Capítulo 7

¡Ya, stop! ¿Quién deja a su novia en la fiesta de compromiso? Bueno, pensaba que nadie hacia eso hasta...que conocí y cupido. Ahora cuando me case (en un futuro más que lejano y ni sé si va a pasar) voy a tener temor que me dejen.

Maldito ególatra cobarde.

Se miraron por largos segundos frente a frente y pude notar la ira que tenía Estela por lo sucedido hace casi tres milenos, su semblante había cambiado y sus ojos se estaban cambiando de color a casi rojo. Me hubiese ido si no fuera porque era algo urgente y serio.

Después de algunos minutos Estela estaba dispuesta hablar, pero no era conmigo, sino que era hablar con Cupido y sentir su furia,

-¿Cómo tienes el descaro de venir hasta aquí? Parasito con alas-pregunta en voz alta ella.

-No sabias que estabas aquí, Estela-sonríe-Pero te vez estás más hermosa de la última vez.

Estela lo mira todavía con cara de pocos amigos, su labio tiritar de la rabia contenida, sus manos se aprietan y su ceño todavía tiene la misma cara de odio y resentimiento hacia él.

-Claro que me veía mal, engendro-grita alterada- si me dejaste tirada cuando era nuestro momento ¡NUESTRO MOMENTO!

-Era tu momento, presumida

-¿Mi momento?-pregunta ella divertida-El único momento que fue mío es cuando te fuiste con mi hermana

-Tu hermana era preciosa, creo que más que tú-expresa- bueno, eso no es el caso. Fue un error

-Mi hermana era, una ninfa masculina, en verdad era un hombre, imbécil

-Ni me lo recuerdes, aprendí de la peor forma-dice, haciendo una mueca de asco-Pero belleza, fue un error y lo sabes.

-El único error que había eras tú, pero estaba tan idiota y cegada por ti que no me daba cuenta.

-Estela, sé que fue un error pero tengo una explicación, solo quiero decirte que lo siento.-la mira a los ojos-Perdón por todo.

Estela al escuchar eso, hizo lo que toda mujer madura haría cuando tu ex prometido te pide disculpas.

Matarlo a golpes.

Okno, le digo una bofetada que le giró la cara.

-Auch, eso dolió preciosa-lamentó cupido.

Estela nos sonrió a ambos simulando que no había pensado nada.

Entramos a la casa y era maravillosa. Piso de mármol, muebles cuidados, grandes espacios. No como mi departamento, mi departamento comparado con este palacio seria como el sótano abandonado con ratones.

-No es cómo parece-susurra Kal a mi oído- Ella ha hecho cosas suficientemente malas para vivir así.

Lo quedo mirando un momento a los ojos, preguntándome, ¿Qué habrá hecho ella?

-Entonces, chicos-Nos llama Estela desde atrás-¿Qué quieren que haga yo?

-Lo que quiero no es posible mientras Emillie este, querida-bromea Kal-Bueno, necesitamos un favor.

-Ignoraré el comentario anterior. Creo que necesitas hablar con tu madre ¿verdad?

-La verdad que sí Estela-contesto yo por él-Necesitamos eso, sería un favor grande.

Estela los lanza una mirada advertencia a los dos, haciéndose notas que era un asunto serio.

-Voy a llamar a mi padre Ares, él me puede contar algo sobre el paradero de ella-habló en voz alta- En caso que él no sabe trataré de contactar a "ninfa" para qué te ayude.

Asinte todavía serio, lo miro y no pude evitar suspirar por todo lo que esta pasando.

-¿Emilie?-me llama

-Sí, dime

-Gracias por todo. Puede que sea algunas veces idiota.

-¿solamente idiota?-pregunto divertida

-Déjame terminar-para sonriendo- Puede que sea idiota, muy idiota, inmaduro, infantil, odioso, molestoso. Pero aprecio lo que estás haciendo por mi, la verdad que nunca pensé que podías brindar tanta ayuda.

Sonrió, la verdad que ni yo sé porque estoy haciendo, pero lo estoy haciendo con todo mi apoyo.

-De nada, mientras estés aquí al parecer te ayudaré en lo que necesites.

Me toma y me abraza, y sentí seguridad estar entre sus brazos. No sé cuantos minutos estuvimos así así pero debo admitir y confesar me gusto estar así.

-Chicos-nos llama Estela con seriedad- Tengo que hablar algo con ustedes, está pasando algo serio aquí

(Narra Afrodita)

Ya ni recuerdo desde que día estoy aquí. Apenas recuerdo cómo estaba antes de esto. Nunca pensé que mi propio hermano me haría esto.

Veo mis manos y me entremeseo, cada parte de ella esta con heridas y infecciones, puede que no muera porque soy inmortal pero siento el dolor como todo ser vivo.

-Te vez como la mierd* querida hermana-sonríe, segado por la rabia.

Me estremezco, tengo miedo.

-Dime donde esta-demanda él con firmeza.

Sonrio, puede que esté aquí, toda sucia y con mis ropas rotas pero soy una diosa.

Me levanto con la poca firmeza que tengo y lo miro con una sonrisa de superioridad. Puede que él sea dios pero yo también lo soy.

-No lo sé, querido. Y si supiera créeme no te lo diría.

Apolo me da una bofetada que me bota al suelo, me estremezco del dolor y no puedo evitar de quejarme con un gemido.

-Perra.

-Me han dicho cosas peores a lo largo de la historia, hermano. Perra casi es un alago para mí.

-No me cabe la menor duda de eso.

Apolo se acerca a mí sigilosamente, sonriendo de algo malo que iba a pasar.

-Hermosa, si no me lo dices tendré que hacer cosas que tu no quieres.

-¿Cómo qué?

-¿Recuerdas a Prometeo? Tengo un castigo parecido a eso- mi garganta trago fuerte al imaginarme eso -¿y sabes lo mejor? Qué tu castigo es pensado en ti.

-¿Los pájaros comerán mis entrañas?-rio-¿En serio? Pensaba que se te ocurrían ideas más interesantes hermano, digo, llevas más de 5000 años vivo y se te ocurrió eso. Esto decepcionada de ti

-Algo parecido-responde él-¿Ves hermanita? Siempre pienso en ti.

-Ni que me digas-respondo sarcástica.

Todavía molesto, se aferra a mi brazo con rabia y resentimiento. No podía creer que mi propio hermano me haga esto, algo tan sagrado y leal como es la sangre, él lo estaba traicionando. Si mi padre llegase a saber del altercado podía llegar a sacar del Olimpo a Apolo para siempre y ser un mortal más, pero sabía que mientras estaba yo aquí nada podía hacer

-No me deberías responder de tan manera, idiota-grita con fuerza- soy tu dios y me respeta.

-Ni siquiera en mi culo eres mi dios Apolo, supera eso.

Apolo me da una patada por la rabia contenida, para después cerrar con un portazo la puerta en donde estoy encerrada.

-Espero que tengas estomago para sobrevivir al castigo que te daré Afrodita.-grita desde afuera

Doy un vistazo al lugar en donde estoy. Es muy oscuro, sucio y lleno de humedad por los malos olores que esta posee. Sé que es un lado del templo en donde todos vivimos pero ni siquiera sé qué lugar estoy exactamente.

-Te odioooo-grito exasperada.

A lo largo de estos días había intentado de todo para que alguien me ayudara pero era imposible, no tenía mi varita y a pesar de los gritos de auxilio que emitia, nada se escuchaba.

Comencé a llorar con fuerza, no debía estar aquí pero estaba pagando por los pecados que hacia cupido y era lo que siempre pasada.

Me pregunté qué hubiese pasado si yo no hubiese echado a cupido del olimpo, tenía la pequeña seguridad que Apolo hubiese encontrado la manera de matarlo y despedazarlo.

-No importa-me apoyé mentalmente-Podré salir de esta, como siempre.

Mientras trataba de relajarme a la fuerza noté que Apolo accidentalmente había dejado mi varita en este lugar.

A pesar de las cadenas qué tenía puestas, pude moverme lentamente y alcanzarla.

Ahora tendré que arreglar este caos antes que Apolo se entere, donde esta él.

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Holaaa! Bueno, esta es mi nueva novela o proyecto que tengo (en verdad esta historia la tengo pensada desde que estoy desde que estaba en el colegio y ahora estoy en la univ.)

Espero que les guste esta novela, estoy haciendo todo lo posible para que les guste <3 

Suerte

Pregunta : ¿Cómo se imaginan a Kal o Cupido? Comparenlo con algun actor u modelo