V
La habitación era pequeña y sucia. No había muchas cosas adentro y los cuerpos de sus compañeros trataron de encajar en el reducido espacio, mientras se apretaron unos contra otros.
Solo había una cama y un televisor. Al parecer la mesita de al lado fungió como mesa de comedor si es que la persona que vivía ahí no comía su comida directamente en la cama. Eijiro Kirishima no parecía del todo inquieto ante el ambiente como otros. Jiro aún mantuvo esa mirada de recelo, mientras trataba de no ensuciar sus botas negras y apartaba a Momo cada que parecía estar a punto de tocar algo con el brazo desnudo.
Mineta en cambio miro abiertamente con desconcierto el lugar, de alguna forma ese tipo de actitud calmo el palpable ambiente tenso que se arremolino después de que Midoriya terminara de hablar.
Midoriya había revelado que era una persona peculiar. La simple idea fue extraña de concebir, como el hecho de que alguien pudiera pasar su peculiaridad a otro. Pero al parecer All Might lo había logrado. Le había dado su peculiaridad y eso de alguna forma lo había puesto en la mira de este personaje enigmático que parecía ser el hombre que movía los hilos detrás de escena; All For One, quien deseaba hacerse de su poder a toda costa. Lo cual les había ocasionado que todo terminara de esta forma, con 19 estudiantes y 1 adulto en una habitación sucia de un hotel de mala muerte.
—¿Es un tipo de broma no? —había soltado Sero con esa sonrisa perezosa que le caracterizaba, sin embargo su sonrisa rápidamente murió cuando miro la seriedad con la que lo miro Midoriya.
El silencio volvió a establecerse en medio de la habitación que a simple vista no fue construida para almacenar a tantas personas, de alguna forma todos habían terminado apretujados en el extremo derecho donde estaba la puerta. Sin embargo ninguno pareció querer marcharse, en su lugar sopesaron la información con calma, Eijiro había concluido eso ya que él también lo estaba haciendo.
Este tipo de cosas no podían simplemente tomarse a la ligera. Después de todo ¿Por eso se había marchado Midoriya, no?
Sus ojos se encontraron de vuelta al ruedo. Midoriya se encontraba frente a la cama en silencio, pudo observar como una mueca se perfiló en sus labios, mientras seguía mirando el piso.
Kirishima quiso animarlo, decirle que todo estaría bien, que saldrían bien de esto, porque eran la clase "A", eran héroes y eran fuertes, pero Kirishima no pudo hacerlo, no cuando la realidad lo había golpeado al igual que a sus compañeros. Kirishima no dudaba de su fuerza, ni la de sus compañeros, pero el nivel entre un héroe en entrenamiento y un héroe profesional era visible, durante el altercado solo pudieron hacer lo mínimo para ayudar y aun así no había bastado.
No era una cuestión de agallas, Kirishima se dio cuenta. Sino el hecho de que no quería perder a nadie más.
Eran héroes, la duda e incertidumbre no eran palabras que a un héroe se le permitiera sentir, pero ¿Cómo se aprendía a lidiar con la perdida y a hacer las paces con la muerte?
Kirishima no estaba asustado de morir, sacrificar la vida por algo en lo que creía fervientemente con todo su corazón creía que era una razón válida. Pero perder a alguno de sus amigos...
Sus ojos se desviaron a la derecha donde Bakugo se encontró aún al enfrente de Midoriya.
Bakugo había estado en coma por 4 días, y su vida había dependido de una máquina para mantenerlo con vida. Kirishima miro su habitación con preocupación cada vez que pasó por su pasillo cuando él mismo despertó.
La ansiedad junto con la preocupación se instaló en su cuerpo, Bakugo era su amigo, era algo difícil de entender pero no era un mal tipo.
Además esto no podía terminar así ¿Verdad? ¿Quién lo ayudaría a estudiar y quién entrenaría con él por las tardes?
Kirishima en ese entonces se había obligado a ser paciente. Y trato de poner su mente en algo más, el humor estaba por los suelos. Bakugo odiaría ese tipo de actitud.
"Si estás demasiado ocupado en estar triste entonces porque no usas esa misma energía para mover tu estúpido trasero y volverte más fuerte".
Él lo hubiera regañado de esa forma. Además ¿No se hubiera sentido subestimado con él por pensar que no saldría de está?
"¿Quién crees que soy? ¿Acaso crees que esto podrá detenerme?"
Sí, eso sonaba más como algo que Bakugo le diría, porque Bakugo era así, no era del tipo de detenerse, fuerza su cuerpo hasta el límite para conseguir resultados. No espera una victoria fácil. Es más, repudia cualquier tipo de trato fácil como una forma de subestimación.
Así que Kirishima se impregnó de esa fuerza, porque esto no era nada, Bakugo volvería, se pondría de pie y él estaría ahí junto a él y luego acabarían con los malos. Porque se supone que los héroes siempre ganan ¿No?
Sin embargo para cuándo Bakugo despertó este se había marchado. La noticia la había recibido la mañana siguiente después de que despertó. Kirishima se odio por no estar ahí presente. Pero al fin Todoroki se encontraba lo suficientemente estable como recibir visitas. Y era su amigo también. No tan cercano. Pero de alguna forma la clase "A" era una familia ¿No?
Además Todoroki necesitaba apoyo, después de ver los noticieros a Kirishima se le había hecho un nudo en el estómago. Al parecer Todoroki tenía un hermano que pensaban se había suicidado, sin embargo resultó ser uno de los integrantes de la Asociación de Liberación Paranormal: Dabi.
Imaginar lo que sintió Todoroki al enterarse que su hermano seguía vivo y que era un villano debió de haberlo dejado en shock. Aún más al enfrentarse contra él.
Así que quería brindarle apoyo aunque no supiera realmente que decir. Esa tarde había sido silenciosa en medio de sus otros compañeros, quienes solo pudieron ofrecer unas cuantas palabras de consuelo hasta que la familia de Todoroki llegó a la habitación.
Kirishima se preguntó qué hubiera pasado si hubiese revisado una vez más la habitación de Bakugo ese día, y si tal vez hubiera llegado a tiempo como para verlo al menos un momento antes de que sus padres se lo llevarán.
