El tiempo se había vuelto infinito, aunque aún no estaba ni a mitad de la mañana. Pero para Rocket Raccoon ese encierro silencioso, era mil veces peor que quedarse en la prisión de Kyln. El mapache, vuelto a capricho por Strange a su forma más primitiva, un salvaje y grandioso animal que aún conservaba esa aguda y maliciosa inteligencia. Inocente del peligro, sin control animal lo encontraba... Si había algún reclamo en el vecindario.

Peter y Drax, los dueños de ese piso. Habían salido temprano, al instituto como era habitual, teniendo al menos la piedad de dejarlo libre para que se moviera por ese espacio delimitado. Nada que hacer. Salvo dormir y esperar, ni pensar intentar abrir el refrigerador. Preparar algo en la cocina ¿o por qué no?. Era una criatura con habilidades inigualables. Pero Rocket gracias al mago supremo, había perdido sus pulgares. ¿Cómo iba a manipular?. No se detuvo a pensarlo. Porque más interesante y llamativa, le resultó la idea, acababa de ver esa botella con un cristalino licor dorado, arriba en lo más alto en la alacena.
La sonrisa se marcó en ese mal hablado hocico. Por fin había encontrado algo que hacer.

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Tras el partido de fútbol americano. Había terminado la jornada escolar. Peter, como muy pocas veces ocurría, sentía el deseo de una larga ducha caliente y una muda de ropa. Si hasta le crujían los zapatos, no tenía idea como se había filtrado lodo hasta sus calcetines.

—Hey Quill... ¿Te parece una película ochentera y palomitas esta noche?— Le preguntó Gamora luego que llegaron a esa esquina en la que se separaban sus caminos para volver a casa.

—Drax tú también puedes venir— Le hablo Mantis con esa actitud de algodón de caramelo.
El chico azul solo arrugo el entrecejo. Sin responder.

—Okey.— Peter se sonrió. Con ese humor increíble. Al parecer le había sentado muy bien esa descarga de energía y la adrenalina generada en el juego ¿O era más que eso?. ¿Quién podía saber?. La tormenta continuaba. Eran los únicos que tuvieron que caminar hacia sus casas empapados y aún así. —Yo llevo las palomitas...— Terminó la idea y se giró con manos en los bolsillos de su chaqueta en dirección a casa.

Nebula observó algo suspicaz a su hermana, ¿Desde cuándo su actitud se había vuelto tan jovial? ¿O a caso simplemente fue toda esa electricidad de Thor, expandiéndose a su alrededor cuando Peter le cayó encima?
¿Ahora... El casi cretino se volvía interesante?
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Drax fue el primero en entrar a la casa. Y su mirada se endureció de esa manera descomunal.
No llego a imaginar cómo había ocurrido aquello. Solo sabía que el librero y la alacena, estaban volteados al suelo. La cristalería, pocos vasos se habían salvado de ese desastre.
El lugar estaba impregnado de alcohol. Aunque no fuera mucho en realidad. La botella estaba quebrada. Entonces, lo peor. Descubrieron las patas del animal, marcadas en dirección de la la salida por la cocina... Ya todo era un desastre. Pero Peter se puso pálido. Al entender, que Rocket, estaba lastimado. Había dejado sus huellas ensangrentadas por todo alrededor.

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Bucky luego de ver desaparecer el auto de Peggy y la motocicleta de Roggers. Apretó el acelerador de su propia máquina sin respeto a la copiosa lluvia. Llegando al parque se dispuso a entrar en diagonal por uno de los senderos demarcados con gravilla, para tomar un atajo hacia su casa. Y simplemente no supo como de pronto ese animal cayó en frente de él. Derrapó entre las piedras, su moto se fue de costado con violencia y sin detenerse. Bucky se golpeo duro contra un árbol. Aún así, estaba lejos de su inconsciencia. Pero el mapache. Diablos. Pobre animal.

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Peter maldijo esa lluvia insistente que traicionera había borrado las huellas de su amigo. Olvidando la cita, con Gamora, comenzó esa tozuda búsqueda por todos los rincones del parque preocupado por el mapache borracho y mal herido, no era un buen pronostico.

Quill estaba lejos de imaginar ese accidente entre Roquet y Bucky. Si hubiera sabido, tampoco habría sospechado, que el amargo soldado, se iba a dar tiempo para recoger al animal. Intentando hacer lo posible.

Bruce Banner abrió la puerta de esa impresionante casa. Sus labio se separaron y esa ceja subió muy alta. —¿Barnes?— Le hablo medio espantado. ¿Cómo había llegado hasta ahí? ¿Por qué?.

Bucky tenia esa desagradable expresión en el rostro, como si una úlcera estuviera escociendo su estomago y los jugos gástricos estuvieran tratando de escaparse por su garganta. Espantoso. Incomprensible. Solía alejar a la gente a su alrededor.

—¿Me puedes ayudar?— Pregunto sin animo. Y antes de que el cerebrito emitiera repuesta alguna, lo empujo y se escabulló a la lujosa sala de estar.

—¿Claro?— Contesto reticente. Bruce no tenia idea que era lo que necesitaba.

