Sentado en el suelo, Jimin reía alegremente mientras los pollitos se entusiasmaban a su alrededor, soltando sus "Pío Pío" a la vez que batían sus pequeñas alitas y saltaban con alegría, cada uno intentando llamar su atención para que les diera un poco de comida.
—¿Cómo haces eso? —preguntó una suave voz baja y sorprendida frente a él.
—¿Qué cosa? —respondió, observándole con una bonita sonrisa de ojos.
—Eso —señaló Tae a los pequeños animales a su alrededor—. Y no es solo con ellos, Betty también te sigue cada vez que te ve.
—Minnie no sabe —rió suave—. Minnie solo acariciar y acariciar, decir palabras bonitas a bonitos animales —explicó mostrándole sus manitos vacías a los pollitos.
Pero eso no quitó el entusiasmo a los pequeñines, quienes de igual forma picotearon su mano buscando más, causándole cosquillas al omega.
—Uhm, ¿cómo crees que esté Namjoon y Jin? —preguntó Taehyung, observando en dirección a la casa.
Agitando su mano hacia los pollitos, despidiéndose cuando estos fueron con sus mamás, Jimin le observó.
—Namjoon enfermo, no Jin —le recordó saliendo del granero, sacudiendo sus pantalones y su colita.
—Si, pero Jin estaba muy preocupado por el —le recordó.
—A Jin le gusta Namjoon —recordó el dulce híbrido y tocó sus mejillas—. Hoyuelos, hoyuelos —comentó.
Taehyung frunció ligeramente el ceño y asintió, no los conocía lo suficiente como para decir lo contrario y era difícil creer que Jimin no decía la verdad cuando SeokJin se había mostrado tan preocupado por aquel alfa.
—¿Qué hacemos? Ya terminamos con nuestras tareas y Jin está ocupado para que nos enseñe algo —expresó, perdido.
—¡Tiempo libre! —exclamó la dulce cosita, alzando sus brazos sobre su cabeza con entusiasmo.
—¿Y eso es bueno? —preguntó el joven omega, confundido.
—Minnie pasa tiempo libre con su oso, Tae puede pasar tiempo con Kookie —explicó sonriente, comenzando a caminar.
—Me gusta tu idea y no quiero ser aguafiestas, pero creo que ambos estaban muy ocupados —comentó, siguiéndolo.
Minnie se detuvo e inmediatamente hizo un puchero.
—¿No tiempo para Minnie y TaeTae? —preguntó, triste.
—Bueno, siempre podemos comprobarlo, ¿no? —indicó no muy seguro.
Recuperando su sonrisa, Jimin tomó la mano de su amigo y comenzó a correr hacia la casa, dejando a su paso unas alegres carcajadas e ignorando a los otros omegas que trabajaban cerca.
Cuando entraron, Minnie fue directamente al despacho de su pareja, encontrándoselo de frente al abrir la puerta.
—Tiempo libre —exclamó al contemplar a su oso.
—Me alegro bebé, pero no tengo tiempo libre en este momento —expresó besando su frente—. Debo de ir a revisar la granja y después tendré una reunión por llamada con el consejo —explicó.
—¿No tiempo para Minnie? —preguntó con sus orejitas peludas cayendo en desánimo.
—Te compensaré después —prometió acariciando su cabeza—. Puedes jugar con Taehyung mientras estoy ocupado.
—Minnie no jugar —gruñó frunciendo adorablemente el ceño—. Minnie trabajar con Tae, pero ya no más trabajo para ninguno —explicó volviendo a tomar la mano del pequeño hámster que se había mantenido en silencio atrás.
—Oh, lo siento —sonrió el oso—. Pero si ambos tienen tiempo libre lo pueden pasar juntos, ¿no? Mientras no salgan de la granja y vayan a los límites, estará todo bien —aseguró.
Jimin frunció sus labios, pensativo.
—¿Qué hacer? —preguntó.
—Cualquier cosa para no aburrirse mientras no sea peligroso —expresó sin ser de mucha ayuda.
—No ayudas, oso —se quejó la pequeña cosita.
—Lo siento, bebé —rió suave antes de besar su frente—. Tienes pinturas nuevas, ¿no? tal vez puedas usarlas —comentó y revisó la hora—. Tengo que irme, nos vemos después —se despidió dejando a solas a ambos omegas.
—¿Pintamos? —preguntó el pequeño híbrido ardilla a su amigo.
—No lo sé, la última vez mi ropa quedó manchada y no se la pude sacar —expresó—. ¿Tal vez podamos leer? ¿Ver una película? ¿Jugar afuera? ¿Preguntarle a Jin?
Pensando en sus opciones, Minnie frunció sus labios sopesando seriamente, como si fuera una decisión muy importante.
—Vamos con Jin, así podemos ver cómo están y preguntarle qué podemos hacer, tal vez a él se le ocurra algo más entretenido —pensó Taehyung.
—Vamos con Jin —sonrió Jimin.
Tirando de su mano, Jimin lo llevó a través de la casa. Cuando llegaron al pequeño consultorio de Hoseok, tocaron la puerta y entraron sin esperar una respuesta.
—¿Cómo sigue? —preguntó Taehyung, contemplando del gran hombre en la camilla y al omega sentado a su lado, tomando su mano buena entre las suyas.
—No ha habido cambios desde esta mañana —suspiró observándoles—. Las heridas no han mostrado signo de curación todavía, y eso me preocupa un poco —expresó.
—¿Hobi? —preguntó Jimin observando en el pequeño cuarto.
—El se ha estado dado unas vueltas, pero está cambiando y ordenando todas las cosas en el nuevo consultorio, creo que piensa cambiar a Namjoon allá cuando termine —explicó—. EunHa también ha venido de vez en cuando —respondió, volviendo su mirada a Namjoon.
—¿Escuchar eso? —preguntó Minnie, moviendo sus orejitas peludas.
—¿Escuchar qué? —preguntó Taehyung, observando un poco curioso como esas orejitas sobre su cabeza se movían.
—Eso —pronunció frunciendo ligeramente el ceño—. No es pancita de Minnie —anunció tocándola—. No de TaeTae —advirtió inclinándose cerca de su pequeño amigo—. Es de... ¡Jin!
—¿Qué sucede conmigo? —preguntó el nombrado, observándoles con expresión cansada.
—Uh... ¿Has logrado dormir algo? —preguntó el pequeño hámster.
—No mucho —negó suave.
—¿Comida? —preguntó Minnie.
—No tengo apetito —respondió volviendo a observar a Namjoon.
Ambos pequeños jadearon con sorpresa.
—Jin comer, mucho —exclamó el dulce chico.
—Lo sé, pero realmente no tengo apetito —sonrió suave, sin ánimo.
—Kookie se va a preocupar —expresó Taehyung, angustiado.
—Tae y Minnie alimentar a Jin —decidió la pequeña cosita y entonces tomó la mano de su amigo saliendo de la habitación, sin permitirle al omega mayor decir nada al respeto.
—¿Podemos hacer esto? —Tae preguntó bajito mientras entraban en la cocina.
—Jin comer o enfermar —expresó colocando sus manitos en su cintura mientras observaba alrededor de la cocina.
—Pero... ¿Ji-seok no se va a enojar? —insistió—. A él no le gusta que nadie entre en la cocina cuando él no está —le recordó.
—No, guardián de la cocina bien —aseguró comenzando a revisar cada mueble en busca de comida—. Es por Jin.
Taehyung le observó, todavía inseguro.
—No sé cocinar —anunció finalmente, mientras imitaba al pequeño hibrido ardilla revisando todo.
—Minnie tampoco —soltó una suave risita baja—. Pero, galletas para Jin y leche —explicó—. Solo buscar, guardián siempre las esconde en un lugar nuevo —frunció sus labios por lo tramposo que era el alfa.
—Eso es porque siempre tengo una pequeña ardilla invasora que se las lleva sin mi permiso —anunció una voz divertida a espalda de ambos pequeños omegas.
Pegando un pequeño salto, ambos se observaron con miedo antes de dar media vuelta lentamente, contemplado al alfa observarle con los brazos cruzados sobre su pecho.
—¡Fu-fu-fue idea de Minnie! —chilló Tae antes de cambiar sorpresivamente y luego escapar de la cocina en su pequeña figura, dejando su ropa atrás.
—Gran compañero de robo te conseguiste —resopló Ji-seok, divertido con la situación.
—¡No culpa de Tae! —defendió colocando sus manos en su cintura—. Ji-seok asustar a TaeTae —acusó señalándolo con su dedito.
—¿Así que es mi culpa que se asustara y huyera abandonándote? —alzó una ceja.
El dulce chico asintió relajando su postura nuevamente.
—Ustedes realmente... —negó con un suspiro—. ¿Qué hacían aquí de todas formas? —interrogó.
—Oh, comida para Jin —respondió—. No comer, pero debe comer. Minnie y Tae no cocinar así que llevar galletas y leche —explicó.
Observándolo unos largos minutos más, el alfa finalmente arrojó un suspiro y bajó sus brazos.
—Si quieres llevarle comida a tu amigo, búscame y dime, pero no invadas mi cocina desordenando todo a tu paso —reprochó y se acercó al pequeño hombrecito.
Alzando su brazo, abrió una de las gavetas de la alacena y sacó un frasco lleno de galletas.
Jimin le observó con una pequeña o formando sus rellenos labios.
—¡Eso es trampa! —acusó cuando el alfa se alejó—. Minnie no alcanza lugares altos porque pequeño —refunfuñó.
—Lo sé —asintió—. Por eso las oculto ahí —se alejó—. Toma un plato junto a un vaso —ordenó.
Refunfuñando adorablemente por lo bajo debido a lo tramposo que se había vuelto el guardián de la cocina, Jimin obedeció y chilló con sorpresa cuando sintió una mano en su colita, muy cerca de su trasero.
—¡No tocar a Minnie! —exclamó alejándose del tacto del alfa, enfrentándolo.
Ji-seok le observó y alzó una ceja mientras se volvía a acercar.
—No, no, no, no... —gruñó alzando sus manos frente a su cuerpo, como si tan solo con eso pudiera impedir que el contrario se acercara más.
—Ya dije que lo siento —anunció repentinamente el alfa, deteniéndose—. Fue un accidente.
—¿Minnie? —preguntó una tercera voz.
Volteándose, el dulce chico contempló a Hoseok parado en la entrada de la cocina.
—¡Hobi! ¡Él me tocó! —acusó yendo directamente a su lado, escondiéndose detrás de su cuerpo.
—Ji-seok —pronunció el beta, alzando una ceja en su dirección.
—Fue un accidente —suspiro el alfa contrario—. Tropecé con la ropa que dejó el otro niño en el suelo, lo pasé a tocar y reaccionó así —se excusó.
—¿Qué hace la ropa de Taehyung en el suelo? —preguntó Hoseok observando a Minnie.
—Guardián lo asustó —acusó con todo su rostro arrugado.
—Porque los sorprendí invadiendo mi cocina —se excusó.
—¿Minnie? ¿Estás bien? —preguntó Hobi cuando la pequeña ardilla gimió.
—No, Minnie no bien —se quejó rodeando su cuerpo con sus brazos—. Cuerpo de Minnie raro, quiero a oso —expresó con cierto tono angustiado qué preocupó al contrario—. Todo por tocar a Minnie —volvió a acusar gruñéndole al alfa.
—Ya dije que lo siento, fue un accidente —espetó Ji-seok—. Solo te pasé a llevar, a penas te toqué e inmediatamente te alejaste —le recordó.
—Ven Minnie —pronunció Hoseok sabiendo que quedarse ahí sería dar un círculo sin fin en la discusión de ambos.
—Pero... Comida de Jin —recordó.
—Ji-seok...
—Yo se la llevaré —asintió el alfa recogiendo la ropa tirada en el suelo—. Solo habla con ellos para que no vuelvan a invadir mi cocina sin mi presencia —ordenó.
Obstruyendo la vista de Jimin con su cuerpo, Hoseok le sonrió cálidamente y le animó a salir de ahí, dirigiéndose a la sala de estar.
—Minnie raro —se quejó tomando asiento—. Quiero a Yoongi.
—Lo sé, pero Yoongi está un poco ocupado en este momento lidiando con el Consejo —explicó tomando asiento frente a él.
—Minnie quiere a oso, Yoongi hacer sentir bien a Minnie —estiró su labio interior en un puchero.
—¿Sabes por qué ocurre eso, Minnie? —preguntó con cuidado.
—Porque Minnie quiere mucho a su pareja —respondió.
—Exactamente —asintió Hoseok—. Y como lo quieres mucho, tu lado sumiso, el omega dentro de ti, rechaza cualquier tacto proveniente de un alfa porque solo quieres el del tuyo, y es por eso por lo que te sientes raro —explicó—. Aunque haya sido accidental, que otro alfa te tocará sin tu permiso se sintió extraño y mal, ¿no?
Minnie asintió fervientemente, agitando su cabello ante el movimiento.
—Bueno, es debido a ello —le sonrió—. No te preocupes, la sensación puede persistir un poco, pero se irá, y si no lo hace, Yoongi te ayudará —prometió.
—¿Minnie sentirse mal cada vez que alfa toque a Minnie? —preguntó.
—Así es —asintió—. Es común en las parejas que aún no han completado su unión e incluso puede persistir después de que la terminen.
—Pero... ¿Y si guardián toca a Minnie otra vez? —frunció el ceño.
—Puede ocurrir —asintió—. Pero si es un accidente no hay mucho que hacer, solo aceptar sus disculpas y luego ir con Yoongi para que te ayude —expresó—. ¿Estás mejor? —preguntó.
—Poquito —respondió y su mirada viajó hacia su pierna cuando sintió algo escalar por ella—. TaeTae —exclamó sonriendo mientras ayudaba a su amigo subir a su regazo.
—Les dejaré para seguir con lo mío entonces —sonrió Hoseok levantándose—. Ya sabes Minnie, no es malo que te sientas así, es natural —le recordó antes de alejarse siguiendo con lo suyo.
Y aunque Minnie había entendido, ¿realmente tenía que aceptar que cualquier alfa tocara partes de su cuerpo que solo su oso debía de tocarle aun cuando estos fueran solo un accidente?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro