Namjoon iba de un lugar para otro, no podía estarse quieto, aún y cuando ya tenía una pequeña pancita de 3 meses, cualquiera que lo viera pensaría que sólo era inflamación de su estómago por haber comido algo irritante, sin embargo los más cercanos sabían que se debía a su embarazo.

—Jungkook ven y deten a tu omega que no hace caso y no se quiere sentar, ya le dijimos que todo saldrá bien y aun así no obedece. — gritaba Seokjin pues veía como su casi hermano andaba de aquí para allá como si nada.

—No puedo estarme quieto, no cuando hoy se casan mis cachorros, Jisoo me pidió que checara que todo estuviera en orden. — decía el omega.

—Todo saldrá bien Namie no tienes de que preocuparte, mi linda sobrina tendrá su boda de ensueño así que ya relajate.

Namjoon estaba muy emocionado, pues no podía creer que su pequeña cachorra aquella que llevaba 10 años cuidando se fuera a casar y que mejor que con aquel pequeño cachorro que conoció hacia ya más tiempo, changbin y Jisoo hacían una linda pareja, llevaban ya 2 años de relación y el joven alfa al darse cuenta que ella era su omega, le pidió matrimonio.

Jungkook no estaba muy feliz con eso pues decía que su bebé aún era muy joven, pero al ver lo lindo y tierno que era el alfa con ella fue que acepto ese matrimonio.

—Namjoon debes rejarte o le hará daño a nuestro cachorro — jungkook había llegado con ellos después de escuchar los gritos de Jin.

—Es vergonzoso alfa, yo con esta panza en la boda de nuestra pequeña, todos pensaran que ya soy un abuelo.

—Eres perfecto omega, y no eres un abuelo aun eres muy joven y me provocas tanto — decía mientras mordia la marca que hace 8 años había dejado de nuevo en su esposo, porque si, ellos se habían casado después de que naciera su cachorra.

—Vamos no estén de empalagosos, Jungkook sabes lo hormonal que está tu esposo y aun así vienes a provocarlo, si hacen eso quien entregará a Jisoo. — decía Jin pues le encantaba molestarlos.

—Tiene razón Jin, alfa ¿dónde están mis cachorros? Pensé que estarían contigo.

—No te preocupes amor están con Yoongi y Taehyung en el jardín.

La familia Jeon había crecido en este tiempo su primer cachorro tenía 9 años, era todo un Alfa idéntico a Jungkook.
Durante el embarazo de su primer hijo Namjoon y kook estaban muy asustados, el alfa sobreprotegia a su omega, no quería que nada le pasara pues el embarazo era de alto riesgo por lo que la mayoría del tiempo se la pasó en cama, pero cuando Taeyang nació ambos fueron los más felices del mundo.

Su nuevo doctor le dijo que posiblemente no podría quedar en cinta de nuevo por lo que ellos ya no se cuidaron, hasta que al cumplir los 2 años de su primer cachorro, Namjoon se desmayo y de ahí supieron que esperaban a la pequeña Hanna una linda omega que casualmente se parecía mucho a su tío Jin, todo iba perfecto dos hijos estaba muy bien, además de que el omega ya no quería más pues no se consideraba ya tan joven.

Cuando la pequeña Hanna cumplió 3 años, alfa y omega se entregaron de nuevo a la pasión, pues Yoongi y Seokjin se habían ofrecido a cuidar a los pequeños, cosa que los esposos Jeon no desaprovecharon haciéndolo toda la noche.

Nueve meses después llegaron los gemelos Jack y Hope, ambos alfas.

No todo fue lindo durante este tiempo, en algún momento hubo problemas dentro del matrimonio, incluso Namjoon se fue con sus cachorros a vivir a otra casa, llevadose a Jisoo con ellos, pues para él la omega también era su cachorra.

Jisoo al ser la mayor y ver que sus padres estaban separados considero que Jungkook le había sido infiel a su padre omega, sin embargo después se entero que la pelea era porque su madre Irene estaba chantajeando a Nam con contarle todo a ella si no se alejaba de Jeon.

Porque si, al final Jisoo se entero que ella no era hija biológica de Jungkook, sino más bien de un apuesto alfa de nombre Jackson al que con el tiempo llegó a conocer y llevarse mejor pues ninguno de los dos sabía de la existencia del otro.

