La mayoría de las competencias de auto no involucran más que el orgullo de ganar, es algo que la gente nunca entenderá porque solo se siente cuando uno está detrás del volante, la emoción y la adrenalina, cobran un significado y se vuelven parte de ti, para mi esta carrera me haría recuperar la paz que hace mucho tiempo había perdido.

Me puse el casco, me aseguré que todo estaba en orden, aferré mis manos al volante, vi los marcadores que en segundos darían la orden de salida. En cuestiones de segundos dejé de pensar en lo que me rodeaba para sentir la velocidad dentro del auto, ser el auto.

Parecerá contradictorio y hasta peligroso, pero necesitaba no pensar en lo que me rodeaba para no distraerme, había aumentado demasiado la velocidad cuando rebasé la segunda curva, había dejado a todos atrás. Avancé un tramo cuando sentí que pisaban mis talones, veía a unos metros de distancia una curva cerrada, pisé el acelerador al máximo y derrapé, ganado en tiempo, recuperé mi ventaja y al final de dos vueltas pasé de primera la ronda clasificatoria.

-Ostia tía usted sí que sabe, pensé que me daría un infarto cuando vi las maniobras que hacías- nacho estaba más blanco que un papel.

-Que Asensio aun no te rindes- me volteé a verlo.

- Eso nunca, aún queda mucha carrera por delante- se alejó de nosotros con paso firme-

-Oye tu- me gritó Lucas- Se puede saber qué haces, estás loca de remate o se te zafó un tornillo-

-Ninguna de esas, estoy embarazada no enferma-

-Por lo mismo estás embarazada, no piensas en tu seguridad- parecía un papá regañando a su hija.

- Lucas todo está bajo control, esto es más seguro que correr en NASCAR, además tu amiguito lleva tiempo tocándome los ovarios, necesita que le den una lección de humildad-

-Y yo necesito que recuperes la cordura y pienses en...- la llamada a los corredores evitó que Lucas continuara su regaño.

-Lucas, todo va a estar bien- le guiñe un ojo  y me alejé.

La idea de Lucas como el de los fanáticos de automovilismo es que los pilotos están locos, pero esto es un juego de niño pequeño en comparación con la que yo hacía. Un piloto de carreras es alguien completamente consiente de lo que suceda en su entorno, y a mi marco acababa de pasarme en la cuarta curva quedando en segundo puesto para la última ronda.

En lo que algunos recuperaban el aliento fui por una soda, tenía mucha sed, para mi sorpresa Gonzalo había llegado, al verme me abrazó y yo gustosa le correspondí. Jaime me felicitó por mi magistral desempeño en la pista de carreras.

-Te lo dije Jaime, esta chica es buena- Gonzo me estrecho más entre sus brazos

-Ya lo creo le has pateado el trasero a todos- no es el alago que espera una mujer, pero me agradó.

Sentía una intensa mirada que me impedía estar a gusto, mis ojos se dirigieron a la primera persona que tuve delante, los ojos cafés de marco lanzaban cuchillas filosas en mi dirección, apretaba sus dientes y sus nudillos se comenzaban a poner blancos. No sé porque se comportaba así, pero fuimos llamados a la pista para la última vuelta.

Caminé hacia la pista, pero al hacerlo me topé de frente con Marco, mis fosas nasales captaron su delicioso aroma varonil y no pude evitar recordar las veces que he estado en sus brazos. Pero automáticamente alejé esos pensamientos de mi cabeza y me monté en mi auto.

Esta vez solo quedaríamos cinco para competir, Toni Kroos, Benzema, Marcelo, Marco y yo. Esta sería mi última vez detrás del volante, así que disfrutaría este instante, sin olvidarme de mi objetivo, ganar la apuesta, estoy harta de tener que lidiar con Marco.

-Lista para perder Señorita Vegas- rodé los ojos.

-Eso lo dices por ti idiota- bufé en un susurro.

- ¿Cómo dijo señorita Vegas? - iba a repetir lo dicho cuando anunciaron que en segundos arrancaríamos.

