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Prólogo

Mutante, cuyo nombre científico es Homo Sapiens Superior o simplemente, Homo Superior; a simple vista se tratan de humanos ordinarios.

Pero hay una diferencia sustancial: Poseen un Gen único que los diferencian de los seres humanos promedio, el Gen X.

Esté gen se activa en cualquier momento: puede ser en la más tierna infancia, en la complicada adolescencia o en la adultez madura de la persona; pero todos tienen un gatillo usual que activa esté gen que otorga poderes de todo tipo: Estrés extremo, trauma o simplemente...la desesperación de hacer algo por alguien.

Desde poderes inútiles hasta poder doblegar la realidad a tu voluntad con el mero deseo de tus pensamientos o palabras.

Cómo diría la gran Kitty Pryde alias ShadowCat: Somos mutantes. Nacidos diferente de la humanidad básica , con un genoma mejorado que nos otorga superpoderes. Nos molestas por tu cuenta y riesgo. 

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La noche y la oscuridad reclamaba está zona de la ciudad, una figura encapuchada caminaba con calma hacia la puertas de un orfanato, cargando en sus brazos una pequeña caja de cartón grueso con algo adentro en ella. Todo bajo un silencio espectral y la luna juzgando sus acciones.

Sin temor y sin dudas, dejó la pequeña caja en la entrada de la institución...sin antes dejar un pequeño colgante de plata con una hermosa joya roja que tenía un símbolo desconocido en él; tras eso se fue sin voltear para perderse en la noche.

El frío de la noche empezó a soplar y ante la ausencia de calor, lo que había en la caja empezó a llorar fuertemente pidiendo ayuda.

En la caja, había un hermoso bebé de cabellos plateados...

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El no tuvo un buen inicio en la vida.

Fue abandonado a muy pocos días de haber nacido en un orfanato de una ciudad que honestamente, desconocía y no tenía mucho interés en saberlo.

Pasó los primeros 4 años de su vida ahí, lidiando con las miradas y burlas de niños más grandes ante características que resaltan mucho de él.

Un hermoso pelo plateado, ojos verdes y unos ligeros pero finos rasgos que no eran muy prominentes pero le daban una delicadeza a su rostro poco usual.

Pero, un día la vida le sonrió y le dió una oportunidad.

Cuando el niño cumplió 5 años de edad, una familia muy cálida le adoptó después de intentos fallidos para poder concebir un hijo; luego de verlo dijeron que "El señor los había reunido para que yo formará parte de su familia" y pues tuvieron razón.

Fue adoptados por los Williams, una familia fuertemente cristiana pero sin llegar a un extremo radical y ser bastante abiertos a aceptar a todo tipo de personas en su comunidad.

Su nuevo nombre: Abel Wiliams.

Al año de haberlo adoptado, la familia creció con el agregado de una niña: Beatrice Wiliams.

Ambos niños crecieron en la comunidad cristiana de la que formaban parte sus padres, acercándolo a la fé cristiana y aprendiendo los valores relacionados a está; pero algo que le sorprendió a medida que crecía fueron un tipo de persona que le llamó la atención: Los Mutantes.

Personas que parecían normales pero que realmente poseían capacidades asombrosas para hacer hazañas más allá del límite humano; algunos los consideraban enviados de dios, otros como criaturas creadas por el mismo demonio pero en general, esa comunidad le abrió las puertas a los mutantes.

El jóven Abel...sinceramente siempre tuvo curiosidad por los mutantes, algo en su ser le llamaba para saber más de ellos.

Pronto descubriría el porqué de éste interés tan...peculiar.

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Abel estaba llegando a la escuela junto a su hermana, el peli plateado había crecido bastante de estatura  entre el 1.85 de estatura agregado a su cabello plateado, lo hacía una cabeza muy resaltante en la escuela.

Y a la vez, muy atractivo para las chicas y alguien de respeto para los chicos.

Más de uno que tenía su pandilla en la escuela quería que se le uniera pero él reclinaba. Todo gracias a la enseña cristiana que recibió de sus padres junto a su hermana.

Y pues ante su altura y características, era alguien que simplemente imponía incluso sin quererlo. Un aura de "Molestame y terminarás en el hospital".

Abel tenía una mejor amiga: Yulia Perkins, una joven coreano-francesa que resaltaba por ser muy buena en el ámbito de la química y la biología; aunque parecía poseer una peculiar obsesión por los mutantes.

Se conocieron al inicio de la escuela secundaria, tras defenderla de unos matones que buscan abusar de ella por ser una "Amarilla más"; cosa que empezó su larga y peculiar amistad...ya que su amiga le decía más de una vez que el era un mutante por tener el cabello plateado de forma natural y tan bien cuidado.

Al inicio fue ligeramente molesto, pero se acostumbró siendo un tipo de juego entre ellos, ya que ella tenía una peculiaridad: Poseía heterocromía, un ojo azul y un ojo rojo.

