Observaba mi reflejo en las puertas metálicas dobles por las que hacia media hora habían entrado a Eva, en que momento me había convertido en un idiota, muchas cosas comenzaban a cobrar sentido ahora que en medio de la tormenta podía pensar con más claridad, todo lo contrario, a lo que experimentamos en momentos como estos.

Estaba sentado en el suelo con las rodillas recogidas a la altura del pecho y mi cabeza apoyada sobre ellas, mis manos sobre mi nuca. Muchas enfermeras me habían pedido en más de una ocasión que me fuera a la sala de espera, pero ni el mismísimo Rey Felipe iba a hacer que yo me moviera de sitio.

Entre el dolor, el remordimiento, el arrepentimiento e incluso culpa, me corroen, la he hecho sufrir, quisiera tener una máquina del tiempo y poder regresar a el día de mi cumpleaños para haber hecho lo que debía hacer, hubiésemos vivido juntos ese momento cuando se enteró de que esperaba un bebé, aunque es demasiado pronto para nosotros le hubiese gritado a los cuatro viento que esa noticia me hacía feliz, mejor dicho me hace feliz, pero no hay nada que pueda hacer, necesito reparar mis daños y sanar sus heridas para que me perdone y poder estar juntos como debió ser.

Entonces pienso en la posibilidad de que ya no esté, mi bebé, mi hijo con Eva, la mujer que sin yo darme cuenta se convirtió en el amor de mi vida, en la madre de mi hijo.

-Por Dios Voy a ser papá- dije en un susurro.

-Así es- Igor que ha estado todo este tiempo a mi lado se hace sentir con su respuesta, entonces caigo en cuenta.

-Tú lo sabias, sabias que Eva estaba embarazada y no me dijiste nada-

-Si lo sabía-estaba herido por la traición de mi hermano- Pero solo hasta mi llegada a Madrid me enteré de que era mi sobrino, hermanito te me estás haciendo mayor-

Sentí una algarabía en el pasillo, unas parejas aparecieron ataviados en su ropa de fiesta.

-Saben algo- preguntó Lucas preocupado.

-Tu- me levanté del suelo y caminé en su dirección enfurecido- Eres un traidor-

Los chicos me apartaron de él, estaba cegado por la rabia y el dolor, estuve a nada de devolverle el golpe de hace unos días.

-Y ustedes también lo sabían- grito señalando al resto del grupo.

-No ninguno sabia, porque habrían de hacerlo- respondió Lucas- El único que sabía tu aventura con lujos de detalle en Mallorca era yo y cuando conocí a Eva, por Dios, era cuestión de sumar dos más dos, y cuando me di cuenta de que estaba embarazada supe que debía cuidar a mi sobrino, hasta que llegaras de los Estados Unidos, pero llegaste tú en plan Dios del ego y arruinaste todo-

-Yo no sabía...- digo avergonzado por mi pésima aptitud- Yo pensé que tú y ...-

-Claro que no podías saberlo si nunca dejaste que te lo explicara, las veces que nos veía juntos siempre íbamos a por Macarena para las consultas, o simplemente la llevaba a su casa porque sabía lo mal que había pasado el día por las náuseas y por y tus meteduras de pata, todo este tiempo quise hacerte entender que estabas equivocado-

-Perdón- dije al fin derrotado.

-No hay nada que perdonar gran tonto- Lucas palmeo mis hombros.

-Quieres que te enseñe algo- Maca se acercó a mí en aptitud maternal para mostrarme una foto, la primera ecografía de mi bebé, mis ojos se cristalizaron y lloré como el día en que perdí a mi madre.

Con cada lágrima se sanaba una herida en mi interior y se habría otra. Los pensamientos negativos no estaban siendo buena compañía en ese momento, lo había tenido todo y en cuestión de segundo puede que lo haya perdido.

-Marco no llores- intentó consolarme Claudia.

-Si mallorquín todavía no han dicho nada, eso es bueno-  me alentó Nacho.

Las puertas metálicas se ha abrieron para dejar ver a dos médicos, se veían exhaustos.

-Familiares de la señora Eva Vegas- dijo la mujer.

-Nosotros- todos hablamos a coro.

-Alguno real- insistió.

-Yo soy el novio, Eva como está- moría de nervios ante las respuestas no dadas, temía que todo estuviera mal.

- La paciente está estable, pudimos controlar la hemorragia, pero hubo que sedarla por el estrés de lo sucedido- comenzó a hablar, internamente comenzaba a dar gracias a Dios.

No me atrevía a formular la siguiente pregunta, pero cuando sentí un apretón en mi hombro supe que alguien más la haría por mí.

-El bebé, está bien- la voz de Igor sonaba serena, no sé si yo lo hubiese podido hacer.

-Eso es lo más delicado- las piernas se me pusieron como gelatinas, ahí venia el bombazo que no se si quería escuchar, no hace una hora que descubrí mi inminente paternidad para serme arrebatada- una de cada tres embarcadas presenta pérdida de sangre en algún momento del embarazo, especialmente en el primer trimestre-

-Pero por Dios necesito saber si perdí a mi hijo o no- le grito exasperado.

-No, su bebé está en perfectas condiciones- respiré aliviado, ese bebé significaba todo para mí en este momento, era la Luz del sol al final del túnel, el que me uniría de por vida a la mujer más increíble del mundo.

-Entonces porque la perdida- preguntó María.

-A eso iba, la paciente tiene un hematoma intrauterino, son pequeños lagos de sangre en el interior de la cavidad endometrial, entre la capa más superficial del útero y el tejido propio del embarazo, sin embargo, su causa es desconocida-  recapitulo y pienso en su caída en la zona de piscinas del deportivo.

-Ella se calló hace dos días, yo mismo la acompañe al hospital y nos dijeron que todo estaba bien- aclara Lucas, y el médico me mira algo intrigado.

-Viejo chismoso limítese a hacer su trabajo- le grita mi subconsciente.

- Lo más importante es que estos hematomas intrauterinos no suelen provocar la pérdida del embrazo, especialmente cuando se observa latido cardiaco-

-Podemos pasar a verla- pregunta ansiosa Claudia.

-Solo familiares- aclara la doctora que había permanecido en silencio.

-Yo soy su cuñada- aclara.

-Claudia es mejor que pase Marco, nosotros debemos ir a la casa por un cambio de ropa para mañana estar aquí temprano- la sugiere mi hermano y yo lo agradezco, la noche va a ser larga, pero necesito estar solo con Eva.

-Nosotros también nos vamos- dice Isco.

-Por cierto, les debo una disculpa a ustedes- señalé a Macarena y a Lucas.

-A nosotros ¿por qué? - dicen sorprendidos.

-Por arruinar la fiesta con todo esto-

-Tranquilo Marco somos o no somos amigos-

-Siempre- nos abrazamos en forma reconciliadora- Por cierto, que es el bebé-

-Una niña- Lucas se ve feliz con su respuesta-

-Eva planeo un espectáculo pirotécnico de fuegos artificiales rosa y al final la feliz noticia, lamento que se lo haya perdido, pero ya me tocará devolverle el favor cuando les toque a ustedes- aclaró Maca.

-Dos mujeres eh... - me paso la mano por el pelo analizando la idea, si yo podría tener dos rubias de ojos verdes para mí solo.

-Ahora si Marco entraste en el club de los papás- se burla de mi Nacho- Pronto sabrás lo que hemos sentido todos-

Antes de marcharse Igor me trajo un café y unas donas, eran como la una de la madrugada cuando entré a la oscura habitación donde dormía plácidamente mi ángel, se veía tan indefensa y pálida, me acerqué junto a la cama para asegurarme que respiraba, su pecho subía lentamente y yo solo podía perderme en ese marcado ritmo, retiré un mechón de cabello que tapaba su lindo rostro y me senté a su lado en un sillón.

La luz del alba me hizo despertar de mi sueño, no supe cuando me había dormido, me dolía todo el cuerpo, sentía que me habían molido a golpes. Me estiré y el pitido de las maquinas me hizo caer en cuenta de donde estaba. Eva aun dormía, me incliné sobre la cama y acaricié su vientre, ese lugar sagrado donde crece nuestro hijo.

-Hola bebé es papá quien te habla y aunque sé que eres muy pequeño aun para escucharme y entenderme, desde que hace una horas me enteré de tu existencia me han embargado una gran cantidad de sentimientos, anhelo el momento de tenerte entre mis brazos, eres la luz que ilumina mi vida, mi sol, mi luna y mi estrella, pero siento miedo de fallarte así quiero hacerte una promesa voy a tratar de ser una versión mejorada de mí mismo, quiero tener la sabiduría suficiente para darte todas las respuestas adecuadas, quiero ser el reflejo de mi padre. Pero sabes antes tengo que hacer que mamá me perdone, porque papá fue muy tonto y la lastimó demasiado, tú te mereces una familia, no dos papás que se odien porque papá no supo enfrentar sus miedos y reconocer cuanto valía mamá. El padre que quiero ser para ti debe ser tu guía, por lo que debo aprender a ser consecuente con mis palabras, pensamientos y por sobre todo debo aprender a ser honesto conmigo mismo y con los demás. Quiero ser tu súper héroe, ese que siempre esté ahí para ti y que te haga sentir seguro. -

-Sé que lo harás no tengo dudas de eso- levanté mi cabeza para hacer contacto con sus ojos verdes.

-Tu...- quise hablar, pero las lágrimas que brotaban de sus ojos me lo dijeron todo.

-Si oí lo que decías, lamento no haberte contado antes- dijo evadiéndome la mirada.

-Y yo haber sido tan gilipollas-

-Mira Marco, quizás hoy no nos una el amor, a mí me fallaste, pero te pido que nunca le falles a este bebé, por favor- tomó mi mano y la colocó sobre su vientre- como pareja no funcionamos, pero la vida se empeñó en juntarnos mediante esta pequeña vida que crece en mi interior, tanto tu como yo seremos responsables de nuestro hijo, eso si quieres ser parte de su vida-

-Claro que quiero- afirmé- de eso no tengas dudas- yo los cuidaré a ambos, velaré por su seguridad-

-Tu y yo sabemos que se siente la ausencia de un padre, y aunque la vida nos los ha quitado, ellos dejaron marcas en nosotros. No permitas que este bebé sienta tu ausencia y créeme que a la primera que le falles haré hasta lo imposible por evitar que mi hijo sufra, no rompas la promesa que acabas de hacer con lo que respecta a él o ella, por mi parte te perdono porque ya estoy cansada de odiar-

-Pero tú y yo...- protesto.

-Tu y yo somos pasado, un nosotros nunca existió, ni existirá. Lo que si tienes que tener en cuenta es que somos dos adultos responsables que tendrán un hijo en común, pero nada más, el lazo con nuestro hijo o hija nunca terminará, hagamos de este bebé alguien feliz y seguro, que sepa que, aunque sus papás no están juntos, siempre va a poder contar con nosotros-

-De eso no tengas la menor duda, sentí mucha angustia al pensar que los perdería- le confieso en un sollozo.

-Yo más, pero gracia a dios el bebé se aferró con uñas y dientes- me dice orgullosa de nuestro pequeño guerrero. - ¿Qué fue lo que sucedió? -

-Creo que va a ser mejor que el doctor te explique porque yo no entendí nada lo único que quería saber es si estaban bien y cuando tuve una respuesta positiva ya nada más importó, y Eva, aunque digas que no estamos destinados a estar juntos, yo creo todo lo contrario y aunque me lleve toda una vida voy a luchar por que tú y yo estemos juntos otra vez, como debió ser desde un comienzo-

⚽️🤰💜

Hola a Tod@s

Ya estoy de regreso, espero que estén satisfechos con el capítulo.

Quiero dedicar este capítulo a leoidel15, gracias por leerme y por comentar.

A Marco le llegó la hora de demostrar cuanto ama a Eva.

Se vienen capítulos llenos de amor y porque no de peleas también.

Besos😘, Betty