39
Seis años después, nuestro pequeños ya habían crecido mucho.
Daniela comenzó a estudiar Bachillerato.
Y tú cada vez comprabas más cremas para tus imperfecciones por la edad y dejabas de mirarte al espejo para no ver tu hermoso reflejo.
Pero no sabía como te veías tú o cómo te veían los demás, porque me daba igual; yo te veía tan preciosa como el primer día.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro