Flashback...

Hace quince años...

Narrador omnisciente

Habían arribado a Longuetown, después de cuatro días de un rápido viaje. Robin se encuentra apoyada en la barandilla, contemplando por primera vez la ciudad portuaria. Ryan se encuentra a unos pocos metros de ella.

_ Bueno nuestro viaje está por finalizar, “Rita” _ comenta enfatizando la última palabra _ Te soy sincero, me gusta más tu nombre y apariencia real _ comenta esto último, seriamente, en voz baja para que los demás no escucharan la conversación.

_ Sí... _ responde ella distraidamente, casi en un suspiro.

_ Prepararé tu próximo pasaje al destino más lejos posible y lo más pronto. Tendrás que aguantar un poco más tu disfraz. _ indica con la misma actitud.

Al llegar a puerto, se puede ver el movimiento general de los estibadores (personas que descargan los navíos), pescadores, comerciantes, los efectivos de la Marina, entre otros. El joven teniente se apaña entre la multitud, y ve un barco listo para zarpar, se acerca al encargado del navío.

_ Buenos días, caballero. _ llama a un marinero de forma respetuosa, consiguiendo su atención. _ ¿Quisiera saber cual es el destino de este barco? Si es posible, claro. _

_ Se dirige a Alabasta, en el Grand Line, señor. _ respondió el encargado sonrientemente.

_ ¿Llevan pasajeros? _ vuelve a cuestionar el marine.

_ Sí, pero solo pocos, señor. _ responde simplemente el marinero.

_ No importa, le compraré un pasaje. _ dicho esto le, extiende un fajo de berries. _ Y a la señorita que los acompañará deseo que sea bien tratada, o me enteraré de una forma u otra. _ advierte esto último de forma seria.

_ S-s-sí se-señor _ titubeó con temor, sabiendo su rango en la Marina.

_ Bien _ expresa con una sonrisa. _ ¿Cuándo zarpan? _

_ E-en media ho-ra, señor. _ concluye al final el otro joven.

Ryan simplemente realiza un gesto de que esperaran un minuto, y se da media vuelta para buscar a Robin, quien se encontraba observando los puestos mercantiles del muelle. Al encontrarla, le informa lo que había conseguido.

_ Te irás ahora. Ya encontré un barco que te llevará lo más lejos de aquí. _ informa seriamente.

_ ¿Tan rápido? _ cuestiona con un toque de tristeza.

_ Sí, el tiempo apremia. _ expone seriamente mientras que ambos se dirigen al navío. Inmediatamente, el teniente se detiene, ante la mirada fija de la joven.
Se encuentra en un estado pensativo durante unos cuantos segundos. _ ¿Qué ocurre? He notado un poco de tristeza en tu voz. _ le pregunta, dirigiendo su mirada a sus ojos.

_ Yo… eh… _ la joven Robin duda por unos segundos. _ Sí. _ responde finalmente. _ Tú eres una de las pocas personas que me ha querido como soy. Es muy triste separarnos. _ confiesa con tristeza en su semblante.

_ Entiendo cómo estás. _ contesta el marine de forma seria. _ Pero debes entender, que por más que yo sea un Marine que te esté ayudando, el resto no son como yo. No estás segura conmigo. Pero aún tienes una promesa que cumplir. ¿Lo sabes no? _ pregunta esto último, recordándole a Saul.

_ Sí, es verdad. _ responde ella con seriedad.

_ Llegamos. Bueno, nuestros caminos se separan Nico Robin. Cuando puedas, o creas conveniente, deshazte de ese disfraz. Te queda mejor otra imagen que no elija yo. _ expresa esto último haciéndola sonreír un poco _ En cuanto al collar, eso sí te lo puedes quedar, considéralo un regalo. _ concluye su oración, sacando la conclusión de que las iniciales de la "joya" tenía las letras N. R.

_ ¡Todos los pasajeros a bordo, comenzamos a zarpar! _ se escuchan los llamados de un marino del navío.

_ Adiós Robin. _ se despide, para luego dar media vuelta y retirarse. Pero es sorprendido por un abrazo en su espalda de parte de la joven.

_ Adiós, “Aniki”. _ Robin musita con tristeza.

_ No es necesario que sigas actuando la falsa identidad, aunque eres mi “prima”. _ bromea poniéndose de frente a ella, dándole una sonrisa, y  correspondiendo al abrazo.

_ No estaba actuando. _ expresa la joven con dolor y tristeza. Ryan se queda sorprendido, atónito, por esa respuesta.

¿De verdad lo considera como un hermano? Unas lágrimas traicioneras se asoman del ojo del joven teniente, recordando momentos de su pasado.

_ ¿E-en... serio piensas eso... de mí? _ pregunta con ojos llorosos y un hilo de voz, manteniendo la sonrisa. Ella solo lo abraza con más fuerza y firmeza. _ Robin tu barco se va... _ la toma de los hombros suavemente, dirijiendo su mirada a sus ojos azules. _ Te extrañaré, no lo dudes. Nos volveremos a ver, cuando menos te lo esperes ¿sí? Mantente viva hasta entonces. _ le sonríe, dándole un beso en la frente, para el leve asombro de ella.

Ella solo asiente con una lágrima saliendo de sus ojos azules. Levanta su maleta, y sube al barco.

Cuando el navío zarpa, no pierde de vista a Ryan, quien se queda en el muelle, hasta que el barco se pierde en el horizonte.

Ryan se sonríe en el puerto, pensando en que le gustaría el regalo que le había dejado a ella.

Fin Flashback...

Actualidad...

Narra Ryan

Según lo que me contaron, principalmente el joven narigón y el reno mientras yo comía, fue que: escapamos de Enies Lobby, en su barco con cabeza de carnero llamado “Going Merry”. Durante el trayecto, el navío se había partido y tuvieron que recurrir a la opción de quemarlo. Aparentemente tenían un gran cariño al barco, ya que escuché con pesar y tristeza en sus voces por lo que habían hecho con sus restos.

Estuvimos en la ciudad sobre el mar, llamada Water 7, durante una semana. Viendo que la Marina reanudaba la persecución hacia ellos, me llevaron consigo a petición del médico Chopper, que no podía abandonar a un paciente suyo. Estuvimos una semana en el mar, y henos aquí.

_ Muchas gracias, Dr. Chopper. Muy pocas veces había visto un médico tan dedicado a sus pacientes. _ agradezco al doctor por su preocupación, a la vez que le alago también.

Creo que se encuentra feliz, aunque me insulta diciendo que no lo alegraría de con halagos, realizando un baile raro. Raro... pero adorable.

Veo como todos están con su rutina. El espadachín peli verde entrena con pesas, lo que me recuerda que tengo que retomar mi entrenamiento físico, que desde hace un mes que no he realizado.

La navegante peli naranja se encuentra en su estudio; el capitán se la pasa observándome con curiosidad desde el suelo de la cubierta; no veo al cocinero rubio o a el carpintero peli celeste; pero si diviso a Robin.

Decido acercarme a ella. Se encuentra leyendo un libro. Al principio dudo si acercarme o no, ha pasado tanto tiempo desde que la ayudé a escapar.

_ Hola Robin. _ le saludo con una sonrisa, sonrojándome por lo bella que es. Ella dirige su mirada hacia mí. _ Me da mucho gusto volver a verte. ¿Qué estás leyendo? _

¿En serio? Después de tanto tiempo... ¿es lo primero que le voy a decir? Emm... sí, una conversación común y corriente, comienza con la primera estupidez bien dicha.

_ Hola teniente-san _ saluda ella con una sonrisa. La hace ver más bella. _ Tanto tiempo ha pasado ¿no? _ cuestiona con la misma actitud. _ Estoy leyendo un libro de arqueología, justamente el que me habías dejado en el maletín hace 15 años. _

_ ¿Aún conservas ese libro? _ pregunto con una ligera muestra de alegría y sorpresa. Después de todo... conservó el regalo. _ Yo…yo… lo siento, todavía no soy muy bueno para las conversaciones, aún je je. _ me disculpo apenado, con una sonrisa nerviosa. Y en parte es cierto. Hace un largo tiempo que no trataba con nadie más que mi hermano menor y mis superiores. Siempre serio y de carácter profesional. _ Y por cierto... ¿“teniente-san”? _ cuestiono divertido.

_ Fufufufufu _ ella ríe levemente con su risa particular. _ Te queda el mote... ¿no? _

_ Bueno... _ me rasco la sien. _ No lo había pensado de esa forma.... _ opino con una ligera sonrisa. _ Aunque tenía el futuro puesto de Almirante. Pero dejémoslo ahí, me gusta el “apodo” que me pusiste. _ comento sonriente.

_ Veo que haz formado una buena carrera durante todo este tiempo, para llegar a tal puesto _ comenta con una sonrisa.

_ Bueno... _ indico, volviendo a rascarme la sien a la vez que me siento sobre la barandilla. _ No fue del todo así. Ahora soy un traidor buscado de la Marina. _ indico. _ Pero no cambiaría el pasado por nada en el mundo. _ alego seriamente esta última parte. _ Pero, sinceramente, me alegra saber que tienes nakamas que confían en ti y que harían cualquier cosa para protegerte. ¡Rayos! _ exclamo ligeramente emocionado. _ Enfrentarse al Gobierno Mundial de esa manera. ¡Hay que tener agallas! _ expreso sonriente, y emocionado por el suceso, haciendo que ella sonría por igual.

_ ¡Oi, “Rian”! _ escucho una voz familiar detrás de mí. Me volteo a ver para encontrarme con la cara de el capitán a unos pocos centímitros de mi cara. En otras palabras “mi reciente primo aparecido”. _ ¿Quieres pescar con nosotros? _ cuestiona sonriente, mostrando sus blancos dientes.

_ ¿“Nosotros” quienes? _ pregunté, con una ceja enarcada.

_ Usopp, Chopper, y yo. _ responde con su sonrisa habitual. Pienso por un rato, y al final asiento con la cabeza, dando mi respuesta afirmativa. _ ¡¡¡YUKATA!!! _

_ Pero antes dos cosas: una no grites cerca de mi oído, ya te lo he dicho. _ le repito un poco molesto, y con leve dolor en las orejas por el reciente grito.

_ Shishishishi _ se ríe divertidamente.

_ Dos: mi nombre es “Ryan” (se pronuncia “raian”), no “Rian” (como suena) _ le explica. _ En unos minutos voy. _ concluyo mi oración. Dicho esto Luffy se retira hacia donde están sus amigos.

_ ¿Por qué aceptaste? _ me interroga Robin de forma curiosa.

_ Tal vez para conocerlo mejor, ya que, como te habrás dado cuenta, somos familiares que nunca nos vimos. _ respondo. _ Además, yo tengo una especie de deuda con él y el resto de la tripulación por sacarme… perdón, sacarnos… de ese lugar. _ comento con una pequeña sonrisa de lado. _ Con tu permiso, me retiro. _ doy una leve reverencia, con mi mano izquierda en mi espalda.

_ Fufufufufu... siempre tan educado, teniente-san. _ alega Robin con una sonrisa.

_ ¿Y qué te puedo decir Robin-san? “Los modales forman al hombre”. Eso es tan real…, que yo soy un caso perdido... jeje _ bromeo con una sonrisa, cerrando levemente mis ojos y dando media vuelta, mientras me dirijo a donde estaban los otros chicos. A su vez, escucho la típica risa de la arqueóloga en mis espaldas.

Creo que a ella la trato más educadamente… a mi parecer. Y no solo eso... estoy más sonriente de lo habitual.

Mientras me dirijo a donde está el capitán, siento que alguien me observa y no me encuentro errado. El chico peliverde, que ahora recuerdo que es el ex cazador de piratas Roronoa Zoro, me observa detenidamente mientras él entrena.

_ Hola... _ le saludo, inclinando la cabeza, él solo bufa y sigue con su levante de pesas, ignorándome.

_ "Qué caracter..." _ pienso a mis adentros.

Voten y comenten... no sean tímidos.

Bye, Sayonara, Adieu, Aufwiedersehen, Chau!