Jisoo estaba muy triste pero gracias al amor de su alfa pudo salir adelante, agracede tanto aquella vez que acompaño a su padre omega a ver a su otro cachorro a las afueras, pues cuando lo vio quedó enamorada, eran destinados y gracias a la Diosa Luna nada ni nadie intervino para que ellos pudieran conocerse y ser una linda pareja que se amaban.

Cuando Jungkook y Jisoo se enteraron que no eran padre e hija se pusieron muy tristes, Jeon amaba a su princesa y ella amaba a su padre, por lo que no permitieron que la sangre los separara y en su lugar mantuvieron las cosas igual.

Poco después Jeon fue a buscar a Namjoon pues al enterarse que este sabía que Jisoo no era su hija se enojo muchísimo al punto de no verlo, mandaba por sus hijos y después alguien más iba a dejarlos con tal de no toparselo, pero una noche que estaba recostado en su cama un fuerte dolor en su pecho no lo dejaba dormir, ese sentir no era suyo si no más bien de su omega, su cuello le dolía y ahí fue cuando entendió que Namjoon estaba tratando de romper el lazo de nuevo, pero él no permititia eso y menos por causa de Irene, no dejaria que nuevamente su propia Estupidez lo alejara del amor de su vida, por lo que corrió en su forma lo una hasta llegar a la casa de su omega.

Ni siquiera tocó, pues sabía donde estaban las llaves escondidas, al entrar se fue directo al cuarto de su omega, ahí lo vio, recostado en su cama con la ropita de sus hijos alrededor, y en sus brazos se aferraba a aquel saco que le dio a su hija mayor esa misma tarde para que se  cubriera del frío, tenía su aroma y por ello el omega no lo soltaba.

Jeon se sentía tan idiota por tener en ese estado a su omega, por algo que el nisiquiera tenía culpa, lentamente se fue acercando a la cama, Namjoon al sentir una presencia gruñó pues a ningún omega le gustaba que se acercaran a su nido, pero al ver de quien se trataba no pudo evitar llorar y recostarse nuevamente pues se sentía patético, pensaba que quizás Jungkook venía a darle fin a su relación.

—Perdoname Namjoon, siempre soy un imbecil cuando se trata de ti, perdoname por haberte alejado de mi lado, yo no puedo vivir sin ti, mi lindo omega.

—Vete Jungkook no quiero verte, tu me lastimaste mucho y ahora te quiero fuera de mi vida.

Aquella noche el alfa no se fue, en su lugar se quedó recostado en el piso, si alguien lo viera no podrían creer que el mismísimo rey estuviera haciendo eso, pero lo hizo eso y más noches, cada día le pedía perdón, hasta que una noche el omega no pudo más y juntos se volvieron a entregar a la pasión pues se amaban y no querían estar separados por más tiempo.

Namjoon y sus hijos regresaron al palacio para ese entonces los gemelos ya tenían 9 meses, alfa y omega pensaban que con esos hijos era suficiente, pues los amaban y cuidaban mucho.

Pero aquella tarde que fueron a casa del Alfa de su hija para que convivirán mejor él y su padre, Jungkook estaba muy alterado, su lobo estaba molesto con ese mocoso que tocaba y besaba a su bebé, Namjoon al notarlo quiso tranquilizarlo con su aroma más no consiguió nada.

—Alfa estoy algo caliente, ¿podrías ayudarme? — Namjoon le había dicho eso en su oído, cuando los jóvenes fueron a la cocina con los suegros de Jisoo para servir la comida.

Jungkook lo miraba sin saber bien si lo que escucho era correcto, pero al ver como su omega lo miraba inocentemente su miembro se puso duro, quería quitar aquellos ojos tiernos por unos llenos de placer.

—Vamos al baño omega— y tratando de no hacer tanto ruido ambos se metieron a ese pequeño lugar donde Jeon se lo hizo muy duro al omega, pues quería sacar toda la frustración que tenía y eso le encantaba al omega.

Algunos minutos después ambos salieron como si nada, pero claro que todos habían notado su ausencia, sus olores mezclados y algo que jamás olvidaría Jisoo es que los habían escuchado pues no fueron muy discretos que digamos.

Y a las pocas semanas se supo que el omega esperaba a su quinto hijo.

—Ve por ellos por favor debo arreglarlos y esos alfas son muy juguetones y los alterarán más como lo hicieron en el cumpleaños de los gemelos.

Jeon hizo caso a lo que pidió su omega saliendo en busca de sus cachorros a los cuales amaba con todo su corazón.

La ceremonia por fin dio inicio Jisoo se veía hermosa con un enorme vestido blanco, al altar la entrego Jungkook pues aunque ella les pidió a sus dos padres alfas que lo Hicieran, Jackson sabía que tenía más derecho Jeon por lo que denegó la propuesta y sólo veía como su hija avanzaba hasta el altar para unir su vida al alfa que ella amaba.

La boda salió perfecta tal y como siempre lo soñó Jisoo gracias a que sus padres se encargaron de todo, al terminar la fiesta ella junto con Changbin se fueron de luna de miel.

Esa misma noche Jungkook le hizo el amor toda la noche a su omega, pues no quería imaginar lo que ese depravado le haría a su cachorra.

Dos años después.

Namjoon veía como sus hijos corrían por todo el jardín, hasta que vio como su pequeña cachorra tropezó y cayó.

—Vamos bebé no pasó nada, princesa,— trataba de consolarla mientras la tomaba en sus brazos —Vamos con tu padre alfa para que te consuele, porque mira esa pequeña rodillita tiene un gran raspón— decía tan tiernamente.

Ambos entraron topandose con jungkook en el camino, el cual al ver a su hija menor la tomó en sus brazos, Nahomi era la más pequeña, una linda omega idéntica a su padre Nam, pues tenía sus mismos ojos, color de piel y cabello, era tan hermosa a ojos del Rey.

—Apenas iba por ustedes mis amores, ya todo está listo para celebrar nuestro aniversario de bodas amor — dijo a la vez que daba un apasionado beso a su omega pero separándose cuando la pequeña comenzó a gritar pues no le gustaba compartir el amor de su padre alfa.

Todos estaban reunidos en el gran comedor pues juntos querían celebrar que esa pareja siguiera junta, después de tantos años separados y de miles de pruebas su amor seguía siento más grande que cualquier otra cosa.

Al terminar Jeon y Namjoon hicieron el amor, reafirmando la marca y lazo que tenían y que sabían que siempre los mantendría unidos a pesar de todo.

La mañana llegó y lo supo porque sus cinco hijos entraron corriendo, a ellos les encantaba pasar tiempo con sus papis más especialmente con Namjoon, pues él los amaba y adoraba y como no hacerlo, si durante 10 años lo único que pedía a la Diosa Luna era poder tener un cachorro en su vientre, poder formar una linda familia y tener a su lado al tonto alfa que amaba tanto.

Y justo ahora que todos estaban en la gran cama y que incluso sus cachorros mayores Jisoo y Changbin se unieron para consentir a sus padres, Namjoon no podía sentirse más feliz, tenía lo que siempre soñó y se le negó por muchos años, una gran familia.

Miro a su alfa que peleaba con almohadas con el pequeño Taeyang, aveces pensaba que Kook era un cachorro más, pero lo amaba, de pronto toda la habitación se lleno de gritos y risas alegres, todos iniciaron una gran pelea lanzando almohadas y cojines, Namjoon también se le unio hasta que unos fuertes brazos lo tomaron por la cintura para acercarlo.

—Te amo omega, gracias por la hermosa familia que me diste, eres lo que siempre soñé y te amo, te amo tanto Namjoon, te prometo, es más no te juro que jamas te fallare ni a ti ni a mis hijos, por mi honor. — dijo finalmente el alfa.

—Te amo mi bobo alfa, gracias por todo lo que nos has dado y no es cuestión de honor, quiero que estemos juntos por siempre, como debió haber sido desde un principio.

Alfa y omega se besaron mientras sus pequeños continuaban con su pequeña pelea de almohadas, pero en cuanto los vieron se lanzaron abrazarlos, tirandolos en la cama y subiendo encima de sus padres, mientras les daban muchos besitos.

Namjoon ahí comprendió que tenía todo en su vida, su motor de alegría y lo que siempre soñó. Al fin aquel omega cojo o defectuoso como solían llamarlo consiguió la felicidad y el amor que muchas veces imagino y esta vez para siempre.

FIN