14.''El monstro que hay en mi''
Habían pasado 2 días desde aquella confesión de mí mama hice lo habitual y evite hablar con mi mama; en ese tercer día después de lo ocurrido apareció el detective Ramírez mientras desayunaba y dijo:
—Buenos días señor y señora Bocelli igualmente a ti Stephen... Ha sido encarcelada la señora Rosinery por el accidente.
Mi tío pregunto:
—¿Esa desgraciada confesó? ¿Dijo el porqué de lo que hizo?
—No, pero al realizar su casa encontramos un recibo del mismo auto lavado además de varias fotos de la señora Kenia Kante y una carta que decía:
"Querida Martha sé que no he sido el mejor esposo ni el mejor padre para nuestra hija pero siempre les he demostrado mi amor aunque esta carta no es para ello sino para confesarte textualmente que tengo un hijo y que me enamore de alguien más, es una hermosa nigeriana por la cual he viajado a Nigeria constantemente y a mi hijo cuando muera le dejare de herencia un millón de euros; por favor no sufras por mí ni esta traición ya lo nuestro estaba muerto aunque siempre te quise con cariño Franchesco"
—¿Y eso que tiene que ver con la investigación?
— ¡Federico! No entiendes eso puede ser una razón para querer que encarcelaran a la madre de Didier.
—¡No entiendo nada detective! Pero no necesito explicaciones tuyas Sidney.
—Señor Bocelli lo que quise decir fue que la señora Martha con esa noticia tendría suficientes razones para querer sacar del camino a los Kante por cuestiones de avaricia.
—A ok ahora si entiendo.
—¡Pues yo no! Porque esa señora me utilizaría como parte de su venganza a mí si yo no tengo que nada que ver con lo que paso entre ese tal Franchesco y Kenia.
— Para utilizar como escusa o mejor dicho razón lo que le paso a el chico en su rostro para inculpar a Kenia diciendo que era venganza.
—¿Y quién esa tal Martha detective? ¬¬
— La viuda del difunto empresario de apellido Botinelli.
Al escuchar este apellido recordé que era el mismo que tenía Franchesca y me esperance pues ella podría estar en Bellegra y mejor aún era hermana de Didier; deje de comer y me fui al colegio vi las clases previas al receso y me senté con Álvaro hablamos hasta el final del recreo, al llegar a casa mamá me abrió la puerta y me encerró con ella en mi habitación para decirme:
—Hijo has evitado todos estos días hablar conmigo y con tu tío ¿Qué pasa?
— ¡Que más quieres que pase! Escuche todo lo que hablaste con él y sé que Luigi no era mi papá y eso me creo desconfianza en ti, no sé qué mierdas querías de mi padre o mi tío no sé ya era de mí en realidad pero ya está muerto y no pienso que se haya auto envenenado sino que tú lo hiciste.
Al escuchar eso procedió a darme una bofetada y a decirme:
—Yo soy tu madre porque piensas eso de mí, además el maldito que hizo sufrir a Luigi fuiste tú; a veces siento que he tenido un psicópata de hijo toda mi vida.
—Con que moral hablas de mi si en estos 4 años no se preocuparon por llamarme o saber que me había pasado, ni siquiera te habías dado cuenta de que no muevo mi brazo derecho y así pretendes ser una buena madre... ¡Aquí los únicos locos fueron Luigi y tú!
Dije eso y me fui a la habitación con los libros, comencé a llorar porque quien se hacía llamar mi madre me había dicho que era un psicópata y peor aún un maldito; estuve allí leyendo hasta la 10pm cuando volví a mi cuarto para poder dormir.
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