Jisung llegó al apartamento y se sentó a lado de Minho en el sofá, comenzó a jugar con sus manos y después recargo su cabeza en el hombro de su amigo.

— Aceptó — Minho se acomodo para poder hacer que Jisung se sintiera más cómodo.

— ¿En verdad?

— Si pero tengo condiciones.

— Bien, quiero escucharlas.

— Solamente sera sexo ¿esta bien? Nada de tomados de la mano y esas cosas, nos comportaremos cómo siempre lo hacemos, puedes seguir con tus conquistas nocturnas y yo con las mías.

— Me parece perfecto.

— Otra cosa.

— ¿Cuál?

— Harás lo que te pida sin importar que sea.

— Hablamos de en la cama solamente ¿no?

— Claro.

— Bien ¿algo más?

— Prepararas el desayuno los fines de semana.

— Eres todo un aprovechador.

— Lo sé — el rizado sonrió y acomodo sus piernas sobre las de Minho.

— Esta bien, es un trato.

— Esta bien — volvieron a ver ma televisión pareciendo algo más que amigos.

Pero lo cierto es que siempre se había comportado así, nunca se habían visto de otra manera que no fuera como amigos, tampoco habían sentido ningún tipo de atracción hacia el otro pero lo cierto era que a ojos de el resto de la gente ellos siempre habían parecido algo más.