-¿No crees que tú ojo rojo se volverá un dispositivo de destrucción que dispara rayos láser y brille como el Terminator? .- se burló ligeramente de su amiga, que está le respondió con otra burla.

-¿Crees que tú usarás tu voz y tú cabello cómo Sindel de Mortal Kombat? .- contestó Yulia a Abel, qué esté simplemente hizo un amague de grito lanzando una bola de papel.

-Mientras no sea la retconeada del 11, todo estará bien entonces. Además tendría una melena di-vi-na.-

Los amigos se rieron ante el tono exageradamente femenino que soltó el peli plateado junto a su último comentario, llevándose la mirada del resto de la clase ante su comportamiento.

Su plática se vió interrumpida por el sonido de la campana y la entrada del profesor de historia a su aula, su presencia hizo que Abel rodara los ojos en molestia y aburrimiento; ya que el odiaba con toda su alma a éste profesor por ser alguien sumamente molesto que parecía odiar con todo a todos.

-(Mínimo es imparcial).- se contestó sarcásticamente a sí mismo, ignorando lo que su profesor apuntaba en el pizarrón, permitiéndose ver por la ventana con tranquilidad esperando que la clase pasará rápido y poder seguir con la siguiente.

Todo estaba en calma para él.

Hasta que múltiples disparos resonaron por todo la escuela seguido del grito de varios estudiantes corriendo por los mismos. Todos estaban en shock observando a la puerta, misma que se abrió de una patada mostrando a un hombre con un pasamontañas portando lo que parecía ser una AK-47.

-TODOS AL PUTO SUELO!.- el criminal ordenó mientras realizó un disparo al techo, asustando aún más a los estudiantes, estos mismos decidieron obedecer y ponerse contra el suelo del aula.

Seguido otros dos hombres entraron al aula: uno matando sin piedad al profesor mientras que el segundo se encargaba de amarrar las manos de cada estudiante contra su espalda, para luego llevarlos a la cancha de deportes.

Había varios alumnos con heridas notables, sangrando y algunos inconscientes; tenían a los profesores contra la pared y listo para disparar en cualquier momento.

-Ponte aquí, maldita amarilla.- pusieron a la franco-coreana en el suelo, a lado de su mejor amigo de cabello plateado que miraba con molestia y horror todo lo que hacían en estos...terroristas o lo que fueran verdaderamente.

Pero teniendo armas apuntandoté, lo mejor que quedaba era obedecer a lo que solicitarán si quería sobrevivir a esta situación.

Era mero sentido común.

....

El tiempo pasó lentamente desde la perspectiva de los rehenes, lo que fueron minutos se sintieron cómo horas eternas; a merced de un grupo de supremacistas blancos.

Cierto, el grupo que había tomado la escuela se trataba de un grupo supremacista blanco, que decidieron empezar actuar tras los anuncios hechos por los mutantes por una supuesta nación propia de ellos.

Krakoa.

-Estoy simplemente...harto de ver cómo nuestro gobierno se ha mostrado débil. Permitiendo que nuestra gente, nuestra nación...se vea invadida por Latinos, Amarillos y permitiendo que los negros vayan reemplazando a la gente que formó está nación con su sangre y sudor! Y para la cereza en el pastel, está esos senadores permitiendo que la plaga mutante cree su nación, esa misma raza que acabará con la humanidad! ¡Reemplazados por esos fenómenos! .- El que aparentaba ser el jefe de los terroristas, daba su discurso mientras hacía pasar enfrente a uno de los estudiantes de raza negra.- Queremos qué nuestro gobierno se arme de valor de una buena vez y actúe. Demandamos que el senado rechacé la propuesta de esos fenómenos, si no tenemos respuesta en los próximos minutos...

Levantó su arma para disparar en la cabeza del muchacho, volando su cabeza en pedazos.

-Entonces empezaremos a actuar. Uno por raza.-

Todos los presentes inocentes quedaron en shock al ver una ejecución cometida a sangre fría, sin dudar y sin remordimientos.

Los dientes de Abel fueron apretados ante la impotencia de la escena, así como lágrimas y asco de parte de sus compañeros de clase y de escuela que estaban en está situación tan crítica.

Y ante su impotencia, el tiempo siguió corriendo....

Uno...

Tras...

Uno...

Uno tras uno de los alumnos y maestros eran asesinados, todo ante la incompetencia de las autoridades que no han hecho nada para evitar está masacre.

-Tch tch tch, parece...que tengo que ser más duro; No han hecho nada, ni siquiera he visto que hayan planeado el entrar el lugar con sus supuestos equipos de policías especiales. Es...triste verlo.- Hizo la señal para que trajeran a una persona para mostrarla a la cámara que estaba filmando todo en vivo.

Uno de los secuaces decidió tomar a la persona que menos quería Abel que fuera seleccionada, su amiga Yulia.

-¿Q Qué haces? ¡Suéltame idiota! .- La chica comenzó a entrar en pánico cuando era llevada con el jefe.

