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Flashback, 2006

— Prométeme algo, Hayley. Podemos tener unas vidas horribles, pero siempre podremos contactar la una con la otra.— soltó Izzy desde el tejado con una botella de vino en la mano

— Lo prometo, Iz. Somos la única familia que tenemos.— le da la botella a la castaña

— ¿Que se sentirá morir? — se levanta — Reencarnar en algo mejor. En un animal o persona. En algo que no sea tan jodido como esto.— va caminando por la orilla

— Estas ebria, vas a caerte.— Izzy se ríe y continúa caminando

— Yo renacería como una mariposa. Libre y hermosa por siempre. Viajando por el mundo y sólo existir en un mundo sin crueldad.— contó extasiada y Hayley se preocupó

— Aléjate de la orilla.— pidió con miedo y la Flemming extendió sus brazos dando la espalda a lo poco que quedaba al suelo — ¡Izzy! — cierra sus ojos y se deja caer

Hayley jala su camisón antes de dejarla caer, arrastrándola a la superficie

— ¡Que demonios estabas pensando! — Izzy se ríe mientras Hayley sigue aterrada

— En morir.

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Presente
— ¿Por que nos detenemos? — se queja Rebekah mientras nos bajamos del auto

— Hemos revisado tres ciudades en las últimas 24 horas. Estoy cansada de la radio y huelo a auto.— cierro la puerta y veo alrededor

— ¿Y es mi culpa? Tú robaste la lista de posibles paraderos de Katherine. ¿Alguna vez pensaste que Damon tenía mal la información? — reprocha y volteo a verla con poca paciencia

— ¿Te he mencionado que no soporto el sonido de tu voz? — la rodeo hostil

— Que mal. No hemos terminado. Sube. Siguiente pueblo.— exige y me giro lentamente para verla

— Si me sigues dando órdenes, te voy a arrancar ese cabello rubio, ¿entiendes? — dejo en claro y alza sus cejas — Tengo hambre.— comienzo a caminar

— No vinimos por un bocadillo, Isobel.— reclama y suspiro — Quiero la cura. Katherine la tiene. No pararemos hasta encontrarla.— la ignoro alejándome

— Ya cierra la boca, Barbie. Ahora entiendo por que Klaus les pone dagas.— murmuro y me freno acorralando a una chica mientras subía a su auto — Hola.— se sobresalta

— Por Dios. Me sorprendiste.— se lleva la mano al pecho y sonrío

— ¿En serio? — frunce el ceño y saco a relucir mi rostro vampiro — No será por mucho.— trato de ir por su yugular y me detiene

— ¿Qué haces? — la veo confundida — Se que mucha gente de aquí prefiere que los vampiros se alimenten de su cuello, pero yo te pedí que bebieras de mi muñeca, ¿recuerdas? — guardo mis colmillos — Pensé que Katherine te diría.— la veo sorprendida

— Perra manipuladora, los tiene sometidos.— alardea Rebekah

— Creo que ya encontramos a Katherine.— expongo sonriente

— ¿Como conociste a Katherine? — le pregunta la rubia y ella se queda encandilada

— ¿Como conozco a quien? — refiere la mujer confundida

— Hace que la gente olvide todo de ella, a menos que hablen con ella. Muy brillante.— halaga Bekah y suspiro

— Yo me encargo.— la tomo de los hombros y se sobresalta — Mírame a los ojos, y dime, ¿qué es lo que recuerdas desde que conociste a una vampira castaña? — se pierde en mis ojos

— A Katherine.— sonrío — Llegó hace un tiempo al pueblo. No recuerdo exactamente cuando.

— ¿Donde vive? ¿Donde trabaja? — interrogo

— No lo se.

— ¿Con quien pasa tiempo? ¿Tiene amigos? — me ve confundida

— Dijo que todos podían ser sus amigos, si guardábamos su secreto.— expone y alzo una ceja

— ¿Cuál secreto? — le pido inquieta

— Yo...— se pausa — No lo sé.— ruedo los ojos y la suelto

— Vamos, hay que buscar más respuestas.

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Narrador omnisciente
Stefan y Damon cargaban gasolina para el auto de Damon por que había sido abandonado en medio de la carretera por dos pasajeras que comenten crimines.

— ¿Por que no agradeces que la alguacil Forbes encontrara tu auto después de que los dejaras...— caminan hacía el auto — ya sabes, robártelo.

— Recuérdame enviarle unos panecillos.— alardea — ¿En verdad necesitamos 40 litros de combustible o solo es castigo?

— Dejaron tu auto por que se quedó sin combustible. Tenemos que llenarlo, según el mapa que leí son 160 kilómetros a Willoughby...— lo interrumpe

— Si, no recuerdo ese nombre de la lista en lugares que tengo en Nueva York.— aclara y comienza a llenar el tanque

— La lista. ¿Hablas de la lista que te robaron frente a tu nariz? — se burla Stefan — ¿Después de que bajaste la guardia? Estarán ahí. La alguacil Forbes rastreó el auto que se robaron después del tuyo.

— Olvida los panecillos. Le llevaré champán. Si Izzy está donde dice...— se apoyan en la cajuela

— Willoughby. Capital del maíz en Pennsylvania. Estarán ahí. Esperemos llegar a ellas antes de que encuentren la cura.— expone Stefan

— ¿Y por que no vino contigo el súper novio? ¿Ya se harto de su desastre? — se queja

— No quiere saber de Izzy, parece que esta vez lo hizo enojar.— Damon frunce el ceño

— ¿Qué le hizo? — lo ve confundido — Digo, ese hombre está obsesionado con ella. No la dejaría así, y menos contigo en la carrera.— Stefan suspira

— Le sacó el corazón.— Damon lo ve perplejo — Despertó de malas y volvió al pueblo. Digamos que está muy sentido.— se ríe

— No puedo creer que Izzy le haya sacado lo que sea que tuviera en el pecho.— se burla el vampiro — Soy su fan número uno. Hizo lo que quise hacer muchas veces.

— El problema es que el intervino en sus planes. Eso quiero decir que si capaz de matarlo a él...— lo interrumpe

— Haría lo mismo con nosotros sin parpadear.— expone con angustia

— Si, ella es peor de lo creímos.— argumenta Stefan

— El lado positivo. Si Rebekah toma la cura, será mortal y podremos matarla en ese momento.— informa

— El lado negativo. Izzy será una lunática asesina por siempre.— menciona Stefan regresándolo a la realidad — Olvida las fantasías de venganza y concéntrate en el objetivo. Encontrar a Katherine, conseguir la cura, y salir andes de que rompan el cuello. De nuevo. Ana se encarga con Caroline y Elena de encontrar an Erik.

— Créeme, aprendí mi lección. Izzy sin humanidad es una perra de hielo.— se queja — y no confiaré en ella hasta que recuperemos a la vieja Izzy.

— Mira eso. Finalmente estamos de acuerdo en algo.— se regodea Stefan

— Mira eso.

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Klaus se quejaba de dolor frustrante al costado de su espalda, quemando su espina. El rompía su brazo una y otra vez hasta que pudiera ayudarse a sacar el pedazo de madera que Silas le incrustó anoche. El híbrido agonizaba al sentir que se movía hacía su corazón, no lograba sacarlo.

— Klaus tenemos que hablar.— entra "Izzy" — ¿Que te pasó? — pregunta preocupada al verlo en ese estado

— Silas, el me atacó.— ella se acerca — Me apuñaló com una estaca de roble blanco.— lo ve desconcertada — Un pedazo sigue dentro de mi.—se tira de rodillas

— Por Dios, Klaus, eso puedo matarte.— habla con angustia

— Pues, ciertamente siento que muero.— comenta jadeante — ¿Que haces aquí? Pensé que me odiabas lo suficiente para verme el rostro.— se ven con intensidad

— Oye...— lo toma del rostro y el baja la guardia

Algo en su cuerpo provocaba que se tranquilizara. Aquel sutil tacto que lo mantenía con control y de alguna forma le daba paz al sentirla. Con sólo mirarle el rostro ya era suficiente.

Aunque el fuera orgulloso y se sintiera herido por aquella traición que le desgarró el alma.

— Por más que me gustaría verte morir, aun no has encontrado esa cura.— Klaus se aparta bruscamente y el sonríe alejándose

— ¡Silas! — exclama molesto

— Así es. Anoche me veía como Shane, hoy me veo como la escurridiza de las doppelgängers. Y mañana, ¿quien sabe? — alardea y Klaus lo ve furioso

— Enséñame tu verdadero rostro.— exige exaltado — No la uses contra mi.— sonríe

— ¿Por qué haría eso cuando puedo verme como quien yo quiero que veas?— se quedan en silencio y Silas se acerca lentamente a Klaus mientras el está de rodillas en sufrimiento — Resiste todo lo quieras, Klaus, pero hasta que me traigas la cura, solo te traeré miseria.

Silas desaparece y Klaus jadea de dolor. El sabía a quien necesitaba y anhelaba ver. No se la sacaba de la cabeza.

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Isobel
— Tanto drama por una cura.— me quejo al ir caminando por el pueblo

— ¿Por que la querría? No lo entiendo.— expresa Rebekah confundida

— Sólo quiere llevarnos ventaja. Es probable que quiera metérsela por la garganta a Klaus. Lo odia mas de lo que Ana lo hace.— nos detenemos cerca de la central de correo — Oiga, disculpe. ¿Una vampiro castaña vino por correo hoy? — me ve fijamente

— Hace dos minutos.— alzo mis cejas y veo a Rebekah

— ¿Estuvo aquí hace dos minutos? — pregunto sorprendida

— ¿Por que pregunta? — me ve en sospecha y suelto un suspiro

— Nada, adiós.— se aleja y veo a Rebekah — Si estuvo aquí hace dos minutos, significa que no está lejos. ¿Qué tal si tú revisas adentro? Yo veré en el estacionamiento.— sugiero y tomamos caminados diferentes

Comienzo a buscarla entre las camionetas y alguien me acordaba por la espalda azotandome contra una de ellas.

— Estoy impresionada. Nunca pensé que me encontrarían aquí.— me ahorca y sonrío

— Bueno, es un hermoso lugar para morir.— con la mano libre me quito de su agarre y le rompo el brazo

Suelta un quejido doloroso y la tomo por el cuello elevándola por el aire.

— Una mordida mía y te mueres.— patalea desesperada por aire — Solo recuérdalo.— la dejo caer al suelo y me ve asustada

— Mira lo que encontró el gato. Una escurridiza rata.— se acerca Rebekah

— Si tratas de huir, te voy a atrapar y te voy a matar, así que.— me inclino a su altura — No me hagas correr en tacones.— me fulmina con la mirada

— Vamos, tenemos que hablar.— Rebekah la jala del brazo y la levanta del suelo

Caminamos a una cafetería y nos acomodamos en una mesa, había una buena tensión en ella.

— ¿Donde está la cura? — pedí y me vio confundida

— ¿Qué? ¿Sin discurso "estoy aquí para vengar a mi molesto hermanito"? Aunque era tu primo, pero quien se nota las líneas familiares.— expone y la veo sin importancia

— La gente muere. Lo superamos.— aclaro y agarro mi taza

Nos vemos fijamente y me da esa mirada de sospecha, esa de que no me cree lo que estoy diciendo.

— Después de apagar tu sentido de humanidad. ¿Elena también? — negué — Que triste para los chicos. Su especial copo de nieve de fragilidad humana se fue. Klaus debe tener una fiesta.— la fulmino con la mirada — Bueno, si vamos a quedarnos un tiempo, iré por unos menús.— Rebekah la sérieme encajando un cubierto en su mano

— No irás a ningún lado.— alardea la rubia

— Olvidé lo encantadora que eras.— se queja Katherine

— Me sorprende que me recuerdes, parecía que estabas muy ocupada divirtiéndote con Elijah.— refiere y sonrío

— Por Dios. ¿Qué pasó? — exclama una camarera y le doy un golpecito a Katherine

— Estoy bien, Jolene. No viste nada.— la hipnotiza y ella se aleja

— Cada minuto que desperdician con su parloteo, es otro minuto que le damos a Stefan y Damon para encontrarnos.— las regaño y Rebekah toma del mentón a Katherine

— ¿Donde está la cura? — la hipnotiza

— Lo lamento. Consumí verbena.— se regodea y la suelta

— Podemos torturarme entonces. Bien.— sugiero malévola

— ¿Para que la quieren? — nos pregunta confundida y me apoyo en el respaldo

— La pregunta es, ¿por que la quieres? — la interrogo — Déjame adivinar. Para matar a Niklaus.

— Pase los últimos 500 años huyendo de tu loco novio. No tengo intención de estar a una distancia donde pueda olerme...pero ya que puede ser usada en su contra, estoy segura de que muere por poner sus manos en ella.— explica y veo a Bekah — Le doy la cura, el me da mi libertad.

— Eres una pobre víctima. Por eso mi doppelgänger era la estrella.— alardeo y Rebekah sonríe —¿Donde está la parte del plan donde nos fastidias y alguien muere? — suspira

— No tengo razón para fastidiarlas.— me río

— Tú fastidias hasta a Dios con tu existencia.— me burlo y Rebekah se ríe

— Se que no me creen, pero es la verdad. La gente cambia. No soy la chica que creen que soy.— argumenta y sonrío incrédula

— ¿Una escurridiza perra que no tiene vida propia? Creo que si se lo que eres.— me ve furiosa y Rebekah la revisa haciéndola enojar a

— No la llevo conmigo.— se queja y la rubia me lanza su celular

— No es lo que creí.— alardea y comienzo a revisarlo — Pero estoy segura de que hay algo ahí que puede ayudarnos.— veo el calendario

"2PM. Ver a Em."

— ¿Quien es Em? — interrogo y se queda callada

— Un amigo.— divaga nerviosa

— Aquí dice que se verán a las 2:00.— el ambiente se tensa y parece que el tema le dio en el clavo — Supongo que tendré que ver a Elijah personalmente.— frunce el ceño y Rebekah me ve sorprendida

— ¿Qué? — soltó impresionada y dejo el celular en la mesa

— No se necesita ser muy inteligente para saber que las iniciales "Em" son Elijah Mikaelson. Es el único que te soportaría.— veo el reloj y me levanto del asiento — Algo me dice que seré mejor compañía.— me guardo el celular y se tensa

— No.— pide Katherine y sonrío

— ¿Celosa? — me fulmina — Que no se te escape. Debo lidiar con otro Mikaelson.

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Narrador omnisciente
— Recibí tus 50 mil mensajes. Más vale que sea de vida o muerte.— exclama Ana entrando a la mansión

— Lárgate.— responde y la castaña va en su búsqueda

— ¿Klaus? — camina hacía el — ¿Donde estás?— va por la sala y lo mira en el suelo tembloroso — ¿Que te paso?

— Necesito más tiempo. ¡Deja de acosarme! — le alza la voz y Ana lo ve molesta

— ¿Yo te acoso?— le pregunta irritada — Se supone que debo ayudar a Caroline y Elena a encontrar a la miembro perdido Petrova para detener a Izzy por el error que tú cometiste. Pero tu no dejas de acosarme por teléfono.— le reclama y alza sus cejas

— ¿Ana? — la vampiro frunce el ceño

El mencionó su nombre con mucho alivio

— ¿En verdad eres tú? — le da una mirada concordando y se pone de pie jadeante — Pruébalo.— menea su cabeza

— ¿Sabes que? Yo no soy Izzy. Así que no debería ni estar aquí, tengo cosas más importantes que hacer.— se da la vuelta yendo a la salida

— Espera. Por favor.— se detiene dándole la espalda — Silas me apuñaló con una estaca de roble blanco.— se voltea perpleja — Hay un pedazo adentro de mi e Izzy esta en peligro si es la busca.

— ¿Por que te atacó Silas?— pregunta confundida

— No estaba en posición de preguntarle. Es suficiente decir que estoy herido. Ya puedes entender por que te llamé. De todas las personas al menos no me quieres muerto.— explica y ella le da una mueca

— No estaría muy segura de eso.— la vampiro se cruza de brazos — Por tu culpa han pasado cosas muy oscuras en mi vida. No es que te importe.— el resopla

— Si yo muero, todas las personas que le importan a Izzy también.— expone directo y ella resopla yendo hacia el

— ¿Que quieres que haga? — pregunta dispuesta a cooperar

— Es muy simple en verdad. Necesito que me saques la estaca.— le señala al suelo y hace expresión de disgusto

— ¿Por que mejor no llamas a la única persona en el mundo que te soporta? Me refiero a Izzy.— menciona y el se tensa

— Por que no le importo y creo que podría usar esta situación a su favor.— frunce el ceño

— ¿Por que?

— Me sacó el corazón y me dejó en una callejón, pero eso no importa, lo que si, es sacarme esto.— insiste

— Bueno, fue tu culpa. Ahora ya no hay nadie en este mundo al que le agrades.— lo ve molesto — Debiste pensarlo dos veces.

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Isobel
Estaba en el kiosko esperando al viejo original de Elijah. Me había cansado de caminar de un lado a otro con los tacones y la desesperación por el hambre. Parece que el trajeado no conoce el reloj. Se quedó en otra década.

—Izzy.— me nombran con esa voz varonil que te eriza la piel

Me giro lentamente y sus ojos castaños se encajaron con los míos creando un contacto visual impresionante. Había un brillo en sus suyos cuando me miraba, como una devoción.

— Elijah.— solté a secas y se me acercó — Llegas un poco tarde, ¿no crees? — frunce el ceño

— ¿Qué haces aquí? — me ve confundido y suspiro tensa

— ¿No puedo? — me cruce de brazos y sonrío

— Cambiaste. Tu ropa es más formal, el cabello está más arreglado. Usas maquillaje.— indica sin quitarme la mirada de encima

— No sabía que ibas a notar esos detalles.— expreso asombrada y me apoyo en el barandal

— Eres difícil de no notar.— expone y ladeo una sonrisa — ¿Donde está Klaus? — suspiro

— Klaus, Klaus, Klaus. ¿Me convertí en esas personas en las que el novio parece ser siempre el centro de atención? Ex novio. Soy más divertida que el.— aclaro y arruga sus cejas

— ¿De que hablas? — me levanto y voy hacia el

— No estamos saliendo desde hace un tiempo. No desde que tu hermano Kol murió.— confieso y lo rodeo — Conflicto de intereses por que yo ayude a matarlo. Pero es historia para otro día.— su mandíbula se tensa

— Evades mi pregunta.— quedamos cara a cara formando una tensión

— Sólo no quiero responder.— baja la mirada a mis labios — ¿Qué haces tu aquí?— me sonríe y sube su vista

— No juego así.— sonrío y asiento — Te extrañé.— frunzo el ceño

— ¿Por que? — cuestiono y no me quita la mirada de encima

— Nos hicimos buenos amigos. No te veo desde hace un tiempo.— retrocede y suelto el aliento que tenía retenido — Me agradaba conversar contigo. Tienes un alma vieja.

— Vine de paso. Mystic falls me aburrió.— expuse caminando de un lado a otro

— Es un interesante pueblo el que elegiste para vacacionar.— refiere incrédulo — ¿Quien viene contigo? — sonrío

— Te juntas con Kitty Kat.— me detengo para verlo — Ella tiene algo que yo quiero.— alza una ceja

— ¿Quieres la cura? — refiere incrédulo y sólo sonreí — ¿Donde está ella?

— En un lugar seguro.— aclaro y se tensa — ¿Que? ¿Ahora te interesa? Los Mikaelson no saben amar a otra cosa que no sea el poder.— murmuro y frunce el ceño

— ¿En serio crees eso? — me ve confundido y doy un suspiro

— ¿No es la verdad? — se me acerca

— ¿Donde está Katherine? — estamos frente a frente — ¿Que estás haciendo en realidad aquí, Izzy? — sonrío

— Quiero la cura, Elijah, ella la tiene. Haré todo lo necesario para conseguirla.— le paso por un lado y me frena tomándome del brazo — ¿Qué te pasó, Elijah? Yo creí que eras un hombre de honor, pero estuviste acostándote con Katherine todo este tiempo.— me suelta

— Supongo que este hombre de honor siempre compartió una conexión con Kathrine.— explica y me río — Ella me contactó cuando supo de la cura. Creímos que podíamos ser útiles el uno para el otro.

— ¿De utilidad mutua? Por favor. Caíste en su trampa ideal que todos los demás idiotas.— me burlo

— Me subestimas, Izzy. Se quien es. Se lo que ha hecho.— se defiende y alzo mis cejas

— ¿Y crees que cambió? Juega contigo. Te mintió, Elijah. Sólo te usa para llegar a Klaus.— expongo y sólo me observa

Como si sólo me analizara y tratara de descubrir que pasaba conmigo.

— No solo activaste tu lado vampiro, ¿cierto? — cuestiona y me quedo callada — Hay algo más. Ya...No eres tú misma. Klaus no te dejaría sola y no lo dejarías.— me encojo de hombros — Abandonaste tus emociones. ¿Por que?

— Jeremy y Jenna murieron.— confesé — Tu hermano mató a Jenna y tú novia ideó un plan para matar Jeremy.— baja la mirada sorprendido — ¿No lo sabías? Claro que no.— suspira

— Mintió.— soltó decepcionado

— Odio decir te lo dije, pero...— me doy la vuelta

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Narrador omnisciente
— Ahí va el vecindario.— se queja Katherine al ver a Stefan y Damon

— Ya tienes a Katherine. Estás perdiendo tu toque malévola.— expresa Damon burlón y toma asiento

— ¿Donde está Izzy?— interroga Stefan y se quedan calladas

— Les digo donde está Izzy, la obligan a tomar la cura y yo termino en una caja ¿correcto? No lo creo.— aclara Rebekah y Damon desliza su vista a Katherine

— ¿Qué hay de ti sonrisas? ¿Sabes donde está? — ella suspira

— Puedo darles una pista. Fue a ver a un amigo mío. Tal vez lo conozcan.— Katherine voltea a ver a Rebekah y está la fulmina con la mirada — ¿Un hermano original, gusto impecable?

— ¿Elijah está aquí? — pregunta Damon confundido

— Bueno, hay que cuestionar el gusto impecable de Elijah si es amigo tuyo.— se burla Stefan

— Y cuando digo "amigo", hablo de "amigo." — tira la indirecta y todos hacen gesto de disgusto

— Izzy se puede encargar perfectamente de los hombres Mikaelson.— alardea Rebekah — Parece que los tiene encantados. Así que no se preocupen por ella. Ella conseguirá lo que busca.

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Isobel
— Se lo que se siente perder a un hermano y una madre. Y lamento tu dolor, yo...Sólo espero que puedas encontrar la manera de ser la fuiste. Eres una increíble mujer, Izzy.— me levanto de donde estaba sentada

— ¿Igual que esperabas que fuera la redención de Klaus? Aún crees que hay algo bueno dentro de ese hombre después de todo el infierno que ha hecho. Es patético.— me quejo y me ve molesto

— Me gusta creer eso, si.— asegura — Si el fue capaz de amarte, no puede ser tan malo.— bufeo

— No está. Es un monstruo ahora, Elijah. Ese Klaus bueno que pintas en tu cabeza murió hace mucho tiempo. Tú vida sólo se entorna en salvar a los demás por que te sientes tan responsable por tus hermanos, pero tu obsesión, es con Klaus.— me cruzo de brazos — Y es aburrido. El jamás va a cambiar, el solo se quiere así mismo. Y al poder, claro.— le doy la espalda

— No soy tonto, Izzy. Claro que se me ha ocurrido, pero veo la forma en que te mira. En cómo se esfuerza por vencer sus demonios, su dolor, por ti. Todo lo que hace es por ti.— expone y siento una punzada en el pecho — ¿Qué tipo de hombre sería si no intento encontrar a mi hermano debajo de esta fachada del gran híbrido malvado? — suspiro

— Todos los hombres son iguales. Siempre quieren salvar algo por que creen que está descompuesto, por que no cumplen con sus estándares.— volteo a verlo — Stefan y Klaus creen que la chica de la que se enamoraron sigue viva.

— No puedes culparlos por tener esperanza.— defiende y sonrío — Sería una pena para el mundo perder un alma compasiva como la tuya.

— La esperanza es para débiles. Es mejor ver la realidad y los hechos de las cosas. No fingir que no siguen aquí.— aclaro y me ve desde donde está apoyado

— Eras la mujer más fuerte que haya conocido. Y hay algo que te caracterizaba. Nunca perdías la esperanza.— expone sereno

— Pues lo hice. Y no la volveré a tener.— alardeo y tenemos contacto visual

— No te creo.— me le acerco — En el fondo de tu corazón eso sigue tatuado.— me pongo frente a él y escucho que su corazón se acelera

— ¿Qué? ¿También me quieres hacer tu experimento de redención? ¿Abrirás un centro? — me burlo y se inclina doblándome la altura

— ¿Crees que es un juego? — menciona imponente y lo veo hacia arriba

— Creo que te gusta que juegue.— expongo y respiro agitada — ¿Que serías capaz de hacer, Elijah? Por que voy a matar a tu novia para obtener lo que quiero y no me va a importar.— me azota contra la pared y suelto un quejido — Me gusta rudo. Ya salió el verdadero Elijah. Pensé que seguirías siendo el pastor buena onda. Cuando todos sabemos que es una fachada.— jadea mientras me tiene acorralada entre sus brazos

— ¿Que fachada? — doy un mordisco a mi labio inferior

— "El honorable." — murmuré y comencé a reírme, el me vio con molestia

— Basta, Izzy. No sabes lo que...— lo calle robándole un beso, le tomó por sorpresa, pero no se apartó

El puso sus manos frías sobre mi rostro y me tomó con fuerza dándome un beso apasionado.

Estaba contra la pared mientras el me devoraba dejándome sin aire. Mi cuerpo sentía adrenalina y el se veía como si fuera la cosa que más disfrutara en el mundo. Su boca hizo explosión con la mía.

Bajó sus manos a mi cintura dándome escalofríos, me sujetaba como si fuera suya y no me quisiera soltar.

Cayó en mi red. Justo como quería.

— Elijah.— escuchamos la voz de Katherine y el se apartó de golpe regresándome el aliento

— Kat.— me ve molesta y me limpio la boca al tener el maquillaje arruinado — Espero no te importe que...— me azota contra el concreto

— Perra.— sonrío y me la quito de encima lanzándola del otro lado, le doy una patada en el rostro y Elijah me detiene de ir tras ella

— ¡Suficiente! — ordena tomándome de la cintura para separarnos

— Quiero la cura.— pido y me suelto de Elijah, ella se levanta del suelo

— No te la dare.— asiento

— Bien, será a la mala.— murmuró un hechizo y comienzan a quejarse de dolor — ¿Sientes eso? Es tu sangre evaporándose.— se tira de rodillas gimiendo de dolor — Dame la...— de pronto todo se pone oscuro

Elijah le rompió el cuello a la castaña y la sostuvo entre sus brazos, Katherine suspira aliviada

— Gracias.— se levanta molesta — Espero no haber arruinado su momento.— sube a Izzy a sus brazos

— Mataste a Jeremy Gilbert.— reclama y ella se queda en silencio

— No, técnicamente fue Erik. Yo sólo ayudé a que eso pasara.— explica — Una bomba que estoy segura no pudo esperar a lanzarte. Irónico, ya que supuestamente no le importa nada.

— A mi me importa. ¿No sientes nada por esta chica? Es tu sobrina.— expone — ¿Una niña destinada a vivir lo mismo que tú sufriste? Le quitaste al lo poco que tiene de familia, igual que a ti te lo arrebataron.— lo ve perpleja

Algo dentro de ella se rompió. Fue como si se incrustara en su pecho y lo incendiara.

— ¿Por que me miras como si lo disfrutara? Jeremy fue daño colateral, y no fue mi idea.— el la rodea yéndose con la castaña — Izzy me importa. La cosa no era con ella. Estaba haciendo lo que necesitaba para sobrevivir.— Elijah se frena

— ¿Eso es lo que soy también? ¿Un medio de supervivencia? — se queja

— No dejes que la dulce Izzy te confunda. Quiere ponerte en mi contra y convencerte de que no puedes confiar en mi.— se defiende

— Te hice una pregunta.

— No. Claro que no eres un medio de supervivencia. Me cuidaste cuando no tenía a nadie. Me estás dando una segunda oportunidad cuando nadie más lo haría. Te amo.— confesó y el la vio con sorpresa — ¿Elijah? — no emite una facción — Aunque siento que la quieres a ella.— baja la vista a Izzy — Y eso te pondría en la lista de muerte de tu hermano.— da un paso hacia atrás

— Ella es igual que tú, Katerina. Izzy me hace sentir humano, me hace olvidar mis partes oscuras. Justo como cuando te conocí.— expone y lo ve sorprendida

— Estas enamorado de ella.— soltó perpleja

— Adiós, Katherine.

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Despierto sobresaltada y de mal humor.  Mis ojos se impactaron en el techo de la cafetería en la que estaba antes. Me levanté y vi a Stefan y Damon entrar por aquella puerta. Sólo esperando por mi.

Me sobé la nuca por la incomodidad, tenía planes que acatar todavía.

— Siéntense donde quieran.— les dice la camarera y vienen a mi mesa

— ¿Estás bien? — me pregunta Stefan y suspiro sin emitir palabra

— ¿Por que no hablas? — interviene Damon — Elijah nos dijo que estarías aquí.

