Mattia acababa de cavar un agujero para enterrar el cuerpo de Aiden, ahora se encontraba  grabando las iniciales A. L en un trozo de madera que se utilizaría como epígrafe.

La híbrida se acercó a su marido tras haber ido a hablar con su hermana.

— Ha llamado Elijah. —anunció.— Freya está haciendo un hechizo para encontrarnos. Tenemos que irnos. Ahora. —se fijó en lo que hacía el pelinegro.— Espera. ¿Vas a enterrar a Aiden aquí? —pregunto sorprendida por la decisión.

— No podemos llevarlo. Dame un minuto para enterrarle y nos marchamos. —pidió el James.

— Así es como los lobos entierran a los asesinos y a los traidores. —le recordó ella frunciendo el ceño.— Se que Aiden respondía antes Klaus, pero al final fue leal a la manada. Por eso está muerto, Mattia.

— ¿Crees que no lo se? —respondió con brusquedad.— ¿Crees que así es como quiero que AIden descanse? —volvió a preguntar más calmado.— No tengo elección, tu misma lo has dicho. Tenemos que irnos.

Megan negó con la cabeza.

— Esto no está bien. —suspiró.— Si esperamos que los lobos se jueguen la vida por Hope se merecen saber que sus vidas nos importan. —opino.— Nos lo llevaremos río abajo. Y tendrá un funeral de Media Luna. —Mattia la miro fijamente.— Ya han perdido demasiado. No permitiré que pierdan esto también.

El pelinegro asintió, accediendo a lo que su mujer acababa de decir.

. . .

Seis lobos cargaban el ataúd donde estaba el cuerpo de Aiden, todos los demás los seguían con paso firme.

— Nunca te he dado las gracias por todo lo que has hecho por mí y por mi familia. —murmuró Megan mirando a Mattia.

— Meg, tú eres mi familia. —respondió él sin entender.

— Me refiero a antes de todo, antes de la guerra, antes de la boda... —especificó ella.— Es algo que he pensado mucho. Sabiendo en el lío donde estaba metida con Hayley y los Mikaelson, ¿porque decidiste acercarte a mi?

— En nuestra forma de lobos, Jack y yo solíamos turnarnos para ir a veros, y bueno, protegeros todo lo que pudiéramos. —confeso.— Te vi en múltiples ocasiones; hablando con Hayley, discutiendo con Klaus la mayor parte del tiempo, poniendo malas caras a Elijah...

— ¡Estaba obsesionado conmigo, señor James! —exclamó Megan burlándose.

— Y he salido ganando, dado que ahora eres la señora James.

Megan río.

— Egocéntrico.

— Tú has empezado. —alzó las manos.

Megan rodó los ojos aun con una sonrisa.

— ¿Correteabas por aquí cuando vivías en forma de lobo? —preguntó cambiando de tema.

— Y antes de eso. —respondió con rapidez.— Era un niño cabreado. Mis padres habían muerto, no tenía familia y odiaba todo aun mas porque tu no estabas.

— Todo niño con el gen lobo está cabreado. Yo era una pesadilla. —Mattia la miro esperando que siguiera hablando.— Hayley se tranquilizó cuando se activó la maldición, yo no. Todo era nuevo, diferente, y no podía controlarlo. Eso me irritaba y frustraba de gran manera.

— En esa manera te entiendo. Cuando se activó mi maldición, se activó la de los Media Luna así que vivía en forma de lobo. Una luna llena, nuestro alfa no apareció. Lo habían matado. Y yo ocupe su lugar. —explico.— Protegí a esta gente, los mantuve a salvo. Eso fue lo que me calmó. Al menos durante un tiempo.

— Buena historia, ¿para cuando la película? —bromeó tratando de dispersar los malos recuerdos de él.

Mattia río.

. . .

Megan se encontraba en una cabaña cuidando a Hope mientras que hablaba por teléfono con Marcel. La híbrida había querido darle un respiro a su hermana y se había ofrecido a vigilar un rato a Hope.

— ¿Klaus no mató a Aiden? —preguntó para cerciorarse.

— He pensado que querrías saberlo. —respondió el vampiro al otro lado de la línea.

— ¿Por qué unicornios asumio la culpa?

— ¿Unicornios?

— Estoy con Hopy, no puedo decir insultos,

— Entiendo. —dijo Marcel.

— Dios, ¿porque Klaus tiene que ser tan terco e irresponsable, además de ser un cachorrito híbrido sin rumbo?

— ¿Va todo bien? —pregunto por el humor de su amiga.

— Es que... la moral de la manada no está muy alta ahora mismo. Todos estamos destrozados por la muerte de Aiden. —Megan miró el sitio de la pared donde estaban las iniciales J.K, A.L, O.R y M.J. — Era nuestro amigo.

— Eres una líder que se preocupa por su gente, lo entiendo. —aseguró.— Pero en este momento, eres una líder en guerra. Puedes ser su amiga o su reina, pero no puedes ser ambas cosas. —la aconsejó.— Mattia y la manada entera morirían por ti. La pregunta es: ¿vas a dejarlos? —preguntó.— Si la respuesta es sí, tendrás que vivir con ello.

. . .

Megan vio como Jackson peleaba contra Elijah, quien acababa de aparecer.

— ¿No vas a intervenir? —le preguntó su hermana, quien tenía a Hope dormida en una especie de fular raro.

— Viene a ver a Hope y a ti. —Meg le sonrió a Hayley.— A quien necesitan esos dos es a ti, a mi no me harán caso, Haly.

Hayley agarró la mano de Megan y tiró de ella.

— No me gusta meterme en dramas de triángulos amorosos. —rechistó la híbrida menor.

Las hermanas se acercaron mientras Mattia también lo hacia, colocándose a la defensiva al ver a Elijah.

— Elijah. —lo llamo Hayley.— No deberías estar aquí.

— Ha habido un cambio de planes. —miro a las hermanas.— Hemos encontrado otra manera. Si conseguimos una réplica de la magia de Hope podremos atraer a Dahlia a una trampa. Y después yo mismo la matare.

Megan sonrió cuando Elijah utilizó un tono de superioridad mirando a Jackson.

— Necesitamos un vial de la sangre de Hope. —comunicó Elijah a Hayley.

Hayley debatió en su mente antes de mirar a su hermana, quien asintió. Megan aprobaría todas las opciones posibles que no pusieran en ningún riesgo a su sobrina.

— Te daré su sangre. —accedió.— Confío en ti, Elijah.

Elijah sonrió lentamente.

— En cuatro nuestro hogar está seguro, podréis volver a casa junto a Hope, con la familia. —concluyó Elijah.

. . .

Megan entró nuevamente en la cabaña, ahora era Mattia quien cuidaba de Hope.

— La manada se está reuniendo para el funeral. Te están esperando. —el chico asintió. Megan volvió a mirar el trozo de pared donde estaban las iniciales.— Tu, Jack, Aiden y Ollie vivíais aquí ¿eh?

— Éramos como hermanos. —murmuro.— Cuidábamos el uno del otro. Antes de que vinieras a Nueva Orleans, nuestra manada me eligió a mí. Hemos perdido muchos por culpa de los Mikaelson. —dijo el pelinegro.— Y Elijah quiere que vuelvas con su familia cuando esto acabe. —se levantó.— Pero no puedo vivir bajo el techo de Klaus y ser el alfa que esta manada se merece.

— ¿Qué estás diciendo, Mattia? —pregunto temerosa Megan.

— Te quiero con locura. Y siempre honraré nuestros votos. Pero necesito saber quien es tu familia. —confesó.— Si quieres volver con los Mikaelson, no puedo volver contigo. Si son tu familia de verdad, yo tengo que proteger a la mía. Te daré tiempo para pensar.

Mattia le dio un beso en la frente a Megan, quien estaba estática, para luego pasar pos su lado, pero ella lo detuvo con simplemente hablar.

— Estoy embarazada. —murmuró sin girarse.

Mattia retrocedió posicionándose frente a ella.

— ¿Qué?

— Estoy embarazada. —repitió sin mirarlo.— Eres mi familia, mi marido. Pero Hayley es mi hermana y si ella decide volver con los Mikaelson no me pidas que me aleje de ninguno de ellos. Entiendo tu punto, pero entiende que he pasado mucho tiempo con ellos, y se han ganado mi cariño y respeto. Para mi también son mi familia, pero si tengo que elegir ya sabes cual es mi bando. —finalizó. Mattia no respondió— Te daré tiempo para pensar.

— No tengo nada que pensar. —Mattia por fin reaccionó.— Tu y nuestro bebe sois mi familia. Siento si he sido brusco, entiendo lo que quieres decir y en ningún momento te exigiría que te alejases de Hayley, pero no puedo, ni quiero vivir bajo el techo de Klaus.

— ¿Por qué crees que yo sí?

La mirada de Mattia lo dijo todo. Aun en la situación en la que estaban Mattia seguía pensando en que Megan se había acostado con Klaus, y eso le era suficiente para pensar que ella quería estar cerca de él.

— Te quiero a ti. No a él. —le recordó Megan antes de salir de la cabaña.

. . .

El alfa miraba el cuerpo de Aiden en el bote, una lágrima cayó de su ojo. Megan suspiró entrelazando sus manos, por mucho que hubiera pasado entre ellos siempre le brindaría apoyo incondicional.

Mattia la abrazo como si su vida dependiera de ello, tras separarse Megan se puso de puntillas y le dio un casto beso. La híbrida se giró hacia los lobos, viendo como Josh se acercaba y estos le impedían el paso.

— Le he dicho a Josh donde podría encontrarnos. —dijo Megan separándose de su esposo.— Dejadle pasar.

Después de que Josh se despidiera de Aiden el funeral comenzó. Megan envolvió a Josh en sus brazos, dejando que este sollozara un poco. Nadie dijo nada cuando el bote comenzó a incendiarse, tampoco cuando se alejó.

Adiós, Aiden.

Eirene's note:

no se que comentar al respecto, estoy de luto por Aiden :(

Que os ha parecido??

Mi bebe Meg va a tener un bebeeeee y ya tengo claro tanto el sexo como el nombreeeee

Chaitoooo

EIRENEEVANSS - 20/02/2023