El SONIDO DEL LÁPIZ rasgando el papel era el único sonido en la habitación. Ravenna extendió la hoja sobre la mesa y ajustó los últimos detalles del dibujo antes de guardarlo entre las páginas de su cuaderno de arte. Lo entregaría a Tatum a la mañana siguiente.

Un ruido afuera de la ventana de su habitación la hizo levantarse del escritorio. Era de noche y, como siempre, la chica estaba sola en casa, ya que su hermano estaba fuera de la ciudad. Abrió las cortinas y solo vio árboles, arbustos y la carretera poco iluminada abajo. El viento movía las hojas de los árboles.

-Necesito dejar de ver películas de terror con Randy -, se rió, luego cerró la cortina.

Ravenna se soltó el cabello y guardó los materiales de pintura en el armario. Tan pronto como cerró la puerta, escuchó el mismo sonido de nuevo. La chica caminó tranquilamente de nuevo hacia la ventana, abrió las cortinas y luego el vidrio.

Una mano agarró la suya, haciéndola gritar y apartarse de la persona. Stu Macher se apoyó en su ventana, entrando en la habitación y riendo.

-¡Stu! -Rory gritó, poniendo la mano en su pecho por el susto.

-¿Qué pasa, gatita? - el chico se rió, besó a la chica en la mejilla y luego arrojó sus zapatos descuidadamente al suelo antes de acostarse en la cama junto a la pared.

-¿No sabes cómo tocar a una puerta como una persona normal? - murmuró, luego cerró la ventana de nuevo.

Stu había sido su primer amigo cuando llegó a Woodsboro hacía dos años. Era una ciudad pequeña y todos se conocían desde siempre. Le resultó difícil encajar, pero lo logró con la ayuda de Stu, quien probablemente sintió lástima al verla sola y habló con ella, presentándola a su grupo de amigos poco después.

Stu se rió y lanzó su chaqueta sobre el escritorio.

-¿Qué haces aquí? -preguntó ella.

-Leslie salió y me aburrí -, encogió los hombros. -¿Otra vez sola? -

Leslie era la hermana mayor de Stu. Rory ya había tomado algunos viajes en el automóvil con la hermana mayor Macher.

-Como siempre -, se encogió de hombros. -¿Quieres ver una película? - preguntó Rory.

-¿Cuál? -él levantó el torso y miró a la chica al otro lado.

-Cualquiera, siempre y cuando no sea de terror -, Rory se agachó frente al televisor de su habitación.

-Pero esas son las mejores -, Macher resopló, apoyándose en los codos para lanzarle una mirada de cachorro.

-Está bien, sabes que no puedo resistir esos ojitos -, suspiró ella, viendo al chico reír. -¡Elige! Voy a buscar los dulces abajo. -

Stu se levantó y fue a elegir las películas. Rory bajó las escaleras, fue a la cocina, abrió la nevera y agarró los trozos de pastel sobrantes que había hecho por la tarde y algunas barras de chocolate. Cuando volvió a la habitación, Stu estaba acostado en su cama nuevamente. Ella le entregó los dulces y se acostó a su lado.

-¿Cuál elegiste? - preguntó, mordiendo un trozo de chocolate.

-Halloween -, respondió Stu. Rory se encogió de hombros y se acurrucó más junto a su amigo.

La película se reprodujo, las barras de chocolate desaparecieron y también el pastel. Stu se acomodó en las almohadas. Su mano se deslizó accidentalmente por la pierna descubierta de Ravenna. Los dedos fríos del chico le enviaron escalofríos por el cuerpo.

-Perdón -, dijo en voz baja.

-¿Por qué? -preguntó Rory, volviendo los ojos hacia Stu.

-Rory -.

-¿Qué? -Ravenna se volteo completamente hacia el chico. Sus piernas se tocaron bajo la manta. Stu puso la mano en su rostro, sus dedos tocando sus labios.

-Por esto -, respondió Stu antes de inclinarse y juntar sus labios con los de la chica.

Ravenna cerró los ojos y puso las manos en el cuello de Stu. La mano del chico bajó, tirando de la chica hacia su regazo por la cintura. El acto hizo que Rory jadease de sorpresa, sacando una sonrisa de Stu en medio del beso. Las manos del chico acariciaron su piel bajo la camiseta del pijama. Stu tenía un sabor dulce.

[...]

Ravenna vio a Sidney y Tatum en la entrada de la escuela, que estaba llena de periodistas. Ajustó su mochila sobre los hombros y se acercó a las otras dos chicas.

- Buenos días, Sidy. Buenos días, Tatum - saludó. Tatum entrelazó sus brazos.

- Buenos días, Rory - dijeron al unísono.

- ¿Qué pasó?

- Casey Becker y su novio fueron asesinados anoche -respondió Tatum.

- ¿Casey Becker?

- Es extraño, ¿verdad? -Tatum dijo-. Y no solo fueron asesinados, fue sangriento, como en una película de terror. Ambos fueron abiertos de arriba abajo. Sus padres la encontraron colgada de un árbol con las tripas afuera.

Rory sintió una mano en su cintura y, cuando miró hacia un lado, Stu le dio un beso en la comisura de los labios en saludo.

- Rory, chicas -dijo, apretando la cintura de ella y luego se fue en dirección a Billy Loomis, que saludó a Sidney.

- ¿Stu, en serio? - Sidney rió.

- ¿Qué? Somos mejores amigos -Rory encogió los hombros-. Nos vemos en la clase de matemáticas, Sidy, y tú, Tatum, en la hora del almuerzo. Necesito mostrarte el dibujo que terminé ayer.

Besó la mejilla de Tatum y se dirigió hacia su primera clase del día, biología.

Durante la mañana, la interrogaron el director y algunos policías, pero no conocía bien a Casey de todos modos. Tomaban algunas clases juntas, Casey era la capitana de las porristas, un equipo en el que Rory y Tatum participaban. Conversaron algunas veces en fiestas y entrenamientos. Rory sabía que Casey había sido novia de Stu antes de cambiarlo por Steve.

En la hora del almuerzo, Rory dejó los libros en su casillero y, tan pronto como cerró la puerta, Stu la tomó de las manos y la hizo girar por el pasillo.

- Debes dejar de asustarme de esa manera, gatito -rió ella.

- Pero tu carita cuando te asustas es tan linda -susurró en el oído de la chica, quien lo miró-. Vamos, el grupo está afuera.

Stu la llevó al patio, donde estaban Tatum, Sidney, Randy y Billy. Ambos se sentaron en medio de sus amigos, Stu tiró de Rory hacia él.

- ¿Qué les preguntaron? -preguntó Tatum.

- Si conocía bien a Casey -respondió Sidney.

- A mí también -dijo Tatum.

- Y a mí también -contó Rory.

- ¿Te preguntaron si te gusta la caza? -Billy preguntó a Stu, quien estaba al lado de Sidney.

- Sí, preguntaron. ¿A ti también? -dijo Billy.

- ¿Caza? ¿Por qué preguntaron eso? -Tatum dijo nuevamente.

- Los cuerpos fueron destripados -respondió Randy.

- ¡Gracias, Randy! -Billy dijo.

- No me preguntan si me gusta cazar -Tatum dijo.

- Es imposible que una chica haya hecho esto -respondió Stu a la chica.

- Eso es muy machista -Tatum replicó-. El asesino podría haber sido una mujer, un instinto salvaje.

- Con un picahielos, no es lo mismo -dijo Randy.

- Casey y Steve fueron completamente destripados, tiene que haber sido un hombre para hacer algo así -Stu negó con la cabeza.

Rory bajó la mirada, Billy se apoyó en los codos y miró a su amigo.

- O con mentalidad de hombre.

- ¿Cómo destripas a alguien? -preguntó Sidney.

- Tomas un cuchillo y lo abres desde el pubis hasta la parte superior -Stu se volvió hacia Sidney.

Rory apretó la cintura del chico, que puso su mano sobre la suya.

- Eso no tiene gracia en absoluto, idiota -reprendió Billy, viendo que Sidney se sentía incómoda.

- Stuart, ¿alguna vez saliste con Casey, verdad? -preguntó Sidney.

- Sí, por unos segundos -rió él.

- Sí, hasta que te cambió por Steve -se burló Randy.

Rory rió, recibiendo un apretón en su costado.

- ¿La policía sabe que saliste con la víctima? -preguntó Randy.

- ¿Qué estás insinuando, Randy, que yo la maté?

- Eso aumentaría tu popularidad.

- Stu estaba conmigo anoche -Rory explicó. Stu la atrajo más hacia él, mirando a Randy.

- Sí, yo estaba -rió.

- ¿Antes o después de que él despedazara a Casey en pedacitos?

- Vete al infierno, Randy -Rory lanzó una bolsa de bocadillos a Randy, quien la esquivó-. ¿Dónde estabas?

- Trabajando, gracias.

- ¿En la tienda de videos? Pensé que te habían despedido.

- Dos veces.

- No he matado a nadie -dijo Stu.

- Nadie dijo que tú mataras, gatito -Rory se rió, besando la mejilla del chico. Billy los miró a los dos.

- Además, se necesita ser muy hombre para hacer algo así -bromeó Randy.

- Te destrozaré, Randy.

- Vamos, Tatum, dejemos a estos idiotas atrás -Rory se levantó.

- ¿Adónde vas? Pensé que íbamos a mi casa más tarde -Stu le agarró la muñeca.

- Entrenamiento de porristas -le dio un beso en la comisura de los labios-. Le pediré a Tatum que me deje cerca de tu casa.

- Vete a casa con Tatum, yo te recogeré. Sabes, hay un asesino suelto -Stu susurró en tono burlón.

- Tonto -dijo-. Hasta luego, Billy, Sidy, Randy.

[...]

Rory arrojó su bolso sobre el sofá de casa. Vio el auto de Tatum desaparecer en la carretera, yendo a la tienda de videos donde trabajaba Randy. Riley alquilaría algunas películas y luego iría a buscar a Sidney en su casa para pasar la noche juntas. Sidney estaba nerviosa por todo lo que estaba sucediendo con Casey y Steve, toda la conmoción le recordaba a su madre.

Maureen Prescott, la madre de Sidy, fue brutalmente violentada y asesinada el año anterior, un crimen que conmocionó a los habitantes del tranquilo Woodsboro. Aunque el asesino había sido arrestado, denunciado por Sidney y estaba tras las rejas en ese momento.

La chica estaba a punto de subir a ducharse y esperar a Stu cuando el timbre del teléfono la hizo caminar hacia la cocina. Cogió el aparato.

- ¿Hola? -contestó.

- ¡Hola, Rory! -la voz grave sonó al otro lado.

- ¿Quién es? -preguntó, sentándose en la barra de la cocina.

- Vamos a jugar un pequeño juego, Rory. Respóndeme una pregunta; ¿cuál es tu película de terror favorita?

Rory se rió, escuchando la risa del otro lado.

- Hola, Roman.

- Estás haciendo un gran trabajo, hermanita -dijo Roman, su hermano, sin el modulador de voz esta vez.

- Hermanito, sabes que todo tiene que salir perfecto, como lo planeamos.

Parecía que el Acto 1 finalmente había llegado y ella estaba ansiosa por la continuación de todo eso. Ravenna había esperado mucho tiempo para eso.

- Y lo hará, Ravenna.