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Fin

En aquel gimnasio había pasado. De un lugar de entrenamiento, a lo que es ahora, un nido de amor entre dos chicos. Los cuales fueron enemigos.

Pero en lo que simplemente se había convertido en un beso. Fue al mismo tiempo en que El romance se había terminado.

Steve se sentía de algún modo extraño, su cuerpo pedia a gritos más. Pero, algo no le gustaba. No por el simple hecho de qué se sentía amado. Si no. Qué únicamente no sentía nada.

Tentacular: ¿Ocurre algo?.

Se separó. Al abrir los ojos y notar la mirada confundida de Steve. Quién solo se aparto de él, juntando sus piernas.

Steve: No. Solo... No sé... Es difíciles, poder explicarlo.

Tentacular: Muy bien. — Alejándose. — Creó que ahora sí tengo que irme.

Steve: Espera.

Aquel kaiju rojiso tomo rápido, uno de los tentáculos. Mientras que el azulado, llevaba un peso en el corazón desde hace mucho tiempo y sentía la necesidad de compartirlo con alguien. Pero nunca tuvo una sola alma. Que esté ahí para escucharlo, y ahora que conocía de alguna forma más de cerca a Steve, quien  siempre había sentido que sería  su confidente más cercano. Todo se estaba desmoronando.

Steve: ¿Podemos caminar salir a caminar?. — Sugirió.

Tentacular: ¿Qué más puedo perder?.

Mencionó de mala gana, terminando en seguir al regordete. En completo silencio. Después de caminar por el parque cercano, adaptado para humanos y moustros gigantes, durante un rato,  finalmente encontró el valor para abrir su corazón.

Steve: hay algo que necesito decirte. Esto ha sido algo con lo que he estado luchando durante mucho tiempo y creo que mereces saberlo.—comenzó con nerviosismo.

Tentacular, únicamente se dispuso a  mirar, a su "amigo" con preocupación y le hizo un gesto reconfortante para animarlo a seguir adelante.

Steve: Verás, he reflexionado mucho sobre lo que hemos vivido, y he llegado a la conclusión de que no podemos ser más que amigos. No es por falta de amor, sino porque siento que no puedo amarte lo suficiente como para tener una relación romántica.—  admitió con sinceridad. —

La confesión tomó a tentacular por sorpresa, pero escuchó atentamente las palabras de Steve mientras intentaba comprender lo que le intenva decir.

Tentacular: Necesito entender por qué sientes que no puedes amarme lo suficiente. No comprendo.

Carlos suspiró profundamente antes de responder un . ~"Es complicado, Tentacular. ~

Steve: Cando me detengo a pensar en una relación romántica contigo, siento que algo falta en mí.

Tentacular: No soy perfecto. Eso lo he escuchado varias veces.

Steve: No es simplemente eso. El amor lleva tiempo, ni siquiera te conozco. — Recordando. — El único recuerdo que tengo de ti, es que querías destrozarme.

Tentacular: Lo se. — Mirando el lago. — Tenía mucha presión en ese momento.

Steve: ¿Enserio?. Hasta donde recuerdo, tu eras el favorito del pueblo.

Tentacular: No lo entiendes. — Entrando en el lago. — No sabes, lo que se siente. Que te comparen con alguien.

Steve: Puedes contarme. — Tomando el perro que ponía ~No nadar~. Arrojándolo lejos.— Soy bueno escuchando.

Tentacular: ¿Por qué tengo que contarte yo la historia?. ¿Tú amiga no te dijo?.

Steve: Ella únicamente me dijo lo que vivió. — Entrando también al agua. — También quiero oír tu versión.

Mencionó Steve. Acercándose al kaiju azul. Quedándose únicamente ambos en la completa oscuridad, siendo iluminados, únicamente por los aros de color azul neón del tiburón. Quién al tener al otro demasiado cerca, instintivamente se alejaba por la pena.

Steve: ¿Qué pasa?. — Decía de manera burlona. — Tú puedes ser lascivo y muy bulgar. ¿Pero si lo hago yo te da pena?.

Tentacular: No es eso.

Steve: Pues empieza a contarme que sucede. — acariciando una de sus mejillas. — No me retire tanto.

Tentacular: Pues. Fue antes de que me hiciera famoso, fuí entrenado por alguien cercano. Al padre de tu amiga. Pero, el tenía una forma de entrenar muy extraña... — recordaba cada comentario. — Únicamente se la pasa diciéndome. Qué era un débil, no lograría nada si no tomaba riesgos. El trabajo duró es la clave. Rayburn era mucho mejor. Rayburn hacia 500 sentadillas en menos de una hora. — suspirando. — Lo único que pensaba...

Steve: Tentacular...

Tentacular: Al final. El pueblo se quedó en bancarrota. Yo era la clave. Y ese sujetó me recordaba a diario, lo mucho que el pueblo había gastado. Para que yo pudiera entrar a las peleas. Y la vez en que casi pierdo. En vez de recibir unos alientos. Únicamente recibí una hoja de papel, en ese absurdo gimnasio. Que decía: Vuelve a hacer el ridículo en frente de todos. Y los siguientes baners que verás serán. Tenti la suela de Rayburn.

Steve: ¿Qué pasó después?.

Tentacular: Supongo lo que te contó tu amiga. Yo traición al pueblo, la desgracia para todos. Y yo queriendo destruir el gimnasio.

Steve: ¿No crees que fue algo muy precipitado?. — Molesto. — Dejaste a todo un pueblo que te apoyó desde cero. Te alimento y te dió un techo donde vivir. Y tú. Querías comprar el pueblo entero y romper lo único que los hacía especiales.

Tentacular: Eres igual que ellos. — Dándose la vuelta. — Pensando en fantasias cursis. Cuándo yo necesitaba el apoyo de la gente, ellos se apartaron y lo único que hacían. Era comoarme con una estatua. Les dí todo. Y no basto. Querían un héroe. Y al final, se los di. — Mirando a Steve.

Steve: ¿Que?. ¿Ahora yo tengo la culpa?.

Tentacular: Claro que no. — suspirando. — Cuando ví tu primera pelea. Me ví a mi mismo. Alguien completamente presionado para parecerse a la estatua que veneran como un dios. — mencionaba. Mientras  Steve, solo miraba a un costado. — Pero en el segundo combate. Viéndote bailar, supe que eras especial.

Steve: Ahora me llamas raro. — decía, mientras se le escapaba una risa.

Tentacular: Tu te lo buscas. — Tomando las manos de Steve. — Realmente quiero estar contigo.

Steve: No es tan fácil. — apoyándose en el pecho de tentacular. — No sé nada al respecto. Lo único que conocí, son las películas que Winnie me rentaba.

Tentacular: Podemos descubrirlo juntos. No perdemos nada.

Steve: Yo si.

Tentacular: ¿Qué perderias?.

Steve: A tí. Eres el primer "amigo" moustros que tengo. — Mirando el pueblo. — Únicamente tengo humanos. Y no quiero que te corran del pueblo. Si te ven.

Tentacular: ¿Qué harían?. Ya viste el tamaño que tiene.

Steve: También queiro proteger a Winnie. Es como una pequeña y muy diminuta hermana, no quiero que el pueblo decida hacerle algo a ella.

Tentacular: Entiendo.

Steve: Aún qué. Si quieres, puedo enseñarte a bailar. — girando al rededor del tiburón.

Tentacular: No hace falta. Ya aprendí.

Steve: ¿Enserio?. ¿Qué estilo aprendiste?. Salsa, merengue....

Tentacular: Cumbia.

Steve: En algunos países es considerada como erótica.  No tanto como el tango. Tengo que reconocer.

Tentacular: Me gusta mucho. — tomando la cintura de Steve. — Es fácil de bailar. Únicamente es dar vueltas. Mientras ambos se miran.

Steve: Tienes una idea errónea en eso.

Mencionaba Steve. El cual únicamente se dejó llevar, siguiendo el ritmo del tiburón, quién lo tenía sujetado con una mano en la cintura. Mientras que la otra, sujetaba su mano. Estando ambos cara a cara. Mientras el agua del lago se movía de una manera irscunda, provocando pequeñas olas al rededor. Culminando todo. En un beso de ambos. Quiénes aprovecharon la comoelta soledad del lugar. Declarando así. De que no se amaran como pareja, pero no cuesta nada intentar.







.Fin.


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