En aquel baño solo se escuchaba el sonido del agua caer por la ducha.

Por tratarse de agua tibia, el vapor se acumulaba en aquel cerrado lugar, haciendo que el vidrio de la puerta en la ducha se nublara.

Aún así, cuando Jimin se tomó el atrevimiento de entrar al baño del piso de arriba, la imagen con la que se topó lo dejó más prendido de lo que estaba desde que llegó a la casa.

Tenía algunos mechones pegados en la cara por el agua, y sus ojos estaban cerrados en una expresión relajada mientras gotas acariciaban sus pestañas y rojizos labios.

Jadeó extasiado ante tan erótica imagen, lamió sus labios, y sin perder más tiempo, comenzó a quitarse el overol, la gorra, su buso, y bóxer, dejandolos caídos en el suelo.

Abrió la puerta de la ducha y entró, abrazando aquel blanquecino cuerpo sin aviso alguno. Agust soltó un agudo grito por el susto que Jimin le causó al rodearlo.

- ¡Jimin hyung! - Agust jadeó - ¿q-que crees que haces? - Jimin podía sentir el pecho de Agust subir y bajar acelerado.

- Shhh... - pasó los labios por su oreja - Necesitaba tenerte otra vez, y no quería esperar hasta que te terminaras de duchar.

El agua ya había empapado a Jimin, el cual había comenzado a frotar su cuerpo contra el de Agust.

- ¿Vamos a ir a la c-cama?

Jimin rió, mientras pasaba la lengua por el cuello del menor. - No bebé, lo haremos aquí.

- P-pero... - Agust fue volteado por Jimin, sin despegarse ni un centimetro de su cuerpo, y enseguida sus labios fueron callados por el húmedo beso del mayor.

Su boca era abierta y saboreada por la lengua de Jimin, y a la vez el agua de la ducha caía como cascada entre ambos labios, ahogandolo levemente.

El chasquido de sus lenguas se escuchaba como eco en el pequeño y cerrado lugar, por aquel beso desenfrenado. Jimin acariciaba el cuerpo de Agust, por donde sea que sus manos pasaran. Apretaba su espalda, bajando por su cadera y llegando a sus glúteos, los cuales masajeo haciendo a Agust jadear.

- Ah..ahh...Ji-Jimin.... - Jimin se dirigió a su cuello, besando y restregando su nariz en aquella deliciosa piel, deleitandose con el aroma a jabón floral y las gotas que recorrían esta como porcelana brillante.

- Eres tan exquisito...ahhh... - su lengua bajó hasta su pecho - ¿dónde habías estado todo este tiempo pequeño? - sus manos atrayeron la entrepierna de Agust hacia su cara cuando bajó hasta allí.

Agust cerró los ojos y gimió, enrollando sus manos en el empapado cabello de Jimin. Entonces, Jimin besó y lamió la cabeza de su pene. Agust se encorvo un poco ante aquella delirante sensación. Sentia sus piernas temblar y tenía miedo de resbalarse.

Jimin sujetó muy bien sus piernas arrimandolo contra la cerámica en la pared, mientras seguía degustando el pene de Agust.

- Ah...mmm....n-no puedo m-mas ahhh.... - Agust se retorcía contra la pared, jaloneando el cabello de Jimin queriendo que se detuviera pero a la vez no.

Entonces, Agust se vino, dejando su semen en la boca de Jimin, el cual resbaló por su barbilla y era corrido por el agua.

Agust sentía que se ahogaba. Necesitaba salir de aquel cerrado lugar y poder respirar aire fresco, pero en eso Jimin se levantó y lo viró contra la pared.

- E-espera es que...

Jimin abrió su entrada y comenzó a estimularlo, mientras besaba su nuca y su otra mano acariciaba su pecho.

Su entrada aún ardía y dolía mucho por lo del día anterior, y el hecho de que Jimin quisiera otra vez penetrarlo, lo asustaba un poco.

- Quiero volver a sentirte precioso, lo necesito tanto... - le susurró encima de su mejilla, mordiendo levemente esta.

