Estudio de Sana - lunes a la tarde

— ¿Se puede saber dónde vas tan apurada? —Apenas Momo llegaba al trabajo de su amiga se topaba con Sana que al parecer iba de salida— No me digas que estas escapando del bomboncito de nuevo... ¿Acaso te persiguió hasta acá? ¿quieres que te de una mano? Porque por mas insaciable que sea no creo que pueda con dos ex porristas juntas —la mayor ya tenía los colmillos puestos

Sana se frenó de golpe al mismo tiempo que giraba los ojos ante lo que estaba diciendo su amiga— Primero que jamás compartiría a Tzuyu, segundo no se te ocurra desafiarla porque te aseguro que pierdes otra apuesta y tercero no, no estoy escapando de ella, es solo que me llamó Yoon Ah que necesita verme urgente en el bar de Somi —le comunicó a su amiga y empezó a caminar hacia la salida de vuelta

— Para un poco rubia hueca y déjame ir contigo que necesito que hablemos de los contratos de Victoria Secret, o acaso te olvidas que necesito tenerlos listos antes de la primera sesión del sábado —le advirtió

— Pues apúrate entonces idiota, lo hablamos en el auto —la rubia quería llegar al bar lo antes posible. Estaba preocupada, Tzuyu nunca dejaba sola a su hija

Bar de Somi

Las dos amigas caminaban las dos cuadras que separaban el estacionamiento del bar— ¿Entonces le cumplimos a Sooyoung todos sus caprichos? —preguntaba la abogada repasando los últimos retoques de los contratos

— Si Momoring. La conozco. Estaba buscando que yo reaccione, y si hay algo que no pienso hacer es pelear con ella — Sana sabía que su ex no iba a resultar fácil de manejar

— Espera a que se entere que te estas comiendo al bomboncito —decía sonriendo la mayor— Aunque ya lo debe de saber, los rumores están por todas partes —ella misma había visto que varias revistas ya especulaban sobre el romance de la jugadora estrella y la fotógrafa— A propósito ¿Cuándo piensan anunciarlo? —preguntó curiosa

— No lo sé... no hemos tenido mucho tiempo de hablar —Sonrió Sana pícaramente— Esta semana va a ser imposible —la sonrisa se le caía — Tzuyu a se va esta noche y probablemente vuelva el sábado...

— El sábado tú tienes la...

— Si si lo se Momoring... la sesión de Victoria Secret —la rubia sabía que era algo importante para su carrera —es solo que casi una semana sin mi novia... pufff ... va a ser terrible —Sana no quería admitir que iba a ser un gran reto para ella pasar ese tiempo sin Tzuyu, si era posible la quería todo el tiempo al lado de ella

— ¡Dios mío! Porque me haces esto señor... —Momo señaló con su cabeza a la puerta del bar donde se encontraba Tzuyu apoyada en la pared usando unos jeans rotos en las rodillas, una remera negra y lentes de sol— Oye tu —llamó la atención de la deportista que no se había dado cuenta de la presencia de las otras dos— ¿Acaso no sabes que los bombones se derriten en el sol? —le preguntó usando un tono no más de reproche que de seducción

Cuando Tzuyu se percató de quienes venían hacia ella sus ojos tuvieron un solo destino... Sana— Espero que no, sino no voy a poder llevar nunca a mi novia a la playa... Hola Momo... ¿puedes cerrar los ojos diez segundos? —pidió amablemente a la mayor

— Está bien Chou, pero si me vas a tocar te aviso que no respondo de mi —bromeó

— ¡MOMO! —Sana la retó, Tzuyu no iba a tocar a nadie. Solo a ella

— Es broma, es broma mujer. Está bien... segundos desde YA —la mayor cerró sus ojos

— Hol... —la rubia quiso saludar como corresponde a su chica, pero Tzuyu pensaba aprovechar sus diez segundos de otra manera. La morena la tenía apretada contra una de las paredes de los exteriores del bar y le estaba demostrando con un beso cuanto la extrañaba

— TIEMPO —Momo abrió los ojos y se encontró con la pareja que este momento era una mezcla de brazos por todos lados. No se podía ver a través de ellas de los unidas que estaban— YA YA dije tiempo —nada, seguían igual— POR DIOS ESTAMOS EN LA CALLE —menos— CHOU ESTAS A 3 SEGUNDOS DE RESTAR MAS PUNTOS —Y ahora sí. Tzuyu se separaba a la velocidad de la luz