Entonces fue que se descolgó del hombro ese bolso de gimnasio que lucia abultado. Bucky lo puso sobre la costosa mesa de cristal y sin importarle mucho el desastre, saco el animal mal herido con cierto cuidado.

Banner se quedo pasmado. Aquella era una visión dolorosa —No soy veterinario... no tengo los implementos.—Objeto la petición. Demonios. Ni siquiera era su casa.

—¿Qué necesitas?— Insistió. Negándose a la idea de darse por vencido.

Bruce sintió esa punzada atravesando su cráneo, arrugo su entrecejo, se llevo un par de dedos a la frente. Exhaló profundo. —Ven por acá...— Le indico con la mirada al animal, dándole a entender que lo tomara y lo siguiera. Banner, se movió por largo pasillo en esa silenciosa y perfecta casa. llegaron a una escalera que bajo acelerado. Entonces dígito una serie de números en un panel y una puerta, que parecía a lo menos blindada, se abrió automática.

Stark seguro no iba a estar contento.

Bucky después de entrar al sótano de la casas giro sobre sus eje. Tal como lo había sospechado. Un increíble laboratorio, lleno de avanzados artefactos científicos.

Hulk, en su lado más dulce, retiro algunas cosas regadas en un gran mesón de acero. Las luces sobre el se prendieron como su lo estuviera siguiendo. Todo a su alrededor comenzó a cobrar esa vida virtual

—¿Stark?— Pregunto acomodando al mapache en el mesón. Vio a Banner cubrirse con esa especie de bata blanca de científico.

—Con Potts.—Contesto, y saco de una alacena algo que parecía una bolsa de suero. Para empezar por limpiar todas esas heridas.

Stark acababa de destapar esa botella de vino y comenzó a llenar unas copas. Delicatessen en la mesita junto al sofa, Pepper se levanto del sillón en busca de unas velas. La Pecosa ilumino su rostro con esa pequeña flama. ¿Qué mejor clima, para dejarse mimar en el sillón?... si hasta había un chal dispuesto.

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Mantis miro nuevamente por la ventana. No había mucho por hacer, el agua inundaba las calles, haciendo honor a la presencia del príncipe de Asgard en la tierra, truenos, relámpagos.

— Esto es ridículo.— Farfullo Nebula. La lámpara estaba pestañeando, amenazante de un corte masivo en la red de electricidad.

— Nadie saldría en su sano juicio con esta tormenta.— Suspiro Gamora. Ajena a lo que de verdad estaba ocurriendo afuera.

—Demonios Rocket— Maldijo. Peter reviso no sabia por cual ves otro callejón entre la basura, sin encontrar ninguna evidencia. Testarudo, había perdido la noción del tiempo. Con su ropa nuevamente empapada. Comenzaba a entumecer. Se estremeció. Y en cuanto pareció prestar atención a su alrededor a metros de distancia cayo un rayo en un árbol incendiándose y el tendido eléctrico exploto.

A oscuras. El Señor de las Estrellas camino en medio de la noche cabizbajo frustrado revisando mentalmente las calles que había transitado, para volver a casa. Tan ensimismado en la culpa. Tal vez si lo hubiera dejado enjaulado. ¿Qué iba a pasar con Rocket?.

Pero violento, todo termino de importar. Por descuidado dio con esa pared que se le atravesó perpendicular en su dirección, esa pared que no era de concreto. Logro empujar al sujeto que se ponía de por medio. Thor volteo de inmediato. Para saber que diablos había golpeado.

El rubio de ojos azules lo observo incrédulo. Acababa de salir del edificio en el que vivía Valquiria.

—¿Peter?— Vibro su voz dulce. Su entrecejo se arrugo.

Ahí. Su muchacho, cabizbajo. Manos en los bolsillos. Lucia como un cachorro abandonado. Si hasta le pareció que estaba temblando de frió.

El chico Celestial levanto la mirada.

Solo basto que Thor lo viera para que la lluvia lo dejara de mojar. Pero de poco valía. Ya estaba todo empapado.

—¿Te puedo ayudar?— El príncipe le hablo con toda serenidad. Escondiendo esa emoción. De no entender por que. Solo sabia que finalmente estaba frente a el. Después de permanecer en sus pensamientos durante toda esa agitada tarde.

La mirada quebrada de Peter contrastó con esa cínica sonrisa. Todo marchaba bien antes de que el dios se apareciera en su puta vida. —No quiero tu mierda Odinson. —Contesto amargo.

Thor se inclino buscando esa mirada que de inmediato le negó. Trago largo, sus fosas nasales se expandieron tomando mucho aire. —Vamos a casa.— Le hablo determinado. Como un adulto sin dar pie para la discusión.

Quill le respondió tan solo con esa devastadora ira en la mirada. ¿De verdad?... ¿Pretendía? ... Protestó su voz en Off. Pero el príncipe cruzo su brazo tras su espalda y apoyo palma en su hombro. Paralizandolo. No tenia idea que demonios estaba haciendo. Donde iba. Solo camino. Negando esa espalda que se había puesto tiesa a su contacto. Odiandose, por estar tan consciente de esa cálida e inocente cercanía.

¿Pensar? ¿No Pensar?.

Peter, se dejo guiar por Thor.

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A-ha | Stay on these Roads.

Subtitulos en español

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Daddy You're Not My Crush CONTINUARA