Tomé fuerte el volante del Audi, sentía la presión mezclarse con la adrenalina, todos tenemos un límite y el mío es Marco Asensio, tomé tan fuerte el volante que mis nudillos se tornaron blancos, inhale profundo esperando el final de la cuenta regresiva, cerré mis ojos, para céntralos en cuestione de segundos en la pista, justo en el momento en que pisé el acelerados, marco me llevaba una leve ventaja, que acorté en la primera curva. Di mi primera vuelta con éxito, en la segunda, algo salió mal y di un volantuzo que casi me hace salir de la pista, pero rápidamente me reincorporé y volví a tomar ventaja del resto de corredores, comencé a reí por alguna extraña razón, no sé si fue un subidón de adrenalina o el susto del momento, pero solo pensaba en que en cuestiones de minutos me desharía de mi mayor tormento.

Fijé mi vista en la meta, una vuelta más y tendía la victoria, así que necesitaba centrarme, no podía equivocarme, Marcelo se me acercó por la derecha y Marco por la izquierda, ambos intentaban rebasarme nuevamente, sentí un ligero golpe en mi izquierda, pero guardé lo mejor que tenía para el final giré la palanca de cambios y pisé el acelerador a fondo, para obtener la victoria final.

-Toma esa Asensio- le grité.

Todo el Madrid aclamaba mi nombre, pero como era de esperarse no me permitieron subir al podio de ganadores, la carrera era para los jugadores de Madrid y una simple empleada no entraba dentro de las promociones para la automotriz, así que marco obtuvo el tan esperado trofeo del primer lugar. Si era injusto, pero era lo que tocaba.

-Sí que eres buena- dijo en tono bajo casi imperceptible, parece que le costaba asumir su derrota.

-Y lo dudabas- dije con ironía.

-No te voy a mentir, tenía la esperanza de derrotarte y aunque las premiaciones son injustas tu ganaste, así que ten-

- ¿En serio? Me vas a entregar tu premio- dije sorprendida.

-Tú lo ganaste, créeme no sé si pueda, pero tu ganaste la apuesta, así que me voy a mantener lejos de ti por un tiempo- se veía agotado y por primera vez en todo este tiempo veía al marco que conocí en Mallorca.

-Adiós Marco Asensio- susurré y le tendí la mano para cerrar el trato.

- No es un adiós es un hasta pronto-me acercó a él quedando a centímetros de su cuerpo- Te estaré observando Eva, hay algo de ti que no puedo descifrar, pero siento que nos une-

Eso era imposible fuera de Lucas y Macarena nadie más sabia de mi embarazo, y ellos no me traicionarían. Me alejé de él cuándo me percaté que todos observaban la escena, lo dejé allí en medio de todos y me dirigí a la salida.
Mi teléfono comenzó a virar en mi bolsillo, santa mierda tenía más de vente llamadas perdidas, una de Claudia, seguida de un mensaje.

Nos vemos en unos días,
voy por trabajo a Madrid,
espero poder reunirnos.✔✔

   Que bien necesito de una
amiga urgente,tenemos
mucho que hablar✔✔

No me puedes adelantar nada✔✔

Solo te digo, que pronto te
quedarás sin cuñado✔✔

Queeeeeeeee😲😲😲 que te hizo Marco✔✔

Cuando estés en Madrid te cuento. Besos😘😘😘✔✔

El resto de llamadas eran de mi ginecólogo el Doctor Fuentes, al momento la alarma cruzó por mi cabeza, algo no andaba bien. Miré en todas direcciones buscando un taxi, cuando un Audi negro Q7 estacioné frente a mí, la ventanilla del lado del pasajero bajó lentamente para dejarme ver a Marco.

-Necesitas que te lleve-

-No gracias puedo esperar por un taxi-

-No seas orgullosa Eva, ya es tarde, no me es nada acercarte a donde quiera que sea que vallas-

Era cierto ya pasaban de las nueve de la noche, era demasiado tarde para ir con mi médico y moría por estar en mi cómoda cama arropada con mi pijama. Me monté en el recién estrenado coche, esa sensación que lleno el pequeño espacio me hizo recordar viejos momentos compartidos por los dos, más cuando Marco encendió la radio dejando a flor de piel mis emociones y sentimientos.

...Dirá la gente que yo estoy loca
Si yo estoy loca es porque andas en mi cabeza
Quise obligarme a olvidar tu boca
Y ahora mi boca dirá que si tu regresas...

Hay veces como en la canción me preguntaba si a nuestra historia tendía segunda parte o quedaríamos ahí en ese limbo de donde domina el rencor, pero donde siempre lo voy a extrañar, porque por más que siento que lo odio, cada pedazo de mi corazón desecho se empeña en amarlo.

