035 Mikaelson Ball
- ¿Qué quieres saber?- le pregunta Klaus - Parece que crees que soy el villano de tu historia, después de que te crié, te di lujos y la vida que cualquiera hubiera deseado. Quiero escucharte.- se sienta de regreso en su silla y la pelirroja sostiene su mentón
- No morirá, ¿cierto? - pregunta Damon con preocupación y Stefan sostiene a la castaña entre sus brazos
- Tiene como dos horas hasta que llegue al corazón y muera. Aunque, bueno. Si muere, se convierte en vampiro. Klaus pierde, ¿cierto?- Elijah azota sus manos en la mesa sobresaltando a todos
- ¡Detén está barbaridad! Izzy es inocente en todo aspecto. No merece lo que le haces.- le reprocha Elijah y la pelirroja solo bebe más vino
- Los cuatro enserio se preocupan por ella. Siento celos de hecho. Acaso...- la callan al azotarla contra la pared. Damon la sostenía del cuello
- Tal vez tú no quieras hablar. Pero lo que sí me gustará en serio, es hacer que hablen. ¿Entiendes?- ella sonríe jadeando mientras el ejerce presión
- Eres un niño.- quita la mano de su cuello y Damon se sorprende por la fuerza - Tengo mil años, muchacho.- lo agarra del cuello y lo levanta por el aire - No saques mi lado malo.- le rompe el cuello y lo lanza del otro lado de la habitación - Bien, ¿quien sigue? - se sienta en la silla - Puedo seguir toda la noche, pero entonces la niña del momento muere.- advierte
- Solo pregunta y terminemos con esto.- menciona Klaus abrumado y bebe vino
- Tú mataste a mi madre por sed de sangre y tú a mi tía Tatia.- voltea a ver a Elijah y este frunce el ceño - Los dos mataron a mi familia. Ambos van y protegen a la indefensa, Izzy. Pero la verdad es que ambos son la destrucción para las Petrova. Cada doppelgänger ha muerto en sus manos. ¿Cuanto tiempo falta para que también le destruyan la vida a ella o su hermana?- ambos voltea a ver a la castaña - Mi mamá y su hermana eran inocentes y amarlos las mataron. Tal vez su castigo es ella.- apunta hacia Izzy- Amarla otra vez y perderla de nuevo. Ana te amaba y al hacerse vampiro y enterarse de la verdad te odió tanto que hasta juro vengarse. Tú vendiste a mi madre al monstruo de tu padre por celos y...- el híbrido la interrumpe
- Yo no maté a tu madre.- la corrige y se le acerca - La amaba y jamás sería capaz de hacerle algún daño.- la pelirroja lo ve sin emoción alguna
- Ayana me contó la verdad, Klaus. Ella te escuchó decirle a Mikael que encontraste al asesino de tu hermano y que era mi madre. Tú la vendiste por que descubriste lo que pasaba entre ella y Elijah.- el entrajado se queda estático ante tales acusaciones
- Ella te engañó, Valeria.- aclara el híbrido - Si le dije a mi padre quien fue el licántropo que mató a mi hermano, pero no la señalé a ella. Si no a tu padre.- ella frunce el ceño - Hay cosas que no sabes sobre el pasado...- lo interrumpe
- Entonces habla.- golpea su mano contra la mesa - ¿Que tiene que ver mi padre en esto?- Klaus ve de reojo a Elijah
Flashback, 1001
- Nik, debes ayudarme.- le suplica la castaña mientras lleva moretones en el rostro
- Genevieve, ¿que fue lo que te pasó?- pregunta exaltado y se acerca hacia ella con rapidez. Ambos estaban en la pradera
- El....el...- se pausa y vuelve a llorar. Klaus va sobre ella y la abraza - No puedo.
- Gen, ¿que fue lo que pasó? Háblame.- ella se aferra a él - Cualquier cosa la resolvemos juntos.- solloza y se aparta del el. Sus ojos llorosos se impactan con el rubio
- El papá de Valeria me encontró y me lastimó.- lo ve perpleja - ¿Recuerdas que te dije que por eso tuve que huir de mi aldea? Por que era violento y casi me mata.- el asiente con molestia - El quiere a mi hija y yo no puedo permitir que...- el la interrumpe
- No le pondrá una mano encima por que estará muerto.- le pasa por un lado furioso y ella lo frena
- No, no. Espera.- se para frente a él y lo contiene poniendo sus manos en su pecho - Debemos ser muy inteligentes. El es más fuerte que tú. Tiene su gen licántropo activado. Te matará.- expresa con miedo - Hay que decirle a tu padre que el mató a Henrik.- Klaus alza sus cejas - Así el irá a cazarlo y si algo sale mal, dos pájaros de un tiro. Luego podremos huir juntos con mi hija y mi familia. No lo quiero cerca.- el rubio se queda pensativo. Era una gran idea la que la castaña habían maquinado.
- Tienes razón. Puede funcionar.- expresa confiado y ella sonríe - Hablaré con el. Seguro para mañana estará colgado en algún tronco.- el la toma del rostro- Nadie te pondrá una mano encima jamás. Lo prometo.- la castaña asiente y ambos se dan un corto beso
Fin flashback
- Tú padre vendió a Gen. Le dijo la verdad acerca de ella y escapó. ¿Quieres saber por qué Ayana te mintió?- la pelirroja se queda estática - Por que era su hijo. En tus venas corre sangre de las Bennett. - todos se quedan perplejos
- ¿Qué?- expresa Elijah - ¿El hijo de Ayana fue quien abusaba de Gen?- pregunta incrédulo y baja la mirada - No puedo creerlo. Ella era buena.- Valeria se sienta en su silla para analizar aquella información
- Nadie sabía. La maté por eso.- la pelirroja alza su mirada - Cuando descubrí que nos había engañado y no habló sobre su hijo, fui tras ella, la maté y te encontré.- lo ve desconcertada - Eras su nieta.- la pelirroja niega
- No, no, no. Seguro mientes.- le reprocha - Tú siempre mientes.- los focos comienzan a parpadear con fuerza - Tiene que ser mentira.- baja la mirada aturdida
- ¿Vas a ayudar a Izzy?- le pregunta Stefan - No tiene mucho tiempo.- pregunta con angustia
- Por esa razón Izzy pudo conectarse con el ataúd.- expresa Valeria entre susurros- Por que está en su sangre.- alza sus cejas - Toma poder de ella.- ladea una sonrisa
- El antídoto.- insiste Stefan y la pelirroja voltea a verlo - Debemos salvarla.- ella se acerca
- Se cumplir mis promesas. Se como me vengaré.- intenta acercarse y Stefan la refugia en sus brazos- ¿Quieres que la salve o no? - la suelta y ella pone su mano en la frente de la castaña. Cierra sus ojos y comienza a recitar un hechizo
Valeria sabía que no había mejor venganza que ver a Klaus perder a la mujer de la que se estaba enamorando. Que su sufrimiento sería a causa de sus propias manos y que ella ayudaría a que eso pasara. El se culparía el resto de su vida y jamás volvería a ser feliz. Hará que en el momento en el que esté completamente enamorado de ella, romperle esa ilusión. Y ahí es cuando ella sabrá que gano.
Izzy
Despierto sobresaltada y el aire se impregna en mis pulmones. Veo alrededor aturdida y siento que estoy recostada en unas piernas
- Hecho.- enfoco - Disfruten su cena, señores.- la luz me molestaba en los ojos y la cabeza me estallaba. Solo veía a Valeria caminar a la puerta
- ¿Qué pasa?- pregunto confundida y me acomodo en el sofá. Cruzo mirada con Stefan
- Valeria te envenenó.- suelta Klaus y alzo mis cejas mientras se acerca - ¿Como te sientes?- me ofrece un vaso con agua
- Cansada. Solo quiero irme a dormir.- aclaro y tomo el vaso, comiendo a beber el agua
- Aun tenemos cosas que discutir, ¿no lo creen?- sugiere Klaus y bajo el vaso - Será en otro momento, supongo. Izzy no está en la mejor situación en estos momentos.- suspiro
- Necesito aire, tengo que procesar lo que acaba de pasar.- solo camino a la puerta y salgo de la propiedad
- Izzy.- escucho que me nombran y sigo caminando - Izzy, espera.- inhalo hondo y volteo a ver. Stefan venía corriendo
- Se que vas a decirme, pero en serio no quiero escucharte.- aclaro frustrada - Solo quiero irme a mi casa.- se pone frente a mi
- ¿Te irás caminando hasta tu casa?.- me cruzo de brazos - No trajiste auto.- doy un suspiro largo
- No lo pensé.- camino hacia la pared - Solo, ya no quiero estar ahí.- me apoyo en la pared y se pone junto a mi
- Dejamos a Damon en el suelo.- ladeo una sonrisa- Estará enojado cuando despierte. Las brujas.- asiento- Izzy, respecto a..- lo interrumpo
- Se que dirás.- volteo a verlo- Se que me dirás que es mi decisión y respetas mi vida privada. Que no debo sentirme avergonzada, ¿o me equivoco? Aunque, contigo ya no lo se.- me aparto - Parecemos enemigos, Stefan. Solíamos ser unidos.- me cruzo de brazos para resguardarme
- Tú y yo ya no somos lo mismo. También cambiaste. Lo he notado.- frunzo el ceño - Eres más fuerte y más valiente. No te dan miedo las consecuencias y peleas por lo que crees. Admiro eso.- suspiro
- He tenido una vida solitaria, Stefan. Siempre he tenido que pelear por mi. Mis abuelos eran mayores y no había nadie que ayudara en las reuniones de padres, en los eventos y que siquiera asistiera. Tuve que valerme por mi misma y no voy a dejar que nadie me pisotee. Eso incluye a todos aquí. No dejaré que me hagan daño y no esperaré a que me rescaten. Me cuide muy bien antes de ustedes y podré hacerlos sin ayuda.- retrocedo
- Yo te llevo a tu casa.- me freno - Iré por Damon y podremos irnos.- inhalo hondo pensando en la posible respuesta que viene a mi cabeza
- Bien. Puedo con eso.- suelto sin más y asiente. La brisa fresca me transmitía tranquilidad junto a los ruidos nocturnos.
Me acerco al jardín del híbrido y solo observo todo a detalle. Las lindas rosas rojas y el césped de un verde brillante. Las luces que alumbraban todo su alrededor daban un brillo hermoso. Tenía diferentes tipos de flores y el aroma era exquisito. Podías disfrutarlo con el simple hecho de estar solo a unos metros de distancia. Era mágico.
- Sabía que te gustaría venir aquí.- me sobresalto al escuchar a Klaus - Me siento ahí a solo pintar y disfrutar de una tarde cálida.- noto la banca del otro lado del jardín
- Tengo que irme.- expreso a secas y le saco la vuelta, me frena y la molestia de forma en mi
- Izzy.- me sostiene y me suelto de golpe de su agarre
- No me toques.- le ordeno y me ve con sorpresa - Aun no olvido lo que hiciste allá adentro. No se si tenías alguna clase de celos o no se por que me expusiste allá adentro.- le señalo - Se supone que era entre tú y yo. No tenias el porque ir a alardearlo a sus caras lo que hicimos. Si tú crees que soy un pedazo de carne del cuál te sientes orgulloso de tener o dejes presumir, déjame decirte que estás muy equivocado y que puedes irte al mismísimo infierno.- expreso furiosa y solo me mira sin habla.
Realmente no lo quería cerca y lo mejor para ambos es que yo me alejara. No se iba a salvar muy fácil de está. Justo cuando comenzaba a mostrar signos de confianza. El lo arruinó.
- Lo lamento, no quería sonar como...- lo interrumpo
- Solo quiero que me dejes en paz.- doy un paso hacia atrás - Conmigo las cosas no serán fáciles. No voy a ceder ante ti y no me vas a conquistar con facilidad por que saliste con mis dobles. Tú solo te fijaste en mi por que luzco como las mujeres que amaste y en serio estoy cansada de que todos los hombres vengan conmigo por esa razón. Yo soy diferente a las que conocieron. Soy Isobel Sommers y no quiero que sigan comparándome o vengan a mi por mis dobles. ¡Estoy harta!- exploto y doy la vuelta alejándome - Y no me sigas, que solo debo girar mi maldita mano izquierda y te rompo el cuello como un jodido palo de madera, ¿entendiste?- alzo la voz y veo a Stefan en el auto - ¡Todos váyanse al diablo!
A la mañana siguiente todo era muy extraño. Ayer pasaron demasiadas cosas que hicieron que el día fuera simplemente horrible. Al parecer el "asesino" del pueblo fue a atacar a Alaric anoche. Elena tuvo que apuñalarlo para que el anillo pudiera curarlo. Lo llevó al hospital para verificar que todo estuviera en orden, aunque aún sospechamos de Meredith. Es duro de creer que lo sea por que se me hacía buena persona, pero como toda buena peli de terror los más santos suelen ser los más diablos.
Ahora estaba solo bebiendo café en la mesa estudiando mis grimorios. Tenía que tener la mente ocupada y entender por que la madre de los originales quiere que yo tenga su libro de magia.
- Buenos días.- me saluda Elena y aparto la mirada del libro - Debemos hablar.- le señalo que en la mesa está su taza de café servida - ¿Tu bebiendo café? - pregunta incrédula y alzo mis cejas, se acerca enseguida - ¿Qué pasó?- suspiro
- Si, debemos hablar.- se sienta junto a mi - Hay cosas que no te he contado. Quería mantenerlas en secreto hasta saber que significa, pero, debo decirte.- frunce el ceño y bebe - Se que hay en el ataúd. Siempre lo que he sabido.- alza sus cejas sorprendida - Lo descubrí la otra noche cuando lo toque. Si no les dije fue por que me coludí con Esther, la mamá de los originales...- me interrumpe
- ¿Qué?- pregunta perpleja - ¿Qué?- ladeo una sonrisa
- Recuerda que me amas y soy tu hermana.- sonrío ampliamente y arruga sus cejas - Esther quiere que ayude a matar a su hijo y accedí a cambio de algo. Hay precio que pagar.- expreso tensa y frunce el ceño
- ¿De que hablas?- pregunta confundida y bebo café tratando de evitar decirle que somos medias hermanas - Izzy, habla.- ordena y bajo la taza
- No estoy lista para decirlo. Dame tiempo. Lo que debes saber ya lo sabes. Es lo importante.- inhala hondo - Confía en mi.- toma mis manos
- Claro que confío en ti, Izzy. Solo quiero saber que estás bien.- sonrío ligeramente - Ya no debes lidiar con tus problemas solas. Estamos juntas y eso es lo que importa. Nos apoyamos.- soba mi mano y siento una linda sensación
- Lo sé. Eres mi amor más real. Eres mi familia.- me ve con la mirada enternecida - Gracias por todo.- nos damos un abrazo cálido.
Elena es algo que es preciado para mi. La amo con mi vida y creo que no podría vivir sin ella. Es muy especial para mi y siempre velaré por su bienestar. Haría todo por ella y se que ella por mi. Es el único verdadero amor que he tenido.
- Bueno, ¿recuerdas que mencioné que teníamos que hablar?- asiento - Anoche algo pasó. Cuando salí del hospital para regresar a casa, fue encrucijada por alguien.- frunzo el ceño - Fue Rebekah.- alzo mis cejas - Elijah lo detuvo y luego me dijo algunas cosas.- me quedo impresionada
- ¿Qué dijo?- pregunto con interés
- Es lo que queremos saber, sunshine.- escucho a Damon y volteo a ver. Había entrado a la casa junto a Stefan
- Buenos días.- enfatizo a secas y me levanto de la silla para ir por mas café. No quería saber de los hombres por algunos días
- ¿Como estás? Después de todo.- me pregunta Damon y saco la jarra del café
- Bebo esto, así que, ya sabrás.- me sirvo y resoplan
- ¿Qué te dijo Elijah? - le pregunta Stefan a Elena y cruzamos miradas por unos segundos. Bebo de mi taza
- Era Esther, su madre la que estaba en el ataúd.- responde tensa y ambos se miran sorprendidos. Yo me acerco a la mesa de nuevo
- ¿La bruja original? - pregunta Stefan incrédulo y me refugio en la taza
- ¿Qué? ¿Como está viva? ¿Que no su propio malnacido hijo le arranco el corazón hace mil años? - expresa Damon confundido
- No lo se, supongo qué tiene influencias en la comunidad de brujas.- Elena voltea a verme y ladeo una sonrisa - Elijah dice que ella quiere vivir en paz con su familia incluyendo a Klaus.- bufeo
- Primero el infierno de congela.- añado burlona
- Se suponía que sería el arma para acabar con Klaus.- menciona Stefan decepcionado y asiento
- Pues no parece. Al menos no de acuerdo a Elijah.- aclara mi hermana y Stefan resopla algo estresado
- Ese ataúd era lo único que evitaba que Klaus nos matara.- añade Stefan preocupado
- ¿Alguien más se siente algo usado ahora? - menciona Damon ofendido
- Elijah me prometió que su familia no nos lastimaría a nosotros.- comenta Elena serena y tocan el timbre, volteamos a ver
- A el si le creo.- añado y me acerco a la entrada, abro la puerta.
Veo alrededor y no había nadie. Como el típico niño que monta bromas para fastidiarte. Agacho la cabeza y veo una carta en el suelo con mi nombre y el de Elena, la levanto volviendo a ver el perímetro y entro
- ¿Qué es eso?- pregunta Stefan y abro el sobre, contiene una invitación
- "Por favor acompañe a la familia Mikaelson esta noche a las 7:00 p.m en una celebración con baile y cócteles" - levanto la vista confundida para verlos
-¿Quienes son los Mikaelson? - pregunta Elena confundida y alzo mis cejas
- La familia original.- respondo asombrada y todos se quedan en suspenso. Era extraño que todos parecen estar despiertos. Klaus enloqueció o algo hizo Elijah.
- ¿No les bastó con mudarse aquí sino que ahora quieren un obsequio? - comenta Damon irritado y miro la invitación de nuevo, noto un dobladillo en la carta y la giro, contenía algo escrito
- Hay una nota atrás. "Isobel, creo que es tiempo de que nos conozcamos." Esther - volteo a ver a los chicos que estaban sorprendidos.
No esperaba que hicieran un baile. Sabía la razón para la que ella me quería. Seguro incluía al Santa y su plan malévolo para matarlo. Ahora tendré a todos encima cuando sepan lo que realmente sucede y haciéndome muchas preguntas.
Narrador omnisciente
La familia Mikaelson gozaban de los lujos de volver al mundo de los vivos. Personas que estuvieran a su merced, alimento a su disposición, ropa fina. Todo tipo de encantos para adaptarse a la modernidad.
Valeria les había sacado las dagas dándoles una grata sorpresa. Elijah no estaba del todo molesto por aquel acto, ya que era su idea principalmente. El que no estaba del todo contento era el híbrido. Tenía una invasión en su casa. Los planes no le salieron como esperaba y aún más. No dejaba de pensar en la discusión que tuvo con la castaña.
- Rebekah, dime lo guapo que soy.- alardea Kol frente al espejo, la rubia bufea
- Ay, Kol, no puedes hipnotizarme.- le responde con sarcasmo y Finn da una risa escondida. Entra alguien con un pésimo humor
- ¿Quien te hizo enojar, hermanito?- pregunta Kol burlón y el híbrido se sienta en el sofá haciendo mostrar su inconformidad. Todo se remontaba a una persona, Izzy
- No es de tu incumbencia, Kol.- responde a la defensiva y el vampiro curvea una sonrisa
- Tal vez Izzy ya puso su distancia y por eso está de malas. Por que al fin se dio cuenta del idiota y odioso pretendiente que es para ella.- refiere la rubia con burla y eso hace que se irrite aún más el híbrido
- ¿Quieres otra daga en el corazón?- expresa Klaus hostil y Rebekah lo fulmina con la mirada
- ¿Otra amenaza de dagas? ¿No te sabes otro cuento?- se entromete Kol y el híbrido voltea a verlo con desplante
-Vuelve a admirarte en el espejo.- le sugiere antipático y eso a Kol no le gustó del todo
- ¿Quien eres tú? ¿Mi padre?- pregunta el vampiro burlón
- No, Kol, pero estás en mi casa.- aclara Klaus y se acerca a su hermano menor a la defensiva. Ambos estaban frente a frente
- Quizá deberíamos hablar afuera.- alardea y se miran de forma desafiante. Había tensión por toda la casa
- !Suficiente! Niklaus. Ven.- lo llama Esther y el híbrido le hace un desplante a su hermano para posteriormente ir con ella - Ya no quiero escuchar sus discusiones. Solo quiero que seamos una familia de nuevo.- el híbrido suspira
- Ellos me hacen molestar y no estoy en el mejor humor.- expresa abrumado
- Ahora dime, ¿con quien vas a venir al baile de hoy?- pregunta la bruja con interés y el híbrido bufea
- No seas ridícula. Tienes suerte de que vaya.- expresa incrédulo aunque un nombre y una persona le cruzaban por la mente
- Pues ojalá reconsideres. Va a ser una velada mágica.- expresa serena y Klaus baja la mirada pensativo. Se atrevería a darle un detalle. Tal vez así lo perdone.
Izzy
- Si Esther quiere hablar conmigo, debería averiguar por que.- sugiero confiada y me siento en el sofá. Todos me ven incrédulos
- Es una pésima idea. Ya trató de matarte.- menciona Damon con inconformidad
- Tiene razón. Los Mikaelson no son de confiar y ya nos dimos cuenta. Algo que iré contigo.- añade Elena preocupada y suspiro
-Izzy tiene razón. Bonnie logró abrir el ataúd por una razón. Creo que hay más al respecto que solo una reunión familiar.- menciona Stefan y paso saliva tensa.
Claro que la hay. La loca bruja quiere matar a su hijo y me quiere usar como su minion de mal. Ella es Gru
- ¿Podría volver el viejo Stefan a quién le importaba si Izzy vivía?- añade Damon y agacho la mirada tensa. Siento la mirada de Stefan
- ¿Para qué? Ahora es tu trabajo.- expresa Stefan sin tacto y resoplo. Pongo mi mirada en ambos y Damon hace expresión de desagrado
- No soy trabajo de nadie. Yo puedo cuidarme sola y no pido permiso.- les aclaro - Necesito privacidad así que saldré de está casa para ir a pintar algo al parque. Necesito liberar estrés y luego comprar un vestido costoso.- tomo mi mochila del perchero - Elena, iré a visitar a Bonnie por si llego a tardar.- agarro mis llaves
- ¿Piensas andar en la calle como si nada cuando toda la familia original está de vacaciones aquí?- me pregunta Damon incrédulo y abro la puerta
- Puedo cuidarme sola.- al salir de la casa escucho un ruido extraño. Había pateado algo. Bajo la mirada y noto una caja blanca tirada en mi duelo. Camino hacia ella y la levanto. Llevaba una nota, la tomo y entro de nuevo a la casa, pero esta vez, voy directo a mi cuarto.
Entro y cierro la puerta. Dejo caer la caja en la cama y leo lo que viene en el papel. Era igual que la invitación que recibí esta mañana. Venía de los Mikaelson.
"Guárdame un baile. Con afecto, Klaus"
- No tienes tan suerte, guapo.- alardeo y ladeo una sonrisa, dejo la nota sobre la cama.
La curiosidad me invade por saber el contenido de aquella gran caja. Muerdo mis uñas y me quedo pensativa solo observando. Sedo ante la desesperación y con precaución levanto la tapa para ver lo que tenia y mis ojos se abren como platos.
Era un enorme y hermoso vestido negro de corte de corazón. Tenía encaje y dejaba lucir un lindo y elegante diseño. Todo lo que una chica quisiera usar para un gran baile. Te sentirías como princesa y seguro te sentirías como la más linda del lugar. Lastima que yo no soy de esas.
Vuelvo a cerrar la caja y solo tomo mis cosas para irme. No quería nada de Klaus y ni siquiera quería pensar en el. Quiero sacarme su nombre de la cabeza y su rostro también. Solo no quiero pensar en los Mikaelson o cualquier hombre.
Decidí ir caminando hasta la plaza por que necesitaba despejar mi mente. El asunto de Valeria alias "mamá" no dejo de repasarlo una y otra y otra vez. Me siento decepcionada de la persona que es. Esperaba más de ella y termine con la ilusión rota. Ya me canse de esperar cosas de las personas. De creer que existe algo bueno al menos honesto en ellos. Me gusta creer que la humanidad no está del todo destruida. Pero cada vez me doy cuenta que tal vez si lo está y soy la tonta que siempre lleva la esperanza. Se que Valeria prácticamente fue como una incubadora humana y que en el embarazo Ana fue la que me cuidó y me dio vida si puede decirse. Ojalá pudiera saber que realmente pasó o su versión de la historia. Por eso necesito a Esther, ella tiene lo que necesito.
- Eres una persona solitaria, lo entiendo.- alzo la vista y veo a Bonnie. Cierro mi libreta - ¿Ahora que pintas?- doy un suspiro y se sienta junto a mi
- La torre del reloj. Tiene una infraestructura hermosa.- guardo mi cuaderno en la mochila - Intentaba mantener mi mente en otra cosa que en mis pensamientos.- pone su mano en mi rodilla
- ¿Qué sucede contigo?- sonrío ligeramente y pongo mi mano arriba de la suya
- No es nada. Pensaba en el estúpido baile que montaran los Mikaelson.- frunce el ceño
- ¿Baile de los Mikaelson?- pregunta confundida - ¿Quienes son y porque harán un baile?- me encorvo de hombros
- Son la familia original.- alza sus cejas - Y el baile lo hacen por que se creen la gran cosa. Que te pudo decir, son británicos.- sonríe - Ni siquiera son la gran cosa.- suspiro
-No te agradan los Mikaelson, ¿cierto?- asiento
- Pero hablemos de que pudieron abrir el ataúd. Tu mamá recuperó su magia es increíble.- expreso con entusiasmo y sonríe
- Si, lo es. De hecho, vamos a ir a su casa para practicar con la magia. Estamos conectando.- noto que sus ojos resplandecen. Me alegraba que ella tuviera una relación con su mamá.
- Estoy feliz por ti. Al menos alguien tendrá diversión y no tendrá que bailar en una parodia de la cenicienta.- suelta una risa - La reina malvada me solicitó. Quiere conocerme y tengo sospecha del por que.- frunce el ceño
- ¿Como que?- pregunta con interés e inhalo hondo
- Como que...- me interrumpen
- No saben lo que nos pasó allá adentro.- viene Caroline a quejarse junto a Elena - Rebekah invitó a Matt al baile. Algo planea estoy segura.- comenta con paranoia
- O tal vez sólo quiere invitar a un chico apuesto al baile.- comento serena y la rubia arruga sus cejas - Olvídenlo.- me cruzo de brazos
- Iré a ese tonto baile para que no se coman a nuestro amigo.- aclara y veo a Elena.
- Entonces, iremos todas.- añade mi hermana
- Bien, ¿a que horas es ese tonto baile?.- pregunta Caroline y ladeo una sonrisa
La ÚNICA razón por la que iba es por que debía hablar con Esther y tenía tarjeta verde. Podría perderme entre la multitud y confrontarla de una buena vez. Al paso de las horas, Caroline y Elena fueron a ver vestidos mientras yo estaba en casa, caminando de un lado a otro en mi habitación viendo el vestido en la cama. No me gustaba ir a buscar vestidos o gastar dinero en ropa cara. Simplemente no va con mi estilo y no me crié de esa forma. Es un tonto baile y un tonto vestido. Que más da.
Levanto el vestido y voy a ponérmelo. Me veo al espejo y me sorprendo de la persona que tengo al frente. Lucia linda sin sonar narcisista. La talla quedaba perfecto con mi cuerpo y no sabía si eso debía ser escalofriante. El cinturón apretaba a mi cintura y me hacía lucir delgada y miniatura. Me sentía cómoda y linda para acabarla de regar. Creo que jamás me había sentido de esas manera en un tiempo.
- Izzy, luces...- escucho la voz de Elena y me giro para verla - Te vez increíble.- sonrío y junto mis manos nerviosa. No me gusta mucho la atención
- Gracias, me siento de esa forma.- regreso mi vista al espejo - Solo que no tanto al saber de dónde viene el vestido.- camino a mi tocador para sacar un colgante. El que me regaló Jenna
- ¿De donde viene?- pregunta curiosa y paso saliva tensa. Sabía que si decía me harían muchas preguntas
- Lo compré con el dinero del fideicomiso que me dejó Isobel.- comienzo a ponerme los aretes algo nerviosa - No siento correcto usar el dinero de ella. Se siente raro.- miento
- Te entiendo. Pero te lo debe, no dejes que eso arruine esta noche.- volteo a verla y asiento - Iré a ponerme el vestido que renté, ¿quieres que te ayude en algo?- suspiro
- A peinarme. No quiero algo tan extravagante o muy elegante. Me gustaría algo ligero y sencillo.- sonríe y se acerca
- Siéntate, ya se que te irá perfecto.- sonrío y hago lo que pide. Después de unos minutos termina. Me había hecho un medio chongo suelto con una división en el medio. Era justo lo que quería pero no sabía visualizar
- Es perfecto, gracias.- expreso animada y me veo en el espejo con comodidad. Estaba lista y no me daba cringe así que era progreso
Elena va a su habitación a arreglarse mientras yo me pongo unos artefactos de tortura que se llaman tacones. Es de las peores creaciones que se han hecho en la tierra. Elena me prestó unos color rojo y mis pies iban a llorar por una velada. Soy masoquista supongo. Claro que lo soy.
Después de unos minutos salgo de la habitación y bajo a la sala. Estaba algo inquieta por lo que podría pasar está noche. La casa era silenciosa desde que Jenna y Jeremy se fueron, sin incluir a Alaric. Se siente muy solitaria. Les dije a Stefan y Damon que no iría aunque igual se iban a sorprender. La cosa es que no los quería encima diciéndome cosas sobre el por qué no debería ir. No es día para lidiar con los Salvatore. Escucho el sonido de unos tacones y volteo a ver. Bajaba Elena con un hermoso vestido de lentejuelas que resaltaba completamente su figura. Seguro me iba a opacar. Se miraba radiante y formaba una sonrisa en mi rostro
- Luces hermosa. Sin duda alguna.- sonríe y se me acerca
- Mira quien lo dice. Estás bellísima.- sonrío - Vamos, se hace tarde y entre más rápido salgamos de esta mejor.- inhalo hondo y asiento - Estás segura de ir con Esther? Mira no estoy muy...- la interrumpo
- Necesito está alianza, Lena. Debo saber si está de nuestro lado o en contra. Es una bruja poderosa que puede causar muchos problemas. Es mejor conocer al enemigo.- comento confiada y asiente
- Confío en ti, así que. Yo te cubro.- nos damos un abrazo corto - Solo ten cuidado.- asiento y nos separamos
- Lo tendré.
Narrador omnisciente
Todos estaban de gala en la residencia Mikaelson. La elegancia los predecía y la decoración era exquisita. El salón estaba repleto de todas las personas del pueblo y algunas otras que seguro fueron hipnotizadas. La música era clásica y el ambiente algo pesado. Solo bebían y conversaban. Algo aburrido para algunas personas pero para otros entretenido. Todos tenían la curiosidad de conocer a la gran familia que orquestó este baile.
- Alcaldesa, Lockwood. Mucho gusto, Kol Mikaelson.- se presenta el vampiro ante Carol y Damon lo analiza con la mirada. Pues acompañaba a aquella mujer mientras se quejaba de la aceptación que tenía ante los nuevos habitantes - Ojalá que su pueblo nos acoja tanto como nosotros lo haremos.
- Damon Salvatore.- le ofrece su mano y Kol hace un desplante- ¿Nos conocemos?- el vampiro ladea una sonrisa
- He conocido a muchos, no pareces memorable. - alardea burlón y eso hace enojar al vampiro. Le pasa Kol por un lado déspota y despeja la vista de Damon. Su mirada se centra en la bella chica que entra por aquellas dos puertas.
Le venía a la mente el recuerdo de Ana cuando bailaron juntos como escolta de la señorita Mystic Falls, se llenaba de nostalgia. Su gran belleza era resplandeciente y su sonrisa le parecía majestuosa. Tenía un gran deja vu cuando sus ojos celestes la observaban. El aliento se le iba pero mantenía su intenso contacto visual, aunque no era el único que la veía.
Klaus la veía con una devoción que lo tenía encantado. Sus ojos se impactaban en el rostro de la castaña. El estudiaba cada parte de su cuerpo poniéndolo nervioso. No se explicaba la cantidad de emoción que sentía al momento. Admiraba lo hermosa y radiante que se veía. Como sus labios rojos llamaba su interés y aceleraba su corazón. La intensidad con la que quería sacarla de la pista para solo besarla y tenerla entre sus brazos. Ponía su cuerpo a temblar de formas inexplicables. Su deseo no tenía magnitud. Solo la miraba sonreír y eso provocaba que el también lo hiciera. Izzy removía muchas cosas en el que creía muertas. Cosas que no estaba seguro de querer sentir. Le daba miedo experimentarlas.
Izzy
Estaba impresionada por lo grande que se veía la casa aún después de ya haberla conocido. Todo se miraba hermoso y resplandeciente. Me daba vibras de gossip girl y eventos de gente rica. Quien dijera que yo ando aquí y apenas y tengo con que mantenerme viva. Me sentía elegante y con clase.
- Iré por algo de beber. Algo me dice que lo necesitare.- me dice Elena y asiento sonriendo.
Mientras acomodaba mi vestido alguien se acerca y me sobresalto
- ¿Qué estás haciendo aquí? - le pregunto a Stefan mientras me escanea completamente. Claramente creía que me iba a sonrojar
-Te pregunto lo mismo. Lindo vestido.- suspiro y sonrío incomoda. Como le digo que me lo regaló la persona que más odia
- Qué sorpresa. Lindo traje. Tu no deberías estar aquí.- interviene Damon y en un parpadear ya tenia a los hermanos sobre mi
- Pues vine. Y no me iré hasta saber que quiere Esther, ¿si? ¿Quieren?- les hago señas de que se muevan y trato de caminar pero Stefan me ofrece su brazo y lo tomo. Volteo a ver a Damon y aunque se queja, termina cediendo.
Caminamos los tres como si fuéramos un trío poderoso. Me sentía a salvo con ellos dos. Me protegían y sabía que no me quitarían la vista de encima. Debería hacer que eso fuera posible.
- Iré a buscar a Elena.- les digo a los Salvatore y me suelto de su agarre. Mientras voy en su búsqueda alguien me intercepta
- Bienvenida.- me saluda Klaus y siento mi corazón acelerarse. El me ve fijamente y yo tenía los nervios de punta, pero claro que no quería que lo notara
- Necesito un trago.- suelto sin más y le saco la vuelta. Camino a la barra - Una copa de lo que sea que estes sirviendo.- le pido al camarero y asiente
-Isobel Sommers, supongo.- escucho la voz de un hombre y me doy la vuelta para ver. Nadie me llama de esa forma - Soy Finn Mikaelson. Vienes a ver a mi madre - alzo mis cejas y toma mi copa para dármela en la mano. No era tan apuesto como Elijah y Klaus pero tenía la suyo. Eso si, se miraba mayor.
- ¿Está aquí?- pregunto ansiosa viendo alrededor
- Su audiencia no incluye a tus amigos.- frunzo el ceño y me apunta hacia la dirección, volteo a ver y miraba a Stefan y Damon
- Están protegiéndome. No se si sepas que tu madre ya trato de matarme.- aclaro y sonrío falsa, el resopla
- Si quieres ver a mi madre, necesitas estar sola.- insiste y nos vemos fijamente. Alguien habla por el micrófono distrayendo mi atención
- Si me permiten su atención, por favor.- habla Elijah y volteo a verlo. Bebo un poco de champán. Claro que iba a necesitarlo
-Permiso.- me deja Finn y veo hacia las escaleras donde estaban todos los Mikaelson
- Bienvenidos. Gracias por venir. ¿Saben? Siempre que mi madre reúne a la familia así es nuestra tradición comenzar la noche con un baile. Está noche será un vals de hace siglos. Si pudieran encontrar una pareja y venir al salón.- un escalofrío recorre mi piel al verla junto a sus hijos. Era mis vívido el momento y eso me tensaba por completo. Se sentía tan real y me ponía nerviosa, pero debía enfrentarla. Necesito respuestas. La veo irse hacia el pasillo y pienso ir tras de ella. Levanto el vestido y me encamino
- Ni lo pienses.- me ordena Damon deteniéndome
- Quiere verme a solas, Damon.- insisto y trato de esquivarlo, pero vuelve a detenerme
- Lo siento por ella, ¿no fui claro esta mañana? - expresa irritado y frunzo el ceño
-Me invitaron y no tienes el derecho de decirme si puedo o no hacer las cosas.- le dejo en claro y me ve fijamente. Comenzaba a irritarme
- Avísame antes de entrar en la boca del lobo.- insiste y encarno una ceja
-¿Para que me detengas?- pregunto molesta y me mira fijamente
- Si.- suelta con cinismo y ladeo la cabeza manteniendo contacto visual. Se lo que intenta pero no voy a ceder
- Damon, Izzy.- nos nombra Klaus y ambos volteamos a verlo - Me permites.- me extiende su mano y la alzo mis cejas sorprendida. Levanto la vista para verlo y me la pienso dos veces antes de hacer esto. Tomo su mano
- Es la tradición.- aclaro a secas y Klaus me dedica una sonrisa. Le doy una mirada de victoria a Damon y camino con Klaus hacia la pista. Nos formamos en una fila
-Sobra decirlo, pero estás bella.- sonrío mientras comenzamos a movernos.
- Gracias.- respondo tímida. Sentía la mirada de Klaus, no me la quitaba ni un minuto.
Toma mi mano y me da una vuelta, coloca su mano en mi cintura dándome escalofríos. Pongo la mía en su hombro y nos balanceamos al ritmo de la canción. Todos bailábamos en círculos y yo no tenía idea de lo que haríamos aquí. Solo seguía a los demás
- Que gusto verte. No pensé que quisieras bailar conmigo.- menciona sereno y suspiro mientras mantengo la vista en la pista
- Yo tampoco y no precisamente vengo por gusto.-a lo lejos veo a Elena bailando con Damon y ladeo una sonrisa
- Cambiemos el tema a lo hermosa que te ves con ese vestido.- volteo a verlo con sorpresa. Los ojos de Klaus tenían un brillo diferente mientras me miraba, manteníamos un contacto visual que me ponía a temblar
- No pude ir de compras y sinceramente tampoco me gusta, así que..- comento sin importancia y sonríe. Trataba de seguirle el paso
- ¿Y el bailar conmigo? ¿Cuál es tu excusa?- pregunta con interés y lo veo fijamente
- Tenía que escapar de Damon. Fuiste mi opción más viable.- comento sin tacto y asiente
- Izzy, se que las cosas entre nosotros no terminaron bien anoche, pero puedo asegurarte que...- lo interrumpo
- No quiero escucharte.- le aclaro a secas y se sorprende - Solo terminemos con este baile y no hablemos, ¿quieres?- suspira asintiendo y estira mis manos para posteriormente darme una vuelta y termine chocando con alguien inesperado.
Stefan me miraba intensamente poniéndome tan nerviosa. No podía dejar de verlo y sentía el corazón acelerado al estar en sus brazos. Sentía muchas cosas en mi interior. La conexión que había se sentía por todos partes, casi como antes.
- ¿Con Klaus? - me pregunta incrédulo y solo suspiro
- Me sacó del apuro con Damon. - frunce el ceño y su mano en mi cintura tensaba mi piel mientras nos movíamos. No dejaba de pensar en otra cosa
- Te tomó 30 segundos poner a Damon de humor.- expresa con un tono quisquilloso y resoplo
-Solamente esta cuidándome.- aclaro y el asiente algo abatido
- Necesita entender que puedes cuidarte sola.- lo veo con sorpresa. Me gustaba que pensara eso de mi, que me viera como alguien fuerte.
Nos ponemos a bailar y disfruto cada momento. Era tan tranquila la sensación que me daba aunque algo más venía a mi mente y debía lidiar con eso
- Tengo que hablar contigo.- expreso serena y me acerco más a el
- Pues hazlo - estábamos tan pegados que nuestros labios parecían imanes que estaban apunto de tocarse. Nuestras respiraciones eran agitadas y mi garganta se sentía húmeda
- Aquí no.- aclaro y rompo el contacto. Dejo de bailar llevando a Stefan conmigo, salimos al patio - Si Esther trama algo no lo sabremos si dos guardaespaldas me siguen.- se cruza de brazos
- ¿Por que me lo dices?- pregunta confundido y frunzo el ceño
- Por que Damon no me deja acercarme a ella sin protección y a ti te importa matar a Klaus más que cualquier otra cosa y....- agacha la mirada y frunzo el ceño- ¿Qué? ¿Me equivoco? - pregunto incrédula y me mira con la expresión apagada, permanece el silencio y el contacto visual era desafiante.
No entendía que era lo que sentía y eso me molestaba, no comprenderlo. Odiaba eso
- No, estás en lo cierto.- responde a secas y nos miramos fijamente, asiento - ¿Que necesitas que haga? - suspiro
- Asegúrate que pueda entrar con Esther. Sola.- hago énfasis en lo último
- ¿Segura que puedes?- pregunta con precaución e inhalo aire segura
- Si puedo.- expreso confiada y asiente. Le paso por un lado y me detengo un momento al recordar recordaba algo que quería decir - Cuando éramos amigos me dejabas a mi decidir, creías en mi. Después de todo al menos eso se siente igual.- le hablo a su espalda sincera y solo suspira. Retomo mi camino y entro a la casa, voy por el pasillo en busca de Esther
- Izzy. - me habla Elijah y me freno nerviosa - Entiendo que mi madre solicitó verte.- se une a mi camino y paso saliva tensa
-Si, ¿por? ¿Algo está mal? - pregunto confundida y suspira
- Bueno, el perdonar a mi hermano luego de lo que ha hecho contra nuestra familia me parece un poco raro por decir menos.- comenta con desconfianza y alzo una ceja. Elijah podía intuir que algo sucedía
- ¿Crees que tu madre miente?- pregunto incrédula y resopla interceptando mi camino. Estábamos frente a frente
- Me hace preguntarme cosas que nunca imaginé. ¿Puedo confiar en que me dirás lo que te diga?- inhalo hondo y nos vemos fijamente. Sus ojos marrones se impactaban con los míos. Tenía que verme convincente. No debía notarse que miento.
-Por supuesto. Te lo digo luego, ¿si?- expreso serena y le paso por un lado.
- Te vez hermosa.- me freno y volteo a verlo. Nuestras miradas se encuentran - Ese vestido te resalta. Te ves aún más linda, aunque no se si eso sea posible.- sonrío conmovida
- Gracias.- expreso cálida - Lo aprecio.- sonríe asintiendo y continuo con mi camino.
Eso fue algo que no esperaba, pero me hacía sentir extraña. Como si removiera algo en mi, no se. Evito pensarlo y veo a Finn afuera de una habitación esperando. Camino hacia el y me señala que pase, lo hago
- Estás sola. Qué lista.- me dice Finn mientras camino. Estaba algo desorientada con la situación, también el humo que había por todo el lugar
- Solo es savia. La puse para hablar libremente sin ser escuchada. Eso es todo, Finn. Gracias.- el se va cerrando la puerta - Debes tener un millón de preguntas, ¿verdad, Izzy? Por favor.- me hace un ademán referente a que tome asiento y voy hacia el sillón
- ¿Como sigues viva? ¿Eres un fantasma o..?- me interrumpe
- No exactamente. Al morir, la bruja Ayana preservó mi cuerpo con magia. Era un amiga cercana, y ancestro de tu amiga Bonnie.- aclara y asiento
- Es por eso que únicamente Bonnie y su madre podían abrir el ataúd.- expreso serena al ya saber la respuesta y hace una mueca
- No solo ellas completan el linaje Bennett.- frunzo el ceño - Yo tomé su poder y de sus ancestros que están del otro lado.- expresa tan serena que daba miedo
- ¿Estuviste en el otro lado por mil años?- pregunto intrigada
- La naturaleza me castigó por convertir a mi familia en vampiros. Pero hay una forma de deshacer el mal que he creado.- menciona muy confiada y frunzo el ceño
- Tú quieres que te ayude a matar a Klaus, ¿cierto?- pregunto con interés
- Una cosa a la vez, Izzy. Por ahora, apenas requiero tu ayuda.- se levanta y comienza a prender veladoras
- Yo quiero saber dónde está mi madre, Ana Petrova.- exijo y me levanto del sofá - Me dijiste que me dirías.- suspiro
- Todo a su tiempo, pequeña.- ruedo los ojos - Entiendo que Rebekah les contó de mi familia. Como alteré el equilibrio de la naturaleza al convertirlos en vampiros a todos.- asiento
- Dijo que fue para protegerlos de los licántropos.- añado a secas
- Es cierto. Pero casi de inmediato buscaron la sangre de humanos. Mataron al pueblo sin pensarlo. Y luego Niklaus se puso en mi contra.- menciona Esther y alzo una ceja
- ¿Como vas a matarlo? Es inmortal.- añado incrédula y se voltea lentamente a verme
- Llevará tiempo, magia y tu ayuda.- aclara y frunzo el ceño
- ¿Que tengo que hacer?- pregunto confundida, estaba frente a unas velas y una clase de hoja vieja
- Mis hijos creen que este baile celebra nuestra reunión. Pero solo los tengo reunidos para poder hacer un ritual. El primer paso requiere la sangre de uno de los doppelgänger.- me tenso - Una sola gota. Tú esencia estará en la champaña del brindis siguiente.- toma una daga - ¿Quieres hacerlo? ¿O lo hago yo? - frunzo el ceño y doy un paso adelante, pincha mi dedo y me quejo un poco. Pone mi dedo encima de una copa mientras goteaba- Elijah sospecha mas que los otros y necesitara más persuasión. Pero todos deben estar vinculados.- quito mi mano y frunzo el ceño
- ¿Como que vinculados?- pregunto confundida y sigue haciendo el hechizo - Los unió con mi sangre.- reprocho
-Tú misma dices que Klaus es inmortal. Pero este hechizo vincula a todos mis hijos, y si uno muere, todos morirán.- me quedo perpleja
Esto no estaba para nada bien. No estoy segura de que esto sea lo que quiera.
- ¿Qué?- expreso preocupada. No quería que dañara a Rebekah ni a Elijah
- Amo a mi familia, Izzy, pero son un abominación. Traicioné a la naturaleza al crearlos. Es mi deber matarlos.- expresa sin tacto y yo estaba boquiabierta
- ¿Matarlos? Usted los hizo lo que son y, ¿ahora les quiere arrebatar la vida? - pregunto exaltada - Eso es cruel. Yo, yo no se en que estaba pensando.- retrocedo abrumada
- Quieres saber de tú madre, ¿cierto?- me freno mientras sigue con un hechizo - Yo tengo tus respuestas y aún más.- frunzo el ceño
- ¿Eso que significa?- pregunto confundida
- Te quedarás callada a menos de que no quieras volver a verla, jamás.- voltea a verme y mi pulso se eleva - ¿Escoges al hombre que mató a tu madre? ¿A las personas que aterrorizan tu pueblo? ¿Que harás?- nos vemos fijamente
- Escojo no ser parte de esto.- alzo mi mano y quemo el mapa, suelta un quejido - No usarás mi sangre para este homicidio.- camino a la puerta
- No sabrás lo que le paso a tu madre.- volteo a verla
- Soy lista y voy a descubrirlo sin tu ayuda.- abro la puerta y salgo de la habitación. Me voy casi huyendo al patio. Necesitaba aire y despejar mi mente con ese drama
Narrador omnisciente
- Maldita sea.- se queja la bruja Mikaelson mientras recoge el batidero
- Lo bueno que no es la unica doppelgänger en la fiesta.- menciona Valeria y entra por la puerta. Esther se sorprende
- No pensé que te expondrías de esa manera.- se baja la máscara y se acerca con un frasco
- Quiero a los Mikaelson muertos y es lo que me ofreces. El resto no importa.- se lo entrega y Esther sonríe - Sangre de Elena. Yo me encargo de que Izzy mantenga la boca cerrada y tú de vincularlos. Trabajo en equipo.- asiente
- Izzy es una bruja poderosa, nos puede detener en cualquier segundo.- expresa preocupada mientras vierte la sangre - Hasta yo lo admito y nadie me iguala en mi poder. Me hace recordar a mi hermana. Tiene el mismo potencial.- la pelirroja la ve con atención
- Izzy haría todo por los que ama. Si le dices que Ana está viva, tal vez se ponga de tu lado. Ya que te anclas de su poder.- aclara y la bruja voltea a verla
- ¿Como sabes?- pregunta con interés
- Se que Ayana era mi abuela y se que Izzy es la bruja más poderosa de todos los tiempos. Es una trihibrida, claro que tomarías la línea directa con su linaje. Solo que ella aun no lo sospecha y no tardará en darse cuenta. Y cuando lo haga, te quedas sin vida.- se tensa Esther - Es mejor que trabajes rápido.
Izzy
Iba caminando por el patio y me sorprendo al ver a un caballo. Una sonrisa se posa en mi rostro y solo corro hacía el. Siempre había querido conocer uno y este era hermoso. Me acerco y comienzo a acariciar su pelaje. Era tan suave y me relajaba por completo. Era una linda sensación. Ver una cosa tan pura es un sentimiento inexplicable
- ¿Te gustan los caballos?- me sobresalto al escuchar la voz de Klaus
- No voy a hablar contigo si no me dices para que me invitaste.- le aclaro y se pone aun lado mío
- Tú me gustas.- alzo mis cejas - ¿Es tan difícil de creer?- asiento
- Si.- respondo al instante
- ¿Porque?- pregunta con interés - Eres bella y joven, llena de luz.- suspiro - Me agradas.- relamo mis labios
- Apenas me conoces. Solo te intereso por que llevo el rostro de tu gran amor perdido, Genevieve.- volteo a ver al cabello - Es retorcido si te das cuenta, es prácticamente mi abuela.- masajeo al caballo y sonrío
- Sueles usar la mano izquierda para pintar y la derecha para dibujar.- volteo a verlo - Te he visto dibujar desde que llegué y lo he notado.- frunzo el ceño - Odias cuando las personas te mienten y muerdes tus uñas cuando estás bajo estrés. Consideras el arte un medio de expresión del cual te sientes libre. - alzo mis cejas sorprendida- Amas el azúcar y odias el café. Sueles relamer tus labios cuando estás nerviosa y sueles leer con audífonos. Te gusta expresar tus sentimientos en tu diario y odias la cerveza pero te gusta el vino y champaña. Son las pocas cosas que he podido notar desde que te conozco. Cosas que me gustan de ti.- me quedo sin palabras. Lo que dijo me conmovió - Presto atención a los detalles. Seguro si me permites conocerte más, podría hacerte la misma lista.- bajo la mirada tímida y se forma una sonrisa en mis labios
- ¿Por que me dices eso?- levanto la cabeza - Se que es lo que intentas pero no queremos lo mismo.- dejo en claro y me ve fijamente.
- ¿Sabes? Los caballos son lo opuesto a las personas. Son leales.- elevo mi mentón - Mi padre me cazó por mil años y los más cercano que estuvo fue cuando mató a mi caballo.- lo veo con atención - Le cortó el cuerpo, con espada, fue su advertencia.- siento el nudo en el estómago. Era un monstruo
- La primera persona que maté y de la cuál no me arrepiento.- expreso sincera y sonríe
- Me interesas y no encuentro otra forma de dártelo a saber.- se me acerca y retrocedo - Izzy, lamento lo que hice en la cena. No era mi intención hacerte sentir mal.- inhalo hondo
- Soy insegura por que ya amaste a alguien con este rostro.- me señalo - ¿Como se que no te interesa Genevieve en vez de mi? - se me acerca - Demuéstrame lo contrario y lo tendré en mente.- me alejo
- Espera, ¿me estás tomando en cuanta?- escucho su entusiasmo mientras me alejo - Izzy, no te vas a arrepentir.- ladeo una sonrisa y voy a la casa. Entro y me muevo entre la multitud
- ¿Y que tal mi madre?- me intercepta Elijah por la espalda y doy un pequeño sobresalto, volteo a verlo
- Intensa.- aclaro y toma dos copas del camarero
- ¿Y por que razón quería hablarte en privado?- me ofrece una copa y la tomo. Me tenso por completo y siento un ligero escalofrío. Aparto la mirada y a lo lejos veo a Esther observándome desde las escaleras - ¿Izzy? ¿Debería preocuparme la intención de mi madre?- regreso mi vista a ella y paso saliva tensa
Ya no había de que preocuparse por que ya no va a usar mi sangre y la usa como un gran vinculante. Sin ella no puede hacer el hechizo, así que no tenía que mentir.
- No, Elijah. No tienes de que preocuparte.- expreso sincera y asiente
- Entonces, ¿es cierto? - me ve fijamente - ¿Perdonó a Klaus?- suspiro
-No del todo.- frunce el ceño - Elijah, no...- me interrumpe el sonido de una copa siendo golpeada. Volteamos a ver y vemos a Esther con una copa
-Buenas noches, damas y caballeros.- la veo con atención - Los meseros les darán champán, quiero invitarlos a levantar las copas. Hoy me da un enorme gusto el ver a mi familia nuevamente reunida. quiero agradecerles por esta espectacular velada. Salud.- todos levantan sus copas al aire
- Salud.- me dice Elijah y me sonríe mostrando su copa
- Salud.- respondo y las chocamos, bebemos.
- Izzy.- me nombra Klaus y volteo a ver - Te quiero mostrar algo.- suspiro y colocó la copa en la bandeja de uno de los meseros
- Bien, hasta luego, Elijah.- asiente y Klaus me toma de la mano para llevarme de ahí. Siento olas de energía ante sus tacto. Nos movemos por la casa hasta llegar a una clase de estudio - Y bien, ¿qué querías mostrarme?- pregunto con interés y veo alrededor. Tenía buenas pinturas por el lugar
- Una de mis pasiones.- volteo a ver y me sorprendo al ver el enorme cuadro que tengo frente a mi. Este debía ser donde el pintaba. Era hermoso
- Es precioso Klaus. Me encanta la mezcla de colores. Haces notar los colores vividos de una tarde de primavera. Es hermoso.- comento impresionada. Me acerco a una mesa y veo los bocetos.- No me habías mostrado esto. Aunque ya has visto mi arte.- levanto las hojas
- No había tenido a quien mostrárselo antes.- volteo a verlo - Ya encontré a quien.- sonrío y nos vemos fijamente - De hecho, uno de mis paisajes está en el Hermitage, aunque a nadie la importe.- bajo los bocetos - ¿Lo has visto?- meneo mi cabeza y aparto la mirada
- Solo conozco todas las galerías de Boston. No he ido más allá aparte de este pueblo.- aclaro
- Yo te llevo.- volteo a verlo - Adonde quieras. Roma, París.- sonrío - ¿Tokio?- reímos
- Debe ser lindo obtener lo que deseas chasqueando los dedos. Aveces quisiera tener eso.- expreso sincera y mantenemos contacto visual
- Conmigo tendrías eso.- se acerca a mi - Eso y más. Todo lo que quieras.- nos ponemos frente a frente
- No soy tan predecible, Mikaelson. Te lo aseguro.- ladea una sonrisa y le paso por lado - Tienes un don para pintar. Lo haces de forma simbólica. No siempre tratas de dar un mensaje.- recorro su estudio - Tus diseños representan sentidos y significados. Dejas que tus emociones se muestren en...- me pauso al ser volteando por el
- Izzy...- jadeo y solo nos vemos fijamente. Pone sus manos en mi rostro poniéndome nerviosa. Me sentía cómoda y por alguna razón no quería quitarlo - Eres todo lo que he buscando por mil años. Nadie me entiende como tú. Esa es la razón por la que me gustas. Por que veo en ti lo que en nadie más.- paso saliva nerviosa
- Tengo que...- me toma por sorpresa besándome. Sus labios se impactan con los míos y yo me aferro a ellos. Desliza sus mano a mi cintura y me toma con fuerza. Yo rodeo mis brazos a su nuca mientras nos besamos con pasión. Mi corazón se me podía salir del pecho mientras el se aferraba a mi como si fuera lo que más deseara en la vida.
Se escucha un ruido fuerte y nos separamos de golpe. Jadeo tomando el aire y Klaus se aparta de mi
- ¿Qué fue eso?- pregunto confundida mientras me acomodo el vestido
- No lo se.- me limpio los labios y ambos salimos del estudio. Caminamos por la casa y escuchamos la voz de Stefan
- ¡Damon! - me acerco corriendo - ¿Estás loco?- todos los Mikaelson salen a ver la escena. Damon estaba sobre Kol, parece que le rompió el cuello
- Tal vez un poco.- responde antipático y frunzo el ceño - Pero no voy a causar problemas.- voltea a ver a Elena y los miro con confusión
¿Qué fue lo paso?
-Necesito agua.- expreso abrumada y me alejo. Camino a la barra y me encuentro con alguien desagradable
- Hola, hija.- ruedo los ojos al ver a Valeria - Extrañaste a tu...- rompo la copa que llevaba en su mano con solo mirarla - Hey..- se queja y me acerco a ella con furia
- No te metas conmigo que puedo matarte con gusto. No significas nada para mi.- le reclamo - Hazlo de nuevo, te reto.- la amenazo y se me acerca
- No me...- susurro un hechizo y suelta un quejido. Se le va va cerrando la garganta y toca su cuello con desesperación
- Si te explota la cabeza no creo que te crezca otra.- noto como va sufriendo - Aléjate de mi.- le advierto y detengo el hechizo. Respira agitada - No lo volveré a pedir.- voy alejándome de ella para ir a buscar a Elena, ya que me quería ir.
Narrador omnisciente
- Elijah.- lo nombra el híbrido y este se frena - ¿Qué te traes con Izzy?- el vampiro frunce el ceño
- ¿De que hablas?- pregunta confundido
- Estás muy unido con ella y noto la forma en que la miras. Tus intenciones. La historia no se va a repetir.- le aclara déspota y Elijah alza una ceja - Ella está conmigo y no vas a robármela.- el vampiro asiente
- Imaginas cosas. Solo estás celoso.- intenta irse y Klaus lo frena
- Lo digo en serio. Aléjate de ella.- Elijah lo ve meticulosamente - A la otra no voy a pedirlo.- lo suelta y se aleja. El vampiro se queda pensativo ante la petición
Isobel
- Izzy.- escucho que nombran y me freno. Veo a Rebekah acercarse.- Hey, te he estado buscando.- se acerca a darme un abrazo
-Bekah, hey.- sobo su espalda - Lamento lo de Klaus, yo...- me interrumpe
- No te lamentes por el bastardo. Claro que no iba a sacarme la daga.- suspiro - Ese vestido, el te lo escogió, ¿cierto?- me quedo en silencio - Acepta este consejo. Me agradas. Por eso te aconsejo que no te enamores del bastardo. El no sabe amar.- me tenso por completo y la veo sorprendida
No esperaba que me dijera eso. No lo esperaba para nada.
- Recuerda que el solo está contigo por alguien más. Te lo digo por que me considero una amiga.- bajo la mirada decepcionada - Mereces más que el.- suspiro
- Tal vez tienes razón. Quiero ir a casa, hablamos luego.- me despido - Te vez linda, Rebekah.- sonríe
Camino hacia la puerta algo desanimada. Tal vez Rebekah tenga razón. Yo solo llamaba su interés por el recuerdo de alguien más. Eso es confuso y probablemente deba alejarme de Klaus. Todo es una farsa y estoy cayendo en ella. No dejaré que eso pase. No voy a estar con el.
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