La morena se alejó un poco de su novia y ambas agacharon la cabeza— Perdón — pidió

— Así me gusta —Afirmó Momo— Ya estaba pensando en ir a buscar agua fría para tirarles, no es que no me estuviera gustando verlas porque créanme que me cumplieron una fantasía, pero Jihyo no está aquí y me parece injusto que ella se lo pierda... ¿tú tienes algo para decir? —le preguntó a Sana que también estaba con la cabeza abajo y el rubor se notaba en ella más que en su novia

— No fue mi culpa... ella me ataco primero —¡Alerta delatadora!

— ¡OYE! Después te preguntas porque tu hija es una ratita traicionera —la acusó Tzuyu mientras Sana reía

— Tzuyu no puedes negarlo, tú me besaste en contra de mi voluntad —a la rubia le encantaba tomarle el pelo a su jugadora favorita. Y la cara que ponía ante lo que estaba diciendo la rubia era memoriosa

— ¿Es verdad lo que estoy escuchando Chou? —Momo se unía a la broma

— Estoy casi segura de que yo no obligue a tu lengua a que se metiera en mi boca — se defendió

— AAAA, PERO MUY BIEN —la abogada se cruzaba de brazos— Ahora resulta que la señorita bomboncito alardea de las cositas que anda haciendo por ahí con su novia —pobre Tzuyu, no le dejaban pasar una

— Pero... pero... yo solo... —para suerte de Tzuyu la puerta del bar se abrió dejando ver a una pequeña imitación de Sana, Yoon Ah

— ¡YOON AH! —la saludó la fotógrafa e intento abrazarla. El beso de su novia le había hecho olvidar el llamado de su hija

La pequeña frenó a su madre mostrándole la mano en forma de "alto"— Madre. Tienes que presentarte dentro del bar en diez minutos —y sin decir nada más la niña cerró la puerta dejando a las tres adultas mirándose con la boca abierta. Pero luego volvió a salir para agregar— Tienes que entrar sola — miró a su mami Tzuyu y a su tía advirtiéndoles

— ¿Me habló a mí? —preguntó Mina. No estaba acostumbrada a ese trato tan serio— deja de reírte y explícame que pasa —le exigió a Tzuyu que estaba tapándose la boca con la mano

— No lo sé —se encogió de hombros— A mí no me dejaron entrar al bar, por eso estoy acá

—  ¿No me dejaron? ¿dejaron en plural? —la jugadora asintió— ¿Quiénes están adentro? —Sana temía lo peor

— Bueno pues Yoon Ah me pidió que trajera a Shuhua y a el entrenador SeokJin —le contó— Y me imagino que Somi está también —supuso. Tzuyu se imaginaba, por las preguntas que su hija le había hecho en el auto, que era lo que su pequeño cangurin estaba haciendo. La estaba defendiendo

— Momo tienes que entrar conmigo —rogó la rubia asustada— Eres mi abogada —insistió

— OYE NO, eso no se vale. Yo lo tengo que aguantar sola —Tzuyu no iba a tolerar injusticias

— Pero tú eres una súper mujer, tienes estomago de acero —la rubia tocó la panza de su chica— y unos músculos impresionantes —tocó sus brazos— un trasero de los dioses —esta vez se tuvo que apretar los dientes porque si tocaba la pervertida de Momo esta vez iba a hacer mucho más que solo mirar— y unas manos capaces de tantas cosas — parecía que Sana estaba soñando despierta

— ¿Y mi boca? —para colmo Tzuyu soñaba con ella

— Recuérdamelo —pidió la artista que estuvo a milímetros de saciar su sed cuando fue interrumpida

— Al parecer la puntualidad no es tu fuerte madre. Dije diez minutos. Tienes que entrar —la lectura diaria estaba haciendo efecto en la Minatozaki menor

— Exijo que mi abogada este presente — pidió Sana señalando a la mayor

— Cobarde —susurró Tzuyu por lo bajo ganándose una mirada asesina

— Lo tengo que consultar. Un segundo — Yoon Ah se retiró

— ¡MOMO! ¿QUE HAGO? ¿QUE HAGO? — la rubia zarandeaba a su amiga por los hombros

— Escucha Sana. Tranquila. No hables salvo que yo te lo diga y no las mires a los ojos —modo abogada activado

— Su petición fue aceptada —informó al rato Yoon Ah— pueden entrar

La abogada y la fotógrafa pasaron al bar. El lugar estaba con la gente que normalmente asistía. Pero en una esquina las chicas pudieron ver al coach, la jugadora suplente y a la cantinera

— Tomen asintió por favor —pidió Yoon Ah señalando dos sillas delante del pequeño grupo— Somi puedes empezar

— Señorita Minatozaki, nosotros de ahora en más conocidos como "Los ángeles de Tzuyu" requerimos su presencia porque necesitamos cierta información para saber si podemos dejar a nuestro "Charlie", por así decirlo, en sus manos —al parecer la pequeña había reunido a la gente que ella consideraba cercana a su madre

Sana y Momo se miraron. La rubia asintió— Mi cliente está dispuesta a colaborar en lo que pueda —Afirmó la abogada de la rubia

— Señorita Minatozaki —SeokJin iniciaba la ronda de preguntas— Demás está decir cuán importante es Tzuyu para mí, sin ella esta temporada hubiera terminado con mi despido —todas estuvieron de acuerdo en eso— Pero la cosa se va a poner más y más difícil, más aún si llegamos a los play off

Sana le dijo algo al oído a la mayor— Mi clienta no entiende que tiene que ver ella con todo eso. Ella apoya y entiende a Tzuyu en su carrera —aseguró la abogada

— Lo que quiero preguntar en realidad es ¿si usted está dispuesta a renunciar a los placeres físicos cuando sea necesario que mi jugadora este 100% concentrada? —era claro que en épocas de finales Tzuyu iba a tener que esforzarse más de la cuenta

— ¿De cuánto tiempo estamos hablando? —preguntó Momo

— Aproximadamente un mes —sentenció SeokJin

— ¿QUEEEE? —Sana no aguantó el silencio... estaban hablando de un mes sin poder tocar a su novia

Los ángeles se miraron y apuntaron cosas cada una en su libreta

— SANA. TE DIJE QUE NO HABLARAS SIN MI PERMISO —la retó Momo

— Mi turno —espetó Shuhua— un agente secreto nos informó que usted trabaja con señoritas muy lindas y generalmente en poca ropa ¿cierto? —preguntó para confirmar

Sana miró a su hija y murmuró algo así como "rata traicionera"

— Es cierto —confirmó la abogada— pero el trabajo de mi cliente es el sacar fotografías, no veo porque eso puede ser un problema

— No. Problema no, yo solo quiero saber cómo hacer para presenciar la sesión de Victoria Secret, que Adriana Lima me infarta....

— SHUHUA NO —la retaron

— Mi clienta insiste en invitarla el próximo sábado a la sesión —Sana le dijo algo en el oído a su amiga— Y también cree que le interesara saber que la señorita Lima hace un cuadro muy interesante en Body Painting el cual yo misma como letrada voy a presenciar — chantaje puro

— MI VOTO A FAVOR DE MINATOZAKI SANA —se apuró a decir la jugadora suplente

— Señorita Minatozaki —le tocaba a la camarera— a pesar de que lo que acaba de hacer es reprochable —se refería al chantaje—  le veo la cara y no puedo evitar preguntar. ¿Qué crema usa porque parece que tuviera un cutis de porcelana?...

— ¡SOMI! —la pequeña Yoon Ah se estaba indignando. El grupo se estaba saliendo del plan

Momo y Sana debatieron— Mañana por la mañana le estará llegando una caja con cremas varias, siempre y cuando contemos con una pequeña ayudita de parte de usted —la abogada guiño el ojo

— MI VOTO ES POSITIVO —levantaba la mano. Las japonesas sonreían. Esto era más fácil de lo que creían

— ¡BASTA! —pero no contaban con la furia del bichito— Basta de tonteras — sentenció la pequeña— Mamá —miró a Sana— esto es importante, mami Tzu no tiene a nadie que la defienda. No tiene a las tías como tú, ni papás, ni nadie —le explicó triste Yoon Ah haciendo que los demás agacharan su cabeza avergonzados por su comportamiento— Y yo quiero que me prometas que tú la vas a defender. Y como ella no recibe mucho cariño, tú le tienes que dar cariño, darle besos y quererla como por.... —trató de sacar la cuenta— bueno, como por todas las personas que le faltan. Yo te voy a ayudar —Yoon Ah estaba aguantando las lágrimas al igual que su madre

— Sana —Somu volvía a hablar— A este bar vienen muchos tipejos ¿sabes? Una noche uno de ellos se quiso pasar conmigo y ¿sabes quién me ayudo? — preguntó sin esperar respuesta— Tzuyu. Ella tiene un corazón enorme... cuídala por favor —pidió

— Cuando la capitana me trató de jugadora fracasada, Tzuyu le cerró la boca —contó Shuhua— Si le haces algo vas a tener a toda la ciudad en tu contra. Esa chica se ha ganado el corazón de la gente —agregó la deportista— y además quiero agregar que tiene unas piernas de infierno —todas coincidieron

— El bomboncito se te mete en la piel — Momo había abandonado el papel de abogada sensibilizada por su sobrina

— Oigan —Sana les llamó la atención— Toda mi vida creí que la felicidad como la que vemos en el cine no existía— nadie lo cree en realidad— pero cuando miro a esa mujer. Lo creo. Y no solo lo creo, lo siento. Ella me hace feliz. Me hace sentir amada y por sobre todo me deja amarla —les aclaró

— Yoon Ah —se agachó a la altura de su hija— No solo la voy a defender, querer, mimar y cuidar sino por todas las personas que no tiene, que la voy a amar cada día de mi vida como si fuera el ultimo. Te lo prometo —le aseguró a su hija— promesa de mamá de canguro menor a canguro menos —imitó a Tzuyu sacándole una sonrisa a la niña

— DEMONIOS MINATOZAKI TIENES MI VOTO —expresó SeokJin

— Y el mío mama —le dijo Yoon Ah para luego abrazarla— la tía Momo está llorando —le susurró en el oído

— Lo se cariño. es una blandita —rió su madre

Departamento de Sana - Tres días después

Estaban todos preparados en el living para ver el partido de Tzuyu. La morena había jugado un partido espectacular contra Phoenix el martes y ahora le tocaba el más difícil, según SeokJin. Los ángeles. La morena había hablado media hora con su novia para desearle suerte entre otras cosas y de no ser porque Yoon Ah llego para interferir, Tzuyu ya le hubiera sacado hasta el color de estaba usando ropa interior que Sana

— No puedo creer que nos vamos por dos semanas a Corea y nos encontramos con una Sana dulce, sonriente y menos idiota que de costumbre —decía Mina

— Es el amor ¿Cierto Momoring? — preguntó la bailarina acercándose para besar a su novia

— Cierto Sana —le dio la razón

— Oigan después de ver durante años como Jihyo dominaba a Momo. Yo creo que cualquier cosa es posible —dijo Jeongyeon

— Cuidado con lo que dices —le advirtió Momo

— SHHHHH déjenme escuchar —pedía Sana con la oreja puesta en la conversación de Yoon Ah con su otra madre

Momo se paró y fue hasta donde estaba la artista— ¿Están peleando? —preguntó sorprendida. Era la primera vez que pasaba

— Eso parece —contestó la fotógrafa afligida— creo que Yoon Ah le afecta que Tzuyu este lejos. Ayer no quiso ni tocar la batería —raro en la pequeña

— ¿Solo a Yoon Ah? —contestaron todos a la vez

— Sanake ayer en el supermercado le gritaste a la cajera solo porque n tenia monedas —Jihyo tuvo que calmar a la pobre empleada

— Y esta mañana más de uno de tus empleados rogo por la vuelta del bomboncito —agregó Momo

— Tampoco fue para tanto —se defendió

— Ardilla, literalmente le dijiste al pasante que si volvía a equivocarse tu misma te ibas a encargar de que terminaría trabajando en un kodak en la Antártida

— BUENO BUENO... ya entendí —bajó la voz porque si no su hija se iba a dar cuenta que la estaban escuchando

— Ahí viene... ahí viene —dijo rápido la abogada haciendo mención a que la pequeña había cortado la llamada

— Yoon Ah cariño va a empezar el parti...

