—MIRA A QUIÉN TENEMOS aquí —susurró Klaus al oído de Emery una vez que entraron al Mystic Grill con Tony, uno de los híbridos de Klaus.

Emery miró hacia donde Klaus estaba mirando y encontró a Damon y Elena parados allí, conversando. Ella suspiró, volviéndose hacia Klaus, —No hagas nada estúpido.

—Solo hablaré —Klaus frunció los labios, dándole una mirada inocente mientras agregaba, —Añade una pequeña advertencia junto con una amenaza...

—Adviérteles, amenázalos, golpéalos —murmuró Emery, —Pero no los mates.

Tanto Klaus como Tony mostraron sus miradas divertidas, lo que hizo que ella levantara las cejas, —¿Qué?

—¿Vencerlos? —Tony repitió con una pequeña risa.

Emery le sonrió, —Damon puede curarse a sí mismo y a Elena. Estarán bien. Continúen.

Tony no estaba nada mal, Emery lo había conocido hacía unos minutos. No hablaba mucho, pero era agradable tenerlo cerca. Klaus soltó una risita ante ella mientras comenzaba a caminar hacia Elena y Damon, su mano apretada fuertemente alrededor de la de ella.

—Ah, ah —escucharon a Elena decir mientras se acercaban a los dos, —No estoy diciendo que tengan una apariencia atractiva. Estoy diciendo que esta es la que menos me gusta.

—Tomado nota —sonrió Damon, —A ver si puedo hacer alguna mejora.

—No me hagas caso —decidió Klaus interrumpir su conversación haciendo que ambos se volvieran a mirarlo.

Los ojos de Elena se abrieron —Klaus —luego sus ojos se dirigieron a la bruja, —¿Em? ¿Qué estás haciendo con él?

Emery se encogió de hombros, —No quieres saberlo.

Klaus se mordió el labio ante su respuesta mientras levantaba el brazo para rodearle el cuello mientras aún sostenía su mano.

Los ojos de Elena se abrieron ante lo que estaba viendo, —Tú eres... eres... ¡Nos traicionaste!

—Wow —Tony se rió entre dientes, haciendo notar su presencia, —Ella no estaba bromeando cuando dijo que eres jodidamente dramática.

—¿Vas a hacer esto en el Grill? —Damon entrecerró los ojos hacia Klaus, —En ¿frente a todos? Está un poco por debajo de ti, ¿no crees?

—No sé de qué estás hablando —Klaus fingió inocencia, —Acabo de bajar a mi pub local para tomar una copa con mi chica y un amigo.

Fue sólo entonces que Elena se permitió echar un buen vistazo a Tony, quien aparentemente era el corredor que la seguía esa mañana. Klaus sonrió ante la clara conmoción que se extendía sobre los rasgos de Elena, —Dale una ronda, ¿quieres Tony?

—Me sorprende que te hayas quedado en la ciudad el tiempo suficiente para la hora feliz.

—Parece que mi hermana está desaparecida —informó Klaus, —Necesito solucionar eso.

—Linda, rubia, sexy, psicópata —Damon arqueó las cejas, —No debería ser demasiado difícil de encontrar.

—La verdad es que me ha llegado a gustar bastante tu pequeña ciudad —habló Klaus. —Creo que me gustaría tener una casa aquí. Oh, imagino que te estarás preguntando cómo te afecta esto. La respuesta es: en lo más mínimo. Mientras consiga lo que quiero y todos se porten bien, puedes seguir viviendo sus pequeñas vidas como quieras. Tienes mi palabra.

—¿Qué más podrías querer?

—Bueno, para empezar —comenzó Klaus, —Puedes decirme dónde puedo encontrar a Stefan.

—Stefan se fue de la ciudad en el momento en que te salvó el trasero —informó Damon con amargura en su tono.

—Bueno, ya ves, es una pena —con la mano libre lanzó un dardo y dio en el blanco, empezando a perder la paciencia. —Tu hermano me robó. Necesito que lo encuentren para poder recuperar lo que es mío.

—Eso suena como un problema de Klaus y Stefan —se burló Elena haciéndolo dar un paso más cerca solo para sonreír cuando Damon rápidamente dio un paso adelante, listo para defender a Elena.

—Bueno, este soy yo ampliando el alcance, cariño —con eso, se dio la vuelta y estaba a punto de alejarse cuando la mano de Damon rápidamente se extendió para agarrar la de Emery, haciendo que tanto ella como Klaus se detuvieran.

Se dieron la vuelta, la mandíbula de Klaus se aflojó ante la acción de Damon. Arqueó las cejas hacia su amigo, —¿Qué pasa?

—No tienes que ir con él, Em, justo ven-

—No. No creo que ustedes entiendan, así que déjenme aclarar esto —interrumpió Emery, sus ojos parpadeando entre Damon y Elena, —No estoy haciendo nada en contra de mi voluntad aquí, ¿de acuerdo? Las brujas no pueden ser ¿Todo esto? Lo hago porque quiero. Si no puedes aceptar eso, entonces no lo hagas. Pero deja de fingir que necesito que me salven, porque no es así.

Elena jadeó, —Trató de matarme... ¡diablos, sí me mató!

La bruja la miró fijamente con incredulidad, —Joder, Elena, esto no se trata de ti.

—No es pero- —Elena miró a Klaus, quien la estaba mirando medio divertido y medio molesto. —¡Él mató a Jenna! ¡Hizo que Stefan apagara su humanidad! Convirtió a Tyler en un híbrido—"

—Jenna está bien —la interrumpió Emery, ignorando la mirada de sorpresa que recibió del doppelgänger,

—¿Cómo sabes eso?

—Ella vino a verme el otro día —respondió la bruja encogiéndose de hombros, Ah, y Tyler está feliz.

—Sigue siendo malvado —argumentó Elena.

—Bueno —Emery miró al Salvatore mayor y luego de nuevo a Elena, —Damon se metió en la cabeza de Caroline, la obligó a moverse, mató a Lexi, mató a Jeremy una vez y sin mencionar varias otras cosas que ha hecho antes. Sin embargo, aquí estás, llamando a Klaus malvado cuando Damon no está tan lejos. Y tú estás jugando con él. Eres egoísta, Elena. Siempre lo has sido. —miró a Damon —Sin ofender.

—Oh, me ofendí, pero lo dejaré pasar —Damon puso los ojos en blanco hacia su amigo. —Solo mantente a salvo, ¿de acuerdo?

Emery se limitó a asentir. Antes de que Elena pudiera hablar, se dio la vuelta y se alejó, prácticamente arrastrando con ella a un híbrido muy divertido.

EMERY ENTRÓ en la casa de los Gilbert. Había recibido un mensaje de texto de Alaric diciéndole que viniera a cenar y ella aceptó de mala gana.

Todo el tiempo Elena actuó como si no estuviera allí. Alaric podía sentir la tensión entre las dos, pero decidió permanecer en silencio al respecto. En ese momento, Jeremy entró y se dirigió directamente hacia el frigorífico.

—¡Justo a tiempo! —Elena sonrió, —Estamos cocinando.

—Lo siento, estoy de paso —murmuró Jeremy haciendo que Alaric lo mirara,

—Ah, bueno, pensé que nos quedaríamos todos en casa y comeríamos juntos como una familia típica y atípica.

—¿Por qué? —Jeremy preguntó a lo que Elena respondió: —Tal vez porque te despidieron y no se lo dijiste a nadie.

Jeremy se encogió de hombros, —Se lo dije a Em.

—¿Qué? —la cabeza de Elena se giró en dirección a la bruja. Ella arqueó las cejas, —¿No pensaste que era importante informarme?

—No pensé que te importara ya que no se trataba de ti. Y no me diste exactamente la oportunidad de hacerlo.

La respuesta de Emery le valió una fuerte burla por parte del doppelgänger. Sintiendo otra discusión, Jeremy intervino, —Mira, ¿podemos hacer esto más tarde? Hice planes con Tyler. Él está justo afuera.

—¡Oh, espera! —Alaric frunció el ceño, —¿Cuándo empezaste a salir con Tyler Lockwood?

—No lo sé —murmuró Jeremy, —¿Importa?

—¡Sí, Jeremy! —Elena exclamó: —Importa. Fue engendrado por Klaus. Es peligroso.

—Él todavía puede oírte —dijo Jeremy, señalando con la cabeza hacia la puerta, —Está justo afuera. Además, tú, entre todas las personas, me vas a sermonear sobre con quién puedo y con quién no puedo salir.

—Exactamente —la bruja no pudo evitar murmurar, ganándose otra mirada de Elena, quien miró a Jeremy

—¿Qué pasa con esa actitud?

—Sí, lo que sea, esto es aburrido —Jeremy la desestimó, —Tyler está esperando —comenzó a irse, pero Elena le bloqueó el paso,

—¡Oh, no, no! No irás a ninguna parte, especialmente con Tyler.

Jeremy suspiró y miró a Alaric en busca de ayuda.

El hombre mayor sacudió la cabeza, —Estoy con ella en esto, Jer. Lo siento.

Luego miró a Emery quien se encogió de hombros, —Puedes hacer lo que quieras siempre y cuando yo vaya contigo, claro.

—Eso no me molesta. Gracias... Elena interrumpió a Jeremy,

—No, no puede. Ric está conmigo en esto. Son dos contra uno. ¡Estamos cenando!

Jeremy suspiró, —Está bien, está bien. ¿Quieres que me quede adentro? Entonces quedémonos todos adentro —miró hacia la puerta y gritó: —¡Tyler! ¡Entra!

Los ojos de Elena se abrieron en estado de shock. —¡Jeremy!

Luego, Tyler abrió la puerta y entró. —Oh —le sonrió a la bruja, Hola Em.

—Hola —Emery asintió hacia la silla frente a ella, —Siéntate. Estábamos a punto de cenar.

Elena le lanzó a Emery una mirada de incredulidad mientras Jeremy sonreía mientras iba a buscar a Tyler un vaso de agua.

—Gracias —murmuró el híbrido mientras Elena lo miraba fijamente.

—Esto es raro. Klaus tiene híbridos acosándome y ahora estás sentado en nuestra cocina.

Tyler parecía incómodo, —Mira, tal vez debería irme.

—Oh, quédate —Jeremy sacudió la cabeza y se sentó a su lado, No estás haciendo nada.

—A menos que tengas que hacerlo, ya sabes, consulta con tu señor híbrido —dijo Elena, haciendo que Emery pusiera los ojos en blanco. —Algo así como lo hace Emery. ¿Klaus te permitió venir aquí?

—Estoy a esto —formó un pellizco con su índice y pulgar —de quemar todos los huesos de tu cuerpo desde donde estoy sentada, Elena, no me pongas a prueba.

Tyler se rió, —No es así Elena.

—Dime Tyler —comenzó Alaric, —¿Cuál es la diferencia entre ser engendrado y ser hipnotizado?

—Compulsión —comenzó Tyler, —Eso es sólo hipnosis similar al control mental. Y ser engendrado es... es como la fe. Haces algo porque crees que es lo correcto.

—¿Entonces crees que servir a Klaus es lo correcto?

—No le sirvo —Tyler sacudió la cabeza, —Klaus me liberó de una maldición que estaba arruinando mi vida. Le debo eso.

—¿Y si te pidiera que saltaras de un puente? —preguntó Alaric, ganándose un suspiro frustrado de Tyler.

—¡No lo haría! E incluso si lo hiciera, estaría bien. Soy un híbrido.

—Está bien —interrumpió Elena, —¿Y qué si te pidiera que te arrancaras el corazón?

