En cuanto termine de hablar sentí el peso de mis palabras caer sobre mi con fuerza, baje la mirada sintiéndome vulnerable, sentí que de nuevo todo está fuera de mi control, y de verdad lo está, le confesé que aún siento muchas cosas por ella y al hacerlo le di el poder para destruirme... De nuevo estoy a merced de sus palabras, a merced de lo que ella quiera y de lo que sus miedos la orillen a elegir.

Subí la mirada después de un largo momento de silenció, no fue difícil ver las pesadas lágrimas que caen por sus mejillas y entonces no supe que hacer así que nos quedamos sumidas en ese silencio que se sentía tan extraño, como si de alguna forma el silencio nos hiciera saber que las cosas aún no terminan entre nosotras y que venir a hablar con ella no fue más que un atentado contra la poca tranquilidad que había logrado adquirir... Una vez más caí como una tonta por ella.

¿Por qué me dices esto? -sollozo ganándose la mirada curiosa de los otros comensales- se suponía que terminarías esto de una vez por todas... Yo venía preparada para fingir que todo estaba bien y dejarte ir para que pudieras ser feliz con alguien más, no estaba lista para ésto... No estaba lista para decirte que yo tampoco me he olvidado de ti

Lamento arruinar tus planes, pero tú ya has arruinado los míos más de una vez así que creo que estamos a mano -dije tratando de sonar seria-

¡Toma esto en serio, Katherine! -grito frustrada-

Lo estoy tomando en serio, Annette -afirme-

Me miro con molestia una vez más antes de levantarse de su silla y empezar a caminar hacia la salida del lugar; me levanté y fui detrás de ella sin tener la intención de dejar que se fuera ahora que todo quedó expuesto y una vez más estamos al borde del abismo. La encontré tratando de tomar un taxi, la detuve antes de que pudiera pedir uno tirando de su brazo hacia mí, ella me miro con sorpresa.

¿Que haces? -pregunto entre lágrimas-

No puedes alejarte otra vez, Anne -dije seria- ya tomaste esa decisión una vez y nada mejoro, no puedes hacerlo otra vez...

A eso vinimos, ¿No? -pregunto con amargura- vinimos a ponerle un punto final a esto... Se supone que eso querías

Tal vez nunca lo quise... -admiti- tal vez solo estaba buscando una excusa para verte... Tal vez sigues siendo mi debilidad -dije haciendo que llorará aún mas- ya no llores... Odio que lo hagas

No me pidas que deje de llorar cuando me estas dando esperanzas de que esto puede funcionar aunque sabes que no es así -sollozo- es cruel que lo hagas...

¿Cómo sabes que esto no podría funcionar? -pregunte molesta por su afirmación-

¡Es obvio! No fuimos hechas para estar juntas -sollozo destrozada-

¿Aún me amas? -pregunte de pronto-

No puedes preguntarme eso... -afirmo-

Ya lo hice -dije seria- responde...

Eso no va a cambiar nada, Kate -dijo con amargura-

De hecho lo cambiaría todo -me acerque más a ella y tome una de sus manos- dime, Anne... ¿Aún me amas?

Es injusto, tienes novia -afirmo haciendo que una punzada de culpa me invadiera-

Tú fuiste la primera en ser injusta cuando me quitaste la posibilidad de elegir lo que quería para nuestro futuro -dije seria-

Como sea, no podemos hacer esto de nuevo... -afirmo-

¿Hablas de ser amantes? -pregunte divertida ganandome una mirada molesta de su parte-

No es gracioso, Kate... Lo que hicimos es serio y estuvo muy mal -afirmo-

Ya lo sé... Pero no podemos cambiar lo que hicimos -respondi sincera- créeme que trate de cambiarlo, trate de olvidar nuestros errores y de aparentar que no eras nadie en mi vida... -sonrei un poco- no funcionó, Anne...

Nosotras no funcionamos, Kate... -afirmo limpiando las pocas lágrimas que seguían brotando de sus ojos- nuestra relación solo hizo daño y lo sabes...

Si, pero extrañamente no me interesa... -tome una de sus manos y ella me observo nerviosa- ya no te alejes... No quiero que lo hagas

Y no quiero hacerlo, pero siento que te arrepentirás en cualquier momento si hoy elijes quedarte conmigo -admitio con tristeza-

Iba a responderle, pero mi móvil empezó a sonar de pronto rompiendo la burbuja en la que nos metimos. Saque el aparato de mi bolso y al ver el nombre de Lilyan en la pantalla me sentí como la más grande maldita de todo el universo... Una vez más, sé que ella no se merece nada de esto.

Es tu novia -dijo con amargura- ¿No? -pregunto soltandose de mi agarre como si quemará-

Si... -respondi-

Contesta -ordeno-

Estábamos hablando -trate de tomar su mano de nuevo, pero ella se alejó- Anne...

Ella es tu novia, yo solo soy tu ex-amante -afirmo seria-

No eres solo eso... lo sabes -asintio débilmente-

Si vamos a hacer esto tienes que estar segura de tu decisión... Debes pensar claramente si quieres estar conmigo y enfrentar lo que eso representa o quedarte con la chica perfecta -se acerco y beso mi mejilla con dulzura-

Antes de que pudiera decirle algo más, se alejo por la acera dejándome ahí de pie sin saber exactamente que hacer. Mi móvil empezó a sonar de nuevo con otra llamada de Lily, pero no pude contestarle por el sentimiento de culpa que se extendia por mis venas haciéndome sentir de lo peor. Sin saber que más hacer opte por irme, subí a mi auto y antes de que pudiera empezar mi camino mi móvil timbro por un mensaje entrante... Un mensaje de mi novia.

Cariño, solo te llamaba para saber cómo fue tu reunión con Jamie. Espero que todo esté bien.
Te amo

Eso basto para que pasara de sentirme mal a sentirme como la más grande perra de todo el universo.

¿Que se supone que haga ahora? De nuevo todo está de cabeza, Anne y yo dijimos por fin lo que nos habíamos callado durante mucho tiempo... Nuestros sentimientos nos explotaron en la cara con tanta fuerza que cuesta creer que realmente no hayamos arreglado nada; lo peor es que una vez más, nuestra relación amenaza con dañar a una tercera persona y sé que está vez no existirá nada que pueda hacer para reparar lo que podríamos romper.