Capítulo 9.

9.
—No entren en pánico ¿quién tiene dieciocho años?
Nos miramos y el único que levanto la mano fue Liam, se notaba que estaba muy tomado ya que el recién los cumpliría en unos meses.
—Leidy no quiero ir a la cárcel —hablo Jessica
—Si, si no me matan ahí lo hará mi mamá y será mucho peor —dijo Liam
—No quiero morir joven —siguió Kevin
—Esta bien tranquilos, respiren. Nick las llaves de la salida de emergencia —se dirigío hacia ese señor
—A-aquí están ¿Los sacaras por ahí?
—Claro, como cuando éramos jóvenes —dijo Leidy sonriente y él le entrego esas llaves.
Todos la seguimos con miedo a que lo notarán. Afortunadamente lo logramos, pero nadie podía conducir así que tuvimos que irnos a pie.
Todos estaban ebrios, bueno más lo estaban Sarai y Jessica... así yo también, apenas caminaba. Mientras que a Sarai la cargaba Kevin y a Jessica la cargaba Liam y a mi nadie...
«Que envidia»
Leila iba hablando con Leidy. Estaba muy tranquila, hasta que otravez alguien puso su mano en mi hombro intente darle una bofetada, pero estaba tan mareada que casi me voy al suelo.
—Ey, cuidado —¿Qué? ¿Era Daniel? Todos voltearon a ver. Si, era él. —Amm... los vi salir, por esa puerta y yo también soy menor de edad, así que...
—Bueno no hay problema, ¿Los conoces verdad? —le preguntó Leidy
—Sip
—Okey, entonces puedes venir con nosotros
—Pero con una condición —ahora hable yo. Me tenía que aprovechar de alguna manera ¿no? —Tienes que llevarme de caballito
—¿Qué?
—Por favor, me duelen los pies y estoy muy mareada —él puso los ojos en blanco
—Esta bien, solo porque estas por caerte —dijo, se dio media vuelta y se inclino ligeramente hacia adelante —vamos, súbete.
Me acerque lentamente y me trepe a su espalda, lo abracé del cuello y lo rodeé con las piernas. Daniel me levanto como si no pesara nada.
Los ojos se me empezabana a cerrar, sentía mucho sueño. Y lo poco que recuerdo es que le hable a Daniel.
—¿Cómo llegaste a la discoteca? —pregunté
—Es viernes, siempre voy con Liliana
—¿y ella donde esta?
—Bueno se enojo de nose qué y me dejó solo ahí —respondió
—Es muy enojona ¿no? —él asintió con una sonrisa, me apegue más a él y por fin cerré los ojos.
—Tu espalda es muy calientita —susurre
Después creo que me quede dormida, porque solo recuerdo despertar cuando estábamos a una calle de la casa de mi abuela. Aún me cargaba Daniel quien no parecía muy cansado.
Ya me encontraba mejor que antes o al menos más despierta, por eso pude ver el auto de mi padre.
Espera, ¿qué hacia ahí mi papá?
«Ahora si vamos a morir»
«¿Qué será de nosotras?»
—Leidy... Mis papás están... ahí —dije señalando su carro, todos nos asustamos.
Nos miramos entre nosotros y no tuvimos otra que seguir, llegamos y mi mamá estaba muy enfadada eso se veía a kilómetros, Daniel me bajo pero no dejo de sostenerme porque todavía no me funcionaban las piernas.
«Qué vergüenza Lexi, y solo tomaste dos vasos»
¡Callate!
Cosas que no volveré a hacer: tomar cerveza, ni ningún tipo de bebida alcohólica.
—Espero que tengas una buena explicación Alexandra —dijo mi mamá con los brazos cruzados —y ustedes también, voy a llamar a sus madres.
—¡¿QUÉ?! No no por favor —empezaron a hablar todos a la vez.
Mi papá agarro a Leidy y la llevo adentro de su casa, mientras mi mamá empezó a llamar a las mamás de todos.
A Leila y a Jessica las vinieron a recoger sus papás; de Sarai, Kevin y Liam vinieron sus mamás. Supongo que nos ganamos un buen castigo.
Daniel y yo estábamos dentro del auto, estaba nerviosa, ahora si estaba en graves problemas y lo peor esque no sabia si saldría con vida de esta...
—¿Crees que te den un castigo fuerte? —me di vuelta y vi a Daniel mordiendose las uñas por los nervios.
—Obviamente
—¿Cuanto tomaste? porque te andabas cayendo. Si no lo recuerdas, te traje cargando —enrojecí.
—Amm do-dos vasos —él me miró con las cejas levantadas y empezó a reírse a carcajadas.
—Perdón —hablo entre risas— esque no puedo creerlo, solo fueron dos vasos
—Deja de reírte
—Esta bien pulga, pero admite que es gracioso
—No lo es
—Claro que si
—No
—Que si pulga
—Deja de decirme así y no no es gracioso —cruze los brazos sobre mi pecho
—Lo que diga la Señorita— puse los ojos en blanco.
Y él después de un rato seguía riéndose hasta que mis papás entraron, nos fuimos en completo silencio cuando por fin llegamos a casa.
—Daniel tu mamá te espera, puedes salir —dijo mi mamá, él me miró.
—Siento mucho lo que sucedió, buenas noches —y se fue.
Ahora solo estabamos los tres, tengo que hacer algo para alivianar el ambiente.
—Bueno... Al menos ya probé el alcohol, y antes de los dieciocho ¡Si!
—No es momento para bromas Lexi, ¿sabes lo irresponsables que fueron hoy? Pudo haberles pasado algo grave —dijo mamá
—Pero todos estábamos bien...
—Se expusieron a mucho peligro. Tienes prohibido volver a salir en un mes, y luego veo que otro castigo darte. Buenas noches —y salio del auto, suspiré.
—Lexi debes tener mucho cuidado —hablo mi papá después de un rato— Tu mamá y yo nos preocupamos mucho, sabes que solo queremos que tú y tu hermana esten bien.
—Lo se, lo siento mucho papá
—Esta bien, no lo vuelvas a hacer o al menos sin avisar. Puedes confiar en nosotros, si nos dices la verdad te comprenderemos.
—Okey, lo prometo... ¿Ahora iras a... tu casa?
—No, tengo que ir a hablar con Leidy. A casi lo olvido, mañana no podré venir
—¿Porqué?
—Estaré ocupado, tengo que salir de viaje
—Esta bien
Salí del auto enojada, aunque tratando de que no se me notará.
—Lexi ¿estamos bien? —hablo mi papá desde la ventanilla.
—Si papá —asintió y se fue.
Ya van tantas veces que pasa esto, que después de un tiempo ya no tiene importancia.
Hemos cancelado cenas y almuerzos importantes, días especiales sin celebrar y cumpleaños atrasados... Aún duele la ausencia.
*. *. *.
Otra vez lunes... esto es como un ciclo ¿no? Porque en seis días volvera a ser lunes y así toda la vida.
Todo el fin de semana mamá estuvo recriminandome sobre todo lo que pasó el viernes, regaño tras regaño.
En fin, estaba iendo a buscar a Liam a la cafetería porque según él era urgente verme.
Cuando entré vino hacia mi y me llevo a una mesa donde estaban Jessica, Kevin y Sarai.
—Hola, ¿para que me...
—Shh ¿estas bien? ¿Te castigaron? —eso me pareció tierno, que bonito que se preocupe.
—Si estoy bien, me dijeron que no podría salir en un mes y no quedarme después de clase
—A mi igual, mi padre me dijo que soy muy inmadura para ir a discotecas —Jessica sonrió irónica — Si supiera...
—Mi mamá me prohibió manejar el auto toda la vida, ahora solo vendré en bicicleta... es tan humillante —dijo Liam seguido de un suspiró— Y lo peor fue que mi papá me iba a regalar su moto, y ahora ya no lo hará.
—A mi casi me prohíben estar en el equipo de fútbol, —hablo Kevin — pero negocie y tendré que ayudar a mis tíos en su tienda todas las tardes
—Yo igual ayudaré en la tienda de mis padrinos —dijo Sarai, que estaba limandose las uñas.
«Todo fue tu culpa»
Ay no, ahora si me siento muy mal, yo les conseguí problemas con sus papás.
—Lo siento mucho, si yo no los hubiera llamado...
—No, no. Esta bien, por lo menos nos divertimos y sabemos que en cualquier momento nos levantarán el castigo ¿verdad? —todos asintieron, y Liam paso su brazo por mis hombros.
—Gracias, eso me hace sentir mejor
—Oh y no te conté, Leila saco fotos del viernes, le dije que me las pasara y aquí estan
Me paso su celular, sonreí al verlas eran muy lindas; selfies todos juntos, con mi abuela, bailando, haciendo caras raras y también cuando estábamos regresando. Me alarme cuando vi una donde yo estaba dormida y Daniel me cargaba.
«¡Rayos!»
No no no, esto está mal.
No puede estar pasando. Tengo que hacer que la borren.
—Lexi ¿Qué paso? Te pusiste pálida —me habló Jessica
—Esque es-esta foto... Noah no sabe que el viernes salí, y si ve la foto podría enfadarse conmigo
—Y también con Daniel, ya ves lo amigos que son —dijo Liam
—Si, y ahí parece que a Daniel le gusta estar contigo —dijo Jessica acercándose
—No había notado eso —Liam volvió a ver la foto.
—Eso no ayuda —dije enojada
«¡Rayos rayos rayos!»
—Debo encontrar a Leila
—Okey, te ayudo —y salí junto a Liam
La buscamos por todo lado, nos tuvimos que separar para encontrarla más rápido y al fin la encontré en su salón, tenía un poco de miedo a entrar; así que le hice señas para que saliera.
—Hola Lexi ¿qué paso?
—Esa foto en la que estamos Daniel y yo ¿podrías borrarla por favor?
—A okey —saco su celular y empezó a buscar —¿esta? —me la mostró y asentí
—Pero que tenemos aquí... —Lucía apareció detrás y le quito su celular a Leila, quien no hizo nada al respecto
«perfecto»
Entre todas la cosas que podrían pasarme, me pasa esto.
—Asi que aparte de Noah, también Daniel ¿eh?
—Eso no te importa
—Claro que me importa, Noah es mi amigo y lo estas engañando —intente quitarle el teléfono pero lo levanto por encima de su cabeza.
—Estas mintiendo, dame ese celular
—No, antes le mostraré a Noah la clase de chica que quiere para que sea su novia
—No, no lo hagas por favor —sonrió maliciosamente
—Puedo sacar algo a mi favor con esto ¿no?
«¿qué hacemos?»
No lo se, se supone que tu eres la inteligente.
«A mi no me mires, esto es tu culpa»
—No diré nada, ni le mostraré tu foto. Pero me harás un par de favores a cambio —continuó.
—Esta bien lo haré.
—Super, vamonos Leila
Y se fue con esa maldita sonrisa falsa.
«¡Agh!»
Camine hasta mi aula y encontre a Liam quien al ver mi expresión, vino corriendo.
—¿Todo esta bien?
—Si —finji una sonrisa.
—No mientas Lexi...
—Lo prometo, borro la foto y nada más —él asintió, pero estoy segura de que no me creyó.
Después de dos horas más de clase, por fin era momento de irse. Cuando salí me encontré a Noah, creo que estaba esperandome; se acercó con una sonrisa apenas me vio.
—Hola
—Hola —yo también sonreí
—¿Como estas?
—Estoy muy bien ¿y tu?
—Bien, pero podría estar mejor —Me dijo con una sonrisa divertida.
—¿Enserio? ¿Y que puedo hacer para que te sientas mejor?
Sorpresivamente rodeo con sus brazos mi cintura. Luego susurró cerca de mi oído:
—Te quiero mucho Lexi...
Era la primera vez que me decía eso.
No sabía que responder, que decir o como reaccionar; a esto me refería cuando decía que me confundía. Ese instante que no sabía si lo quería o solo me gustaba.