—Una vez más, no lo haría.

—¿Y si lo hiciera? —la doble presionó. Emery se mordió con fuerza el labio inferior para evitar decir algo.

Tyler se molestó: —¡No lo sé! ¡Entonces me arrancaría el corazón! —Sin embargo, todos parecieron desconcertados por lo que dijo. Suspiró. —Ustedes suenan como Caroline, enloqueciendo por algo que no entienden.

—Tienes razón Tyler, no lo entiendo —Elena frunció el ceño, —Klaus nos ha aterrorizado a todos y cada uno de nosotros y tú eres ciegamente leal a él.

—Lo estás pensando demasiado —habló Tyler, —Todavía puedo tomar mis propias decisiones.

En ese momento, el teléfono de Jeremy empezó a sonar. Se levantó y fue a contestar. Después de unos segundos, volvió a sentarse. Elena entrecerró los ojos hacia él, —¿Quién te llamo?

—No fue nada.

—Tengo que irme —murmuró Tyler, levantándose, —Umm, gracias por la oferta de comida, pero...

—Hasta la próxima —Alaric se ofreció y Tyler asintió antes de irse. Alaric se puso de pie. —Eso fue muy revelador.

—Entonces, Tyler Lockwood es un lunático que tiene acceso a nuestra casa —dijo Elena mientras ayudaba a Alaric con la comida.

—Quiero decir que todo este asunto del vínculo, es una locura —señaló Alaric, —Ni siquiera creo que Tyler sea plenamente consciente de lo poco que La razón está detrás de lo que está diciendo. Es esta extraña lógica de culto.

—¿No puedes decirle a Klaus que retroceda? —Elena le preguntó a Emery quién había decidido acercarse a ellos para ayudar también. Le lanzó a Elena una mirada que la hizo callar al instante. El doppelgänger hizo un gesto, —Bueno, genial, esa es una influencia maravillosa para ti Jer —Elena se interrumpió cuando se dio la vuelta y descubrió que Jeremy ya no estaba allí. —¡Jeremy!

Los ojos de Emery se posaron en su anillo de protección que estaba en medio de su plato sobre la mesa. Lo recogió mientras Alaric lo miraba, —Ese es su anillo.

—¿A dónde fue? —Elena cuestionó mientras salían y lo encontraron parado en medio de la calle. —¿Jeremy? —Elena frunció el ceño confundida, —¿Qué está haciendo? —su pregunta fue respondida cuando un automóvil dobló la esquina y aceleró hacia Jeremy. —¡Ay dios mío! —Elena gritó: —¡Jeremy!

—¡Jeremy! —Alaric también gritó: —¡Jeremy, muévete!

Pero él no se movía. Estaba allí parado, como esperando que el coche lo atropellara.

Alaric corrió hacia Jeremy, empujándolo fuera del camino justo antes de que el auto lo golpeara. Rodó por el suelo, inconsciente. Tony bajó las ventanillas, sonriéndoles, —Ahí voy otra vez. Chocar con la gente... — sus ojos se posaron en Emery y su rostro palideció antes de alejarse rápidamente de nuevo.

Emery miró fijamente el auto, el horror llenando sus entrañas. Sabía quién estaba detrás de esto pero esperaba estar equivocada.

Jeremy parecía haber salido de su aturdimiento cuando se levantó y corrió hacia Alaric. —Mierda —murmuró la bruja, mirándolo mientras Elena les mostraba el anillo en su dedo, Estará bien.

Jeremy suspiró aliviado y confundido: —No entiendo.

—¿Quién era el que hablaba por teléfono antes? —Elena le preguntó a su hermano, quien respondió, recordando: —¡Era Klaus!

—¡Te hipnotizó, Jeremy! —Elena exclamó, mirando a Emery, —Todo esto es culpa tuya.

La bruja se puso de pie, sacudiendo la cabeza antes de que ella se alejara, sin molestarse en decirle nada a nadie.