— Saben que quiero la cura. Necesito que sepa que nunca la querré y ya me cansé de hablar de eso. Así que, ¿lo aceptan y me dejan ser quien soy o no? — impongo y se ven entre ellos

— Si, no.— aclara Damon y relamo mis labios

— Izzy, está no eres tú.— contradice Stefan como el mártir infinito

— Lo soy ahora. Y ustedes dos necesitan aceptarlo. Por que si no, habrá consecuencias.— advierto

— Escucha, estaba en la misma situación que estás ahora. Mis emociones se apagaron, no era yo, y tú te rehusaste a aceptarlo...— lo interrumpo

— ¿Y si te hipnotizo como Klaus para que la apagues de nuevo y dejes de fastidiarme? — cierra sus labios — ¿O mato a Damon y así te quedas sin familia y también la apagas? — sugiero y la habitación se densa — Saben que puedo hacerlo. Le saqué el corazón al hombre que amaba. ¿Qué creen que haré con ustedes? — se quedan pálidos, los había asustado

— Permíteme darles café.— viene la camarera y sonrío forzado

— Gracias.— me levanto y le rompo el cuello en un movimiento

Damon soltó un sonido de sorpresa y se quedaron atónitos.

— Como dije, consecuencias. Ese es un cuerpo del que son responsables. Si siguen intentando arreglarme, habrá un segundo, un vigésimo, un centésimo.— informo y se quedan sin habla — No se metan conmigo. El diablo es mi títere.— rodeo el cuerpo y me voy a la salida

Mostré mi postura. Ya saben de lo que soy capaz, aunque siempre lo han sabido. Ahora sólo tengo que encontrar a Katherine y mis respuestas.

Al ir caminando a un auto sonó mi celular. Estaba el nombre de Klaus en la pantalla, cosa que me sorprendió, pensé que había tomado la indirecta.

— Pensé que con el hoyo en el pecho entenderías que te quiero lejos.— abro la puerta — Tal vez fallé y lo hice en tu cabeza.

— Esto es importante, si no no llamaría.— me subo y cierro la puerta

— Tienes diez segundos.— enciendo el motor presionando un botón

— Es de vida o muerte. Silas va por ti y soy el único que sabe que hará.— me tenso

— ¿Por que vendría por mi?

— Tendrás que venir a averiguarlo, amor. Te veo en casa.— cuelga y lo maldigo

Es un maldito hijo de perra.

Después de algunas horas conduciendo, llegué al pueblo. Estacioné el auto con fastidio y fui a tocar la puerta.

— Amor.— me recibió con una sonrisa y le pasé por un lado sin importancia

— Estoy aquí. ¿Qué era tan importante? — cierra y volteó a ver

— ¿Te puedes sentar? — me señala a la mesa y veo vino en ella, sonrío

— Niklaus, si esto es una táctica de ligue, te voy a desmembrar.— advierto y camina a su asiento

— Silas entró a mi mente y me hizo creer que me apuñaló con la estaca de roble blanco.— alzo mis cejas — Estuve en agonía toda la tarde. Hizo lo imposible.— suspiro

— ¿Y quieres que le envíe mis agradecimientos? — me burlo — Podía unirme a él.

— El tiene el ojo puesto en ti.— se sienta — Tiene la estaca y me dijo que te diera un mensaje.— me acerco

— ¿Cuál es? — me siento — ¿Quieres unirte a mi liga del mal? Xoxo.— ironizo y sonríe

— Si le entregas la cura, no la usará en ti. Y no vendrá por mi a torturarme por mil años.— agarro mi copa — Morirá y no nos molestará.

— ¿Y si no? — bebo vino — ¿Y si todo es una jugada para meterla en mi garganta y mandarme con todos los Gilbert muertos? — sostengo la copa y suspira — No lo creo.— me levanto

— Tengo un plan.— soltó y me detuve para verlo

— ¿Y eso que es? — pregunte incrédula y bebí más

Se quedó en silencio unos segundos y se inclinó de su asiento para tenerme en su punto de mira. Viéndome con anhelo.

— Soy el único que puede protegerte.— sugirió y lo vi con gracia, el lo notó

¿Este cree que es más poderoso que yo? Por Dios.

— Estaré encantado de hacerlo siempre que cooperes.— expresó como última palabra y se formó una sonrisa en mi rostro

— ¿Y que quieres de mi? — dejo la copa en la mesa

— Elijah tiene la cura.— confiesa y lo veo sorprendida — El viene con Rebekah para debatir a quien dársela. Tienes que estar de mi lado para conseguirla y dársela a Silas.— sonrío y agarro mi copa de nuevo

— ¿Quieres que seamos equipo? — bebo vino y sonríe petulante

— Es ayuda mutua. Te conviene.— relamo mis labios y suspiro

— Tenemos un trato.