Continuaron en silencio hasta que la ceremonia terminó, al salir del auditorio no eran los únicos que se miraban un poco incómodos, pero la naturaleza de HueningKai lo hizo querer romper esa faceta rápido.

—¿Qué tal van tus primeras semanas en la universidad?

YeonJun miró al mayor, pues estaba concentrado leyendo el folleto— Bien, aunque creo que teoría de imagen se me complicará un poco.

—Espera a llegar a software especializado I, el señor Lee es horrible.

Entre risa y nerviosismo, YeonJun sonrió, una sonrisa muy dulce para ser de un chico pensó el mayor— ¿De casualidad no hacen esto para los de segundo año? Creo que lo necesitaré también ese año.

Ambos rieron, ya la etapa de pena estaba quedando atrás— No creo, pero puedes seguir preguntándome.

Mientras caminaban entre los pasillos, fue inevitable para YeonJun ver los ojos que se posaban sobre ellos, en especial en el sunbae, unos de curiosidad y otros con un claro interés romántico sobre este, se preguntó si HueningKai era popular, no recuerda haberlo escuchado mencionar.

—Vamos a las bancas de atrás —habló el mayor—, ahí podremos hacer el quiz tranquilos.

YeonJun asintió y lo siguió, no conocía ese lugar, solo se la pasaba con TaeHyun y huían juntos apenas terminaban las clases, por lo que se permitió ver con curiosidad esa área de la universidad que no conocía.
Esto hizo que no se diera cuenta de la mirada de HueningKai sobre el menor, e incluso para este era extraño no dejar de tener su vista sobre este.

YeonJun, a diferencia del resto de chicos, resaltaba de una manera que era difícil de explicar, no era solo su cabello rosado, sino que el aura que este transmite es encantadora, puede estar haciendo lo más mínimo como ahora, solo viendo su alrededor, pero ese simple acto en él lucía hipnotizante, HueningKai supo que no solo él se daba cuenta de ello, varías chicas y chicos miraban al menor con interés obvio; YeonJun no parece darse cuenta de su encanto.

Tomaron asiento una vez llegaron al lugar, YeonJun seguía viendo su alrededor, no había mucha gente en esa área, suponía que la mayoría se ha ido ya o están en alguna clase.

—Bien, la primera pregunta es el nombre completo.

—Choi YeonJun.

—HueningKai Kamal.

Las preguntas eran muy sencillas, no entendían la razón para responderlas pues se supone que es como un examen para ver si conoces bien a tu compañero, pero se pueden hacer en una sentada y no profundizan nada.

—Edad.

—18, casi 19

—20, recién cumplidos.

Ambos apuntaban las respuestas.

—Hobie favorito.

Esta vez ambos pensaron mejor la respuesta— ¿Ver el canal de cocina cuenta? —preguntó HueningKai.

—¿A sunbae le gusta cocinar?

—Si, bueno —movió su cabeza un poco apenado, no era usual que hablara de ello—, mi mamá me enseñaba a cocinar de pequeño así que me quedó ese afán por cocinar.

El menor escuchaba atento y asintió al final— ¿Cuál es el platillo favorito de sunbae?

—Deberíamos seguir con el cuestionario, otro día hablamos de eso.

En ese momento YeonJun recordó lo que estaba haciendo y se concentró en ello— El mío es leer.

Otra vez, YeonJun notó pares de ojos sobre ellos, cada vez confirmaba que estaba junto a alguien popular. Repetía el nombre del mayor para ver si recordaba escucharlo, tan siquiera de lejos, pero nada. Mientras este no lo miraba, comenzó a observar su rostro, las facciones de HueningKai son completamente atractivas, se nota que no es completamente coreano, por lo que su belleza podía tomarse como una exótica, incluso los lunares en su rostro sumaban puntos a su atractivo.

Cuando HueningKai volvió a verlo, notó la mirada del menor— ¿Sucede algo?

YeonJun negó, apenado de ser descubierto de esa manera— Nada, solo que sunbae es muy atractivo, solamente eso ¿Cuál es la siguiente pregunta?