— NO QUIERO VERLO —cortó a su madre y se fue rápido para la habitación

Sana la siguió y entro al cuarto detrás de ella— ¿Qué pasa cangurito? —le preguntó su madre

— No me digas así —Sana giró los ojos. El apodo "prohibido"

— Dime que pasa —pidió de nuevo

— Quiero que mama vuelva... YA —le dijo la pequeña sin dudar y se tiro en su cama boca abajo

— Ey —la rubia acariciaba la espalda de su hija— Saber que no puede dejar al equipo. Créeme que yo también la extraño y mucho, pero es su trabajo cariño —explicó

— NO ME IMPORTA —se ve que la tolerancia era algo que el bichito aun no desarrollaba

— Tzuyu te ama —le dijo a su hija

— MENTIRA. SI ME AMARA VENDRIA —la pequeña seguía en su postura— Quiero estar sola —le dijo a su madre

— ¿No vas a ver el partido? —Yoon Ah nunca se perdía los partidos de su madre, y este en especial lo había esperado con ansias

— No —fue solo lo que contesto y le dio la espalda a su madre

Sana salió preocupada de la habitación de su hija y volvió a la sala. El juego ya había empezado

— FALLO OTRA VEZ —Jeongyeon estaba sufriendo la derrota de las Liberty— ¿QUE DEMONIOS LE PASA? —con ese último tiro el equipo se iba al descanso y Tzuyu no había anotado ni cinco puntos

— Sana, te dije mil veces que el sexo telefónico antes del partido estaba prohibido. ¡Mírala, esta agotada! —Momo le echaba la culpa del mal desempeño de Tzuyu a su amiga

— No es agotamiento Momoring —Sana conocía esa cara. Su hija tenía la misma— es otra cosa. Es Yoon Ah —a la rubia no le gustaba nada ver a sus dos mujeres sufrir

— Esta vez no creo que Tzuyu pueda levantarlo, son quince puntos de diferencia —Chaeyoung disfrutaba de como sufrían Jeongyeon y Momo, pero no le gustaba ver a sus amigas mal

— ¿Cómo van? —Yoon Ah no se pudo aguantar. Escucho los gritos de sus tías y salió a la sala

— Abajo por quince y es el peor partido de Tzuyu en la temporada —le dijo Nayeon

La pequeña se subió arriba de su madre— ¿es culpa mía mama? —le preguntó acurrucándose en ella

— No cariño, no es culpa tuya. Debe estar cansada —mintió Sana. Sabía que Tzuyu tenía la cabeza en su hija

— Eso es culpa tuya Sana —volvió a acusar la japonesa mayor— de ahora en más tienes prohibidas las llamadas — odiaba ver perder a su equipo favorito

— ¡Están saliendo de vuelta a la cancha! —Anunció Mina al ver que la televisión enfocaba a las jugadoras

— ¿Dónde está el bomboncito? — usualmente la morena era la primera

— SHHHH escucha están hablando de ella —Jeongyeon subió el volumen y se pudo escuchar mejor la voz de los comentaristas

"Según nos cuentan tuvieron que separar a la estrella de las Liberty, de muy mal partido hasta ahora, Chou Tzuyu y a la capitana del equipo Nancy McDonie. Parece que no pudieron soportar la presión de la derrota y tras una fuerte discusión vinieron los golpes..."

— ¿GOLPES DIJO? —Sana dejó a su hija a un costado y se paró apenas escucho de la pelea— ¿Dónde CARAJO ESTA MI NOVIA? —le gritaba al televisor

— Sana tranquila —la calmaba Jihyo— ya va a salir —miró a su prometida que sonrió levemente pero igual de preocupada

— MAMI —la pequeña señalaba a la tele. Por una esquina del televisor se podía ver como aparecía Tzuyu. Todo el estadio de Los Ángeles la abucheaba

— ¡Dios Mío! Otra vez el ojo no —la pantalla enfocaba el rostro lastimado de su novia, Shuhua venía detrás de ella calmándola— CARAJO TZUYU — gritaba la rubia frustrada

— Mami quiero hablar con ella —dijo de repente Olivia

— ¿Qué? —preguntaron todos

— Hija no es el mejor momento para...

