Siempre creía que los ángeles eran los seres más buenos y bondadosos de la existencia, pero conociendo a Elmert (el ángel mensajero) supe, estaba equivocada. Con el pasar de las horas mi estereotipo de que cómo era un ángel. Se fue a las nubes, como la muerte de chimuelo.

Estamos todavía viajando en el portal, al parecer el olimpo queda muy lejos o muy arriba, porque llevábamos horas y todavía no encontraba ningún indicio del palacio. De las muchas horas que han pasado, Kal llegó a conciliar el sueño y está totalmente dormido en mis piernas.

Levanto la mirada y me encuentro con el Angel fumando algo parecido a un cigarro, pero al verlo más cerca, noto que está lejos de ser un simple cigarro.

-¿Qué mira señorita?-pregunta bruscamente el ángel- Nunca ha visto un ángel fumando

-Ni siquiera he visto un ángel- respondo fugazmente- ¿eso es marihuana? ¿Eres un Ángel y fumas marihuana? ¿No que son totalmente sanos?

El Ángel ríe al escuchar mi respuesta, para después dar una mirada de ternura.

-Es verdad lo que dice él de ti- Hace un gento con la cara indicando a Cupido – Tu inocencia llega a dar ternura. Me hubieses gustado así, pero mi corazón se perdió en lo último.

¿Cupido dijo que yo era tierna? Al pensarlo, me ruborizo, no esperaba que él dijera algo así. Más que antes solamente peleábamos, pensaba que tenía otro concepto de mí.

-Te ruborizaste. Te gusta ¿verdad?-El ángel sonríe- No entiendo como él puede sacar tantos suspiros.

-No-digo con rapidez.- No me gusta.

En verdad no sabía, algo me decía que sí y algo que no. Tenía miedo en verdad, porque de algo que más odiaba eran los amores toxico ¿Y si eso se convertía? Yo no quería un amor toxico. También y no menos importante tengo que saber si el sentimiento es correspondido.

-¿Sabes lo mejor de ser un ángel y no ser un dios?-pregunta él, mirandome a los ojos.

-No.

-Qué yo puedo ver los sentimientos y comprenderlos. Y sé perfectamente que a ti te gusta él – sonríe mostrando todos sus dientes – También veo tu miedo, no sé por qué pero te daré un consejo como amigo, cosa tuya si lo tomas o no. El chico no es malo, al contrario, tiene un corazón digno de admirar. Es algo idiota, pero es normal.

-¿Todos dioses son así?-pregunto riendo mientras peino el cabello de Kal con suavidad.

-¿De idiotas? Sí, es como la esencia. Pero lo decía porque, Afrodita se le cayó de la cuna. Pero ellos no tienen un corazón tan puro como él. Otra cosa, no te fíes de las caras bonitas, no son como parecen.

Asiento todavía confundida ¿Por qué habrá dicho eso?

Desde que estaba con Cupido cada vez me confundo más. Cada vez hay más secretos, engaños y problemas que me compleja. Si bien antes mi vida era aburrida, ahora vivo todo con estrés ¿Es necesario pasar todo esto por él? No yo sé.

Miro a Cupido y le acaricio el pelo, preguntándome ¿cómo será el olimpo?

-Ya llegamos- avisa el ángel mientras inhala lo último de su cigarro, para después tirarlo y botarlo – Despierta a alas de pollo. No tenemos que atrasarnos y él no aporta mucho en esto.

Doy otro vistazo al cuerpo dormido de Cupido, parecía un ángel durmiendo a mi lado. Toco suavemente su cara y él suspira haciendo un sonido tierno y dulce. Sonrió, me doy cuenta de cuanto me está gustando.

-Hey, despierta murciélago, Batman te esta buscando.

Abre un poco los ojos, me sonríe suavemente con confusión.

-¿Ya llegamos?-pregunta todavía con la voz grave

-Sí, ahora veremos todo.

Ambos nos páramos y caminamos juntos hasta la salida del portal. En donde ya nos Esperaba Elmert con una sonrisa y una mirada.

-Wow, esto es más bello de lo que yo había imaginado.-exclamo al salir

Alzo la vista por unas empinadas escaleras de mármol en que estamos y de allí veo que se encuentra un deslumbrante panteón que parece formar parte del mismo cielo.

Aunque la distancia es considerable, aun estando aquí distinguí los pequeños detalles de las colosales estatuas ubicadas al frente, como de las enormes columnas blanquecinas que forman parte de la estructura. Era todo hermoso y elegante.

Kal que está al lado mío, sonríe.

-Las estatuas que ves son de los dioses más fuertes de aquí. Por eso, no tengo mi estatua- explica Kal- Zeus, Hera, y Ares tienen las más grandes estatuas ya que están al comienzo de la creación. Ellos tienen nuestro respeto, como inmortales y como dioses.

En el medio había un gran edificio con altos techos, cubierto con algunas plantas alrededor y blanco. Ahí era el palacio en donde vivían los dioses. El Olimpo real.

-Rápido, entremos al área hospitalaria-habla Elmert

Cupido asiste y me toma de la mano para llevarme por la esquina del palacio. En donde, vi una pequeña entrada. Él se adelanta y toca la puerta tres veces, al momento de tocar por cuarta vez, abre la puerta una hermosa ninfa.

Ella al ver a Cupido cambia su cara de cansada y molesta a una sonrisa sensual y coqueta. Rápidamente se arregla el pelo y se lo acomoda.

-Cupido...es un agrado siempre verte-saluda con voz entrecortada- Creo que la última vez que nos vimos fue...hace 200 años. Recuerdo eso como si fuera ayer.

¿Cómo alguien recuerda lo que pasó hace 200 años? Yo apenas recuerdo lo que comí ayer.

-Wow, tranquilo viejo- comenta él riendo- Yo no recuerdo nada. Pero recuerdo que te llamabas Carmen.

-Carmen era mi hermana-contesta- Yo me llamo Olivia

-¡Oh! Son idénticas

-Ella es morena y yo rubia. No los parecemos en nada-la rubia recalca con signos de molestia.

Rio por debajo, ver a Kal relajado y a la ninfa ya matándolo, es un espectáculo imperdible.

-Entonces Carme...digo, Olivia- rie con lo último - ¿Me puedes decir donde se encuentra mi madre?

Olivia, con cara de pocos amigos nos hace pasar a los tres.

-Les indicaré donde se ubica su majestad, la diosa Afrodita-informa mientras caminamos en el pasillo.

Mientras camino veo en diversas salas distintos seres mitológicos, como ángeles, gigantes, centauros.

-Esta es la sala, por favor su majestad está todavía delicada y en estado de inconciencia-anuncia la enfermera- Por favor, tengan respeto.

Todos asentimos estando de acuerdo, menos Kal que gruñó. La enfermera hizo caso omiso a la respuesta de Kal y abre la puerta.

-¿Por qué estás aquí Apolo?-pregunta Kal, preocupado

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¡Hola!

Les dejo el capitulo, espero que lo disfruten <3. 

preguntaaaa ¿Alguna vez hicieron una travesura estando en el colegio o fueron testigo de una? 

Mi mayor travesura fue cuando le canté a mi profesor de matemáticas la canción de Star wars por qué era el lado oscuro de la fuerza. Y como testigo la que me impresionó más fue cuando le prendieron fuego al basurero del salón porque estábamos haciendo un vídeo y necesitábamos "efectos especiales"