Esas palabras que había escuchado varias veces, prácticamente ya acostumbrado, esta vez lo hicieron sentir un poco diferente, no entendía porqué si solo era un hobae quien las dijo.
Decidió ignorar eso, al igual que la dulce y tímida sonrisa del pelirosa después de decir eso.

Con el paso del fin de semana, HueningKai agradece no haber tomado tanto al punto de estar crudo como su amigo, quien se quejaba sobre el escritorio de su dolor de cabeza.

—Te dije que no tomaras tanto —repitió cuando Jay se volvió a quejar por milésima vez.

—Hubieras bebido tanto como yo si no hubieras estado bebiendo de la boca de WonYoung.

HueningKai rodó los ojos, aunque en parte era cierto, la joven había tomado la mayoría de su tiempo en la fiesta. Miró a su amigo con lástima y suspiró— ¿Te traigo remedio para la resaca?

Jay lo miró con ojos de súplica, como los de un cachorro que acaban de atropellar, pero en esta caso fue el alcohol lo que lo atropelló— Te amaré toda la vida.

Este rió por la respuesta— No es necesario tanto —con la última clase terminada, organizó sus cosas y se colocó de pie—, ve al dormitorio, la llevaré ahí.

◇

Corrió hasta la entrada de los dormitorios, la lluvia había aparecido de la nada y lo había casi empapado, solo porque la tienda de conveniencia estaba cerca no fue peor. Sacudió su cabello con la mano mientras miraba al resto de estudiantes huir de las salvajes gotas.

Ingresó por los pasillos en búsqueda de la habitación de su amigo, en una de las vueltas notó una cabellera conocida, frente a la máquina expendedora estaba YeonJun junto a un joven que no conocía, ambos parecían amigos.
El desconocido sacó lo que compró de la máquina y se despidió de YeonJun, quien ahora compraba algo, pero la máquina decidió fallar.

—No puede ser, si hace un segundo funcionaba bien. —se quejó, presionando el botón una y otra vez.

—Debes golpearla. —la repentina voz lo sobresaltó, volteando a ver a HueningKai quien se acercó hasta la máquina y de una patada hizo que funcionara.

YeonJun miraba sorprendido como su dulce salía como si la máquina nunca hubiera fallado— ¡Wow! ¡Gracias sunbae! —El mayor se sintió un poco orgulloso de tan banal acto, mientras YeonJun se daba cuenta de su estado— Sunbae está todo mojado.

—Tuve que ir a comprar algo y la lluvia apareció —explicó.

Como si fuera costumbre, YeonJun sonrió dulce y acercó su mano a la melena negra y mojada del mayor, sacudiendo las últimas gotas que aún caían. HueningKai se quedó quieto, no sabía qué decir o hacer, por lo que se mantuvo, sin darse cuenta, admirando al joven frente a él hasta que ya no sintió su cálido tanto— Debería ir a cambiarse, podría enfermar.

—Si, primero debo ir a dejar esto ¿tu habitación queda cerca?

—Segundo piso, cuarto 56.

—Yo me quedo en este piso, pero mi habitación está en el edificio de al lado —explicó—, alguien me espera así que nos vemos después.

—Adiós sunbae.

HueningKai avanzó unos pasos, volteó a ver a YeonJun y se dió cuenta de algo. Regresó, tomando a YeonJun de sorpresa por su cercanía, más cuando la mano del mayor se acercó a su nuca— ¿Sunbae?

Este lo miró antes de regresar su mano y mostrar un pedazo de papel— Tenías esto en tu cabello.

—Gra-gracias.

Con una sonrisa, el mayor retomó su camino, mientras un tímido YeonJun tocaba sus mejillas queriendo aplacar el sonrojo que eso le había provocado.
En ese momento, dos jóvenes venían del lado en que HueningKai se había ido.

—Te juro que HueningKai es mi héroe —escuchó decir a uno de ellos—, Wonyoung no se le despegaba en la fiesta.

Inevitablemente escuchó eso.

—¿Será que están juntos?

—No, HueningKai nunca anda con nadie, es un cupido soltero.

En un momento estuvieron lo suficientemente lejos como para escuchar a dónde iba la conversación.

YeonJun ya había escuchado lo del aparente cupido, pero no sabía que su sunbae era este.

Aprovechando que no hubo luz todo el día je

Nos leemos luego~