-¿¡QUE ESTAS HACIENDO HIJO DE PERRA!? ¡SUÉLTALA! ¡ELÍGEME A MÍ!.- Sus gritos y forcejeos fueron en vano, tratando de soltarse con su fuerza mientras observaba impotente lo que estaba apunto de suceder.

Iban a matar a su mejor amiga enfrente de sus ojos, todo por culpa de unos bastardos que creían que lo que hacían era...necesario para algo.

-(¡¿PARÁ QUE!?).-

PARA...

El hombre estaba hablando a la cámara, mientras sacaba de su funda un gran cuchillo militar para colocarlo sobre su garganta.

PARA...

Su amiga estaba llorando...estaba sudando y llorando, rogando por su vida...pidiendo piedad.

PARA...

Los demás vitoreando y animando a su líder cómo si de animales se tratarán...

PAAAAAAAARAAAAAAA

......

El jefe de la organización estaba apunto de ejecutar a  Yulia, con su cuchillo colocado sobre su garganta listo para rebanar el mismo completamente...cuando su mano fue detenida con una fuerza aplastante junto al crujir de sus huesos.

Volteó a su mano izquierda, dónde tenía el arma, para ver el cuchillo completamente doblado y su mano fracturada con los huesos saliendo de su mano...todo aplastado por una mano humana.

Alzó su mirada para ver unos ojos rojos cómo la sangre mirándolo cómo una bestia salvaje mirando a su presa.

-Sueltala,maldito hijo de perra!.- el jóven Abel ordenó mientras soltaba un poderoso derechazo a la cara del supremacista, que le rompió la mandíbula saliendo volando junto a sus dientes.

Los demás miembros del grupo estaban lo suficientemente estupefactos ante lo sucedido, qué dos no vieron como una sombra roja velozmente se lanzó contra ellos; clavando en sus estómagos un par de garras de hueso negro recién generadas para alzarlos cómo si fueran meros costales de pluma

La sangre de los criminales goteo a través de las garras, cayendo en su rostro que ardía con furia animal y con su sombra estaba cambiando.

Pasó de una forma humana a la forma de una... criatura con cuernos hacia enfrenté y alas en 3 pares, junto a una capa de piel dándole un aspecto de cucaracha.

Los hombres que habían sido apuñalados quedaron inconscientes por el shock y las heridas en sus estómagos, por lo que el peli plateado con manchas de sangre miró a los demás qué terroristas que quedaban.

-¿Quién...SIGUE!?.- El joven se lanzó directamente contra los guardias armados en las puertas, estos empezaron a disparar de forma desesperada para ver cómo sus armas atravesaban la carne del muchacho sin detenerlo y curándose en el momento.

Los disparos siguieron hasta que un fuerte grito de terror se escuchó, junto a una gran fuente de sangre brotando hacía las paredes, ya que las garras del muchacho habían atravesado completamente sus cuellos cortando en tres secciones de forma interna.

Los dos últimos hombres armados que quedaba miraron con terror a la...cosa que había empezado a masacrarlos, que prefirieron empezar a correr hacia las salidas de emergencia bloqueadas por ellos.

Pero se percataron de eso, que las habían bloqueado para evitar que entrarán los oficiales por ahí, trataron velozmente de quitar los bloqueos, pero cuando sintieron que podrían escapar de una buena vez...sintieron una respiración.

Lenta y sumamente caliente.

-Mierda!.- Uno de los hombres trató de sacar su pistola de mano pero solamente pudo sentir cómo las garras atravesaban su cabeza desde la barbilla hasta su cerebro, para que su cabeza fuera arrancada de su cuerpo de un solo tirón.

El último que quedaba prefirió morir en sus términos, tomando su arma de mano y volándose la cabeza en ese mismo instante.

Estudiantes y profesores estaban completamente en shock ante lo que vieron, como un simple alumno ordinario terminó cometiendo una masacre contra los asesinos de varios alumnos y maestros con una furia animal y sin piedad alguna.

Algunos lo consideraban un monstruo desde ese momento.

Otros, alguien que deberá ocultarse por lo que es.

Un Demonio.

.....

Una cabellera plateada resaltaba en la luz blanca de la noche, que caminaba sin preocupación alguna tras salir de un bar de mala muerte que estaba infestado de demonios...y principalmente porque no le dieron su sundae de fresa.

¿En serio era tan difícil un Sundae de Fresa?

En eso, el hombre de cabello plateado y ropajes rojos se detuvo en seco mientras sentía algo..

Algo lo estaba llamando.

Por un instante, su aspecto humano cambió al de su forma demoníaca, su lado demoníaco estaba siendo llamado.

Dante había vivido ésto antes, en la ciudad Fortuna con su sobrino Nero.

El Llamado del Alma.

Un llamado que solamente responden aquellos que poseen la misma sangre.

Por lo que el legendario Demon Hunter observó a la nada, mientras que el llamado era más fuerte que cuando fue hecho por Nero.

Algo le decía...que su pasado iba a volver a joderlo una vez más.

A ver si ahora queda mejor

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