No pude dormir bien, pero el recuerdo de un beso en mis sueños me hizo despertar con una sonrisa. Hoy amaneció haciendo calor, aunque por la ventana se veía el cielo gris.

Espera, estoy en mi cama, pero en qué momento llegué a ella. - grite en mi mente.

Entonces me percato del peso de una mano que rodea mi cintura, lo repasé con la mirada, estaba dormido con su seño ligeramente fruncido, gruño cuando intente apartarme de su lado, pero mis esfuerzos fueron en vano.

-Marco- le grité par que se despertara- ¿Qué haces en mi cama? -

-Buenos días princesa- murmuró acercando su cara a milímetros de la mía.

-Asensio, suéltame y responde que haces aquí- traté de sonar segura ya que su cercanía me intimidaba.

-Siempre te despiertas de mal humor porque recuerdo que en Mallorca eras una retozona- lo miré como si hubiera perdido el juicio.

-necesito una explicación y después de eso te quiero fuera de mi casa- dije poniéndome en pie.

-Está bien, anoche estabas tan agotada que cuando llegamos no te logré despertar así que tomé las llaves de tu bolso y te subí hasta tui casa, era tarde y yo también tenía sueño así que me dormí junto a ti-

-Y que te hace pensar que eres bienvenido en mi casa y mucho menos en mi cama- le grité.

-Vamos Eva bien que nos lo pasamos juntos, no te apetece repetir, por los viejos tiempos-

-No para nada y mira Asensio no me siento muy bien así que te quiero fuera de mi casa, ya- dije exasperada.

-No prefieres que me quede- dijo en modo seductor.

-Y tú no entiendes el significado de te quiero lejos de mi vida- le grité.

Después de esa maldita discusión, hemos pasado una semana sin vernos, el equipo salió de viaje para Londres y me toco quedarme, en estos días he ido con Gonzalo a comer y me he puesto al día con el trabajo de la tesis. Pero la felicidad no es eterna y aquí estoy otra vez rumbo al área de piscinas a una sesión con el equipo.

Lucas y nacho me saludan y cuando voy llegando a ellos pego un resbalón y caigo de culo al piso, al momento siento un dolor insoportable y más de uno corre a socorrerme.

-Eva estás bien- me pregunta un preocupado Lucas.

-No pero ya se me pasa- le contesto.

-Estás segura- pasa su mano por mi rostro para secar una lágrima que cae por él.

-Vamos están haciendo un drama de una caída que la pudo tener cualquiera- a ver quién le dio vela en el entierro a Asensio.

- A mí no me parece que estés bien- Lucas me toma en brazos y me lleva hasta una banca-

No he dejado de presionar sobre mi vientre, me preocupa que una caída de semejante magnitud pueda hacer daño al bebé.

-Llévame al médico Lucas- le pido a mi amigo al tiempo que emito un quejido.

No pude evitar ver la cara de Marco cuando Lucas me volvió a cargar, yo rodeé su cuello con mis manos y me acurruqué en su pecho, lo vi resoplar bajito y fruncir el ceño, se veía enfadado no, lo siguiente, pero ahora eso era lo de menos lo más importante era el bebé.

El medico confirmó que todo estaba en orden, el bebé es demasiado pequeño como para que una caída así lo afecte ya que mi cuerpo lo protege, pero debo evitar ese tipo de accidentes a medida que crece ya que lo expongo más. Por ultimo me comentó el motivo de sus llamadas, mis análisis arrojaron que tenía anemia de ahí la dificultad para respirar, el dolor en el pecho, los mareos, mis manos y pies fríos.

Esto se debía a la deficiencia de hierro y de fosfato, me explicó los riesgos de un parto pretermino, así que salí de allí con una dieta que cubriera mis necesidades de hierro, indicó formato ferroso solo hasta que desapareciera la anemia, aparte del ácido fólico, y las prenatales que ya tomaba.

Esa tarde me quedé en casa, recibí la visita de Macarena y María Teresa, que se empeñaron en cuidarme y hacerme compañía, lo mejor de su visita fue que trajeron al pequeño Lucas y a Alexa, los dos son niños adorables.

Después de un día de trabajo agotador, pero sin excederme, salgo del Bernabéu, para dirigirme a la estación de ómnibus, aunque seriamente estoy pensando es tomar un taxi, sigo sin sentirme bien. Marco charla animadamente, firma autógrafos y algún que otro selfi, con un grupo de fanáticas que siempre los esperan a la salida de los entrenamientos. Responde sus preguntas y lo veo pasarse la mano por el pelo cuando más de una le coquetea. Luce realmente encantador, para el que no lo conoce lo imaginan como el chico agradable que ha todos cae bien, pero por experiencia propia y por lo que pasado entre nosotros sé que es un completo cretino.

-Eva, para por favor- me grita cuando pongo rumbo a mi destino.

Quizás si lo ignoro, logro deshacerme de él, no quiero que me monte un espectáculo en el ligar en que ambos trabajamos y mucho menos frente a sus fanáticas.

-Eva, Eva- lo veo alejarse de sus fans y caminar a grandes pasos hacia mí, mientras yo intento alejarme de él.

-Y ahora qué quieres Asensio-  le digo con resquemor, era tanta la insistencia que decido detenerme.

-Te pedí que te detuvieras, necesitamos hablar- su voz era autoritaria-Estás bien ayer me quedé preocupado-

Lo último que quiero es hablar con él, por Dios se ve tan sexy recién duchado, se fuerte Eva, piensa en ti, en tu bebé, mierda no sé cómo le diré que estoy embarazada.

- Si estoy bien y agradezco tu preocupación, pero si me disculpas ya me marchaba y si te soy sincera, no tengo ganas, ni quiero hablar contigo-

-Vas a seguir ignorándome es eso-

- Es que no lo entiendes, verdaderamente pienso que no hablamos el mismo idioma, cuantas veces te voy a pedir que te alejes de mí, tu y yo nada que ver, nuestro trato solo será estrictamente profesional- que mentirota me estoy lanzando, es que ni yo m e la creo.

-Si entiendo, tu eres mi fisioterapeuta y yo tu paciente, pero, aunque me pidas que me vaya yo sé que te mueres tanto como yo por esto-

Su boca estaba sobre la mía, sus besos sabían tan bien como lo recordaba, y ya se le estaba haciendo costumbre besarme a su antojo, mi mente apagó el lado sensato para dejarse guiar, cuando reaccioné Marco tenía una mano sobre su mejilla y mi mano ardía, joder le había pegado una bofetada.

-Vete Marco, déjame en paz- le grité.

-Tal vez ahora no me puedas creer, pero yo te voy a conquistar-

-Tu tiempo ya pasó Asensio, entiéndelo ya te olvidé-

-Solo deja a Lucas, no te rebajes a ser su segunda cuando yo te puedo dar todo- pero que está hablando el idiota.

-Eres un energúmeno, me dices que sientes algo por mí y al mismo tiempo me ofendes-

-Todo se trató de dinero, siempre fue el maldito dinero-

-Contrario a lo que piensas, yo no te busqué por el dinero, cuantas veces te voy a decir que no tenía idea de quien eras Marco Asencio Willensen, no tengo necesidad, yo trabajo y gano lo suficiente, y no necesito de un hombre tenga millones y me mantenga para ser feliz, no sé a qué tipo de mujer acostumbras, pero conmigo te equivocaste- intento alejarme de él, pero me toma por los hombros y me zarandea.

-Marco...- siento la voz de Isco a mis espaldas.

-Marco suelta a Eva- la grita Lucas.

-Valla viniste a defender a tu amante- Lucas le lanza un puñetazo directo al rostro, Marco se limpia la sangre antes de seguir escupiendo su veneno-  Pude esperar esta traición de todos menos de ti, eres tan falso tu que te decías ser mi mejor amigo, te revuelcas con ella en mis narices-

-No sé de qué hablas, pero es mejor que te vallas, te estás pasando Marco, no sigas diciendo cosas de las que te puedes arrepentir- los dos amigos se enfrentan en una lucha de titanes y todo por mi culpa.

-Pero al final estás recogiendo las migajas de lo que una vez fue mío, porque mírame bien Eva, te puedes acostar con mil, pero a mi nunca me vas a olvidar -se vuelve para verme, luce dolido, estamos armando un verdadero espectáculo. 

