꒰ ♡ : 40 ꒱
—Taehyung; mi amor, ¿dónde estás? Ven a ver todo lo que te traje chiquito —decía un Jungkook al aire, buscando a su pequeño esposo en la gran cocina del palacio.
Taehyung quien estaba sentado enfrente de uno de los tantos refrigeradores que allí había mientras comía yogurt de fresa, dio un saltito asustado por la llegada repentina de su esposo a la cocina, pero el susto se fue tan rápido como recordó lo que había pasado.
—Vete de aquí Jungkook, no te quiero ver —dijo, sintiendo como pequeñas lágrimas se acumulaban en sus ojitos, desde el inicio del embarazo se había vuelto todo un bebé chillón.
Jungkook escuchó esto y se dirigió hacia donde provenía la vocecita quebrada de su esposo. Cuando lo encontro, su corazón se derritió de ternura ante la imagen con la que se encontro. Su lindo omega estaba hecho una bolita en el suelo, con sus regordetas mejillas manchadas de yogurt y sus piernas dobladas hacia su pecho, por ende escondiendo su pancita de ya 4 meses.
—Te d-dije que te f-fueras de aquí, t-tonto alfa —dijo cuando lo vio acercarse, comenzando a llorar más mientras entre lágrimas se llevaba otra cucharada de yogurt a la boca.
—Pero mi amor, mira todo lo que te traje —dijo, mostrando una bolsa llena de chucherías mientras en su otra mano descansaba un bonito ramo de rosas—. Perdóname mi vida, sabes que no quise tratarte así, pero de verdad estaba muy ocupado, no podía venir por más que lo quisiera, era una junta muy importante —explicó, Taehyung lo miro con un puchero para luego dirigir su mirada a sus obsequios.
—Deja las cosas aquí, ponlas en el suelo pero no te a-acerques a mi —ordenó mientras seguía llorando, no sabía por que no podía parar, solo sabía que tenía muchas ganas de patear el trasero de su alfa por ser un tonto, pero a la vez quería dejar su orgullo de lado y correr hacia sus brazos para recibir todo su amor.
Jungkook obedeció la orden de su omega y dejo la bolsa con dulces y el ramo de rosas en el suelo, cuando lo hizo retrocedio unos pasos para que así su esposo pudiera acercarse por ellos.
Vio como Taehyung gateo un poquito hasta llegar a las cosas, tomando primero el ramo de rosas y y oliendolo, suspirando por el rico aroma que desprendían. Luego tomo los dulces y fue cuando se alejo hasta volver al lugar donde había estado desde hace horas, y pronto tomo una barra de chocolate de la bolsa y la comenzó a comer con gusto.
Los siguientes minutos los pasaron en completo silencio, Jungkook que hasta ese momento no se había acercado y solo se había dedicado a mirar como su omega comía sus golosinas, vio como de repente el omega se tenso y dejaba caer al suelo el dulce que comía de la impresión, y pronto sus ojitos amenazaron con comenzar a llorar nuevamente. El alfa al ver esto no dudo en acercarse rápidamente a su omega para ver lo que sucedía.
Taehyung sonrió y entre lágrimas poso sus manos sobre su vientre, sonriendo en grande cuando lo volvió a sentir.
—¡Jungkook! ¡Nuestro bebé se esta moviendo! —gritó con emoción, los ojos de Jungkook se iluminaron y no dudo en colocar una de sus manos sobre su vientre, sintiendo los pequeños movimientos en él—. Hola bebé, somos tus papis, papi Tae y papá Jungkook —le habló el omega a su bebé, sonriendo ante los movimientos que no paraban.
Jungkook se sentía en un sueño, las palabras no salían de su boca, solo sentía que estaba viviendo la mejor sensación del mundo al sentir al pequeño amor de su vida moverse dentro del gran amor de su vida.
Salió de su ensoñación al sentir las manitas de su esposo en su rostro y como estas mismas lo atrajeron hacia él para darle un bonito besito en los labios.
—Te amo, Koo —le susurró Taehyung a su alfa, inevitablemente Jungkook sintió muchas ganas de llorar por todas las emociones tan bonitas que estaba viviendo.
—Yo te amo mucho más, pastelito —le contestó, mirando directo a los ojitos mieles y brillantes de su esposo—. De verdad perdóname mi amor, créeme que tú y fresita son lo más importante que tengo y que los amo con todo mi corazón, de verd- —fue interrumpido al ser callado por un nuevo beso de su omega, quien sostenía aún su rostro con fuerza, atrayendolo hacia él lo más posible.
Una vez se separaron, Taehyung miro a su esposo, sintiéndose dichoso de tenerlo.
—Te perdono Jungkookie, tú también perdóname, debí comprender que también tenías cositas que hacer —dijo, Jungkook sonrió y esta vez fue el quien lo beso, olvidando todo el problema que había pasado.
Él alfa sonrío en medio del beso al sentir en la palma de su mano que descansaba sobre el vientre de su esposo los nuevos movimientos de su bebé, sintiendo como fresita vivía con ellos la felicidad de amarse.
Ambos pasaron gran parte de la noche de esa forma, tirados en el suelo de la cocina mientras comían dulces y hablaban con su bebé, mientras este les respondía con pequeños movimientos.
Viviendo la magia del amor.
-Nana.☁️
volví jeje
y volví solo para decir q le quedan como 10 caps o menos al au y llega a su final 😿
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