— Sino me ayudan la llamo yo. ¡Por favor mami! —le rogaba la mini rubia— Quiero hablar con ella —recurría a sus pucheros mortales

— No debe tener su celular —Yoon Ah la había convencido, pero Sana veía casi imposible que su chica tuviera su celular

— Llamemos al del coach —dijo la niña— lo he visto usarlo en otros partidos

Sana miró a sus amigos, todos la miraban expectantes— Esta bien, está bien, pero si no atiende a la primera no insistimos —les advirtió mientras agarraba su celular y buscaba el contacto para llamar

Mientras tanto el partido había vuelto a empezar, con Tzuyu y la capitana en el banco. De repente la televisión enfoco como Kim SeokJin atendía su celular

— MINATOZAKI POR SI NO LO SABES ESTOY EN MEDIO DE UN PARTIO EN EL CUAL ME ESTAN PARTIENDO EL TRASERO Y PARA COLMO TU NOVIECITA DECIDE JUGAR A SER ROCKY CON MI CAPITANA —evidentemente no era un buen momento para llamar

— Lo se SeokJin, lo sé, pero es importante que hable con Tzuyu. Un minuto solamente —pidió

— ¿HABLAR CON TZUYU? ¿ESTAS LOCA? O QUIERES QUE TODOS LOS MEDIOS ME DESTROCEN. DAHYUN CUANDO QUIERAS PUEDES EMPEZAR A ACERTAR ALGUN TIRO —el coach dirigía y hablaba al mismo tiempo

— SeokJin ¿Quieres ganar el partido o no? —preguntó Sana

— ODIO QUE TENGAS RAZON ¡CHOU! —llamó a la jugadora— TIENES TELEFONO

— ¿Hola? —Tzuyu no se imaginaba quien la podía estar llamando en medio de un partido

— Mami —la vocecita de Yoon Ah iluminaba la cara de la morena— perdona. No quise decir nada malo. No me arrepiento que seas mi mama —Yoon Ah miraba como su madre alzaba las cejas como gesto de reproche— Lo dije solo para llamar la atención, en realidad quería decirte que te amo y que te extraño mucho. Pero que amo que seas mi mama. Perdona —volvía a pedir la niña

Al otro lado del teléfono Tzuyu no pudo sostener las lágrimas— Yo también te amo hija —fue lo único que las lágrimas le dejaron decir

— Mamá y yo queremos que ganes el partido por nosotras ¿puede ser? —Sana le robaba el celular a la pequeña

— Amor. Entra a esa cancha a patear traseros —la animó Sana— Tu hija y yo vamos a estar acá esperándote. Te amo —le dijo Sana

— TE AMAMOS —gritó el resto del grupo

Tzuyu sonreía— Te amo —respondió la morena— gano el partido y las llamo ¿sí? —cortó la llamada y miro a SeokJin

— COACH QUIERO ESTAR DENTRO YA MISMO —exigió la jugadora

— DEMONIOS CHOU ¿Qué estas esperando? PIDE CAMBIO

— Señoras y señores tengo el gusto de estar entrevistando a la jugadora de la noche...Chou Tzuyu —la periodista había detenido a la deportista para hacerle la nota final— Tzuyu... ¡Que partido! 29 puntos en los veinte últimos minutos y diez puntos más para llevar a tu equipo a la victoria en tiempo extra —la mujer parecía más entusiasmada que la propia jugadora— ¿Qué las hizo reaccionar? — preguntó la reportera

Sana y el resto del grupo miraban la entrevista atentos a las respuestas de Tzuyu. Aunque su novia estaba preocupada por el ojo morado de su chica

La morena sonrió a la cámara haciendo derretir a los espectadores— Bueno. Gracias a dios tengo ángeles en New York que cuidan de mí. Ellas me hicieron reacción —miró a la cámara

— Tzuyu tengo que preguntar. Tengo más de miles de personas en twitter queriendo saber si los rumores son ciertos ¿Chou Tzuyu tiene dueña? —le preguntó como si de la respuesta dependieran miles de vidas

Tzuyu rió agachando la cabeza y luego la levanto para mirar fijo a la periodista— Chou Tzuyu tiene dos dueñas —contestó— Minatozaki Sana y mi hija Yoon Ah. Los dos amores de mi vida.