T R E C E
—¿Le entregaste el sobre a HyeMin? – Jimin miró con atención a Hoseok – ¿Fue complicado?
—Difícil pero no imposible, no confía muy fácil en los demás.
—¿Cómo está? – preguntó rápidamente – ¿La viste bien?
—Es totalmente tu rostro pero con cabello largo, Jimin – se percató del brillo tan peculiar en los ojos de su amigo cuando le dijo aquellas palabras – lo único que puedes agradecerle a ese hombre es que está muy bien cuidada.
Hoseok y Jimin habían acordado verse una semana después de que el primero viera a la chica, Jimin tenía la cabeza demasiada revuelta como para poder ver a los ojos a MiNa, la muerte de Dongsik fue un golpe bajo para su vida, principalmente porque sabía el trasfondo de todo, no podía ir con su jefe porque era un amigo cercano de Suk y su última esperanza era la jueza Min, pero también se dió cuenta que pertenecía a aquel círculo vicioso y lleno de corrupción que envolvía a los casinos Kim.
—¿Me estás pidiendo una nueva orden pero ahora sin pruebas?
—Desaparecieron esta mañana, jueza – Jimin bajó su mirada – uno de nuestros colegas fue asesinado, él había encontrado las huellas de Kim MiNa en el arma homicida.
—¿Debería creerte?
—Yo mismo leí los informes que el doctor Kang hizo – el chico suspiró – soy el teniente a cargo del caso, estoy enterado de todo.
La mujer de cabello corto y tez blanca le miró con indiferencia para después levantarse de su asiento mientras acomodaba su ropa.
—No puedo concedertela porque no tienes pruebas – HyoRin recogió algunos papeles de su escritorio – además, te estás equivocando de persona, Kim MiNa es una mujer igual de recta que su padre.
Jimin bajó su mirada apretando sus puños, las sombras del pasado seguían atormentando su mente, ¿Acaso le debía algo a la vida? Él sólo era una víctima más de las mentiras de Suk, no podía imaginarse hasta donde más podría llegar aquel hombre perverso con sus falacias y el mal que le había hecho a más familias como la suya a causa de las mismas.
—¿Tu padre sabe que estás aquí?
—Vine sólo a verte para decirte lo que ocurrió ayer – el castaño se levantó – debo irme.
—Espera, aún no te vayas – Jimin tomó aire antes de hablar con Hoseok nuevamente – hoy hablé con el jefe Jung.
—¿Y qué hay con eso?
—Me pidió alejarme del caso – un silencio envolvió la oficina del menor – definitivamente.
—¿Crees que mi padre esté liado con Suk?
Hoseok sintió un repentino calor en su cuerpo, de verdad le rogaba al cielo que Jimin le dijera que solo era una buena broma de su parte y que todo estaba como siempre, tenía una imagen impecable de él, ni siquiera podía idealizar a ese padre amoroso y recto que lo había criado con aparentes valores envuelto en escándalos de corrupción, sin embargo, él le extendió un sobre igual que el que le entregó a MiNa. Lo tomó rápidamente sacando su contenido, por un momento se olvidó de como respirar, su corazón se detuvo momentáneamente y comenzó a negar inconscientemente con su cabeza.
Fotos en distintos lugares lujosos, disfrutando de un buen momento con una sonrisa en el rostro de todos los presentes fue con lo que él se topó.
—Contraté a un investigador privado para que siguiera a tu padre y mis sospechas fueron confirmadas – tragó saliva – HakSan y HyoRin están liados con Suk, desde hace años.
Hoseok se sentó nuevamente antes de que se desvaneciera en el suelo.
—¿Yoongi sabe de esto?
—Se lo dije hace un rato, me dijo que él también lo sospechó desde que su madre evadió sus preguntas.
—Por Dios...– colocó su mano en su frente cerrando sus ojos un momento – esto es una locura.
—Estamos solos en esto, Hobi – Jimin mordió su labio nervioso – entenderé si quieres quedarte fuera de esto, es la reputación de tu padre la que también está en juego.
—Te ayudaré – contestó abriendo sus ojos, unas lágrimas resbalaron instantáneamente por sus mejillas – joder, te ayudaré en todo.
—Tenemos menos de dos meses para hacer esto – extendió algunos papeles – hice un acuerdo con SeokJin para darle todas las titulares para su televisora.
—¿Es el periodista de SBA? – Jimin asintió – su jefe estará feliz después de todo.
—Necesito que te infiltres sólo para grabar parte de sus negocios y luego exponerlo en televisión nacional.
—Intentaré sacar una cita con él – Hoseok limpió las lágrimas de sus ojos – te juro que te ayudaré a destruir a ese hombre, Jimin. Confía en mí.
3/3 ❤️
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