Por la mañana...
Estoy harta! ya no voy a hablarle nunca mas, como pudo hacer eso... bueno tendré que ir a clases, porque se está haciendo tarde, creo que hoy lo voy a pasar bien, hay un día a la semana que solo hacemos gimnasia, los que pertenecen a un grupo se juntan con ellos y practican sus habilidades físicas, claro yo podía elegir a quien fuera ya que al parecer debía descubrir mis habilidades. Entonces llegó Chad y nos fuimos a clase, como prometió vino a recogerme
- Hoy con que grupo iras? -dijo él
-No lo se, es que no conozco a nadie demasiado -les respondí preocupada
-No te preocupes, lo había anticipado -dijo él con sonrisa picaresca- Ya les he hablado a los de mi grupo de ti, así que vendrás con nosotros
Y así lo hicimos, cuando llegamos al gimnasio me presentó a su grupo, todos de tipo intercambio, Chad dijo que él sería mi pareja, y que no sería demasiado duro conmigo, por lo que yo me relajé.
-Estas lista? -dijo Chad- estoy seguro que eres fuerte así que no te preocupes
-De acuerdo - dije
En ese momento se lanzó hacia mi, y yo sentí un tirón en lo mas profundo de mi y salté sintiéndome increíblemente ligera, aterricé encima de Chad, él perdió el equilibrio y caímos me sentí increíblemente poderosa cogí a Chad de los hombros y lo lancé como si no pesara nada en absoluto, pero este rebotó en el techo y vino hacia mi, me cogió y me inmovilizó contra el suelo, pero quiso girarme para verme inmovilizada y entonces recordé el episodio de la plantas así que retorciéndome me quité un zapato y toque el suelo parra llamar a cualquier tipo de planta que pudiese retenerlo y así fue solo que Chad consiguió liberarse rápidamente, aunque me dio el tiempo suficiente para salir de su agarre, me alejé un poco y noté como alguien abría la puerta que daba al exterior poco a poco el interior del gimnasio se fue llenando de aire, sentí como si pudiese moldearlo y pensé en retirar el aire que rodeaba a Chad, que inmediatamente cayó al suelo y se estaba asfixiando, en ese momento entré en pánico porque no sabía como pararlo, grité pidiendo ayuda, pero todos en el gimnasio de habían ido  y solo quedábamos Chad y yo en el gimnasio, así que como no se me ocurría nada más le hice el boca a boca, cosa que aprendí en un curso de primeros auxilios y inmediatamente respiró, me quedé aliviada y entonces cuando Chad pudo hablar dijo:

-Creo que puedes controlar el aire -Dijo mirándome intensamente

-Lo siento, lo siento tantísimo -Dije casi llorando - No lo voy a hacer de nuevo casi te...

- Me interrumpió abrazándome, y me dijo al oído - Tranquila, se que no querías hacerme daño - al separarme me seco una lágrima de la mejilla - No llores, me alegra que seas fuerte, y además todos nos hemos salido de control alguna vez, ahora ayúdame a ir hacia el hospital

-Cla-claro enseguida -dije yo, que aun tenia hipo por llorar- cógete de mi

Fuimos al hospital, que estaba realmente cerca del gimnasio, esto lo agradecí profundamente cuando llegamos llamé al médico rápidamente y este me dijo que fuera a la sala de espera porfavor pero aunque no quise escucharlo oí que el médico le dijo a Chad

-No puedes seguir así Chad, lo sabes que estas llegando a tu límite - dijo el doctor muy serio

-Lo se pero no quiero implicar a alguien en esto porque sabes lo que implicaría- contestó Chad

-Pero sabes que no solo estas tu en peligro, sino que todos a tu alrededor, un día podrías salirte de control, y sabemos que su familia es muy especial en estos temas, no podrá mantenerse aquí

Y decidí que ya había oído suficiente, esto no era cosa mía así que salí aunque tropecé con la silla...

Al día siguiente...