-Basta- grito reuniendo todas mis fuerzas, mi vista está nublada, no me siento bien. - Eres una bestia y si sigues así vas a perder a tus amigos- me tambaleo, pero Isco me sostiene, Marco intenta acercarse, pero Lucas lo aparta.

-Me estás haciendo perder la cabeza, pensé que sentías algo por mí, y yo como estúpido me lo iba a jugar todo por ti-

-Definitivamente tú no estás bien de la cabeza Asensio, analiza tus actos antes de que sigas haciendo más daño- contengo las ganas de llorar, mientras hablo.

- Marco, basta es mejor que te vayas- la grita Nacho que se ha unido al grupo por todo el alboroto que se ha formado.

Marco me mira y sé que tiene más cosas para decirme, pero se da la vuelta y se aleja. Los chicos me miran algo preocupados.

-Estás bien linda- me pregunta el vizcaíno, y me alcanza una botella de agua.

-Chicos siento pena con ustedes, no tenían porque- me tapo el rostro avergonzada con ellos.

-De verdad no reconocí a Marco- comenta Isco que aún no sale de la impresión.

-Ven te llevo a tu casa, es mejor que descanses- sugiere Lucas.

-Te lo agradezco, pero ya bastante haces por mí, ahora hasta tu mejor amigo está enojado contigo-

-Marco se puede ir a la mierda, de un tiempo para acá se comporta como un verdadero imbécil- dice restándole importancia.

-Tal vez siempre lo ha sido- comento.

-Deja que Lucas te lleve, si no fuera porque tengo que recoger a los niños te llevaba yo- Isco como siempre al pendiente de sus pequeños, mi bebé no vivirá eso, cada vez dudo más si contarle a Marco o no- y no llores más que te arrugas y te pones fea-

Montamos el Audi Q8 gris daytona propiedad de Lucas Vásquez, no demoraríamos en llegar a mi casa, así que me mantuve en silencio conteniendo las ganas de seguir llorando, Isco tenía razón no puedo llorar más eso no le hace bien a mi bebé ni a mi corazón, no puedo llorar más por amor, Marco Asensio no merece ni una de mis lágrimas.

-Es el- dijo Lucas rompiendo el silencio- él es el padre del bebé-

-No sé de qué hablas-

-Vamos Eva, no soy estúpido desde que Jaime te presentó supe quien eras, además Marco te acaba de montar una escena de celos y eso solo se hace cuando sientes algo por alguien o tuvieron una historia- yo mantengo mi vista en el camino mientras Lucas habla -Marco cuando regresó de Mallorca estaba mal y tengo ese algo que hace que las personas confíen en mi así que terminó contándome todo, el día que te conocí quise saber si eras de verdad la mujer que el dibujaba en su historia, solo tuve que tratarte cinco minutos para saber que estaba equivocado y cuando me percaté de tu embarazo yo...- hace una pausa.

-Todo es tan complicado cuando se trata de él- lo interrumpo cuando iba a volver a hablar.

-Ustedes dos necesitan hablar, largo y tendido, si hay alguien que merece saber que va a ser papá ese es Marco, ese idiota se muere por los niños, sé que su relación es complicada y vaya que lo sé, me se la historia en sus dos versiones y ustedes se aman, no sé si sea un amor sano, pero se aman, además tu bebé merece un papá, ya ustedes después deciden si estarán juntos o no-

-No sé Lucas, no sé si sea bueno que Merco lo sepa-

- Eva ahora no, pero en unos meses, tu vientre va a crecer y todos se darán cuanta que estás embarazada y solo es cuestión de sumar y restar para que Marco saque la misma conclusión que yo-

-él me ha lastimado mucho, no Lucas yo no quiero escucharlo-

-Entiendo que estás dolida y no es para menos, ni yo mismo puedo reconocer a Marco, pero con el tiempo vas a ver las cosas diferentes, pero piensa en esa criaturita antes que en ti-

-gracias Lucas, eres un gran amigo-

-Recuerda que aquí estoy, además quiero ser el padrino, me lo merezco, ya que soy en mejor amigo de sus padres-

⚽️🤰💜

Hola a tod@s
Buenos Días, buenas tardes o Buenas noches. Aquí en mi Cuba son las 12:30 pm.
Capítulo super extenso.
Se vienen momentos super intensos  para el próximo capítulo. Espero disfruten este, y sigan comentando que me encanta.

Besos😘, Betty