Capítulo V
You know what your mama went through.
Sus ojos estaban hinchados, su boca estaba seca y su labio inferior temblaba, sentía que en cualquier momento la corbata lo asfixiaría hasta matarlo, y no quería algo diferente.
Había sentido un dolor agudo e insoportable en su pecho cuando ayer su madre escucho la confirmación de la noticia y había roto en llanto. Los sonidos lastimeros que salían de su boca resonaban en todas las paredes del lugar y él sin saber que hacer exactamente también lloró.
La tarde había pasado con dolor, todos estaban preparados para sepultar a su padre al atardecer, y deseo que su amigo hubiese estado ahí para darle la mano y entrelazarlos con la suya.
La servidumbre estaba mirando el espectáculo con dolor, todos vestían de un negro elegante y sollozaban disimuladamente, los colegas del padre de SeokJin también estaban ahí, agarrando los brazos de su madre que seguía incontrolable y lo siguente que vió fue cómo está desfalleció sobre el resplandeciente césped qué, según su madre, en un césped como ese había sido engendrado cuando recién habían adquirido la propiedad.
Una de las nanas lo tomo del brazo y le susurro cosas poco entendibles, todo había acabado tan rápido que su mente aún estaba en shock mirando la pequeña montaña que se alzaba sobre la tierra levantada donde su padre ahora descansaba.
Lo llevaron al auto a cargo del chófer amable que de vez en cuando lo llevaba por un helado después de la escuela, pero ahora con el semblante apagado lo llevo a su casa.
Fue guiado hasta su habitación y sentado con dulzura en la cama, su nana acaricio sus cabellos negros como los de su padre, le volvió a repetir que todo iba a estar bien, y que sólo necesitaba descansar, cuando lo vió con un pálido tono en su rostro, descolgó el auricular del teléfono y llamo a la casa de su amigo, deseaba que los dos hablarán, así el pelinegro podría olvidarse un poco que su madre había entrado en crisis después de ver el cuerpo de su marido bajo tierra.
Escuchó varios pitidos y la nana pensó que no contestaría, hasta que esa voz suave y demandante contesto pronunciando un suave "¿Hyung?", entonces le tendió el auricular al pelinegro y se dispuso a caminar hacia la cocina, quería prepararle un dulce té para animarlo un poco.
El pelinegro llevó el auricular a su oreja y con su voz cortada apenas pronunció.
— ¡Papá está muerto!
No sintió cuanto tiempo estuvo llorando, no habló mucho con NamJoon, sólo había entendido que pediría permiso a sus padres para pasar a visitarlo, y posiblemente quedarse a dormir. El té que la nana le había llevado ahora estaba tibio, habían pasado los colegas de su padre a su habitación para darle el pésame y susurrarle palabras de aliento, cargarle más responsabilidades que alguien de su edad quería y que él aún no lograba entender.
Sus sentidos se encendieron cuando un fornido hombre que apenas pasaba de los treinta y tantos, entro a su habitación, no estaba seguro si escuchó que pidiera permiso, pero poco le importa, todos había pasado sin hacer eso. Se sintió un poco cohibido cuando el hombre se sentó a un lado de él y acaricio su muslo. Era estimulante, pero no sabía en qué grado y con qué propósito era ese gesto que iba de arriba a abajo sobre su pierna derecha, y como si su cuerpo hubiese deseado de aquella extraña forma de consuelo soltó un sonoro suspiro y sus músculos se relajaron.
—¿Mejor?
Susurró el hombre con voz ronca sintiendo su cuerpo arder por las ideas que surcaban su mente. SeokJin asintió a la pregunta y se dejó hacer por el hombre, que le dio un poco de engañoso consuelo en el momento que él lo necesitaba.
"¡Extraño a mi padre!"
Pensó cuando el alivio en su corazón llegó al igual que llegó el primer apretón en su entrepierna. Cerró los ojos y dió un pequeño brinco lleno de miedo, y aquel hombre que se decía ser amigo de su padre acercó sus labios en forma de corazón a los suyos, previniendo que el pequeño gritara.
Una mano se adentro en sus pantalones y tocó la dulce y virgen piel que se retorcía ante el taco. SeokJin suspiro, porque ese dolor que estuvo en su pecho hace algunos minutos se había calmado, y realmente no sabía lo que estaba pasando, pero se sentía como cuando su padre llegaba temprano del trabajo y si era uno de esos días que estaba extremadamente feliz lo llevaba solo a él al cine o a dar una vuelta en su espléndido deportivo, llenándolo de todo lo que él quería, y esos momentos aparecían ahora con fuerza.
Se sentía ese calor surcando en su interior, ese que solo sentía cuando su padre veía sus calificaciones y lo alagaba por ser el primero en la clase.
Sus ojos que antes estaban cerrados los abrió de golpe cuando sintió algo profanando su pequeña entrada, y quiso gritar y apartarse de lo que le estuviera causando ese dolor terrible, sin embargo, cerró los ojos y ese ardor se volvió delicioso cuando pensó en la ocasión que su padre lo había llenado de besos en agradecimiento por el regalo que el mismo SeokJin le había hecho por su cumpleaños.
Si, así justamente se sentía, deseeó que ese sentimiento durará para siempre cuando fue levantado y sentado en las piernas del hombre al mismo tiempo que lo penetraba hasta abarcar todo su interior, tocando suavemente su punto dulce hizo que soltara un pequeño suspiro.
No se dio cuenta de la excitación que escurría en su intimidad embriagandolo, tampoco se dio cuenta de cuando comenzó a ser embestido con fuerza y él sólo cerró los ojos para volver a recordar los momentos felices con su padre.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro