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La Rompecorazones

Los pasos de Hollow hacían eco en los pasillos vacíos de aquel pasaje secreto que se encontraba explorando. Ni un alma poblaba aquel solitario lugar, su única compañía era el fantasma de su padre que flotaba junto a él atento a cada sonido.

—Hollow, de verdad no creo que vayamos a encontrar ninguna pista de Ali en este lugar.

—.......—Siguió caminando sin detenerse.

—Aunque me digas eso, no tiene sentido. A mí me parece que es solo tu desesperación la que te lleva a buscarla en los lugares más improbables y... Perdón que te lo diga, estúpidos.

—..... —Esta vez Hollow volteó a ver al fantasma con su mirada inundada de ira.

—No estoy tratando de desanimarte, solo soy realista. Hollow, estamos en un galería oculta que descubriste detrás de una pared falsa, nadie sabe de este lugar ¿Cómo van a esconder a Ali aquí si no saben que existe?

—¡....! —Sacó el aguijón onírico y apuntó al rey pálido con el, por su parte el fantasma retrocedió algo intimidado.

—Hollow... ¿En verdad serías capaz de esto? Por favor no...

El fantasma y su hijo se quedaron en silencio mirándose durante algunos minutos. Hollow tenía su mano apretada contra el aguijón onírico y temblaba un poco. El rey pálido a su vez parecía algo asustado pero no retrocedió ni escapó, se mantuvo firme enfrentando al joven guerrero. Finalmente tras un tenso momento, Hollow bajó su arma y volteó para seguir su camino.

El gusano suspiró aliviado, aquello fue muy peligroso, Hollow pudo haberlo destruido para siempre, sin embargo no lo hizo. Una cierta chispa de alegría lo envolvió, quizás su hijo ya no lo odiaba tanto como antes. Algo más tranquilo voló junto al pequeño.

—Si me permites una sugerencia creo que deberíamos salir de aquí ahora, estás demasiado cansado, llevas días sin dormir bien. No creas no me he dado cuenta que te desvelas por la noche. Maltratar tu salud de esa manera no hará que encontremos a Ali antes, así que por favor, trata de tomar un descanso y dormir como corresponde, además ya te lo dije, aquí no encontrarás a nadie, el lugar está vacío.

Pero como si alguien quisiera contradecir las palabras del viejo gusano, unos extraños ruidos se escucharon más adelante, algo semejante a una risa maniaca mezclada con un llanto. En cuanto Hollow percibió estos extraños quejidos, corrió desesperado hasta la fuente del sonido, guardando en su interior la esperanza de que algo tuviera que ver con Ali. Pero grande fue su decepción al encontrar a una extraña insecto sentada con sus patas recogidas contemplando un objeto brillante entre sus manos.

Era difícil decir a que especie de insecto pertenecía la criatura, pues su cuerpo cubierto por una armadura, solo sus cuatro delgadas extremidades quedaban a la vista. Lo único que se podía intuir de esta criatura, era que se trataba de una hembra por su tono de voz.

Cuando la insecto captó la presencia de Hollow, lanzó un chillido ensordecedor, aunque su mirada desquiciada estaba más pendiente del fantasma, que en ese momento por el susto olvidó ocultarse.

—¡Rey! ¡No! ¡Mío! ¡Tesoro mío! ¡Vete rey!

Y tras gritar eso les arrojó una especie de dispositivo de ataque, una bolita metálica que parecía inofensiva, pero en cuanto esta llegó cerca de Hollow extendió unas espinas que dañaron al pequeño caballero.

—Esa criatura... —susurró el rey pálido.

—¿....?

—No la recuerdo la verdad, pero me parece familiar, creo que le di una tarea hace tiempo pero no recuerdo bien.

—.......

—¡Hey! Eso es muy rudo aunque... Quizás tengas razón... —Soltó un suspiro—. Supongo que encargar misiones complicadas a mis súbditos y luego olvidarme de ellos es algo muy cruel. Pero ya es tarde para pedir perdón ¿Cierto?

—..... —Asintió con expresión severa.

—Bueno... Tratemos de ayudarla o algo.

Hollow no dijo nada más, emprendió la marcha para tratar de atrapar a la insecto, quien sin mirar atrás se mantuvo escapando mientras arrojaba bolas de espinas. Aunque ahora que Hollow ya sabía de ellas, se las arreglaba para esquivar.

—¡Mío mío mío! ¡Mi precioso! ¡Mi tesoro! —Las palabras hacían eco en las catacumbas.

La insecto brincaba y se aferraba a las paredes con la habilidad de un mono, alcanzarla se le hacía complicado incluso a alguien tan habilidoso como Hollow, aunque quizás su hermana manejaría mejor la situación, la velocidad y las acrobacias eran su fuerte, él destacaba más en combate directo.

Decidió optar por un ataque a distancia, entonces realizó un disparo de alma que golpeó duro a la criatura haciendo que cayera al piso. Sin perder tiempo Hollow corrió hasta ella. La acechadora al verse acorralada, comenzó a lanzar zarpazos a diestro y siniestro mientras gritaba como desquiciada.

—¡Mi tesoro! ¡Por mí! ¡Por ti! ¡Por el rey! ¡Aaaaaaaah!

Hollow bloqueó sus ataques anteponiendo su aguijón, luego retrocedió de un salto.

—Está loca —dijo el rey detrás de Hollow—. Su mente enferma no entenderá razones.

—¡Llave tesoro! ¡Vete vete vete! ¡Por el rey!

Hollow sabía que salvarla era imposible, su obsesión con su tesoro la perseguiría hasta el fin de sus días, por ello optó por la opción que le pareció más piadosa y de un certero golpe la mató de forma rápida.

—Supongo que no había más opción para ella —dijo el rey algo apenado—. Una lástima, me hubiera gustado preguntarle quien era.

—......

—¿La ex campeona que se volvió loca?

—.....

—vaya, no sabía que este lugar también tenía leyendas propias. Pero no es eso lo que quería saber, ella invocó mi nombre y podría jurar que la conozco de algún lado... Pero no puedo recordarlo.

Hollow ignoró los cuestionamientos de su padre y se acercó hasta el cadáver, entonces le arrebató de las manos una pequeña llave metálica, seguramente era el tesoro que mencionaba la loca.

—Una llave... Era la guardiana de esa llave... ¿Pero qué es lo que abre?

—..... —Se guardó el objeto.

—Hollow... De verdad no recuerdo nada de todo esto, pero juraría que esa llave era algo que no debía ser usado, mejor deshazte de ella y olvida el asunto.

El menor negó con la cabeza argumentando que siempre los objetos que había encontrado le habían sido de utilidad en algún momento, por eso dijo que guardaría la llave. Luego de eso se encaminó a la salida.

Cuando Hollow ya estaba llegando al comedor comenzó a sentir un horrible dolor de cabeza, quizás su padre tenía razón en que debería dormir un poco más, aunque se le hacía difícil. Cada vez que se quedaba quieto en silencio comenzaba a pensar en Ali, en como estaría y si lo extrañaría, al menos él la echaba de menos, le dolía el pecho recordar su ausencia.

Cuando llegó a su destino lo primero que vio fue a Hornet sentada en una de las mesas comiendo con tal furia que un escalofrío le recorrió la espalda ¿Que le habría pasado ahora? Llevaba toda la semana quejándose por una y otra cosa, ya hasta ella misma se había aburrido de reclamar por todo. Debía haberle pasado algo muy desagradable como para que otra vez se pusiera así.

La verdad Hollow no tenía ganas de aguantar a Hornet, pero era su hermana y debía apoyarla. Así que armándose de valor caminó hasta ella, se sentó a su lado y le preguntó cómo estaba.

—Con deseos de ver el mundo arder.

—¿......?

—El nivel de estupidez de este lugar ha superado mis expectativas.

—¿....?

—Se supone que en este lugar los idiotas vienen a demostrar su fuerza y a matarse en combate. Por eso de todos los lugares, jamás me esperaría que me hicieran proposiciones indecentes aquí.

—¡......!

—En los últimos dos días por lo menos 5 tipos me han pedido que sea la madre de sus huevos.

Si el rostro de Hollow no hubiera sido de color blanco, el pobre se hubiera puesto pálido.

—¿¡......!?

—¡Por supuesto que les dije que no! —Hollow suspiró aliviado—. Cuatro de ellos se lo tomaron bien, pero el último no aceptó mi respuesta y tuve que darle un escarmiento.

Hollow lo lamentó por el pobre desgraciado que se atrevió a desafiar a su hermana. Aun así no entendía por qué estaba tan enojada, si había logrado desquitarse con el tipo que le hizo pasar un mal rato, entonces debería estar algo más tranquila.

—Esto es un asco, en serio. Durante mucho tiempo todos me ignoraron y les dio lo mismo mi presencia y de pronto medio coliseo está interesado románticamente en mí ¡Pero qué les pasa a estos imbéciles! Si al menos un miserable bicho hubiera sido amable conmigo pero no ¡Para todos yo era basura! Que se pudran. Malditos locos. —De pronto se fijó en que su hermano parecía algo perturbado— ¿Pasa algo Hollow?

Una cierta angustia surgió en el pequeño. Hasta ahora jamás había tenido que preocuparse de que alguien fuera a dañar a su hermana (más bien le preocupaba que ella dañara a alguien), debido a lo intimidante y aterradora que era, casi ningún bicho se interesaba en ella.

Pero ahora de pronto un ejército de tipos tenía sus ojos puestos en ella y esa idea le enfermaba. No estaba dispuesto a tolerar que cualquier patán tocara a Hornet, hasta ahora al único que aceptado era a Quirrel, pues se las había arreglado para ganarse su respeto y lo consideraba digno de su hermana.

Observó a su alrededor y notó a más de un bicho con sus ojos puestos en Hornet, entonces les dedicó una mirada asesina tan penetrante y oscura que los insectos se sintieron intimidados y salieron del comedor.

Se felicitó a sí mismo por haber espantado a las basuras, pero los problemas nunca acababan. Repentinamente una araña bajó del techo y quedó suspendida en el aire frente a Hornet. Se trataba de Spencer y al igual que la vez pasada, se presentó extendiendo sus patas para parecer más grande, aparentemente ya era una costumbre suya.

-Hola Hornet —saludó el arácnido.

A pesar de la forma amistosa en que se presentó Spencer, antes de que Hornet pudiera decir cualquier cosa, Hollow sacó su aguijón y lo amenazó con una mirada tan cruel que al pobre gladiador se le recogieron las patas del susto.

—Eh... Hollow ¿Que rayos te pasa? —cuestionó Hornet.

—¡¡.......!! —El chico agitaba sus brazos furioso mientras seguía amenazando a Spencer con su aguijón.

—¡Pero que estupideces dices Hollow! —Gritó Hornet con la cara roja—. ¡Yo no me estoy reservando para nadie y ya te he dicho que Quirrel y yo solo somos amigos!

—....... —Le dirigió una mirada severa a su hermana.

—Mira, agradezco tu preocupación pero no necesito que me cuides. Pasé la mayor parte de mi vida defendiéndome sola y puedo seguir haciéndolo, así que no te metas en mis asuntos ¿Quieres?

—¡.......! —Ahora comenzó a enojarse y a apuntar a Spencer irritado.

—A Spencer lo conocí el otro día, es inofensivo. Es solo una arañita curiosa que gusta de charlar conmigo, no tiene ninguna intención oculta.

—Eh... En realidad si la tengo —declaró el bicho.

—¿Eh? ¿La tienes? —Tanto Hornet como Hollow parecieron sorprendidos por su honestidad.

—Pues sí, intenciones muy ocultas y muy serias.

—¿Qué tan serias?

—Hasta las últimas consecuencias.

—Denme un respiro —Hornet suspiró agotada—. Lo siento Spencer pero no tienes oportunidad.

—¿Ninguna?

—Ninguna.

—Jo, qué mal

A pesar de todo Spencer se lo tomó bastante bien, en realidad parecía que no tenía muchas esperanzas desde el principio, pues simplemente se descolgó del techo y se sentó frente a Hornet.

—Bueno... La verdad es que aún no he puesto todas mis cartas sobre la mesa.

—¿Que planeas Spencer? —Hornet tomó una actitud distante y se cruzó de brazos.

—Pues la vez pasada me dijiste que buscabas a alguien, puedo mover mis hilos para encontrar a quien desees, todo por un módico precio.

Un escalofrío recorrió la espalda de la araña cuando notó la mirada asesina que le dedicaba el campeón. Esto lo puso algo nervioso, sabía que no era rival para él y lo que menos quería era enfadarlo. Ese enano (aunque ya no tanto como antes) podía eliminarlo con un par de golpes sin que tuviera posibilidades de defenderse. Pero si jugaba bien sus cartas podría obtener una muy buena recompensa.

—Bien, cuál es tu precio —dijo Hornet con la seriedad de un hombre de negocios.

—Una cita.

Bastó que dijera esas palabras para que Hollow saltara sobre él con intenciones de matarlo. Afortunadamente para el bicho, Hornet rápidamente movió sus hilos y atrapó a su hermano antes de que ocurriera una tragedia.

—¡Pero qué rayos te pasa!

—¡........!

—¡Tú no vas a matar nadie! —Con un movimiento rápido amarró a Hollow a su silla cosa de dejarlo quieto.

Spencer miraba la escena incrédulo, Hornet tenía la capacidad de rivalizar con el mismísimo campeón, en verdad era una chica de temer.

—Hollow, esta es la primera oportunidad que tenemos en semanas de dar con el paradero de Ali ¿No quieres encontrarla?

Estas palabras removieron el corazón del caballero, por supuesto que quería encontrar a Ali, haría lo que fuera por tenerla sana y salva entre sus brazos, pero tampoco quería sacrificar la honra de su hermana. Ajena a los cuestionamientos de su hermano, Hornet decidió continuar con sus negociaciones.

—Supongo que tienes claro que no tienes ninguna posibilidad conmigo ¿Cierto?

—Lo tengo más que claro, me lo restregaste en la cara hace un rato, pero con unos colegas hicimos una apuesta, el primero que consiga una cita contigo gana. El premio es muy bueno, 500 geo por cabeza, como somos 6 los que participamos en la apuesta recibiría 2500 geo ¿Puedes creerlo? Ahora, como no especificaron que tipo de cita tenía que ser, basta con que salgamos un rato y ya.

Hornet lo miró sorprendida, Spencer era muy honesto y muy directo, eso le agradaba. No vio nada de malo en aceptar el trato, aunque por supuesto dejaría muy claras sus condiciones.

—De acuerdo, tendré una cita contigo, pero te lo voy a dejar en claro, yo no caigo en el famoso truco de "hay una mugre en tu cuerno", y si intentas propasarte conmigo te arrancaré una pata ¿Entendido?

—Había un bono extra si conseguía un beso...

—Ni lo sueñes.

—De acuerdo, 2500 geo igual es un buen premio, con eso más lo que tengo ahorrado ya puedo largarme de este lugar para vivir como rey.

—¿Estás aquí por el dinero?

—Sí... Bueno... Algo así. En realidad llegué a este lugar porque no tenía ninguna otra aspiración en la vida más que demostrar que era un tipo rudo y fuerte y quería aplastar a todos a mi paso pero... Últimamente he considerado otras opciones —Le lanzó una mirada extraña a Hornet—. Pero dejemos eso de lado, tengo que cumplir mi parte del trato también ¿Verdad? Así que... ¿A quién buscan? ¿Cómo se llama? ¿A qué especie pertenece? ¿Cómo es?

—Estamos buscando a una chica llamada Ali. Ella es bastante especial, aún es una cría y no es un insecto.

—¿No es un insecto? ¿Y qué cosa podría ser si no es un insecto?

—Lejos de Hallownest hay muchas criaturas raras y extraordinarias, ella es una de esas. Ali es un murciélago, un tipo de bestia peluda carente de caparazón, con unas formaciones cartilaginosas en su cabeza en lugar de antenas, además tiene un par de alas membranosas que...

—¡Un momento! Esa descripción que me estás dando me suena a la mascota de Tamy.

—¿La mascota de Tamy?

—¡:........!

—Eh... No es exactamente una mascota, pero su aspecto pequeño e infantil la hace parecer una, aunque en realidad se trata de una bestia de batalla. Un par de tijeretas capturaron hace un tiempo a una bestia desconocida en Nido Profundo y decidieron regalársela a Tamy, ya que luego de la muerte de su anterior compañero quedó muy afectada. Tamy logró entrenar a esa criatura y la convirtió en una fiera salvaje que solo la obedece a ella, aunque claro, es la domadora de dioses, es una experta en someter a cualquier criatura.

Los ojos de Hollow se abrieron por la sorpresa en cuanto escuchó ese título y un temor comenzó a emerger de lo más profundo de su ser.

—Entonces ¿Esta cosa obedece a esa tal Tamy? ¿Y pelea junto a ella en el coliseo? Eso no me suena a algo que haría Ali. Ella es bastante caprichosa y no es muy aficionada a las peleas, la verdad es una vaga que prefiere que le cacen su comida en lugar de hacerlo ella misma —Hornet suspiró recordando a la pequeña—. Aunque quizás en parte era nuestra culpa por consentirla demasiado.

—Tampoco es como que Tamy la convirtiera en una máquina de lucha de un día para otro. Sé que le costó bastante someterla y la tuvo semanas en entrenamiento antes de sacarla al campo de batalla, pero en cuanto lo hizo la criatura arrasó. Ahora todos la adoran, sus colmillos son de temer y tiene muchos admiradores. Además de que es bastante bonita y talentosa, con esos poderes de fuego que usa para hacer un espectáculo antes de cada pelea...

—¡Esa es Ali! —Gritó Hornet golpeando la mesa— ¡Hollow encontramos a Ali! ¡Por fin podremos recuperarla! ¿Hollow? ¿Qué te pasa?

Aquello que debería haber sido una gran noticia para el muchacho terminó siendo una pesadilla. La domadora de dioses, la subcampeona del coliseo, la única a la que le había perdonado la vida en aquel lugar, jamás pensó que aquella decisión le costaría tan cara.

Él solo había querido ser piadoso, cuando asesinó a la bestia de Tamy y la vio llorar destrozada no se atrevió a matarla. Cada insecto que había derrotado en el coliseo era un luchador carente de corazón y dispuesto a morir sin lamentar nada, pero Tamy era distinta, veía una chispa de deseo en su mirada y una voluntad por seguir adelante que ninguno de los otros gladiadores poseía, fue por eso que la dejó vivir, no se atrevió a apagar su espíritu para siempre.

Y ahora más de un año después de eso, el perdonarle la vida resultaba ser un error que ahora su preciada Ali debía pagar. De hecho la situación parecía sumamente crítica. Él le había arrebatado a la domadora a un ser querido, quizás ella decidiera pagarle con la misma moneda asesinando a la murciélago. La simple idea le aterraba.

—Bueno, solo hay que ir a hablar con la domadora y pedirle que nos regrese a Ali.

—No creo que sea tan fácil Hornet —Spencer la miró de forma maliciosa—. Al menos tú no podrás ir a hablar con ella, eres una novata que aún no supera la prueba del guerrero. Supongo que ya te explicaron las jerarquías aquí. Hay tres niveles, guerrero, conquistador e insensato. Cuando consigues cierta cantidad de victorias en un nivel e impresionas a los señores del coliseo, estos te hacen combatir con un oponente de nivel superior, si lo derrotas puedes acceder al siguiente nivel. Esto te permite acceder a los dormitorios y a otras zonas que por el momento están prohibidas para ti. Tamy como subcampeona, está en las instalaciones designadas para los insensatos, jamás se digna a visitarnos a nosotros la chusma, para hablar con ella tendrás que ascender de rango.

—¡Aaaaaaaah! ¡Por queeeeeee! ¡Otra vez con esa estupidez del rango!

—Bueno, tu querido hermano tiene acceso a todas las áreas del coliseo, aunque es un problema que no pueda hablar ¿Verdad? Aun así, no creo que Tamy esté muy dispuesta a liberar a su..."Ali", mucho menos a entregarla a Hollow, al fin y al cabo, él fue quien asesinó a su anterior compañero.

Hornet volteó a ver a su hermano y notó el rostro preocupado que tenía.

—Hollow... No me digas que....

—.....

Hornet accedió a la petición de su hermano y lo liberó de sus ataduras, el pequeño caballero simplemente salió del comedor luciendo deprimido y angustiado.

Luego de la partida de hollow, su hermana se quedó algunos momentos más en el comedor enterándose de algunos pormenores de la domadora de dioses y posteriormente, afinando algunos detalles de la cita que tendría con Spencer. Esto último no le hizo mucha gracia pues básicamente tenía que dejar que él la presumiera por todo el sitio, aunque era algo esperable, aquello no era una cita romántica, ellos ni siquiera eran amigos, definitivamente eso no sería algo divertido. Pero al menos agradecía que la araña fuera totalmente honesta y correcta con ella dejando en claro sus intenciones y expectativas.

Cuando terminó con sus asuntos, Hornet se dispuso a buscar a su hermano, ya le había dado suficiente tiempo a solas para que asimilara la situación y ya era hora de que se asegurara de que estaba bien. Sin embargo, como siempre las cosas no podían ser tan fáciles para ella.

No llevaba mucho trecho recorrido cuando una mariposa con su cuerpo lleno de cicatrices se presentó ante ella. El insecto tenía una actitud regia, arrogante y una tendencia innata a mirar a todos con desprecio. Ella jamás había visto a ese peleador antes, supuso que era alguien de un nivel superior, probablemente de nivel conquistador o insensato.

—Oye tú ¿Eres Hornet?

—¿Quién me busca?

El bicho la miró de arriba a abajo, analizando cada parte de su ser con mucho detalle.

—Así que tú eres esa hembra tan popular que llegó hace poco al coliseo. Se ha hablado bastante de tu belleza y poder. La verdad con esa estatura tan baja no luces nada impresionante, pero debo admitir que eres de las chicas más guapas que he visto últimamente por aquí.

Hornet bufó molesta. Otro idiota que venía a hacerle proposiciones indecentes, aunque por la actitud de este, parecía tratarse de un idiota de nivel superior, pero qué asco.

—Mi nombre es Ben, orgulloso guerrero de nivel insensato, el ser volador más poderoso actualmente en el coliseo y futuro campeón —Hizo una pausa dramática y una pose exagerada—. Seguro debes estar impresionada por tener a semejante individuo frente a ti pero...

—¡Ya cállate! —Le gritó Hornet mientras se agarraba la cabeza— No puede ser, de todos los payasos con los que he tenido que tratar en los últimos días definitivamente tú eres el peor.

—¿Payasos? ¿Acaso es una nueva forma de referirse a los galanes? —La mirada que le dedicó Hornet era indescriptible.

—Mira, tú solo vete. Ahora no estoy de humor para estas cosas, tengo que encontrar a mi hermano, otro día juego contigo ¿Quieres?

—¿Acaso me estás despreciando? —Ben lucía sumamente ofendido.

—¿Quieres que sea honesta? Sí.

—¡Chica tonta! No sabes el extraordinario ser que tienes al frente. Soy Ben, el domador, el ser más extraordinario, bello, poderoso, talentoso y magnífico de todo el lugar, además de un galán experto en romance y el sueño de toda chica. Cualquiera que... ¿¡Oye me estás escuchando!?

Hornet había preferido ignorar su charla sin sentido y se alejaba de él con actitud abatida, en verdad su paciencia estaba llegando a su límite.

—Vuelve aquí maleducada —Gritó Ben mientras volaba hacia Hornet con intenciones de detenerla.

Pero antes de que Ben pudiera alcanzar a la chica, alguien más la detuvo. Hornet se volteó molesta dispuesta a darle un bofetón a esa mariposa odiosa, pero a quien encontró detrás de ella no fue a Ben, era otro individuo el que la tenía sujeta de la capa, se trataba de una cochinilla envuelta por completo en una armadura marrón.

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Supongo que la primera escena a muchos se les habrá hecho conocida, es el primer paso para sacar el último de los DLC, derrotar al acechador pálido, el Gollum del juego. My precious...

La verdad la parte del coliseo está resultando ser mucho más entretenida de lo que esperaba. Ver a Hollow protector con su hermana no tiene precio XD. Aunque dejo en claro que no es un hermano celoso ni sobre protector, simplemente tiene en claro que ninguno de los tipos del coliseo sería una buen apareja para su hermana y por eso quiere mantenerlos lejos de ella.

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