- H-hyung... - Agust mordió su labio inferior y apretó su mano en el brazo que rodeaba su cintura. - D-despacio, por favor...

- Está bien, mi niño - pegando sus labios al su oreja, Jimin lo penetró lentamente.

Agust hechó su cabeza hacia atrás, quedando sobre el pecho de Jimin, mientras aguantaba sus quejidos. Le dolía muchísimo, sentía que sus piernas flaqueaban y que en cualquier momento su cuerpo cedería.

Pero no, él era un chico normal de 19 años capaz de poder tener sexo lento o duro como los otros de su edad.

**********

- Es una carrera interesante - respondió Agust, después de que Jimin le comentara sobre lo que estudiaba y en qué universidad estaba, mientras hacía sus labores en el jardín y Agust estaba sentado bajo un árbol.

- Si, más o menos. Al principio me daba igual si pasaba los semestres o no, pero ya no me falta mucho para graduarme, así que ahora si le puse más empeño. - Agust rió. Observando como los músculos de Jimin se contraian por la fuerza ejercida. - ¿Y tu estudias algo?

- Mmm...no, aún no me decido si quiero estudiar algo, así que mi familia no quiso presionarme.

- Eso es bueno. Uhh...Agust, ¿puedo preguntarte algo?

- Claro hyung.

- ¿Por qué vives solo aquí? Es decir tienes a Denver, pero...

Agust sonrió mientras jugaba con sus dedos - Me gusta tener mi espacio, y, mi familia no me prohibió vivir solo, con las condiciones que ya conoces. Las personas de limpieza interna que vienen algunas veces a la semana, y eso...

- ¿Y tus amigos?

- Ellos...los veo pocas veces al mes, ya que son muy ocupados. - Agust recogió sus rodillas - ¿Y tu?

Jimin sonrió. - No tengo el gran grupo, pero ahora que estamos de vacaciones, a veces salimos por las noches a divertirnos, o nos reunimos en la casa o departamento de alguien.

- Eso...se escucha genial

- ¿Te gustaría salir conmigo? - Jimin dejó lo que estaba haciendo un rato y se acercó a Agust. - Podríamos ir a pasear, o a mi departamento a ver una película, comer algo...lo que tu quieras - Jimin tomó la mano de Agust y acarició sus nudillos - Así podremos conocernos mejor, fuera de estas paredes.

Agust lo quedó viendo en silencio. Sus ojitos brillaban de anhelo y emoción. Pero lastimosamente nada podía ser fuera de la casa.

- Me gustaría... - Jimin iba a decir algo pero Agust continuó - ...pero, yo tengo novio ¿recuerdas?.

Aquello borró la sonrisa de Jimin en un dos por tres. Frunció el ceño y sostuvo la mano de Agust la cual quería soltarse. - No se quién sea ese otro, pero está claro que no lo quieres ni lo estimas como tal.

- Jimin hyung...

Jimin atrajo a Agust a su regazo. - Para mi ese otro no existe, y para ti debería ser igual. - dejó un suave beso en sus labios.

- No es fácil - respondió Agust, acariciando tiernamente la mejilla de Jimin.

- ¿Qué sucede?¿Por qué tienes de novio a alguien que no quieres? - Jimin no lo entendía.

Agust apartó la mirada. - Nunca dije que no lo quiero. Lo hago. Lo quiero, le debo mucho...no podría hacerle algo así, y causarle dolor.

- No sé que haya hecho por ti, pero tu no lo quieres, solo te sientes en deuda y crees que estando con él es una forma de agradecimiento.

Agust apretó sus manos y se levantó del regazo de Jimin. - Tu no sabes nada, así que por favor no opines ni te metas en mis cosas.

Jimin también se levantó, sorprendido por las palabras de él. - No sé nada porque tu no dejas que sepa algo. Yo quiero conocerte, quiero que me conozcas...

Conteniendo sus lágrimas, Agust dio media vuelta y caminó hacia la casa.

- ¡¿Por qué huyes?! - le gritó Jimin desde donde estaba. Agust no se detuvo y entró a la casa.

Jimin maldijo por lo bajo. Estaba furioso y a la vez muy celoso.