Por la noche no pude dormir, así que decidí salir a practicar mis nuevas habilidades al bosque donde no se porque pero me sentía muchísimo más relajada, una vez allí rompí arboles a golpes de puño, hice grietas en el suelo con patadas, dejé salir toda mi frustración a golpes, por no haber sabido antes que no era hija de mi madre, por el beso de Nate, por hacerle daño a Chad, por no saber que soy exactamente, por no tener nadie con quien poder hablarlo... di golpes hasta que tuve que sentarme en el suelo de agotamiento, mi cuerpo ardía y no podía moverlo bien  pero aun así puse la palma de mis manos y pies desnudos en el suelo y cree raíces para reparar el daño en el suelo y los arboles, cuando terminé traté de levantarme pero las piernas me fallaron pero justo antes de caer al suelo alguien me sujetó

-Oye, iba a ver quien estaba destruyendo el bosque pero resulta que vengo y me encuentro con un tornado aquí - dijo alguien sarcásticamente - No deberías forzarte hasta este punto, colapsaras una y otra vez, aunque viendo tu poder no puedo hacer otra cosa que recogerte cuando caes como siempre

-Quien eres? - Dije mientras este me recostaba encima de su regazo acariciándome el pelo

-Alguien que se preocupa por ti, pero tu no eres capaz de recordar... en otra vida quizás -dijo con tono sombrío él

-Nate, eres tu?- dije yo confusa pero sin fuerzas para moverme aun y entonces me desmayé

Me desperté en el hospital, cuando abrí los ojos me encontré unos ojos rojos muy abiertos observándome, por el sobresalto salté y me di un golpe con la frente de Chad que me miraba desde arriba pero cuando le miré volvían a ser verdes como siempre y recordé la conversación que oí el día anterior

-Que me querías copiar o estas solo por estar aquí conmigo?- Dijo Chad de muy buen humor

-No te lo creas tanto guapo, puedo ver tu carita en clase -Le dije como respuesta riéndome

-Vaya vaya, así que la gatita tiene las uñas largas, pero te delatas llamándome guapo -Dijo el tratando de provocarme- de todas formar quiero presentarte a unos amigos cuando salgamos de aquí 

- De gatita nada -dije yo - Gracias por preocuparte

De repente se puso serio y dijo

-Si alguna vez quieres hablar de algo, puedes hacerlo conmigo, solo quería que lo supieras -dijo él convencido

-Lo se, lo mismo te digo - y sin avisar le di un abrazo, noté que se ponía increíblemente tenso, i cuando me hice a un lado lo vi, tenía los colmillos fuera y los ojos rojos, y inmediatamente se giró y dijo

-No me mires, este no soy yo, ni lo quiero ser - dijo no permitiéndome verlo

-Oye, no puedes renegar de tu naturaleza, lo vas a tener que aceptar, aunque te lo diga yo que soy nueva en esto, ¿esto tiene que ver con que estés en tu límite? - dije, pero al instante me arrepentí

-Estuviste escuchando! Pues si, tiene mucho que ver, en mi familia tenemos un poder increíble cuando realizamos el intercambio -dijo amargamente

-Pero eso es increíble ¿no?- pregunté curiosa

-Sí, pero por contra solo podemos tomar sangre de una persona, y si esta muere no podemos alimentarnos nunca más y morimos también pero tenemos un límite de tiempo para elegir a alguien y el mío termina hoy -dijo tristemente - además que resistir al hambre es increíblemente doloroso

-En ese momento no lo pensé ni un segundo y le dije - Es decir que si no estableces un contrato hoy vas a desaparecer ¿verdad?

-Si, pero no puedo involucrar a nadie en esto, no quiero, además no puedo hacerlo con todos hay muy pocas sangres que me atraigan

Yo lo reflexioné un momento, y caí en la cuenta que antes se sintió muy atraído por mi sangre, solo quería que no se muriera, era realmente el único amigo que tenía aquí así que me mordí el labio disimuladamente y me acerque a él le acaricié la cabeza y puse mis labios sobre los suyos, eso lo obligo a beber mi sangre, que se mezcló con su saliva y note como su cuerpo subía de temperatura, y sus labios se acercaron a mi cuello y oí ahora no hay vuelta atrás, no sabes donde te has metido, y seguidamente me mordió, al principio note el mordisco y como succionaba, pero poco a poco el mundo se puso muy gris y quedé inconsciente en sus brazos, genial otra vez...

Espero que les esteeeeeee gustandoooooo muchisisisisisiismooo, lo siento por no escribir hasta ahora, pero realmente estoy con los exámenes y agobiadisisisiisima, sigan leyendo porfavor!! besooooos muchisisisisimos besoos!!!

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