Luego de recorrer casi todo el colegio en busca de los murales, Jeongin y Felix por fin habían llegado al último, siento este el principal.

No perdieron mucho el tiempo para comenzar a pegar aquel anuncio para unirse al club de dibujo. Aunque no tenían esperanzas que alguien se uniera, no era mala idea intentarlo.

— Me impresiona que el segundo día de clases tengamos que hacer esto —Se quejó, dando un pequeño pedazo de tirro a Felix, quien lo tomó.

— Ni me lo menciones y falta hablar con el equipo de Basketball —Terminó de colocar el anuncio que había diseñado Kai.

— Que te vaya muy bien —Río, mientras dejaba las cosas en su lugar.

Felix solo bufó en respuesta, listo para tomar camino hacia su salón, ambos amigos estaban dispuestos a irse, hablando de cualquier tema que les pareciera interesante.

— ¡Felix! ¡Jeongin! —La fuerte voz de Minho, detuvo sus pasos, ambos dieron una vuelta para ver a su amigo.

El cuerpo de Jeongin quedó paralizado al ver a Hyunjin siendo arrastrado por Minho hasta ahí. Su corazón no perdió ni un segundo para comenzar a latir con rapidez, trato de esconderse detrás de Felix.

— No saben lo enojado que estoy —Se acercó a ellos para abrazarlos.

Por más que a Jeongin intentó escapar terminó siendo envuelto en el abrazo, tratando de ocultar su pequeño nerviosismo.

— Yo también, mírame aquí pegando anuncios —Correspondió el abrazo, contribuyendo a la queja.

— Yo hasta traje a Hyunjin, por poco me mata por sacarlo de su entreno —Dio un paso así atrás dejando de abrazar a sus amigos, jalando a Hyunjin cerca de él.

— ¿Dónde me anoto? —Inquirió alzando su ceja, cruzando sus brazos demostrando la poca paciencia que tenía.

— Ahí —Señaló, el anuncio que recién habían pegado.

—  Felix, tengo una idea para que no nos quiten el aula —Ahora se acercó a Felix, ahora jalandolo haciendo que se aleje de su amigo.

Jeongin se quedó observando a Hyunjin, sentía su corazón volverse un mar de latidos, tanto que sentía como casi salía de su pecho. Las sensaciones que Hyunjin causaba en él era inexplicables.

— Minho, ¿Con que me anoto? —El llamado de Hyunjin quedó en el aire ya que Minho había desaparecido, parpadeo varias veces sin entender, solo observando a Jeongin.

Rápidamente el menor evitó la mirada del más alto, tratando buscar un poco fijo que fuera más interesante que Hyunjin. Fracaso a los segundos pero aún así, lo intento.

Tomó el mayor aire que pudo, tratando de tomar valor para entregarle el pequeño lápiz a Hyunjin, por un momento hasta había olvidado cómo hablar.

Cerró sus ojos antes de acercarse a Hyunjin, lo hizo con cautela tratando de tener cada detalle de sus acciones.

— Toma —Para su suerte, su voz salió normal, con temor extendió el lápiz hacia Hyunjin.

— Gracias, mira que mi mejor amigo me abandona como si nada —Bromeo, emboscando una pequeña sonrisa.

Jeongin sentía que se iba morir ahí mismo, tener a Hyunjin tan cerca, más aún cuando acaba de sonreír, era algo que veía imposible de creer. Su corazón no podía más.

— ¿Qué estás hablando de mi? —preguntó Minho acercándose a ellos.

El menor, agradecido en silencio la manera en que Minho interrumpió el pequeño momento, si no lo hacía se iba a desmayar.

— Que eres un abandonador —Lo Señaló, haciendo que Minho lo mire mal.

— Oye Jeongin —Llamo. — Necesito tu número pero deje mi teléfono en el bolso de Hyunjin —Despeinó su cabello soltando una risita.

— Oh claro que Felix, te lo pasé —Dijo rápidamente, con una bella sonrisa.

Minho aceptó sin muchas para explicaciones, viéndose bastante convencido con la respuesta.

— No tengo carga, aparte sabes que tardó en llegar a casa —Dijo Felix, llamando la atención de todos.

— ¿Enserio? —Inquirió un poco triste.

— Si también puede ser que se me olvide —Trato de sonar triste, aunque fuera un momento totalmente fingido.

Esperaba que Hyunjin no se diera cuenta.

— Entonces, Hyunjin anotó —Ordenó, haciendo que su mejor amigo rodé los ojos.

— ¿Por qué nunca andas tu teléfono? —Inquirió sacando su teléfono de su bolsillo trasero.

Jeongin se quedó un momento perplejo, miró a Felix quien solo le dedico una pequeña sonrisa llena de picardía. Ese fue el momento donde entendió todo.

— Tu anota —Volvió a demandar.

— Jeongin dale el número —Dijo Felix al ver que ni Minho ni Hyunjin lo pedían.

— Voy —Sacó su celular rápidamente.

A Veces Jeongin amaba con todo su corazón a Felix. Y Felix estaba seguro que ya habían mandando su fecha de cupido.