Narra Lucian 

La madre de Hiro nos miro un momento y rapidamente se dio cuenta de la herida en mi mejilla, no le hacia falta desir nada la mujer asi como hermosa se le notaba que era lista pero a la vez muy compasiva como para seguir sembrando conflicto, solo le dijo a Elizabett que ella se encargaria personalmente y que podia irse a su casa, la chica confiada no protesto en lo mas minimo, comence a dudar ya que no sabia como desmentir el gran desastre que Elizabett avia probocado y tampoco queria hablar mal de ella porque no queria que la mama de Hiro me odiara, ella se ve como una mujer muy respetable, mas bella que cualquier modelo que yo siquiera haya visto en mi vida. Ella sin decir nada se acerco a mi y con su mano suabemente toco mi mejilla mientras me miraba fijamente a los ojos...tiene una mirada intensa y veo de donde eredo eso Hiro.

-Te hizo mucho daño, de verdad lo siento mucho es la primera vez que veo que actua de esta forma- dijo ella lo que me sorprendio ya que no esperaba que llegara a esa conclusion sin que siquiera yo me justificara.

-no se preocupe...no dolio mucho solo fue superficial- respondi

-dejame curarte eso porfavor joven caballeroso- dijo ella, normalmente soy muy agresivo con las personas pero con ella me cuesta serlo, es una mujer tan educada y gentil que jamas podria responderle mal....acaso me gusta?... noo es diferente, por ella siento mucho respeto.

Nos sentamos en el sofa y ella saco un botiquin pequeño de primeros auxilios que estaba en una de las gabetas de un mueble de la habitacion, curo mi herida como si yo fuer un adorno de porcelana fria que ella temia mucho romper, me gustaria tener una madre asi, que cuidara de esta forma de mi, mi madre era tan diferente... ella es mas perfeccionista al igual que mi padre, son frios conmigo lo cual odio, mas ahora que siento...la calidad de madre en alguien completamente ajena a mi familia, Hiro tiene mucha suerte y ahora entiendo porque no quiere dejar a su madre sola, es una mujer fantastica, ni yo quisiera soltarla ni un momento, estos pensamientos me hacen darme cuenta que aun siendo adulto soy demasiado infantil al quererme aferrar a una figura materna.

-muchas gracias señora, es usted muy amable- dije cuando ella termino

-dime Elena ese es mi nombre- dijo ella

-bien señora Elena y no se preocupe no le dire a ladie lo de Rlizabett- respondi pensando que ella no querria decirle a su hijo que su prometida estaba DEMENTE 

-si no quieres decirlo es decicion tuya, yo no la encare porque no me gustan las peleas ni la violencia- dijo ella recogiendo un mechon de su cabello negro y colocandolo tras de su oreja, tenia unos pendientes doradas que hacian ver su cuello mas largo y delgado. -pero quiero preguntarte otra cosa-

-digame?- dije curioso mirandola a los ojos

-te gusta mi hijo?- dijo ella directamente pero antes que pudiera responder alterado por completo ella sonrio ligeramente pero calido y siguio hablando -no te preocupes, no es un regaño o una amenaza puedes no contestar si lo deseas; es solo que lo que paso en el set me sorprendio mucho-

-es solo actuaccion!! su hijo se mete mucho en el papel y bueno yo... El beso no fue real!! se lo juro!- dije respirando agitado sin saber como explicarlo sin quedar mal.

 -no me refiero al beso- dijo ella haciendome callar de repente -fue como te miro despues de que le hablaste, ese silencio, esa mirada, nunca la habia visto en mi hijo, por primera vez senti que el rompia las reglas y no solo se comportaba como un niño que sigue las ordenes de su padre sin cuestionar-

-de verdad? a que se refiere con eso?- pregunte

-desde muy joven Hiro a sido un niño bueno, mi esposo y yo nos sentiamos bendecidos al tener un hijo que destacaba y era muy talentoso pero mas que todo obediente y apegado a nosotros- dijo ella mirando al frente -Hiro siempre ha hecho lo que su padre le decia como el no dejarme sola mucho tiempo y salir a comer todos los domingos para un desayuno familiar, el se encarga de este lugar desde que su padre nos dejo y al morir mi esposo le pidio como ultima voluntad que se casara con Elizabett y tuviera una familia feliz- 

-por eso estan comprometidos? bueno creo que ella si esta obsesionada con el pero...a Hiro no parece gustarle la idea- dije sinceramente 

-Eres muy observador- dijo ella sonriendo un poco mas -mi hijo ha atrasado la boda mas de una vez pero no desase el compromiso, el dice que la quiere pero yo se que eso no es amor, no quiero ver a mi hijo como una marioneta sin emociones por culpa de la ultima voluntad de mi esposo- 

-que tengo yo que ver con esto?- pregunte 

-el contigo es distinto, pude ver vida en sus ojos despues de que le hablaste es algo que nunca habia visto, no puedo decir que es amor tampoco pero contigo es algo que no es conmigo ni con Elizabett- dijo ella

"Se refiere a un violador" pense de inmediato en un tono sarcastico -ya veo... puede ser aunque nosotros no somos sercanos ni siquiera amigos, solo es trabajo- respondi de forma educada.ç

-no sabes como deseseo que te equivoques...- dijo ella levantandose y sacudiendo ligeramente su vestido. -mi Hiro no es un buen partido por el simple hecho de su dinero, el eso no le importa, sino que es muy apasionado y leal con las personas que ama de verdad, cosideralo-

-no creo...pero lo pensare- dije tratando de no pelear, no creo que me ame solo esta jugando lo se, pero ver a su madre aceptando que un hombre sea la pareja de su hijo con tal de que este sea feliz, difinitivamente ella lo quiere muchisimo

-buenas noches- dijo ella retirandose de mi habitacion

-descanse señora Elena- respondi y me recoste en la cama... 

Tenia tanta curiosidad por la vida de hiro que apenas pude dormir esa noche, mas estando en esa casa, a la mañana siguiente terminamos de grabar lo que nos faltaba y luego de eso nos fuimos cada quien por su lado, Elizabett me declaro una guerra en la cual no pensaba participar y la mama de Hiro tenia su fe puesta en mi en algo que tampoco quiero hacer... la vida esta llena de cosas que no buscamos ni planeamos pero es nuestra reccion ante esta lo que define todo al fin y al cabo.