-Te adentraste en el bosque, es algo común entre los alumnos, pero normalmente vuelven, tuve que haberlo sabido  cuando Nate volvió solo - Dijo muy pensativo- Así que solo él sabrá que te pasó, por si te lo preguntas yo era amigo tuyo

-Y como se que lo que dices es verdad -le pregunte curiosa

-Tócame, te lo mostraré -dijo el con una sonrisa

Lo primero que vi fue un beso, por lo que me sorprendí, pero parece ser que le rechacé  y nos hicimos muy amigos, él me enseñó a luchar, y yo intenté buscarle una pareja pero fallé estrepitosamente... también vi muchas noches en las que yo estaba muy preocupada y iba al gimnasio con él, por eso me era tan familiar, así que cuando termine de ver los momentos que había estado con él le abracé y se lo agradecí, a continuación me fui, quería hablar con la directora y preguntarle, que porque no me había dicho que yo ya había estado allí antes. Pero antes tenía que hacer el viaje con Chad, para conocer a su familia, cosa que me aterrorizaba muchísimo ,pero aun así tenia que ir, ya que era una tradición de su familia, y si quería serle de ayuda, tenía que hacer esto por él, así que fui a su habitación, llamé a la puerta pero al no obtener respuesta entré  y lo encontré dormido profundamente me acerqué hasta sentarme a su lado, y le acaricié el pelo, estaba tan plácidamente dormido, reflexionando sobre mi relación con Chad desde que entré a esta escuela había cambiado mucho, y aunque no hacía mucho de esto,, ya lo consideraba mi amigo, y cuando le acaricié la cabeza esta vez brilló una luz muy tenue en mi mano y Chad aun dormido sonrió, podría haberle hecho llegar mis pensamientos y decidí dejarlo dormir, sería mejor hablar con el una vez se despertara, asi que salí del cuarto. Aunque no quería fui al entrenamiento con Nate, ya que si que me había sido de ayuda, además quería tocarlo y ver que relación tenía con él.

-Así que has venido - Dijo Nate con su prepotencia y chulería habituales

-Que no me estabas esperando acaso? - Dije yo medio enfadada - quisiera saber que tipo de don tienes -le dije yo, ya que no me había preocupado de eso hasta ahora

-Puso cara sombría ,y dijo- Yo no encajo en la clasificación, tengo poderes de lo más variados, pero ahora no es lo que más importa, tu estas bien? -dijo preocupado- Por lo de Deira, quiero decir la chica de antes

-No hice caso de su pregunta, y le dije- Porque no me contaste lo de mi muerte y que me conocías?- dije, me empezaba a entrar la angustia

-Me hubieses creído!? No hubiera sido muy violento?- dijo él agresivamente

-tienes razón, por eso te lo pregunto ahora, que me pasó?

-se quedó mirando un punto fijo en el suelo- Entramos en el bosque de este mundo - Y no dijo nada más

-Porque? como? Qu...

-Me interrumpió y dijo- creo que no es este el momento de hablar de ello

Y yo entre en cólera, el suelo empezó a temblar,

-¡crees que tienes el más mínimo derecho a esconderme mi vida!, lo que me pasó - Y entonces se me ocurrió que si lo tocaba podría descubrir lo que había pasado,  así que me lancé hacia él, me senté a horcajadas encima de él y le toque el brazo, y el flujo de imágenes empezó... DIOS MIO

El y yo charlando debajo de una árbol, el  y yo cogidos de la mano, el golpeando a alguien, había demasiados y estos recuerdos eran demasiado intensos, pero llegó un recuerdo de un hombre y una mujer, y me llamó la atención porque la mujer tenia los mismos ojos que yo, pero el hombre tenía una mirada muy oscura, casi daba miedo, entonces ellos se fueron y se adentraron en el bosque, y Nate cortó la conexión, me cogió de la cintura y se puso encima de mi

-Oye mirar recuerdos ajenos es de mala educación- Me dijo un poco enfadado

Yo me tape la cara, me había puesto a llorar por la intensidad de los recuerdos, yo le había querida tantísimo y lo peor era que podría estar volviendo a gustarme, no podía parar de llorar, era como si hubiese recuperado algo que no sabía que me faltaba, pero no quería que me viera llorando, porque era obio que el sabía lo que yo había visto

-No hagas eso, no llores sola, esto es mi culpa por no decírtelo antes - Dijo el muy apenado - Vamos, no llores más yo nunca dej...- y paró de hablar

-Me quité las manos de la cara y el me seco las lágrimas y me dio un abrazo -Ya estoy un poco mejor, pero tu nunca que?

-Mira no puedo más, no pude soportar perderte, y no lo voy a volver a hacer, y me encanta estar contigo fue todo culpa mía, maldita sea no puedo no quererte y cuando estoy contigo tengo la necesidad de abrazarte y tocarte, siento como si el vínculo que tuvimos no se ha cortado del todo, pero comprendo que necesitas tiempo para estar lista, ya que tu situación es bastante difícil, pero te voy a esperar lo que se necesario

En ese momento yo tuve un impulso, que vino desde el fondo de mi corazón me incorporé, le cogí la cara y le di un beso que al principio el se sorprendió, pero a mediada que yo subía el ritmo, el se iba adaptando cada vez mejor, hasta que mientras le pasaba las manos por la espalda toqué un trozo de su piel, y lo vi de nuevo aquel bebe en sus manos, y el llorando, entonces Nate paró el beso

-Oye para haber muerto y vuelto, sigues besando como una diosa - Pero creo que debes ver los recuerdos poco a poco o podrías no poder digerirlos bien- dijo sarcástico- tu muerte seguro que no es algo fácil de ver, mejor tómatelo con calma.

- Yo había tenido suficiente por hoy así que le dije - Bien, pero me has de mostrar más, porfavor prométemelo

-Bien, te lo prometo...

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Cuando me levanté por la mañana vi a Chad al borde de mi cama

-Nena, hoy es el día, preparada para conocer a mi famosa familia?- Dijo riendo

-Si me dejas coger unas cosas y arreglarme podemos salir hoy

-De acuerdo, me voy, y así dejaré que te cambies

bien, que podía ponerme para conocer a una de las más antiguas familias de este mundo, para el viaje había cogido cosas bastante formales, como vestido y pantalones largos con tacones, ya que Chad dijo que estaríamos una semana más o menos, también había cogido un pijama que mi madre me había puesto en la mochila cuando me fui, ya que los míos no estaban demasiado nuevos... por decirlo de alguna forma.

Había llego el momento de irse, pero quería despedirme de Nate, porque se me había olvidado decirle que me iba una semana, aunque ahora que lo pensaba tampoco le había dicho lo de Chad que yo era su... no se si eso tendría nombre, bueno, que yo estaba ayudándolo dándole mi sangre, así que lo busque por el lugar pero no lo vi, incluso me acerqué a la casita del conserje, el cual tenia una puerta que me llamó mucho la atención, tenía unas molduras alrededor del marco muy extrañas, pero vagamente familiares, así que como en un impulso la toqué y su abrió, entonces al primer pie que puse dentro alguien sujetó mi brazo

-oye, me parece que te gusta invadir lugares ajenos, no creo que debas entrar... - Dijo Nate

-Te estaba buscando, por cierto tengo algo que contarte - Le dije yo un poco nerviosa

-Me buscabas en la casa del conserje? - y se rio

-No, te buscaba para decirte que me marcho una semana

-Como vas a irte? porque? no creo que debas visitar más este mundo, no sin alguien que te proteja - Dijo Nate, y estaba empezando a alterarse - Además, por que razón te vas? y con quien?

-Tranquilo Nate, voy con Chad porque estaba a punto de morir y para ayudarle le di mi sangre- Dije poco a poco, ya que no sabía como se tomaría la noticia, pero ahora que lo pensaba, tampoco tenía ninguna obligación con él

-Nate se puso la mano en la frente, y pude ver un brillo dorado en su piel , y cuando se quitó la mano de la cara sus ojos habían cambiado a color amarillo y me estaba mirando entre enfadado y muy alterado y dijo - Tu no iras a ninguna parte, además no pensabas contármelo!? Como has podido!

-Y  eso a mi me pudo y le respondí- Al igual que tu me escondes importante información, yo tengo la obligación de contártelo todo, no me parece demasiado justo, no crees? Y voy a ir porque eso me parece ser una buena amiga, adiós

-Nate me cogió del brazo, y me dijo- No vayas porfavor, te lo pido

-Yo me solté- Voy a ir digas lo que digas - y me fui

A mi nadie me decía que debía hacer o dejar de hacer, y aunque odiaba discutir con Nate, necesitaba que él lo entendiese.