Y esque había una diferencia entre gustar y querer y... amar.
¿me gusta?
¿Lo quiero?
¿Cómo se sabe? Dicen que son las mariposas en el estómago o el corazón acelerado
¿Cómo será que se siente en realidad?
—Ven —me tomo la mano e intento llevarme con él.
—espera... —no sabía cómo decirle que estaba castigada como una niña
«eres una niña Lexi»
Bueno, si lo soy, pero igual ya estaba grandecita para castigos.
—Okey, vamos... Espera ¿no tienes entrenamiento hoy?
—No importa, quiero salir contigo —sonreí y nos fuimos.
*. *. *.
Me llevo al cine, como era algo de último momento estuvimos como diez minutos discutiendo sobre que género de película ver. Yo quería una de terror y él una de drama, al final accedí porque prometió que la próxima mirariamos una que yo quisiera.
Compramos los boletos y unas palomitas, nos sentamos juntos.
Unos minutos después que comenzo la película puse mi cabeza sobre el hombro de Noah. Pude observar como sonrió, lo cual hizo que yo hiciera lo mismo.
«Me pregunto de donde sacas tanto valor para hacer estas cosas»
Ni yo lo se...
Cuando termino la función salimos de ahí, íbamos a ir por algo de comer, decidí revisar mi celular ya qué lo había apagado para entrar al cine.
«¡rayos!»
Como treinta mensajes de Anna y ¡siete llamadas perdidas de mamá!
14:34
¿donde estas? ¡Debiste salir hace media hora!
14:53
Lo siento, tuve que ir a casa, tienes suerte de que mamá no llego aún.
15:20
Mamá llegó. Esta muy enojada...
15:46
Dice que iremos a cenar con los vecinos, más te vale estar antes de las seis.
16:28
Dime donde estas, me estas empezando a preocupar Lexi.
17:09
No se que estas haciendo, pero cuidate ¿si?
Respire hondo y le respondí:
Estoy bien, llegare pronto :)
Volví a apagar el movil. Fui con Noah quien se detuvo en una cafetería
—¿No te llamaron de tu casa? —preguntó cuando me senté junto a él.
—No, solo eran mensajes de Liam.
—Okey, bueno te traje aquí porque... ¡es mi cumpleaños! —dijo sonriente.
—¿Qué? ¿Hablas enserio?
—Sip
—¿Porqué no me lo dijiste? No pude preparar un regalo
—No quiero un regalo Lexi, estas aquí conmigo, eso es más que suficiente —me sonroje
Nos trajeron café y un pastel con una vela encendida.
—No olvides pedir un deseo —dije
—Esta bien —cerro los ojos y luego soplo la vela.
Comimos muy tranquilos, pagamos y nos fuimos a caminar a un parque que estaba muy cerca.
Jugábamos a hacernos preguntas al azar sobre comida, música y más cosas. Pero me puse nerviosa cuando preguntó:
—¿Cuando te dieron tu primer beso?
—¿A ti? —trate de cambiar para no responder, pero no lo logre.
—Eso está en contra de las reglas, responde
—Amm no he besado a nadie —mis mejillas comienzan a arder.
—¿Enserio? —paro de caminar.
Se puso en frente mio mirandome a los ojos, luego bajó la mirada a mis labios y lo que quiere hacer es muy obvio. Noah empieza a acercarse lentamente, mi respiración esta fuera de control.
—¿Q-que haces?
—Haciendo mi deseo realidad —respondió
Estaba tan cerca que podía sentir el calor de su cuerpo con el mio, cerré los ojos con fuerza todavía con el corazón acelerado y...
_________________________
*Se va en silencio dejando algo a la mitad*
Jajja 🤭 Ya se, me perdí dos semanas, pero no me maten, me dio un bloqueo y no sabía que escribir y al final logre hacerlo. ¡Siiii!
Les traje un capítulo más largo, espero que les guste... Nos vemos la próxima semana, los quiero mucho 💞
Cuídense :)
Adiós 👋
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro