Peter bufo.

Estaba verdaderamente harto de estar en clases. Lo único que deseaba era irse a casa de una vez por todas. Pero para su desgracia, aun faltaban tres horas.

Cuando sonó el timbre para el ultimo recreo. Salio lo mas rápido que pudo, y se dirigió a uno de los patios de la Universidad. Por suerte, estaba vacío. Se sentó al pie del roble mas grande que había. El cielo estaba soleado, pero parecía que podía llover en cualquier momento.

«Últimamente todos los días están así» pensó Peter.

Recostó su espalda en el roble, y suspiro.

Estaba agotado.

Tanto mental como físicamente. Y eso en realidad le estaba afectando en sus estudios. Pero aun así no trataba de arreglar sus problemas.

May le había dicho que se miraba mas pálido, y que había adelgazado. Vio que era verdad cuando a unas cuantas horas después se había duchado, y había visto su cuerpo completo desnudó en el espejo que estaba en la ducha. Tenía ojeras muy grandes, y sus clavículas se marcaban más que antes. También últimamente se había sentido mareado debido a la falta de sueño y a la poca alimentación.

Quería ignorar que muchos lo trataban diferentes por el hecho de ser Gay, pero no podía. Y en realidad eso y las burlas de Flash, le estaban pasando factura.

Saco un cigarrillo de su chaqueta, y lo encendió. Sabía que estaba mal y que se estaba haciendo daño -especialmente cuando no había comido nada en todo el día-, pero los cigarros eran los únicos que lo hacían relajarse y olvidarse del mundo.

Le dio una calada al cigarro, y cerro los ojos cuando sintió que el humo inundaba sus pulmones.

Estaba tan concentrado en su cigarro, que no se dio cuenta que alguien se acercaba.

—¿Sabes que no se puede fumar aquí?. — preguntó una voz frente a él.

En vez de alterarse, de relajo mas. Era por eso que amaba los cigarros.

Le dio otra calada al cigarro, y exhaló nuevamente el humo. Abrió los ojos para ver de quien se trataba. Y aun mantuvo la calma al ver que se trataba de un maestro. Asintió suavemente a la pregunta.

»¿Por qué estas fuera de clases?. — Peter se encogió de hombros ante la pregunta. Observo al maestro, lo había visto unas cuantas Veces -ya que al ser su primer año en la Universidad no había tratado mucho con maestros-, era el maestro de física, según había escuchado era experto en ingenería y en otras áreas, pero él había querido impartir la clase De Educación Física.

Su nombre -si no mal recordaba-, era Tony Stark, era uno de los maestros mas viejos, pero -en su opinión- no estaba nada mal para tener aproximadamente 50.

Tony se sentó a la par de él, y también recostó la espalda en el roble. Peter lo miro a los ojos, y Tony hizo lo mismo.

Tony apartó la mirada de Peter, se saco un cigarrillo de la bolsa de el pantalón. Luego volvió sus ojos a Peter.

»¿Enciendes mi cigarrillo?. — hizo la pregunta mirando a los ojos de Peter, quien busco en su expresión burla. Aun así se dio cuenta de que hablaba en serio.

Saco su encendedor y encendió el cigarrillo de Tony, quien se lo había puesto en los labios.

»Tu nombre es Peter, ¿verdad?. — Tony le dio una calada al cigarro. Peter alzo una ceja, pero aun así asintió. — Te vi la semana pasada, en mi clase. Eres el chico que golpeó a Flash, frente al director. — Peter apretó los labios, ya se había olvidado de ese “incidente”. — Y debo decirlo...para ser delgado y pequeño, fue un muy buen golpe. — Tony comentó sonriendo. Peter rodó los ojos.

Peter arranco un poco de pasto con su mano derecha.

—Él me estaba molestando. — Susurró Peter, esta vez Tony alzo una ceja.

—Vaya, pensé que eras mudo. — comento sarcástico. — Se que él, te estaba molestando. Recuerda, estabas en mi clase. — Peter no contesto nada, y Tony no agrego nada. Se quedaron en silencio durante algunos minutos. Hasta que Tony volvió a hablar. — ¿Cuantos años tienes?. — Peter suspiró.

—Diecinueve. — contesto en un susurró, Tony giro el rostro para que Peter no pudiera ver su expresión. — ¿Por qué?.

—Bueno...por lo que se, eres muy inteligente. — contestó simple.

Peter por primera vez en varias semanas sonrió. Y Tony lo vio.

***

Peter abrió su casillero. Tenía dos horas restantes, y luego se podría marchar. Cambio sus libretas, y cuando cerro le asusto ver a Tony recargado en el casillero de a la par.

Se llevo una mano al cabello, y apretó los labios. Habían pasado tres semanas desde que Tony fumo con él, y todos los días anteriores habían estado juntándose en los recesos para charlar y fumar.

—Ya le dije que no haga eso. — se quejo Peter por quinta vez en la semana.

Termino de cerrar su casillero.

—Y yo ya te dije que no me hables de usted, Peter. — reclamó Tony. — Pero bien, yo no tengo la culpa de que tu te asustes por todo, ¿okay?. — Peter cerro los ojos para no soltarle un par de groserías.

—¿A que vino?. — ignoro las ultimas palabras de Tony. Su voz sonó amargada. Tony alzo una ceja.

—¿Estas en tu periodo?. — preguntó sarcástico. Peter puso su brazo sobre el casillero, y sobre este recostó su cabeza. — Como sea...no venía a nada. Así que adiós. — Peter reacciono y tomó a Tony del brazo antes de que se fuera.

—Espera...— Peter miro a Tony a los ojos. Luego desvío la mirada. — Yo...lo siento, no he tenido un buen día. — confesó recordando como Flash y sus amigos se habían vuelto a burlar de él, en la mañana. Por lo que había ido a parar a la dirección por quinta vez en dos semanas. Peter volvió sus ojos a Tony. Este lo estudio un poco,luego cerro los ojos durante unos segundos. Cuando los volvió a abrir, su expresión paso de enojo a ser mas dulce y comprensible.

—Esta bien, te entiendo. No tienes porque disculparte, yo no tengo mucha paciencia el día de hoy que digamos. — Tony acarició la mano con la que Peter lo había tomado. — Sólo quería preguntarte si estas libre en la noche. — comentó.

Peter lo pensó. No creía que May le diera permiso de salir, ya que el director la había mandado a llamar, y no creía que estuviese muy contenta con él. Sin embargo asintió.

»Bien. — Tony sonrió. — Nos vemos en frente del edificio en el que vives entonces. — dicho esto,se marchó.

Peter se preguntó como llegaría, si jamas le había dado la dirección. Pero apartó sus pensamientos cuando se dio cuenta de que ya habían tocado.

Corrió a su salón rogando que el maestro no hubiese llegado aun.

***

Peter se llevo otra fresa a la boca. Tony trataba de regular su respiración, Tony le dio una calada al cigarro que se estaba la fumando. Peter se acabo la fresa y miro por la ventana de copiloto del auto de Tony, Tony lo miro de reojo.

Le faltaba poco para volver, había salido por la ventana de su habitación. Y por momentos rogaba porque May no se haya dado cuenta. Sabía que si eso pasaba se metería en graves problemas, pero estaba seguro de que aun así no se arrepentiría de haberse escapado. La había pasado genial con Tony.

—¿En que piensas?. — la voz de Tony llamo su atención, ya se había acabado el cigarrillo.

—Uhmm, cosas irrelevantes. — contestó, miro los ojos color Whiskey de Tony, y se dio cuenta de que sus pupilas estaban dilatadas.

Se acerco un poco mas a Tony por instinto, y luego se recostó en el asiento sin dejar de verlo. Tony hizo lo mismo que él, y se dedico a observar sus labios.

Peter se paso la lengua por el labio inferior, Tony termino de acortar la distancia y lo besó.

Era el primer beso de Peter.

Sabía que jamás lo olvidaría. Suspiro encantado al darse cuenta de que sabía a una mezcla de cigarros y fresas.

La lengua de Tony se enredo con la suya, y se dedico a tratar de llevar el ritmo y a disfrutar de el sabor. Un gemido se escapo de su boca cuando Tony mordió su labio inferior. Tony sonrió y él sintió como sus mejillas se calentaban.

El sabor de las fresas y el cigarro había quedado en su boca, mordió su labio inferior cuando se dio cuenta de que esa noche no podría dormir.

Una pregunta rondó su cabeza. ¿Que iba a pasar después de ese beso? Él único que tenía respuesta a esa pregunta, era Tony.

—Sabes...— la voz de Tony volvió a llamar su atención, Peter lo miro. — me, me gusta imaginar como sería mi futuro. Es decir, que es lo que va a pasar dentro de algunos días, semanas, meses...y quizás años. A veces decepciona que no pase lo que uno se imagina,  pero lo cierto es que todo al final valdrá la pena. — Tony sonrió, y deslizo su mano sobre la de Peter.

Peter le devolvió la sonrisa.  Y Tony lo volvió a besar. Esta vez Peter se dedicó a seguirle él beso, y a gravar el aroma de Tony en él.

Esa noche era la mejor de su vida.

***

Peter apretó los ojos para no llorar. Aun así, una lágrima se deslizó por su mejilla. 

El recuerdo de Tony y él, besándose en él auto del mayor, lo estaba matando. Era horrible recordar como las cosas cambiaron después de ese día.

Tony le había llevado a la casa. Y se habían despedido con un beso. A la mañana siguiente se despertó esperando una llamada o un mensaje de Tony, pero se decepciono al ver que no era así. Lo dejó pasar, y espero a que Tony le llamara y que las ideas que tenía en la mente le cambiaran. Siempre podía sentir él aroma De Tony. Había tratado de olvidarlo, pero se dio cuenta de que era misión imposible.

Había llegado a la conclusión de que para Tony, había sido un simple juego.

Desde ese día las noches para él -inevitablemente- eran mas largas, estaba perdiendo mas horas de sueño que antes y sus comidas habían bajado más.

Había tenido que rogarle a May para que no lo llevará al médico, o a un psicólogo.

Al principio dejo los cigarros -ya que le recordaban a Tony-, pero eso no le había durado más de dos días. Cuando volvió a fumar, estaba solo en casa -May había salido con una amiga- y segundos después de haberle dado la primera calada -por instinto-, había ido a la nevera, y había tomado un tazón con fresas dulces. Cuando se dio cuenta de lo que había echo, no había podido evitar llorar porque le recordó a Tony.

Desde ese día -dos semanas exactamente-,no había día en el que no fumara, y al mismo tiempo comiera fresas.

Se sentía como el peor tonto de todos. No se había dado cuenta,  y se había enamorado de Tony.

Suspiro cuando se dio cuenta de que nuevamente se había quedado inmerso en sus pensamientos.

Maldijo en voz baja, ya que le tocaba Ed. Física, y lo peor de todo era que no se la podía saltar ya que estaban en exámenes.

Harry se paro al lado de él, cuando se dirigía a la clase de física, y le sonrió. Peter detallo rápidamente sus facciones -algo que jamás había echo con nadie mas que no fuera Tony- y le devolvió la sonrisa.

Era muy guapo.

Y había decidido que no se quedaría estancado con Tony, y por lo que sabía, Harry era Gay.

—¿Estas bien?. — la pregunta de Harry lo tomo por sorpresa.

—Si...¿por qué?. — preguntó con dudas. Harry se paso una mano por su cabello, y luego lo miro con los ojos profundamente verdes.

—Parece que has llorado. — comentó dulcemente. Peter maldijo en su mente.

—Oh...— se sintió mas tonto cuando lo único que de le ocurrió decir fue eso. — No...quiero decir, no es nada. Es solo que...vi un vídeo muy triste en internet, y soy muy sensible, eso me hizo llorar. — mintió, Harry alzo una ceja, pero no insistió. Y Peter en serio se sintió tonto cuando se dio cuenta de que había sido la excusa mas estúpida que había escuchado. No siquiera les dejaban usar el móvil cuando estaban en los recesos, peor en clases.

—¿Te puedo dar un concejo?. — preguntó Harry, antes de entrar a  la clase de física. Peter miro brevemente dentro de el salón, y se dio cuenta de que Tony y todos los demás estudiantes estaban ahí, solo faltaban ellos. Tony se dio cuenta de que no entraban, y le alzo una ceja.

Peter lo ignoro y miro a Harry. Asintió suavemente.

—Si, claro. — su voz había sido en un susurro, y trato de no ponerse nervioso cuando sintió la mirada de Tony sobre ambos.

—Bien...se que no debería de meterme pero...olvida lo, estoy comenzando a divagar. — Harry se rió de él mismo, y Peter no pudo evitar sonreír dulcemente. — Lo único que quiero decirte, es que no importa lo que te este pasando, yo se que tú, eres lo suficientemente fuerte para superarlo. No dejes que te afecte demasiado. Eres demasiado inteligente para que pierdas tu tiempo en cosas o personas, que no lo valoran. Piensa en lo que te estoy diciendo. Tú, eres una parte del futuro del mundo. No dejes que nada ni nadie te robe tu futuro....y pues, yo siempre estaré para ti, ¿okay?. — Peter asintió, y le sonrió dulcemente a Harry.

Tenia ganas de llorar.

—Tu lo que quieres es hacerme llorar, ¿verdad?. — bromeo. Harry le sonrió coqueto.

—Quizás. — dicho esto, Harry entro al salón. Peter vio como se colocaba en el puesto de siempre.

Sonrió y entró a la clase ignorando a Tony. Las palabras de Harry le habían calado profundamente.

***

Peter sonrió cuando Harry y él, terminaron de hacer los ejercicios al mismo tiempo.

—No sabía que eras tan flexible. — comentó Harry, los demás también terminaron y tomaron sus cosas para marcharse lo más rápido posible. Siempre era así. En cambio Peter y Harry, desde hacía dos semanas que terminaban primero todos los ejercicios, y salían de último.

Peter se rió.

—Te sorprenderías al ver que tan flexible puedo ser. — dijo en un susurro para que lo escuchara solo Harry, todavía habían un par de alumnos y Tony en el salón. Aun así Tony le escucho, y sintió una punzada de celos.

Harry encendió un cigarrillo, y le dio una calada. Luego se lo paso a Peter, quien también le dio una calada.

—Podríamos averiguarlo...— sugirió Harry coqueto, Peter alzó una ceja, y Tony se llevo ambas manos a las sienes mientras se sentaba.

—Podría ser...— A Tony le asombro lo seguro que Peter sonaba. Hacia aproximadamente un mes -desde que se habían besado-, Peter de avergonzaba por cualquier cosa. Y ahora planeaba aceptar propuestas de sexo como si fuera un experto. —  pero, por él momento, lo mejor es que nos vayamos a duchar. — Harry asintió ante lo dicho por Peter. Ambos se dirigieron a la salida.

—Peter...— Tony apretó los labios al ver que ambos habían parado cuando estaban a punto de salir. Se maldijo por su impulso, pero no pudo evitar llamarle. Tenían que aclarar muchas cosas. — podemos...¿podemos hablar?. — pregunto en un susurro, pero supo que le había escuchado, cuando le había dado una calada al cigarro, y luego se lo había dado a Harry para que se lo llevará.

Segundos después, Harry salio.

Peter se dio la vuelta,y camino hacía donde él, Tony se puso en pie.

—¿Que pasa, Tony?. — Tony se sorprendió con la seguridad y tranquilidad con la que le hablo Peter. Peter rezó para no ponerse nervioso, aunque eso era improbable. El cigarro lo había tranquilizado lo suficiente.

—Yo...— Tony suspiró y hizo una pausa inseguro. Peter lo notó. — quería disculparme por lo de aquella noche, me hubiese gustado disculparme antes...pero tuve un problema con Steve, un amigo. Y digamos que eso me tenía mal. — Peter alzó una ceja.

—¿Eso es todo?. — Tony le miro confuso.

—¿Si...?

—Bien, ¿me puedo ir? Harry me esta esperando. — Tony entre cerró los ojos, y Peter los rodó. Tony asintió, le iba a dejar ir. Si orgullo como Stark no le permitía pedirle que se quedara.

Peter se dio la vuelta, y Tony decidió que su orgullo se podía ir al infierno.

Tony tomo esta vez él brazo de Peter, antes de que comenzará a caminar. Peter se medio giro, y lo miro a los ojos.

—Espera...— no sabía que decir. — ¿Harry...? ¿Harry es tu novio?. — preguntó. Peter dudo un segundo y luego negó con la cabeza. Tony suspiro.

—¿Que te hizo pensar eso?. — preguntó.

—Pues sus actitudes...y creo que por qué no te había visto fumar nunca con nadie más, aparte de mi...— Peter negó con la cabeza.

—Creo que...bueno, no creo, me gustas. Y creeme que si fuera novio de Harry, jamas habría vuelto a probar un cigarrillo mientras estuviera con él. — confesó Peter, Tony alzo una ceja. — ¿Quieres saber porque?. — la pregunta fue hecha con un toque de inocencia, Tony asintió. —  Desde hace 1 mes, las fresas y los cigarrillos, siempre saben a ti. — Peter acorto la distancia y rozo sus labios contra los de Tony.

—Me gustas... También. — Tony dijo,y luego beso a Peter. Peter sonrió cuando sintió las manos de Tony sobre sus caderas.

Se separo del beso, y se deshizo de las manos de Tony rápidamente. Comenzó a caminar a la salida. Tony lo miro confuso.

—Te esperó esta noche a las 8, frente a mi casa. — Peter dijo, y Tony sonrió como enamorado.

Se sintió tonto cuando se dio cuenta de que se había quedado viendo la puerta por donde Peter había salido.

Fin.