
Capítulo 15-El Capricho Del Rey
Las cosas después de la muerte de Jimin no habían sido fáciles, la iglesia ahora estaba en constante lucha con los Jeon y Min, sin embargo estos últimos habían dado la espalda a Yoongi pues para ellos había sido demaciado estúpido lo que hizo pues enfrentar al clero y después marcar un delta era muy denigrante más para ellos que siempre habían cuidado la pureza de su raza.
Las cosas en el reino no estaban del todo bien pues mucha gente estaba enojada ya que varios soldados murieron por un omega que para ellos no valía la pena, por lo que ahora Namjoon no era bien visto por todos, incluso muchos no lo consideraban su rey consorte sino más bien el capricho del rey.
Justo hoy se cumplía un mes de esa trágica noche, Namjoon y Jungkook no habían logrado avanzar en su relación pues el omega se sentía culpable por la muerte de Park, más al ver el estado tan triste en que el estaba Seokjin.
—Hola Jin— saludo amablemente Yoongi, pues a pesar de que lo había marcado no tenían una relación real, el alfa solo lo ayudaba en sus momentos de crisis cuando lloraba por su ex pareja, lo cual heria a su lobo al sentirse de nuevo rechazado.
—Vete Yoongi ahora no quiero verte y llevate tu ropa tampoco la necesito, no tienes porque hacer esto, no quiero que estés a mi lado por lastima — le decía con reproche el delta.
—Jin yo no estoy contigo por lastima, fue porque mi lobo y yo así lo quisimos, ahora eres nuestra pareja y quiero cuidarte.
—Pues no me interesa que quieras cuidarme yo puedo hacerlo solo, así que ahora vete de mi recamara y llevate tus cosas, no quiero percibir más tu aroma, por tu culpa el olor de jimin ya no esta, su único recuerdo me lo arrancaste al venirte a este cuarto conmigo.
Yoongi se había instalado en esa recámara al ver como se alteraba Seokjin cuando él estaba lejos, lloraba mucho y lo único que lo tranquilizaba era el aroma de su ahora alfa.
—Está bien Seokjin me iré y en un momento enviare a Lisa para que recoga todas mis cosas, me instalare en la recámara del fondo, por si me necesitas. — decía con tristeza pues no quería separarse de Jin.
—No creo necesitarlo yoongi, ahora solo no quiero verte, sal de mi cuarto por favor— Seokjin cada vez se sentía peor, había perdido al amor de su vida y no podía dejar de pensar en que fue su culpa, si tan sólo le hubiera hecho caso y hubieran huido cuando él se lo pidió.
Por otra parte en Tae y Hobi estaban muy contentos faltaba ya muy poco para que naciera su pequeño cachorro, ellos se habían mantenido al margen de todo y solo apoyaban y ayudaban a sus amigos, sobre todo a Nam, pues veían como las demás personas lo trataban.
Namjoon iba caminando por el pueblo, quería despejar su mente y que mejor que hacerlo comprando cosas para preparar una rica tarta de manzana pues cocinando se relajaba y no pensaba en cosas negativas.
—Con que ahí va el capricho del rey— escucho muy cerca, por lo que camino más rápido, claro lo que su pierna le permitía— no puedo creer que ese omega defectuoso sea la razón de que muchos murieran, debe ser muy bueno en la cama para que tenga al rey Jungkook a sus pies— varios hombres se rieron por el comentario que hizo ese alfa.
—Ven omega, porque no nos divertimos un rato, jamás lo he hecho con un cojo, tal vez seas muy bueno— lo dijo mientras apretaba el cuerpo de Namjoon al suyo, el omega por instinto lo empujó pero esto solo lo hizo molestar más.
—Detente omega o te golpeare, deberías sentirte orgulloso que alguien como yo se fije en un defectuoso como tu— seguia pegándolo más a su cuerpo mientras lamia su cuello.
—Detente no me lastimes me das asco—gritaba el omega mientras trataba de safarse del agarre del Alfa.
—Creo que pondré mi marca en tu lindo cuello omega y no quiero que sigas gritando, nadie aquí te ayudará y menos cuando tu fuiste el causante de tantas muertes — el alfa comenzó acariciar su cuerpo aún y cuando el omega gritaba que se detuviera.
—SUELTALO IMBECIL —justo en ese momento llegó jungkook, quien con sólo utilizar su voz hizo que el alfa soltara a Namjoon y además de doblejara mostrando su cuello —En tu pura vida vuelvas acercarte a mi omega y eso va también para los demás, desde hoy quien se atreva hablar o siquiera mirar mal Namjoon tendrá sentencia de muerte, el es mi omega, mi esposo y por lo tanto su Rey, así que si no les gusta pueden largarse a otro reino. — todos los presentes se quedaron atónitos pues no esperaban esa respuesta por parte de su Rey, muchos no querían a Namjoon pero sabian muy bien que Jeon era un rey justo, bueno y sobre todo los trataba con respeto, por lo que nadie consideró irse y en su lugar se inclinaron en señal de respeto a su nuevo rey, incluidos los alfas que justo hace un momento lo molestaban.
—Vámonos omega— ambos salieron tomados de la mano, pues Jeon quería demostrarle que ahora él era su apoyo para todo.
Cuando estuvieron en el palacio Jungkook cargo a Namjoon para llevarlo a su habitación, su cara era de molestia pura y su olor delataba lo enojado que se encontraba el alfa.
Cuando por fin llegaron el alfa se sentó en la cama con Namjoon en su regazo, su aura era de frustración y molestia.
—Lo siento alfa, no quise molestarte, quería salir a despejarme y solo te cause problemas, perdoname— el alfa se golpeó mentalmente pues su dulce omega creía que estaba molesto con él, cuando era todo lo contrario estaba enojado consigo mismo por no saber cuidar bien a su omega.
—Escuchame omega, no estoy molesto contigo jamás lo estaría, es más bien que estoy enojado por no saber cuidarte, con todas las cosas que han pasado no hemos tenido tiempo para nosotros, para comenzar a construir nuestra propia historia, yo no quiero forzarte a nada, pero realmente te necesito Namjoon, mi lobo y yo deseamos que seas nuestro, no hablo solo de lo carnal, yo quiero que me entregues tu corazón, así como yo estoy dispuesto a darte el mio, te amo Namjoon eres mi todo, mi mundo. — el omega al oír esas lindas palabras fue que tomó confianza y junto sus labios con los del Alfa.
—También te amo Jungkook— Namjoon se paró y fue directo a la puerta, en un principio Jungkook creyó que se iría pero luego de ver que sólo puso el seguro se alegró, pues de inmediato se sento a horcajadas encima de su alfa.
—Alfa quiero que me demuestres cuanto me amas, ya no soporto más sin estar en tus brazos, se que muchas cosas están pasando pero ahora solo quiero pensar en nosotros, yo... yo quiero que me hagas tuyo rey Jeon.
El Alfa no supo porque esas últimas palabras lo excitaron de sobremanera, por lo que unió de nuevo sus labios para comenzar con un beso demandante y pasional, las manos del Alfa no se quedaron quietas y en su lugar comenzaron a descender por la cintura del omega hasta llegar a sus glúteos los cuales acaricio y apretó a su antojo.
Con sumo cuidado fue depositando a Namjoon en la cama para después el posarse encima, no sin antes quitarse su saco y camisa, la cual rompió de los botones por la fuerza que empleo al tirar de ella, Namjoon por su parte observaba detenidamente el bien trabajado cuerpo del Alfa, no podía negar que lo deseaba tal vez desde que lo conoció aún y cuando supo que sería su cuñado, pero ahora eso ya no importaba sólo eran ellos dos demostrándose cuanto amor se tenían.
Con desesperación Namjoon quito igualmente su camisa y pantalón dejando únicamente la ropa interior, Jungkook veía su cuerpo, ese gran cuerpo que lo tentaba , Namjoon jamás había sido su tipo, incluso prefería a las mujeres pero ahora estaba tan perdido por ese omega varón, tan duro como jamás había estado en su vida, por solo ver a su pareja desnudo.
Volvió a subirse encima de Namjoon acariciando todo su cuerpo y dejando un rastro de besos en él hasta llegar a su cuello, donde dejó aun más besos y caricias, chupando con mayor énfasis en aquel pequeño espacio donde esperaba dejar su marca, para que ningún estúpido alfa pudiera quitárselo y que Namjoon fuera solo suyo, porque no lo negaría Jungkook era posesivo y muy celoso con sus cosas.
—Omega no sabes cuanto deseo hacerte mio, quiero entiendas que solo me perteneces a mi Namjoon. —Continuaba con sus besos por todo el cuerpo hasta que llego a su vientre y se detuvo al observar lo sonrojado que estaba su pareja, así que queriendo ver directamente a su omega, fue que guio una de sus manos a su miembro y comenzó apretarlo.
—Aaalfaaa se sienteee muy bieeeen— gemia el omega.
—Voy hacer que te sientas mejor omega, quiero que disfrutes todo lo que voy hacerte.
Por lo que sin esperar más tiempo quito su ropa interior observando la desnudez completa de su omega.
—Eres tan hermoso Namjoon, si tan solo pudieras verte en mis ojos sabrías lo especial y maravilloso que eres.
El omega no lograba entender todo lo que decía su alfa, pues mientras hablaba lo no había dejado de acariciar su miembro subiendo y bajando su mano, con mucho cuidado el alfa volvió a besar a su omega mientras introducía uno de sus dedos dentro de Namjoon, este al principio se sorprendió pues la sensación era nueva y extraña para él, sin embargo después de un tiempo comenzó a jadear queriendo más y quien era Jungkook para negarselo.
—Haaaazlooo maaass rápido aaalfaa— decía pues la sensacion era abrumadoramente placentera.
—Namjoon quiero probarte — el omega no comprendía a que se refería hasta que vio como su alfa bajaba más y su rostro se perdia entre sus muslos, de pronto sintió algo tibio y como algo húmedo se introducía en él, lo cual fue se sentía muy placentero.
—Alfaaaa detente, esto no esta bien— decía entre gemidos, pues era muy satisfactorio lo que Jungkook hacia con su lengua.
—Maaaassss rápidoooo alfa —dijo y Jungkook acato la orden comenzando a introducirse con más fuerza, comiendo todo el lubricante que este tenía, sólo unos minutos bastaron para que el joven se viniera en su pecho, disfrutando de uno de los mejores orgasmo de su vida.
—Omega, quiero hacerte mío, déjame demostrarte cuanto te deseo— el omega solo asintió y eso fue suficiente para que él alfa se introdujera en él, la principio con movimientos lentos, pero después de un rato cambio por unos más rápidos y placenteros.
—Eres tan estrecho Namjoon, te sientes taaan bien omegaaa—ambos estaban a nada de llegar al orgasmo, el alfa estaba encima del omega penetrandolo duramente a petición de este mismo, justo en uno de esos movimientos fue que tocó aquel dulce punto del omega que lo hizo jadear.
—Dale ahí alfa por favooorrr—jadeaba dulcemente el omega, Jungkook jamás imagino que así se sentiría estar con su pareja destinada pues realmente encajaban a la perfección.
Sólo basto un movimiento más para que Namjoon se corriera en su vientre por segunda vez, Instintivamente ladeo se cuello en señal de sumisión.
Las encías del Alfa picaban, quería marcar a su omega, hacerlo suyo para siempre y así lo hizo, lentamente sus colmillos comenzaron a encajarse en aquel bello cuello, mientras llegaba al orgasmo, para Nam fue doloroso en un momento pero después de ello sintió el mayor de los placeres por lo que dejándose llevar por lo que sentía en su marca y en su entrada al sentir crecer el Nudo del Alfa se vino nuevamente gritando el nombre de su alfa.
—Ahora eres mio Namjoon y nadie podrá alejarte de mi lado.
Ambos se veían a los ojos sintiendo lo que el otro, mientras esperaban a que el Nudo bajara, ahora por fin podrían ser felices y comenzar su vida en un matrimonio normal o eso era lo que esperaban
—Dale más fuerte alfa te necesito, por favor hazlo más rápido— decía el joven mientras su alfa lo empotraba en la cabecera de su recámara.
—Te sientes tan bien Jin, no sabes cuanto espere este momentoooo—jadeaba Yoongi al ver el cuerpo sudoroso y desnudo de su delta.
—Yo también lo espere alfaaaa deseaba sentirte, me llenas tan bien— después de unas cuantas estocadas más por fin la pareja llegó al orgasmo derrumbandose en la cama, claro Yoongi cuidando a Jin pues estaban unidos por el Nudo, Yoongi no se preocupa por dejar en cinta a Seokjin pues los embarazos en deltas eran casi inexistentes por no decir imposibles, sabía que al ser marcados por alfas cambiaba su anatomía, pero aún así su cuerpo siempre rechazaba al esperma.
Después de un rato de besos y mimos el delta cayó totalmente dormido recargando su cabeza en el pecho del Alfa.
Yoongi sabía muy bien que Jin lo odiaria al día siguiente, pues la razón por la que se acostaron fue porque al delta le llegó el celo, en ellos era normal pues una vez al mes lo tenían, la ventaja era que solo duraba un día.
El Alfa había estado muy triste pues despues de que Seokjin lo corriera se encerro en su habitación, pero grande fue su sorpresa cuando más tarde lo llamó a su puerta desesperado brincando a su regazo y comenzando a besarlo en cuanto esté abrió, al sentir su aroma de inmediato supo lo que tenia y aunque quiso evitarlo fue débil y cedió a lo que su cuerpo y lobo querían, que era tomar al delta y hacerlo suyo.
—Por favor no me odies Seokjin — dijo el alfa antes de caer en el mundo de los sueños.
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