Para uno de los Kaijus la noche había fue extraña. No por qué sentía un poco inseguro, por haber dormido con lo que alguna vez fue su enemigo.

Si no más bien. Tener miedo a que de la nada, haber amanecido desvivido.

Pero el estaba ahí. Mirando como el azul estaba dormido, sentís envida por qué sabía que el si había dormido bien. Pero al ver destellos de su cuerpo lo alarma y evitando hacer ruido, volvió a cerrar los ojos, haciéndose el dormido.

Tentacular: ¡Joder!. — se quejo. — Qué dolor de espalda más cabrona.

Se expresó. Provocando gracias en Steve.

Tentacular: ¡Oye!. — Llamo al Kaiju dormido. — Ya es de mañana.

Mencionó el tiburón y estirando sus tentáculos. Meneo un poco a Steve, quien finjo somnolencia.

Steve: Alguien se despertó temprano. — Bostezo. — ¿Tienes hambre?.

Tentacular: Un poco. Pero con una manzana y un poco de agua estará bien. Tendré energía del volver al gimnasio.

Steve: ¿Es una broma?, ¿Volverás a ese sitio?.

Tentacular: Es el único que me queda. Aparte la gente apuesta mucho dinero para verme perder, así que estoy ganando mucho dinero por fingir.

Steve: Joder. Eso me trajo recuerdos.

Tentacular: Ahora. Cómo dije en un inicio, solo dame una manzana.

Steve: Claro que no. Por ahora te quedarás aquí. Winnie ahora se está encargando de pagar deudas.

Tentacular: ¡Fantástico!. Ahora tengo un problema más.

Steve: Se dice gracias.

Tentacular: Si lo que digas niño. Ahora, ¿Podrías ayudarme?. — Intentando levantarse. — Sí no me iré, a menos quiero estar afuera.

Steve: Son las — Mirando el reloj. — ¿Por qué estoy despierto a las 5 de la madrugada?.

Tentacular: Al que madruga. Recibe ayuda, ahora ayúdame.

Steve: Muy bien. Señor órdenes.

Aquel con total cuidado tomo con delicadeza al tiburón, quien intentaba con todas sus fuerzas no caer desplomado. Y con una velocidad regular, terminaron saliendo del gimnasio.

Para Steve fue una molestia. El lugar estaba frío, y una neblina cubria todo el pueblo. Estaba claro que anoche había llovido, por qué el rocío del césped. Mojaba el tacto de Steve.

Tentacular: Por aquí estará bien. — con molestia. — Solo no me dejes caer de golpe.

Steve: Claro que no. No soy un imbécil.

Tentacular: Solo trata. — Mirando con molestia. — tampoco acabes con la poca paciencia que me queda.

Steve: Cómo si pudieras hacer algo en estas condiciones. Mejor trata de ser amable, de no ser por mi, estarías tirado al borde la muerte en algún lugar.

Tentacular: Qué más da. Sería la ruta fácil para algunos en este pueblucho de quinta.

Steve: Al menos. Podrías contarme como terminaste en ese sitio.

Tentacular: ¿Para que?.

Steve: Nada en especial, pero el tiempo que estuve ahí metido, escuché de todo. ¿Como terminaste ahí?.

Tentacular: Puede que estas cosas fueran las respuestas. — Desenredó sus tentáculos. — Llamaron más la atención de algunos extraños.

Steve: Bueno. Fue algo... Anticlimatico.

Tentacular: Lamento matarte tus ilusiones niño de feria.

Steve: Lo dice el sujeto que estuvo apunto de morir por hacer enojar al ser con veneno que te causa parálisis.

Tentacular: Lo que digas. — Mencionó, mientras enrollaba nuevamente los tentáculos.

Steve: ¿Qué tal estás tú vista?. La primera vez que me envenenaron, perdí la visión por unas horas.

Tentacular: Deja de hacer eso.

Steve: ¿Qué cosa?.

Tentacular: Comportarte como un maldito niño salido de una iglesia.

Steve: Solo trato de ayudarte.

Tentacular: Ambos sabemos el error que cometí. No actúes de manera como si eso fuera agua pasada.

Steve: Vale entiendo.

Tentacular: Solo déjame curarme un momento, luego de que pueda caminar, veré dónde me meto.

Steve: Sabes que tienes la puertas abiertas. Si aún quieres entrar.

Aquel solo se levantó, y con un par de pasos entro nuevamente en el gimnasio, dejando solo a un Kaiju de color azul sentado. Mientras la mañana estaba llegando a su fin, no solo por qué estaba mucho más iluminado, por qué con solo sentir como lentamente el lugar se ponía más caliente, era evidente que  ya son las 9 de la mañana, oh posiblemente ya dando las 10.

Tentacular no sentía ningún remordimiento. Con solo tener a ese tipo al lado, le producía una sensación extraña. Y como si una desconfianza de algún tipo estuviera en el ambiente. Y tragándose un poco el orgullo al momento de entrar nuevamente, este comenzó a sentir una combinación de olores.

El lugar aún tenía ese lugar de sudor, de ejerció de hace unas horas. Pero también estaba desapareciendo, por el olor a cloro que; Steve se encontraba esparciendo con un trapeador de su tamaño, limpiando el suelo donde paso el tiburón tirado.

Pero ahora había uno nuevo y al girar un poco sentía uno agradable. Lo que provocó que su estómago gruñera.

Steve: Sabía que vendrías. — miro con una sonrisa.

Tentacular: Solo quería ver si podría ayudar en algo. — Intentando no ver la sartén caliente con comida. — Antes de marcharme.

Steve: Tranquilo. Solo era limpiar dónde dormiste casi dos días.

Tentacular: Muy bien. — mirando al más bajito. — ¿Tienes algo que pueda hacer?.

Steve: Tranquilo. Puedes encender la televisión si quieres, el desayuno estará en unos minutos.

Tentacular: No. Déjame al menos ayudarte con algo.

Steve: Por dios. — suspirando. — Solo dame un poco de paciencia. — Susurrando. — Escuchá, no hay mucho que hacer en realidad. Hoy es día libre, tenis planeado quedarme  aquí mirando películas y comiendo.

Tentacular: Está bien.

Aquel solo obedeció y con unos cuantos pasos llegó hasta donde estaba una televisión de tubo en una esquina. Y con el picar de uno de sus tentáculos está se encendió. Y lo primero que apareció siendo este el noticiario de la ciudad. Fue lo que dejó.

Tentacular: Vaya. Parece que soy famoso nuevamente.

Steve: ¿Por qué?. — curioso este miró la televisión.

Noticiero.
Presentador 1: Con las recientes entrevistas. Parece qué la ex-estrella de lucha libre; Tentacular, aún no es signos de volver al ojo público.

Presentador 2: Al final cumple su promesa. — Riendo. — Pero, aún sigue en las luchas.

Presentador 1: ¿Enserio?.

Presentador 2: Por un vídeo filtrado. Parece que ahora está en algún lugar de peleas clandestinas. Pero si un amateur le ganó, los de este lugar también le ganan.

Presentador 1: ¡Wow!. Eso debe ser tan humillante, al final la teoría de que el compraba a los luchadores para perder está confirmandose.

Presentador 2: Solo el tiempo nos dirá. Si decide salir a la luz y volver a pelear en un cuadrilátero de verdad.