∴━━━✿━━━∴

Blossy.

─ Finalmente, esta es la oficina de la Directora. Normalmente siempre esta allí dentro. ─

─ Oh, muchas gracias, jovencita. Estoy en deuda con usted. Bueno, ¡hasta luego!.─

─ Sí...adiós. ─ musité. ─

═════ ✥.❖.✥ ═════

─ ¡Llegué!, ─ nadie contestó. ─ ¿mamá?. ¿Bash?. ─

Descolgué el bolso de mi hombro, dejándolo en el sofá del Ala principal. Caminé hasta la cocina. Mamá no estaba alli, pero una nota de ella, sí.

Blossy, cariño. Es nuestro aniversario de bodas, así que, no estaremos en casa hasta más tarde.

Te quiero mucho, vale. No duermas tarde, eh...

Con amor, tu madre.

─ Eso significa...¡Casa sola!. ¡Sí!. ─ Corrí de un lado para otro como una total maniática, hasta que tropecé con el sofá. ─ ¡Ay!. ─

∴━━━✿━━━∴

10:20 pm. Aún seguía despierta. Empiecé a contar ovejas con la idea de dormir plácidamente en mi cama. No funcionó.

─ Argh. ─ me quejé. Escuché el sonido de un jarrón caer, emitiendo un estruendoso ruido. ─ ¿Que fue eso?.

Levantándome de mi cama; agarré una regla simétrica dispuesta a herir al individuo que había irrumpido en mi casa.

Tal vez, son más de uno.
❝ Cállate, puta conciencia. ¡No ayudas en nada!. ❞

Cautelosamente, bajé las escaleras. El jarrón estaba ahí, pero...¿quien lo había roto?. No había nadie en el Ala principal. Tal vez, Estaba imaginando cosas. Tal vez, el jarrón había sido empujado por el viento.

Nuevamente, escuché otro sonido. Este sonido era más agudo, como...¿un gato?. Con mi regla simétrica que aparentaba ser un cuchillo, caminé hasta donde provenía el agudo sonido.

─ ¿Un gato?. ─

En una esquina, detrás de las escaleras, un gato blanco temblaba asustado. Estaba sucio, el lodo en su pelaje delataba mucho.

─ Hola. ─ me acerqué pero, el gato retrocedió, chocando contra la pared. ─ No te dañaré, ¿vale?. ─ Extendí mi mano en su dirección. Receloso, el gato caminó paso a paso hacia mi. Acaricié su cabeza cuando estuvo suficientemente cerca. El ronroneó. ─ Eres tierno.

∴━━━✿━━━∴

YuriNoOtaku.