Pero había sido demasiado tarde. Su profesor había afirmado que Bakugo había solicitado su alta en el hospital. Eso género que Kirishima se pusiera nervioso. Bakugo solía sobrepasar sus límites a veces por las razones más tontas como el orgullo y no quería que se lastimara.
Su profesor pareció haber visto su preocupación y añadió: —Está bien, está con sus padres, ellos no permitirán que haga una locura, además, dale algo de crédito al chico, no es tan idiota como parece.
Kirishima se tranquilizó un poco con sus palabras. Sin embargo la inquietud no abandono su cuerpo. no hasta que lo vio de regreso sintió que todo el miedo e incertidumbre se había esfumado por completo, toda la clase "A" estaba de vuelta, o al menos eso creyó. Porque cuando saludo a Bakugo, este no respondió. En realidad no miro o hablo con nadie más
Kirishima cerró sus manos en forma de puño, había pasado dos semanas desde que no hablaba con él. Y no, el saludo cortes o el intercambio de palabras que solían suscitarse porque la situación lo ameritaba no era lo mismo.
Algo había pasado y no sabía qué.
—Bueno eso explica varias cosas —comento Yaoyorozu— Según la teoría de la evolución de quirks es muy probable que en un futuro la complejidad de las peculiaridades sea mucho mayor que la que hoy en día se ha logrado ver como registrar —su mirada permaneció fija en Midoriya, su voz fue modulada, mientras hablo— En un inicio se dijo que tu peculiaridad era un incremento de fuerza que te otorgaba maximizar ciertas acciones, por lo que saltar un edificio, mientras usabas tu peculiaridad logro darte la habilidad de saltar largas distancias, lo mismo ocurrió cuando corrías y lanzabas un golpe, sin embargo con el paso del tiempo la magnitud de tu peculiaridad avanzo a tal grado que la sospecha de una mutación en tus genes paso por mi cabeza —Yaoyorozu pareció apenada, sus cejas se contrajeron, mientras sus labios formaron una sonrisa débil en forma de disculpa— Sin embargo esta evaluación no parecía del todo correcta en base a mis conocimientos, después de todo un tipo de mutación de ese tipo sería un rasgo extraño de presentar, siendo que la existencia de una doble o triple peculiaridad es extraño de presenciar en base a los riesgos físicos —Yaoyorozu hizo una pausa, eh hizo un leve gesto de disculpa hacia Todoroki con la cabeza, el susurro de; "lo siento Todoroki-kun" floto dentro de la habitación, mientras el chico de doble quirk solo asintió.
—Yaoyorozu —llamo Kaminari, su rostro reflejo preocupación, Yaoyorozu pareció darse cuenta.
—Lamento si mi análisis parece algo intrusivo, sin embargo, con esta nueva información puedo estar un poco más aliviada Midoriya —confeso y el alivio pudo percibirse en cada una de sus palabras— Después de todo, que tu peculiaridad evolucionara demasiado rápido, sería un riesgo para ti como para los que están cerca de ti. Así que el hecho de que tu quirk te fuese dado de alguna forma alivio mi inquietud. Sin embargo, si es verdad lo que dices, que fuiste una persona peculiar, ¿Por qué All Might te eligió en primer lugar? No malinterpretes, creo fervientemente que All Might tuvo una buena razón, y has demostrado ser digno de tal poder, sin embargo, ¿No parece ser un poder que parece ser contraproducente para ti, aún más con al ser una persona peculiar? —sus ojos se detuvieron en las heridas visibles de sus brazos y manos— Como una persona con peculiaridad no puedo entender del todo como fue para ti que naciste sin una, sin embargo, lo que sí puedo entender es mi propio quirk y como se desenvuelve dentro de mi cuerpo— Bakugo la miro por el rabillo, Midoriya nivelo su mirada, estaba concentrado en ella, en cada una de sus palabras— Como sabes, mi peculiaridad me permite crear cualquier objeto siempre y sepa su procedimiento, para ello debo estudiar su composición y así recrearlos dentro de mi propio organismo con los lípidos que hay dentro de mí, sin embargo si bien la información de su procedimiento es importante, lo que confiere que el resultado sea el óptimo soy yo misma al crear los recursos que necesito para crearlos.
—Puedes sentir el proceso —musito Midoriya, Yaoyorozu asintió.
—Así es, mi peculiaridad no solo es un poder más que puedo usar a gusto, sino una parte de mí, así como siento mi brazo cuando lo muevo o lo uso para cargar un objeto puedo sentir mi peculiaridad creando el objeto deseado cuando lo activo, en otras palabras no es diferente a lo que siento con otra parte de cuerpo como una mano o un pie —Yaoyorozu se detuvo por un momento, pareció contemplativa— ¿No fue duro para ti? ¿Tener este nuevo "miembro" contigo?
—Sobre eso... —Midoriya titubeo, por supuesto que fue abrumadora la oleada de poder que broto de su cuerpo, muchas veces sintió que su cuerpo se rompería cada vez que lo usaba, sin embargo, no podía simplemente desistir, All Might confió plenamente en él.
—¿Y eso que importa ahora? —la voz de Bakugo atrajo la atención de todos, Jiro lo miro mal y soltó un audible; siempre tan grosero. Yaoyorozu se sonrojo, pareció cohibida por el comentario y esta se removió inquieta.
—Eso es verdad, lo lamento, es solo que si hay algo que pueda hacer me gustaría hacerlo, sin embargo debo reconocer que aún hay partes que no logro comprender del todo, por ello mi ayuda no sería practica ni beneficiosa.
—Sobre eso, Yaoyorozu —hablo All Might, parecía arrepentido— Es verdad que muchas de mis decisiones no contemplaron un panorama completo sobre la situación en si —Una sonrisa triste se perfilo en su rostro, y su mano se extendió por encima de su estómago— También es cierto que coloque al joven Midoriya en una situación peligrosa por decir lo menos, sin embargo mi juicio sobre él como mi sucesor no fue un error, aunque —hizo una pausa— Me hubiera gustado haber podido ayudarlo más, y no ponerlo en este tipo de aprietos.
—All Might —los parpados de Midoriya se abrieron al igual que su boca, una mano se extendió en su lugar, pareció preocupado por el ex héroe.
—Eso es estúpido —soltó Bakugo, una vez más todos los ojos se colocaron sobre él— No puedes simplemente pensar que puedes mantener a este idiota a salvo —dijo y Kirishima pudo escuchar el resoplido decepcionado de Sato— Es demasiado imbécil como para tener un poco de cerebro y pensar en algo más allá de ayudar a los demás, independientemente si le hubieras dado o no ese poder tuyo, él hubiera encontrado la forma de meterse en problemas por sí mismo.
Viniendo de cualquier otra persona, Kirishima pudo haberse molestado por el insulto, sin embargo era Bakugo quien lo estaba diciendo, y deseo con todo su corazón que la gente pudiera desentrañar el mensaje real debajo de las palabras toscas.
—Ka... —el viejo apodo quedo a medio terminar cuando una voz interrumpió a Midoriya de tajo.
—Joven Bakugo... —All Might dirigió una mirada hacia él, su expresión adolorida y llena de culpa fue reemplazada por el deje de asombro, Kirishima estuvo feliz de que el hombre pudiera leer entre las palabras ásperas.
—Parece que nada de lo que ha dicho Midoriya hasta ahora te ha afectado Bakugo —dijo Sero, la sonrisa permaneció en sus labios, aunque esta vez de forma tensa, más como un hábito arraigado para no aumentar la tensión, aunque el nerviosismo se reflejó en su mirada.
—Sí —la respuesta fue corta, pero concisa, como de costumbre Bakugo no escondió la verdad.
—¡Pero no es culpa de Kacchan, yo decidí decírselo! —el grito acalorado de Midoriya resonó en medio del silencio, este pareció acomplejado por las miradas que atrajo.
—All Might tampoco parece sorprendido sobre Bakugo. Así que puedo decir que él también sabia, ¿No? —comento Jiro.
—En realidad tiene sentido, después de todo, sus reuniones después de clases, eran algún tipo de reuniones secretas ¿No es así? —dijo Yaoyorozu.
—Yo... —la voz de All Might sonó rasposa ante el análisis correcto de Yaoyorozu.
—Me disculpo, entiendo si mis palabras sonaron como una acusación, después de todo queda claro que este tipo de información no podría ser revalida a cualquier persona, a menos que fuese una persona de confianza —Bakugo resoplo. Yaoyorozu observo el gesto como un visto bueno a que continuara, su vista se fijó directamente en Midoriya— Por ello me siento honrada por conocer tu secreto, y juro por mi honor como héroe que tu secreto no será revelado.
—Así que esa es tu conclusión —profirió Bakugo, Yaoyorozu asintió, ambos se miraron fijamente hasta que Bakugo aparto la mirada y miro a los demás— Bien, ahora saben la verdad ¿Qué es lo que harán? —la voz de Bakugo resonó en medio del silencio. Kirishima observo como Midoriya alzó la mirada en su dirección. Bakugo no regreso la mirada, en su lugar espero en silencio.
—Entonces... por eso lo llamaste Deku —Uraraka dio un paso hacia adelante, su mirada era firme, su entrecejo estaba fruncido, sus manos se habían vuelto puños en sus costados. Solo fue por un segundo, pero Kirishima lo notó la leve contracción en su semblante, al parecer no fue el único, porque Midoriya lo miro con horror.
—Deku también se puede leer cómo inútil —hablo está vez Tsuyu.
Kirishima miro a Bakugo, a simple vista no pareció haber ningún cambio en particular en él. Sin embargo él pudo notar los pequeños detalles.
Bakugo era más del tipo de hechos, las palabras no se le dieron bien aunque era muy inteligente. Lo que no podía explicar con palabras lo hacía con acciones, pero a veces eso no bastaba para la gente.
No obstante, pudo ver las pequeñas señales que él trato de trasmitir.
Por ejemplo, Bakugo no era del tipo que invitaría a otra persona a su habitación. Pero a veces después de varias horas de entrenamiento y mientras volvían a sus habitaciones, notaría como Bakugo dejaría la puerta entreabierta.
Al inicio no lo entendió. Y la revelación de los hechos había llegado mucho más tarde cuando se dio cuenta de su significado.
Había sido una tarde de junio. Los dos estaban regresando a su respectivo piso y de alguna forma había logrado captar su atención como para mantener una conversación desde que habían salido del gimnasio Gama hasta llegar a los dormitorios.
El tema de las pasantías había cobrado una vez más relevancia entre sus compañeros. Kirishima había soltado el tema de la nada y Bakugo pareció interesado, tanto como le era posible como para preguntarle si tenía algún plan en mente.
La conversación transcurrió de forma elocuente y cuando terminaron de hablar, Kirishima se había dado cuenta que estaba saliendo de la habitación de Bakugo.
Cómo si hubiese sido la cosa más natural del mundo había entrado, él tampoco pareció molesto por este tipo de desplante. Kirishima se quedó estático en su lugar recapitulando los hechos. Solo había actuado sin pensar, en base a como la situación había fluido. Sin querer sus labios se alzaron en una sonrisa de todos dientes, mientras volvía a su propio dormitorio, después de todo supuso que, de alguna forma se estaba acercando a Bakugo y eso le hizo muy feliz. Ya que, ¿Ese tipo de cosas hacen los amigos, no?
Conocer más del otro.
La información para suerte de Kirishima transito con mayor versatilidad los días posteriores.
O tal vez la información siempre estuvo ahí y solo hasta que pudo tomarse el tiempo la notó realmente.
Kirishima apretó sus manos, los cuales se habían vuelto firmes puños, no quería que su peculiaridad se saliera de control por su estado emocional. De alguna forma todo lo que había aprendido durante el largo de su convivencia con Bakugo hacía eco en ese instante.
La puerta entreabierta era una invitación para entrar.
Bakugo no era del tipo de dejar las cosas a medias, si no quería tu compañía lo haría saber. Irónicamente si la quisiera, él no sabría cómo verbalizarlo en palabras.
Pero eso estaba bien, eran pequeños detalles a pulir. Y Kirishima también había notado los cambios.
Bakugo Katsuki se había dado a conocer con naturalidad desde un principio. No de una buena forma, pero lo había hecho. Era llamativo y todo lo que hacía de alguna manera genero la atención de la gente fuera buena o mala.
Su carácter fuerte y forma de hablar abrasiva y arrogante dejaron una imagen demasiado marcada en su persona como un personaje volátil y violento, y sumando el hecho de que Bakugo solía generar explosiones de sus manos en el más mínimo disgusto lo que ocasiono puntos negativos a su persona.
Pero, de alguna forma dichos aspectos se habían suavizado.
Verbalizar su disgusto paso de palabras duras y ásperas a indiferencia a menos que fuese un tema de su índole o se pidiera su opinión.
En retrospectiva, Kirishima debió de haberse dado cuenta sobre que, Bakugo no era del tipo afín a relacionarse a las personas.
Él rehuía de las reuniones que no tuvieran algún aspecto académico o reglamentario, algo que pudo esperar de Iida, y no de un personaje como Bakugo que muchos declararon como egocéntrico.
Bakugo nunca pediría unirse a los demás, sin embargo, eso no significaba que no le interesara hacerlo, así que permaneció en el fondo hasta que de alguna forma alguien lo integraba.
Una vez más, extraño, demasiado extraño como para alguien que gritaba a los cuatro vientos que sería el mejor de todos.
Por otro lado, el porcentaje de explosiones se habían reducido un 40%, muchos no lo notaron porque el cambio fue demasiado paulatino, pero eso no significa a qué no fuese real.
Kirishima notó como Bakugo empezó a llevar sus manos dentro de los bolsillos, demostrando así su moderación, el hecho de que se estaba conteniendo, a veces por supuesto funcionaba. Demostrando así que no era la mecha corta que todos creían que era, pero otras veces no pudo hacerlo con esa misma efectividad y una vez más explosiones y gritos se escucharon por los pasillos, salones de clases, dormitorios y hasta cafetería.
Bien, aunque a veces Kirishima debió de darle la razón por hacerlo, después de todo por alguna razón Bakugo atraía el veneno hacia él.
Un ejemplo de ello fue su relación con Monoma Neito, el chico de la clase "B" tenía un problema con la suya, en especial solía buscar cabrear a Bakugo solo por diversión. Kirishima sabía que algunas de las cosas que Monoma decía no eran excusa para la reacción precipitada con la que Bakugo respondía. Pero aun así la mala sangre que corría en su interacción era algo que le empezó a preocupar como para preguntarle a Tetsutetsu sobre si, Monoma tenía algún problema personal con él.
—Monoma cree que tiene que defender el honor de la clase "B" —suspiro resignado— Como sabes aunque estamos en el mismo curso, la diferencia de experiencias es demasiado obvia entre ambas clases, supongo que trata de levantar la moral, transmitiendo a su forma el mensaje sobre que, no hay diferencia alguna entre ambas clases, y claro que, es algo ¿Lindo? De su parte, pero a veces es innecesario a comparación con los problemas que se consigue a si mismo cuando hace ese tipo de cosas, es decir, somos del mismo curso de héroes, ¿Por qué deberíamos pelear entre nosotros cuando no sería mejor patear los traseros de los villanos allá afuera? —Kirishima asintió sabiamente mientras lo escucho, como si Tetsutetsu hubiera dicho la mayor verdad del mundo. Aun así sus labios se movieron al igual que sus manos con inquietud.
—Bueno, creo entender el punto, peroooo —alargo la o, mientras reformulaba una vez más sus palabras— Quiero decir, entiendo lo que dices, pero porque siempre va ya sabes...
—¿Con Bakugo? —rio Tetsutetsu, la tensión en los hombros de Kirishima se desvaneció, su amigo no pareció molesto por la pregunta— Supongo que, porque es ¿Bakugo? —dijo y algo en el tono hizo que el estómago de Kirishima se revolviera— Solo míralo, hombre, ya sabes cómo es el tipo, y Monoma puede ser un cretino, pero solo cuando la situación o la persona lo merece y además hablamos de Bakugo ¿Lo entiendes?
Kirishima se removió incómodo en su lugar, se sintió como en esa ocasión en el restaurante, en ese entonces los habían echado de la biblioteca por ruidosos y ambos tuvieron que cambiar su lugar de estudios, sin embargo las cosas no mejoraron ahí tampoco. En el restaurante se habían topado con viejos conocidos de Bakugo y algunas de las cosas que habían dicho de él como su pasado con Midoriya habían sido incómodas por decir lo menos.
—Bueno, sí, él suele llamar demasiado la atención alzando la voz pero...
—Yo no lo llamaría alzar la voz a sus gritos, pero lo entiendo hermano —le palmeo la espalda, Kirishima suspiro. En otra ocasión el respaldo de su Bro hubiera sido conmovedor, pero esta vez no lo fue, se sintió menospreciado ante su condescendencia.
—Bien, entiendo tu punto, no a todos les puede gustar Bakugo, pero parece que quiere intentar cambiar, en realidad, ¿No sé si lo has notado, pero ya no reacciona tan rápido cuando Monoma viene a incitarlo? Cómo sea, él está intentado ser mejor persona, y como prospectos a héroes ¿No deberías ayudarlo? Así que podrías ya sabes...
Tetsutetsu sonrió, un nuevo par de palmadas se estacionaron en sus hombros, mientras se enganchaba en un abrazo incómodo por el tipo de ángulo en el cual se encontraban los dos sentados.
—Entiendo, mantendré un ojo en Monoma, hermano.
Eso de alguna forma no reconforto a Kirishima ya que Tetsutetsu en realidad no lo entendió, él tampoco quería sonar hipócrita al respecto porque en el pasado él también había pensado de la misma manera que los demás sobre Bakugo. Y es que a simple vista Bakugo desprendía una confianza sin igual que irritaba a las personas aún más cuando tenían que darle la razón.
Sin embargo con el paso del tiempo Kirishima se dio cuenta que la plena confianza en sus habilidades físicas solo fueron en base a su trabajo duro.
Sus palabras hablaron en base a la experiencia, de ahí el origen de su sobrehumana confianza hacia sí mismo, nadie podía estar inconforme sobre su ética de trabajo, donde sobresalió más su verdadera naturaleza analizadora y proactiva.
Para sorpresa de muchos que Bakugo confiara en sí mismo no significaba que confiara en los demás, Bakugo mantenía su distancia de las personas de forma férrea, como si temiera dejar entrar a alguien. Las relaciones superficiales parecían racionales;
Hablar con un compañero de clase porque está en su equipo de trabajo, estaba bien.
Hablar con los profesores sobre lo académico, estaba bien.
Hablar con los héroes sobre los aspectos profesionales del trabajo, estaba bien.
Todos estos puntos eran recursos que solo lo catapultarían a su meta. Lo demás era innecesario.
A simple vista, Bakugo parecería alguien frívolo, sin corazón. Sin embargo, a veces observo a Bakugo en el fondo, con su vista en el libro, pero su atención distribuida en los demás, como si esperara algo, o a alguien.
Así que, Bakugo podía tener plena confianza en sí mismo, pero en los demás no, no en que alguien realmente quisiera pasar el tiempo con él y lo que había dicho hace días había sido revelador.
«¡No eran mis amigos, y lo sabes, solo eran una bola de lame botas, que seguirían a cualquier imbécil que sea más fuerte que ellos!»
Bakugo nunca sugirió momentos para pasar el rato, pero cuando alguien lo incluyo nunca los tomó a la ligera.
Era ese tipo de persona demasiado seria en todo lo que hacía y aun así...
—¿Y qué? —la voz de Bakugo atrajo la mente de Kirishima de regreso, el miedo se instaló en él, Bakugo era difícil de comprender, demasiado áspero y franco, demasiado inútil al querer verbalizar lo que realmente quería decir. Demasiado inepto.
Kirishima miro su rostro, su cuerpo permaneció recto y su rostro ilegible, pero sus manos siguieron dentro de sus bolsillos, y hubo un destello en su mirada que le recordó a Kirishima cuando Bakugo esperaba el golpe de regreso en sus entrenamientos.
Bakugo estaba esperando el siguiente golpe.
Así como en ese momento, en el restaurante.
En ese entonces Bakugo había escuchado parte de su conversación hasta que simplemente explotó y luego él había sido el del problema, aunque los otros chicos habían empezado a hablar de él.
Kirishima sabía que había algo turbio en el pasado de Midoriya y él, de alguna forma se dio una idea de ello cuando recordó las palabras de esos chicos en el restaurante con el paso del tiempo.
—No diríamos que éramos amigos de Midoriya.
—En realidad, no solíamos llevarnos bien, pero ¿Quién hubiera imaginado que Midoriya hubiera tenido un quirk tan poderoso?
—Sí, él es genial, yo supongo que lamento lo que paso hace tiempo...
Kirishima registro la disculpa, aunque, no pareció del todo ser una. No tenía que ser un genio para atar los cabos. La influencia de los quirk era demasiado dentro de los medios, y lo que alguna vez la gente observo como algo raro y monstruoso, ahora se vislumbraba como una cualidad que hacía a una persona mejor que otra dependiendo su peculiaridad.
La gente peculiar era rara, por decir lo menos, al igual que la gente que había adquirido una mutación demasiado obvia, la agresión y por supuesto la marginación eran temas que aún se vivían hoy en día.
Kirishima fue alguien que pudo constatarlo en carne propia, pero en ese entonces no pudo haber hecho nada. Era cobarde y enclenque, alguien de quien se sentía avergonzado.
Aun así...
«¡Oigan, ustedes, déjenlo en paz!»
La voz de Ashido resonó con fuerza en su mente.
A pesar de la propaganda sobre la igualdad y la unión, en sus años de escuela media pudo ver de primera mano el acoso hacia uno de sus compañeros, él sabía que estaba mal, demasiado mal, pero estaba asustado y eran más que él, pero Ashido Mina, su compañera de clases había decidido hacer algo, a pesar de los riesgos.
El simple acto, desató un revolucionario deseo en él y por eso Kirishima había trabajado muy duro para ser una mejor versión de sí mismo. Una de la que se sintiera orgulloso de ser.
Porque, después de todo, la gente podía cambiar, porque él lo había hecho, al igual que todos los demás, como Bakugo también lo hizo y estaba haciendo, así que, debía de hacer algo, algo antes de que todo empezara a irse cuesta abajo.
—¿Y qué? Después de haberle apodado inútil, preguntas; ¿Y qué? —la voz de Hagakure se sumó.
—¿Y?
—¡Eres un bruto, y desalmado! —grito Hagakure furiosa, Bakugo ni se inmutó— ¡Al menos demuestra algo de arrepentimiento o algo!
—¿Y por qué debería hacerlo? —gesticulo Bakugo con la mayor calma del mundo, como si no tuviera frente a él 20 pares de ojos fijos.
—Ka-Bakugo, eso está mal —Kaminari hablo y Kirishima se odio tanto cuando notó como por un segundo algo en la reacción de Bakugo se quebró cuando Kaminari cambio el "Kacchan" por su nombre.
—Eso no cambia el hecho de que lo hice —respondió con frialdad. Kirishima sintió una mirada pesada sobre él, notó a Shoji mirándolo fijamente y luego ladeó la cabeza, Kirishima giro su rostro en la dirección que señaló para ver a Todoroki, quien se había quedado en silencio, mirando la escena con intensidad. Kirishima asintió. Esto podría salirse de control.
—Oigan, chicos nos estamos desviando del punto, ¿Que no vinimos a traer de vuelta a Midoriya? —profirió y notó que algunas de las expresiones de sus compañeros cambiaron al instante, Ochako pareció en conflicto.
—Eso es verdad —se unió Jiro tímidamente, observando la confrontación que podría ocurrir si esto avanzaba.
Bakugo chasqueo la lengua y dirigió su atención una vez más a Midoriya, quien se encontró en silencio, su mirada estaba fija en el piso. Su flequillo ocultó su rostro. Kirishima notó el leve temblor en su cuerpo, en el silencio estridente pudo escuchar un susurro estrambótico, aunque no pudo percibir sus palabras. Kirishima le dio una mirada a Jiro quién hizo una expresión estrangulada y llena de inquietud. Kirishima quiso preguntar, sin embargo no se atrevió a hacerlo.
—Deku —llamo Bakugo y Kirishima notó la extraña reacción en su grupo cuando el nombre salió de sus labios, Kirishima hizo una mueca antes de que sus ojos se abrieran un poco ante la sorpresa, Midoriya había dejado de temblar— Deja esa mierda —no fue un grito ni mucho menos una demanda, su tono de voz fue modulado, casi, podría jurar que estaba tratando de calmar a Midoriya y lo había ¿Logrado?
—¡Hey, Bakugo! ¡¿Crees que esa es la forma de hablarle?! —demando Mineta tomando algo de valor y dando un paso hacia el frente, mientras lo apuntaba con el dedo, Bakugo lo miro por encima del hombro, una aterciopelada ceja se alzó sin mucho interés en su dirección, Mineta tembló, pero no titubeó— ¡S-Se supone que quieres ser un héroe! ¡Pero lo que estás haciendo no es nada heroico, aún menos en base a tus antecedentes! —Bakugo entrecerró los ojos, Mineta retrocedió— Llamarlo así, tu más que nada... —se marchito, mientras balbuceo esto último ante su intensa mirada.
—Es su nombre de héroe —dijo tajantemente.
Mineta paso saliva —Bien, puede que sea verdad, pero ¿Acaso no era un sobrenombre que usabas para molestarlo? Así que en base a ello no se siente bien que tú lo uses ya sabes...
Kirishima miro la escena, paso de Mineta a Bakugo tratando de leer el siguiente movimiento entre ambos, solo para notar como su brazo izquierdo se flexiono.
—Entonces, según tú ¿Cómo debería llamarlo?
Bakugo no aparto la mirada de Mineta, quien retrocedió aún más, su cuerpo choco contra la pierna de Sato. Y Sato colocó una mano en su hombro para que recobrará algo de equilibrio.
—Bakugo —empezó Sero y está vez no hubo su típica sonrisa perezosa, ni mucho menos un "amigo" al inicio de su oración, Bakugo también lo notó, un pequeño temblor se estacionó en sus hombros generando que se tensaran, Kirishima odio la situación— Nadie busca pelea, no contigo, no en este momento en el que estamos tratando de hacer que vuelva Midoriya, así que, por favor no...
Bakugo rio, de forma fea, y lastimera, interrumpiendo a Sero, su carcajada rebotó por toda la habitación e hizo que la tensión aumentará en el grupo.
—Es algo rico viniendo de ti cuando eres el primero en querer insinuar mierda de mi —los ojos de Sero de agrandaron, una vez más Bakugo había ido directo a la diana del asunto, no era tan difícil saber lo que estaba a punto de decir Sero en su oración, Bakugo no lo dijo, y Sero guardo silencio, mientras desvío la mirada.
—Vamos, chicos, ¿Por qué no nos calmamos? —llamo All Might, sin mucho éxito.
—Ser amable no te matara —interrumpió Ojiro.
—Este sujeto de aquí no necesita la lástima de nadie —señalo a Midoriya con un ligero cabeceó, eso pareció dejar opiniones divididas en el rostro de sus compañeros y Kirishima pensó que una vez más había pasado la tormenta, pero Bakugo añadió— Después de todo se cree mejor que nosotros.
La mirada de Midoriya se disparó hacia Bakugo, la sorpresa se extendió por todo su rostro, mientras sus ojos temblaron, Bakugo sonrió socarronamente, había atraído la atención de Midoriya, pero también la de los demás y a diferencia de Midoriya, Kirishima sintió un sentimiento hostil provenir de los demás. Pero a Bakugo pareció importarle poco.
Ser malinterpretado, señalado, acusado y enjuiciado. Ser el del problema como si su sola existencia lo fuera. Bakugo no estaba lidiando con argumentos que la gente no iba a escuchar. Así que simplemente permitió que la gente creyera lo que quisiera creer.
—¡Actúas como si odiaras a Midoriya, a pesar de que estás aquí, por la misma razón que todos nosotros! ¿Qué crees que lograrás? —regaño Ashido.
Los ojos de Kirishima temblaron, la afirmación fue simple, en base a la imagen superficial que reflejaron los dos a simple vista, sin embargo la relación de Midoriya y Bakugo no podía simplemente encasillarse en una palabra, había tantas emociones ahí mezcladas entre sí que habían perdido su forma para fusionarse en algo que tal vez no tenía un nombre, y no lo tendría por un tiempo, pero no por ello no era algo verdadero.
—¿Y si en realidad lo odio? —eso pareció marear a Ashido, Bakugo ni se inmutó y prosiguió— Mis sentimientos personales no tienen nada que ver en mi trabajo —entrecerró los ojos, y desafío a Ashido con la mirada, ella se recompuso y nivelo la suya, con la espalda recta, su entrecejo se frunció. No parecía intimidada.
Kirishima observo el intercambio, estás dos personas que se encontraban evaluándose uno al otro eran figuras que respetaba, después de todo Mina Ashido había encendido una chispa en él como para convertirse en lo que hoy era, y Bakugo era quien mantenía esa llama ardiendo con fuerza.
Ninguno desistiría, no sin pelear antes. Kirishima se movió hacia adelante, solo para que su voz fuese opacada por la de alguien más.
—Pero tú no lo odias —la voz plana y pragmática de Todoroki cortó la tensión de un tajo, Bakugo dirigió una mirada molesta en su dirección las venas enmarcaron sus muñecas, Todoroki siempre tuvo ese efecto en él, el hecho de sacarlo de quicio fácilmente.
—Tu, no hables mierda que no sabes —sus palabras salieron entrecortadas, mientras sus dientes chocaron entre sí, su entrecejo se frunció más. Kirishima se preparó para la confrontación si está llegaba al tipo físico.
—Pero no lo odias, Bakugo —Todoroki dio un paso al frente, su tono de voz fue pausado y calmado, no parecía molesto, sino más bien concentrado en estudiar las reacciones de la persona que tenía frente a él en ese instante como si quisiera determinar algo— Empujas a Midoriya hasta los extremos, menosprecias sus palabras y su propia persona, te disgusta estar cerca de él, y te exasperas cuando los dos tienen que trabajar juntos, pero aun así dejas tus problemas personales a un lado para sacar la situación adelante y lo respaldarías a pesar de sus diferencias sin importar que.
—Por supuesto que lo hago, seré un héroe, mi opinión personal sobre alguien no debe afectar mi desempeño —resoplo.
—Pero eso no es todo ¿Verdad? —Todoroki dio un paso más hacia adelante, Bakugo entrecerró los ojos, Shoji se movió también, pero Kirishima negó con la cabeza, algo dentro de él le insto en creer en Todoroki, la mirada que puso cuando Bakugo abandono la sala de High Alliance era de arrepentimiento, Todoroki no estaba tratando de buscar pelea, sino de entender. Entender de la única forma que sabía hacerlo al preguntar de forma directa, conectando así la información recolectada.
—Es verdad que un héroe tiene la obligación de salvaguardar el bienestar de la gente, sin embargo no siempre la ética y los principios de las personas se alinean entre sí, los deseos de una persona pueden estar en contra de las normas éticas, de la misma forma que la ética puede estar en contra de los principios y deseos de las personas, decir que un héroe está por sobre una persona normal ¿No es alejarlo de su propia humanidad al colocarlo en un estatus sobre las normas establecidas de la sociedad? Los héroes no están por encima de las reglas, no son dioses omnipotentes ni omnipresentes, al igual que cualquier civil cometen errores y sus ideales pueden ir en contra del bienestar de otros, entonces ¿Por qué atañes el hecho de que elegiste venir por Midoriya solo porque un héroe haría eso? —hizo una pausa, sus ojos miraron fijamente a Bakugo, el silencio se asentó entre ambos, mientras se sopesaron sus palabras, era verdad que no todos los héroes actuaban de forma heroica, aunque la imagen de este simple y llano pensamiento era incomprensible para una sociedad que estaba demasiada enamorada con la idea de que el mundo se dividía entre dos colores: blanco y negro; lo bueno y lo malo. Los villanos eran los malos y los héroes los buenos. Cualquier persona que rompiera las leyes era mala, por lo tanto peligrosa, así que debía de ser contenida, pero aun así, en un mundo de héroes había casos, casos que salieron a flote mostrando la realidad, que había una línea gris más grande de lo que se pudo imaginar donde lo bueno y lo malo era más complicado de diferenciar, Enji Todoroki, alias Endeavor, era un héroe respetado, que había salvado a mucha gente, un héroe que fue modelo a seguir de muchos niños que hoy en día también se habían convertido en héroes por él y solo por él, pero a puertas cerradas se había vuelto un monstruo con su familia ante el objetivo de obtener los genes perfectos para su descendencia. Kirishima sabía que no podía creer todo lo que decían los noticieros, algunos habían exaltado algunas partes, sin embargo el silencio de su familia al no querer estar en medio del ojo del huracán, siendo que los medios de comunicación exigían una entrevista, más que ayudar a la imagen del héroe solo hizo crecer las sospechas, y que el propio Endeavor declarará que en efecto todo lo que su hijo Touya dijo había sido cierto añadió una nueva visión a las personas sobre a quienes depositaban su confianza. Porque en efecto, ser un héroe no te convertía en una buena persona— Ser un héroe no te exime de tener arrebatos, de sentir angustia, celos y miedo —prosiguió Todoroki como si no hubiera notado el atisbo de desprecio en Bakugo, mientras avanzaba hacia él— Este tipo de emociones es normal, porque después de todo somos humanos, sin embargo el hecho de que hayas decidido venir aquí no es por tu deber como héroe, sino por ti mismo, decir que solo fue por eso es menospreciar la razón real.
—No hay ninguna razón, Todoroki —sus dientes chirriaron— Que tú vida haya sido una mierda no significa que debas analizar a otros bajo el espectro de tu pasado trágico.
Todoroki frunció el entrecejo. Pero se mantuvo en calma.
—Y menospreciar tus intenciones no es algo que hubiera esperado de alguien que se enorgullece por cada cosa que hace, Bakugo.
—No hay nada más allá de lo que supones ver.
—Pero aun así, decidiste interponerte en el ataque de Shigaraki —Uraraka se unió, su voz fue firme, al igual que su postura, sus manos vueltas puños seguían apretados en sus costados.
—Uraraka... —musito Midoriya, ella le dio una única mirada antes de volver a Bakugo.
—¡Dices odiarlo, pero decidiste dar tu vida por él! ¡Si eso es odio, entonces eh vivido engañada toda mi vida, porque eso que hiciste, sea un héroe o un civil, no lo haría cualquiera! —Uraraka grito con amargura— ¡Somos héroes, pero no quita el hecho de que seamos humanos, que seamos egoístas, tengamos deseos y sentimientos desastrosos en nosotros mismos! Hacer lo correcto no es cosa de nuestra posición, sino una elección y tú Bakugo ¡Elegiste salvar a Midoriya porque esa fue tu elección! ¡Así que no te atrevas a decir que lo odias, cuando una persona normal no salvaría a alguien que odia solo por deber! —sus ojos lo miraron con enojo, de las comisuras de estos, pequeñas lágrimas escaparon, Uraraka cerró los ojos con fuerza por un segundo y prosiguió aún firme— ¡Lo que fueron! —regreso la mirada hacia Midoriya quien la observo con los ojos abiertos, ella casi sonrió con cariño antes de mirar a Bakugo una vez más— ¡Lo que serán en un futuro! ¡Nadie puede determinarlo, sin embargo las personas que son en este preciso momento, puedo decirlo fácilmente, y eso es que ambos son unos completos idiotas! ¡Menospreciando a los demás y a ustedes mismos, como si no pudiéramos entender nada o hacer algo al respecto! ¡Somos héroes, al igual que ustedes, sabemos defendernos a nosotros mismos, no necesitan protegernos y si quieren pelea patearemos sus traseros sin dudarlo, porque más allá del deber, es lo que deseamos cada uno de nosotros! ¡Llámanos egoístas, tercos o idiotas, pero eso no hará que desistamos! ¡Así que... —se concentró una vez más en Midoriya— Bakugo no es el único que vino por ti Midoriya, aunque tal vez sea el único que pueda traerte de vuelta!
—Uraraka... —Midoriya paso saliva, desvío la mirada, no parecía poder verla a los ojos o algo se quebraría— Y-Yo... No puedo quedarme —hablo al fin.
—Oh ¿Es así? ¿Por qué? ¿Por qué debes irte? ¿Por qué es tu culpa todo lo que pasó? —demando Uraraka, con enojo.
—Sí, Deku ¿Por qué es tu culpa? —se unió Bakugo, inflexible y sin atisbo alguno de darle una oportunidad de escapar a la pregunta.
Midoriya se giró ante el tono, su entrecejo se frunció, sus ojos miraron directamente hacia los de Bakugo. Este no se inmutó.
—Sabes bien porqué —No grito, pero sus palabras salieron apretadas cuando sus dientes chocaron entre sí.
—¿No crees que te estás dando demasiado crédito? —le interrumpió— Tratarnos como malditos extras como si esto se tratar solo de ti.
—¿Y no lo es? ¿No es All For One quien me quiere a mí?
—Y Shigaraki quiso que me uniera e su banda de pendejos, pero eso no los detuvo ¿O sí?
—Esto es diferente.
—¿Por qué? ¿Por qué si los descubrían solo los expulsarían de U.A.? ¿O por qué si la policía se hubiera enterado de su participación al usar su peculiaridad y las cosas hubieran salido mal solo hubieran sido arrestados o en el peor de los casos enjuiciados por presunta complicidad al usar sus quirk en medio de un conflicto donde murieron inocentes? ¿Y si perdían sus vidas? Siempre hay riesgos, Deku, esto es algo que debemos tener presente y vivir con ello.
—¡No cuando los riesgos son tan grandes! —Bakugo alzó una ceja— ¡Estuviste en coma por 4 días! ¡Por mi culpa casi mueres! ¡¿Por qué?! ¿¡Por qué lo hiciste!? ¡¿Acaso sabes lo que sentí cuando mire tu cuerpo caer?! ¿¡Acaso sabes lo que significas para mí!?
—No hay una razón realmente —lo corto al instante Bakugo, lo notó al instante Kirishima— Hice lo que tenía que hacer. Solo eso.
—¡Yo también, solo estoy haciendo lo que debo hacer! —gruño Midoriya.
—¿Entregarte en bandeja de plata a ese sujeto? Si es alguno de tus estúpidos planes, vaya plan.
—¡No es estúpido, Kacchan!
—Lo es, cuando ni siquiera puedes mantenerte firme en tus propios principios.
—¿Kacchan?
—Dijiste que serías un héroe como All Might, uno que protegería las sonrisas de las personas.
—¿Tu, aún lo recuerdas? —jadeo Midoriya con asombro.
—Lo repetías día y noche, todos los días, ¿Cómo no recordaría semejante mierda? Pero al menos ese chico debilucho con sueños más grandes que su propio tamaño pudo mantener sus palabras mejor que tú en ese entonces.
—¿Qué quieres decir?
Bakugo resoplo.
—Dijiste que protegería la sonrisa de las personas, pero ¿Dónde está tu sonrisa? —los ojos de Midoriya se abrieron ante la revelación— No pareces feliz.
—E-eso no importa, esto es más importante que yo. Que...
—Un héroe se sacrifica por los demás, pero —interrumpió Bakugo sin molestarse— ¿A este paso cuánto podrá durar con cada sacrificio que está dispuesto a dar? Estás haciendo lo mismo que en tu pelea con Shigaraki, no pensaste con detenimiento en la situación, pensaste que con solo tu voluntad y poder harías la diferencia, y no tomaste en cuenta que no solo estabas peleando contra la voluntad de Shigaraki sino contra la voluntad de All For One. Un hombre que ha logrado salir vencedor durante años por sobre cualquier otro portador, dime Deku ¿Que te hace creer que eres mejor que los portadores anteriores? ¿Tu voluntad? ¿El hecho de dominar los secretos de One For All? Pero dejando de lado el poder inigualable que se te ha dado, tu cuerpo es solo el de una persona normal ¿Cuánto crees que dure a este punto? No estás luchando contra una persona, sino contra la voluntad de cientos de miles de personas que cayeron ante la influencia de All For One. Irte ahora y luchar tu solo no cambiará nada, no cambiará el hecho de que All For One es una rata escurridiza que usará cualquier artimaña, ni mucho menos el hecho de que iremos tras tu desastroso trasero.
—No quiero que nadie sufra o muera por mi culpa —ambos compartieron una mirada, y guardaron silencio por un segundo. Bakugo sonrió de forma descarada. Alzando los labios, mostrando los colmillos.
—¿Acaso no escuchaste una mierda de hace un momento? Ninguno de estos tipos dejaran pasar una mierda, además esa no es tu decisión, elegir que queremos hacer ¿Verdad?
—Kacchan, no voy a huir, ya lo he decidido, yo pelearé —la mirada de Midoriya se encontró con la de Bakugo, el fuego de la determinación iluminó sus iris color verde, Bakugo resoplo.
—Sé que no lo harás, ¿Hace diez años te propusiste ser un héroe y lo lograste, no? Cuando te propones algo no importa lo que tengas que sacrificar lo cumples, es algo con lo que he tenido que vivir por mucho tiempo, imbécil —Midoriya pareció sorprendido por sus palabras— Además, ¿Quien dijo que quiero que te escondas con el rabo entre las patas, como un maldito cobarde? —Bakugo extendió su mano— Lo que estoy pidiendo es que luches con nosotros —Midoriya pareció querer decir algo, pero Bakugo prosiguió— Si ambos tenemos el mismo objetivo, ¿Por qué no pelear codo a codo, Izuku? —tal vez fue el uso del nombre o como lo dijo, pero en ese simple intercambio de palabras pareció haber algo más, algo íntimo sobre las palabras ásperas y lanzadas como si fuese una conversación más. Sin embargo Midoriya Izuku pareció entender el secreto oculto, mientras miro a Bakugo en silencio, con ojos brillantes, ante las lágrimas que estaban a punto de desbordarse, su cuerpo tembló y una mueca se formó en sus labios antes de formar una sonrisa temblorosa y romper en llanto. Midoriya avanzo, su brazo se extendió de forma trémula antes de que Bakugo la tomara con fuerza y sus miradas conectarán otra vez. Solo entonces Midoriya rompió en llanto y a pesar de estar llorando en medio de la habitación, sonrió, de una forma que nadie creyó volvería a ver después de la tragedia que los había alcanzado.
Kirishima miro la escena con una sonrisa, sus ojos se desviaron a su izquierda comprobando la expresión de sus compañeros. Al parecer no había sido el único que había contenido el aliento y sintió que volvía a respirar. Su mirada regreso a Bakugo con determinación renovada. Aún tenía asuntos que arreglar.
Esta vez, no lo dejaría escapar.
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