocanada de aire.
-¿Qué dices? -frunce el ceño y lleva la mano a su mejilla-. Jamás podrían desaparecer, porque yo te...
Se aleja de él llevándose una mirada de dolor de su parte, hasta decidió callar su confesión, por lo que ella habló.
-Estuve con alguien más.
-¿Qué? ¿A q-que te refieres?
-Creo que no es necesario decirlo...
-No es cierto -ríe histérico-. No es cierto. Sólo estás tan molesta conmigo porque desaparecí que quieres herirme, para que sienta lo que tú...
-¡Creí que ya no te importaba! -su voz se quiebra-. ¡Te envié un maldito mensaje terminándote, pero ni siquiera has sido capaz de verlo!
-¡¿Me terminaste con un maldito mensaje?! -grita furioso sobresaltándola, tirando el ramo de rosas a un costado provocando que los pétalos caigan-. Intenté llamarte antes de irme ¡Sólo tenías que esperarme, maldita sea! ¡¿No pudiste aguantar dos putas semanas?! -su voz se quiebra-. ¡¿Alguna vez fue cierto cuando decías que me querías?!
Tomó una bocanada de aire, acercándose a la puerta donde apoyó uno de sus brazos y su cabeza en este, quebrando en llanto. Sentía como el dolor se volvía parte de él, su alma comenzaba a sangrar por las heridas nuevas. Volvía a sentirse completamente miserable.
Había creído que podría enamorarla por completo, que podría ser él único que estuviera en su mente y corazón, así como lo era ella, quiso ser el motivo de su felicidad como lo es para él. Pero ahora se daba cuenta que no merecía serlo, nunca iba a lograr que alguien lo amara porque estaba jodido y tenía que mentir para que no se alejaran.
-Taehyung...-solloza arrepentida con la intención de acercarse, porque no podía verlo de esa manera por su culpa, pero este golpeó la puerta con la palma de su mano sobresaltándola.
-¡Estás tan jodida como yo! -escupe molesto, volteando a verla con desprecio y una sonrisa amarga se dibuja en sus labios por un momento-. Púdrete, Yehyun.
Salió dando un portazo, lamentándose por haberle dado el poder de alegrarle la vida en un segundo, como también el poder de dañarle en un segundo toda su vida.
Su mirada de desprecio le dolía a la castaña, sentía que la quemaba por dentro por lo que comenzó a sollozar desconsoladamente, mientras cubría su rostro, hasta que tuvo el impulso de salir a buscarlo.
Comenzó a correr con las lágrimas aún cayendo por sus mejillas, pero este ya estaba dentro de su coche y cuando quiso tratar de abrir la puerta, encendió el motor para así conducir.
-¡Taehyung, no! -comenzó a golpear la ventanilla de su coche al no poder abrir la puerta-. ¡Taehyung! -grito desesperada al verlo alejarse―. Lo siento tanto...
(...)
A Yehyun no le importó que su vista se nublara por momentos por las lágrimas, estaba decidida a intentar arreglar las cosas con Taehyung, por lo que lo siguió en su coche sin importarle que él lo notara.
Estaba completamente arrepentida por lo que hizo, porque él único hombre que había demostrado que realmente la amaba fue él, aunque desapareciera de la nada. No podía evitar confiar en su mirada que le gritaba que no hizo nada malo, nada para causarle daño, mientras que ella decidió olvidarlo de un momento para el otro.
Al verlo bajarse de su coche, se bajó rápidamente del suyo corriendo desesperada hacia él, tomándolo del brazo.
-¡Taehyung, escúchame!
- ¡Suéltame! -ejerce presión en su agarre para que lo suelte, provocando que casi caiga el suelo-. ¡No me toques! No vuelvas a atreverte a acercarte a mí.
-Pero debes escucharme -solloza.
- ¿Escucharte? -suelta una risa cínica, mientras entra a su casa-. ¡¿Escuchar como tenías sexo con otro, mientras yo te extrañaba?! Que imbécil he sido.
-No digas eso.
-¡Es la maldita verdad!
-¡Creí que me habías abandonado!
Taehyung se acercó a ella, tomándola del brazo. No quería ser débil, no quería que por ver sus ojos llenos de arrepentimiento y dolor, cayera nuevamente a sus pies como si no le hubiera destrozado el corazón.
Tenía que ser fuerte como siempre lo fue con cada traición, sin importar de quién se tratara, por lo que la oscuridad comenzaba a expandirse por todo su cuerpo, recordando las palabras de Jhope, detestando darse cuenta que tenía razón.
-¡¿Quién es el hombre?! ¡Dime! -ordena sacudiéndola-. ¡Dímelo!
-Me haces daño, Taehyung, suéltame -gime de dolor.
-¡¿Con quién me engañaste?! Dime, ¿acaso él te lo hizo como yo? -acaricia su mejilla con algo de brusquedad-. ¿Él te hizo gritar su nombre? ¿Te volvió loca de placer?
-¡Suéltame! -lo empujó débilmente.
Las palabras de Seokjin se instalaron en su mente, al igual que los momentos de Jungkook y Yehyun mirándose.
Los latidos de su corazón comenzaron a acelerarse, mientras tembloroso inspiraba y exhalaba, sintiéndose un completo imbécil por haber creído que ella podría haber llegado a amarlo como lo amó a él
-Dime que no fue especialmente con él-dice con un hilo de voz, ahogando un sollozo-. Por favor, Yehyun, dímelo. Dime que no fue con él...
-Taehyung...
- Fue con Jungkook, ¿no es así? ¡¿Fue con él?! -vuelve a tomarla del brazo-. ¡Dímelo!
Yehyun no era capaz de responder a su pregunta por lo que quebró en llanto, mientras este la soltaba, alejándola, provocando que casi cayera nuevamente, pero es que sentía como todo a su alrededor tenía sentido. Se acercó torpemente a la pequeña mesa redonda, mientras las lágrimas caían por sus mejillas, porque mientras la oscuridad seguía expandiéndose por su cuerpo, lo llevaba a rincones donde sus demonios comenzaban a torturarlo.
El miedo quería paralizarlo, sentía que se le dificultaba respirar y tomó lo botella de whisky con su mano temblorosas tirándola contra la pared, mientras soltaba un grito de dolor cubriéndose los ojos donde no dejaban de brotar las lágrimas.
Yehyun chilló asustada llevando las manos a su rostro con temor de que pudiese llegar a hacer alguna locura, pero era incapaz de dañarla aunque se encontraba completamente roto por ella. A paso lento se sentó en un escalón aferrándose a las barandas, sollozando desconsoladamente, sintiéndose completamente miserable.
-¿No fue suficiente lo que te di para que vayas a los brazos de él? -solloza.
-No es así -toma una bocanada de aire para controlar su llanto, acercándose lentamente.
-Sé que nunca lo olvídaste. Siempre noté la forma en que lo miras cuando está cerca, noté tus celos al verlo con otra y aún así...-ríe cínico-. Aún así, creí que podría llegar a sacarlo de tu mente y corazón. Fui un estúpido -solloza cubriéndose el rostro con las manos-. ¡Un maldito imbécil!
-Lo que siento por ti es completamente distinto, pero estoy enamorada de ti, Taehyung. Realmente te quiero, de eso estoy segura -se pone frente a él a su altura, pero se sobresaltó cuando este la tomó bruscamente del brazo, mirándola con sus ojos inyectados de sangre.
-No digas esa mierda, porque yo prefiero morir antes de lastimarte como tú lo has hecho. ¿Sabes cuál es la mayor diferencia entre Jungkook y yo? -sorbe su nariz.
- No hagas ésto...
- Sí, Jungkook moriría por ti, pero también moriría por quienes lo rodean porque tiene tan buen corazón -ríe limpiando sus lágrimas-. Pero yo sólo moriría por ti, Yehyun. Sólo por ti, maldición.
-Creí que me habías abandonado, Taehyung.
El verlo roto por ella la llenaba de culpa y le hacía ver que nunca podrían volver a ser lo mismo, lo que le recordaba las palabras del policía. Sabía que estaba jodido, y aún así, en su momento no le importó herirlo más, disfrutando aquellas horas con Jungkook.
No quería seguir dañándolo, no era capaz porque la culpa la asfixiaba, sólo quería volver el tiempo atrás donde este la miraba con dulzura y le sonreía feliz por verla.
-Lo siento. Ya no volverás a saber de mí.
-¡No! -la toma de su brazo cayendo de rodillas, para luego aferrarse a su cintura-. ¡Te amo, Yehyun! -grita con su respiración pesada, provocando que se quede paralizada al escuchar aquella confesión-. Te amo demasiado. No me dejes. Por favor.
Fue engañado, lo traicionaron con el enemigo, pero aún así cuando le decía a su corazón que era momento de alejarse, se aferraba a ella, a la esperanza de que pudiera ser amado como este la amaba. Detestaba a su corazón, lo detestaba por ser tan inocente, débil y tonto.
No podía imaginarse confiando en la castaña nuevamente, no podía imaginarse seguir como si nada, pero no quería estar sin ella. Eso lo asustaba terriblemente.
-T-Taehyung, ¿qué dices? -titubea con su voz rota.
-Te amo peligrosamente, Yehyun -la mira con sus ojos inyectados de sangre por haber llorado.
-No. Tú no puedes amarme y mucho menos luego de lo que te he hecho...
-¡Pero lo hago! No me dejes por él, no lo hagas...
Yehyun tragó con dificultad, mientras las lágrimas seguían cayendo por sus mejillas. En sus ojos podía ver la sinceridad de su confesión, pero también el dolor, lo que hizo que su corazón diera un vuelco.
-No volveré a lastimarte. Se acabó, Taehyung. Me iré -trata de sonar firme en sus palabras y saca sus manos al ejercer fuerza-. Lo siento. Realmente, lo siento -comenzó a dirigirse hacia la salida, tratando de aguantar los sollozos.
-¡No me dejes, Yehyun! -grita desesperado y cuando intenta levantarse, vuelve a caer al suelo aterrizando con las palmas de su manos-. ¡Te estás llevando mi vida! ¡Por favor, vuelve, Yehyun!
En ese momento el corazón del castaño se partió al darse cuenta que no se quedaría su lado, porque amaba a alguien más. Se derrumbó en sollozos desconsolados, deseando desaparecer junto a sus lágrimas porque la agonía era demasiada para él.
Sentía que la castaña lo mataba lentamente con su abandono, arrancando su corazón sin piedad.
Yehyun se dirigió a su coche, mientras limpiaba sus lágrimas sintiendo un gran vacío en su pecho, hasta que la tomaron bruscamente del brazo sobresaltándola, pero al ver a Dalmi se tranquilizó.
-Dalmi...
-¡Aléjate de Taehyung! -le da una bofetada, provocando que su rostro se gire y lleve la mano a la mejilla enrojecida, gimiendo de dolor.
-No...
-Eres una maldita zorra -escupe furiosa-. Te advertí que no te atrevieras a lastimarlo y aún así decidiste revolcarte con el estúpido policía. No vuelvas a acercarte a Taehyung, porque te juro que vas a arrepentirte.
-No lo haré -enfrenta su mirada, tratando de contener sus lágrimas-. Sé que tú eres la indicada para él.
-Algo tarde te has dado cuenta, ¿no crees? -la mira con desagrado―. Vete.
Yehyun se subió a su coche tratando de mantener la calma luego de todo lo sucedido, pues la comprendía perfectamente. La pelirroja estaba perdidamente enamorada de Taehyung, y sólo busca protegerlo de todo mal aunque ella no sea correspondida.
Era un amor verdadero, un amor que quizás ella no era capaz de sentir por él, porque ya lo sintió por el policía.
(...)
Los días pasaban y Yehyun ya no sabía quién era. Un vacío se instaló en su pecho que con los días parecía que se expandía, haciéndola sentir como si tuviera un desierto allí.
Cuando se miraba en el espejo no se reconocía, podía notar su piel pálida, sus grandes ojeras, sus ojos enrojecidos porque por las noches sólo podía llorar por la culpa, por su manera de actuar impulsiva, por no comprender sus sentimientos y lastimar a los hombres que robaron su corazón.
Yoongi estaba a su lado, cada día trataba de levantar su ánimo aunque por momentos fuera en vano, aún así no la dejaba sola porque ella no lo hizo cuando era al revés. Le hizo un café y comenzaron a comer palomitas de maíz mientras miraban una película, pero al ver que sale una pareja feliz, Yoongi la puso en pausa, sintiéndose culpable.
-Lo siento, no sabía que es de romance.
-Está bien -no puede evitar soltar una carcajada, al ver como su mejor amigo se preocupa por ella-. Mejor háblame de ti.
-¿Qué quieres saber? -pregunta desconcertado.
-Ayer viste a Saha -sonríe con picardía-. ¿Qué sucedió?
- S-Sólo háblamos...y nos besamos -mete el puñado en su boca sintiendo sus mejillas arder.
-¡¿Qué?! -chilla sorprendida-. ¡¿Cómo sucedió de nuevo?!
-¡No lo sé! -pasa las manos por su rostro sintiéndose frustrado-. Me siento atraído por ella, Yehyun, pero no lo entiendo.
―Quizás eres bisexual.
―No. Yo era gay, muy gay, ¿recuerdas?
-Me gusta verte así -admite con una sonrisa mientras apoya su cabeza en su mano-. Es tierno.
-¿Verme confundido? -la mira desconcertado.
-No. Ella te hace bien, Yoongi -asegura-. No la lastimes, sólo tienes que dejarle en claro lo que te está sucediendo e ir lento.
El rubio asintió mientras recordaba los momentos que pasó con la pelinegra el día anterior, por lo que trataba de borrar la tonta sonrisa que se formó en sus labios.
Soltó un suspiro y miró a su amiga.
-Aún no entiendo porqué no te das una oportunidad con Jungkook.
-¡Porque el realmente rompió mi corazón cuando prometió jamás hacerlo! -alza la voz sintiendo un nudo en su garganta al recordarlo-. ¿Crees que podría ser capaz de soportar que lo haga otra vez? Porque yo siento que no lo seré.
-Pero tú se lo has roto ahora.
-Estoy exhausta, Yoongi. No entiendo para nada mis sentimientos.
-Trata de explicarme.
-Con Jungkook siento que es todo simple. Me hace soñar, es como si todo fuera color de rosas y sigue acelerando mi corazón como la primera vez, pero no sé cómo perdonarlo. Eso provocó mi inseguridad. Temo darme una oportunidad con él y que vuelva a ocultarme cosas que son importartes, que vuelva a mentirme, que vuelva a creer en él y no en mí -suspira desviando la mirada-. En cambio, con Taehyung, yo...me siento realmente amada, me da seguridad. Es todo tan intenso, las peleas, el sexo, el amor, las sensaciones que provoca en mí, pero también es abrumador. Siento que me enloquece -pasa las manos por su rostro sintiéndose frustrada-. No entiendo, Yoongi.
-¿Qué piensas hacer?
-No lo sé -suspira-. Lo mejor es alejarme de ambos y ya no lastimarlos más con mi confusión.
-Yo creo que hay uno que quieres más que al otro, pero tratas de negarlo por miedo. Deberías quedarte con esa persona.
-Yoongi...
-Es más, búscalo ahora -la ánima-. Ve y dile lo que sientes, es lo mejor que puedes hacer.
-No creo...
-¡Búscalo, Yehyun! -la toma del brazo haciendo que se levante-. Y sé feliz, ya no sientas culpa -sonríe-. No pienses en nadie, sólo en ti. Date la oportunidad y lucha por amor.
La castaña estaba completamente confundida por la forma de actuar de su mejor amigo. Pues, creyó que ambos podrían hablar de lo cruel que es el amor y llorar, mientras tomaban helado, pero estaba comenzando a tener algo especial con una mujer que lo estaba haciendo dudar cada vez más de su orientación sexual.
Al parecer estaba teniendo buenos momentos con ella, porque al contrario de cerrarse al amor y hablar mal de este, motivaba a su mejor amiga a volver a arriesgarse. Algo que le enseñó Saha.
Comenzó a conducir, mientras las palabras de Yoongi, se repitían una y otra vez en su mente lo que le daba fuerza para volver a arriesgarse.
« ¿Quién es mi verdadero amor? » pensaba siendo invadida por los recuerdos con ambos hombres.
(...)
Jungkook miraba unos expedientes atentamente, hasta que sintió una presencia en su oficina y al levantar la cabeza se encontró con Yangmi.
Se apoyó en su escritorio, algo normal ya que habían formado una amistad en ese tiempo que llevaban trabajando juntos.
Al principio no se había esperado que fuese agradable, y aunque había momentos donde no estaban de acuerdo que se formaban pequeñas discusiones, luego hablaban como buenos amigos.
-¿Sigues molesto? -se cruza de brazos mirándolo atenta. Este suspiró y conectó su mirada con la de ella, viendo el brillo de burla en sus ojos.
-No lo estoy -se cruza de brazos igual que ella, inclinándose hacia atrás en la silla.
-No te creo -sonríe-. Sé que quieres formar parte de la investigación, pero no permitiré que te excedas como hiciste la última vez.
-Es algo muy importante para mí, Yangmi.
-Eres mi amigo y con Nam estamos de acuerdo en que debemos cuidarte. Además, eres un buen Oficial al que no podemos perder ―presionó los labios y asintió, tratando de ponerse en el lugar de ambos-. Sucede algo más, ¿cierto? Ya conozco esa mirada, Jungkook -señala sus ojos, mientras ríe.
-Es sólo que...la mujer que amo me ha vuelto a alejar de su lado -hace una mueca, sacando su mano que lo seguía señalando, para apoyarla en la pierna de ella-. Ya no sé qué debo hacer con Yehyun, porque creo que he llegado a mi límite.
-Vaya, que complicado. Quizás deberías preguntarle qué es lo que quiere para saber si alejarte o no -se encoge de hombros-. Mi exesposo meses atrás actuaba igual, días que me amaba y días que me quería lejos de él. Una vez que ya no pude soportarlo más, exploté y le dije eso. No le quedó más que confesarme que me era infiel, así que le pedí el divorcio -suelta una risa cínica-. Son cosas que pasan en el amor, pero eso se supera, JK -apoya la mano en su hombro.
El pelinegro asintió, pensando que quizás tenía razón. Al levantar su rostro y ver el suyo tan cerca como nunca antes pasó, se sorprendió por un momento, pero no pudo evitar observar cada centímetro de este.
Su cabello castaño claro estaba atado en un rodete como siempre, sus cejas perfiladas y sus ojos avellanas que si no fuese porque no contenían un brillo especial, le recordarían a los de Yehyun. Su nariz era respignada, y por último bajó la mirada a sus labios delgados que tenían un brillo labial rosado. Nunca antes se preguntó cuál sería su sabor, pero en ese momento estaba tratando de soportar las ganas, a pesar de que la tensión sexual entre ambos comenzó a aumentar. Ella era consciente de lo que sucedía, y también se preguntaba qué sucedería si en ese momento juntaba sus labios con los de él.
Hasta que Jungkook no lo soportó más y la tomó de la nuca juntando sus labios con algo de brusquedad, sin importarle que sea su Jefa y sea siete años mayor que él. Pues, se la hacía realmente atractiva y cuando la veía sin el uniforme, no podía evitar admirar su cuerpo, sus curvas.
Sus lenguas habían comenzado una guerra, mientras Yangmi tirana de su cabello corto, y Jungkook comienza a desprender su camisa sin importarle que en algún momento alguien pudiese verlos. Sólo deseaba poder estar dentro de ella.
Eso fue hasta que escucharon la puerta abrirse y cuando ambos se separaron agitados, voltearon encontrándose con Yehyun. Ella los veía completamente sorprendida, sintiendo como su corazón dejaba de latir por un momento a causa de la gran decepción.
¡Hola!
¿Qué creen que pase ahora con Jungkook y Yehyun? ¿Creen que habrá enfrentamiento entre Jungkook y Taehyung?
Bien, se acabaron las actualizaciones de todos los días, espero que las hayan disfrutado
No se olviden de votar y comentar
¡Nos leemos pronto!
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